Luego de que Félix se fuera, Marinette finalmente se había soltado a llorar, no le gustaba estar vulnerable frente a Luka pero no lo podía evitar.

- ¿Por qué nunca me dijiste lo que te hacia? - Preguntó Luka abrazando a su novia y limpiando sus lágrimas

- Él me amenazó con dejarme si lo hacía, estaba tan ciega por su amor, fui tan estúpida

- No puedo creer esto, no entiendo como se atrevió a hacerte tanto daño

Aquella información lo molestó bastante, le hubiera gustado haber hecho algo en aquel tiempo.

La azabache se aferraba al ojiazul, no quería soltarlo ni un segundo.

- No me dejes sola, por favor quedate esta noche - Le dijo besando la punta de su nariz

- No puedo dejar a Kagami sola tanto tiempo

- Entiendo, será mejor que vayas con ella debe estar preguntándose por ti

- Tengo una idea, le diré a mi hermana que si puede cuidar de ella, se que Kagami le gustaría tener su compañía

- Te lo agradezco mucho, amor

Era la primera vez que lo llamaba así y eso causó que ambos se sonrojaran.

- Se escucha lindo ese apodo saliendo de tus dulces labios

- ¿Te gusta que te llame así?

- Puedes decirme como quieras, amor, cielo... El sexy hombre de tus sueños

- Ese último es el que más te gustaría

- Me conoces tan bien

Lo hizo recostarse en el sofá y subiéndose sobre él para luego besarlo con pasión siendo correspondida al instante. Les era inevitable no demostrarse su amor cada 5 segundos, se habían vuelto adictos a los besos y caricias del otro.

Sin poder evitarlo Marinette pensó en lo que le había dicho Félix sobre Adrien y el plan de Gabriel, después de mucho analizarlo decidió que no lo ayudaría y tenía que hacercelo saber pronto.

(...)

Los potentes rayos del sol que se colaron por la ventana lograron despertar al Couffaine quien bostezo y se estiró. Se percató de que la chica no estaba a su lado así que tomó su ropa del piso, se volvió a vestir y busco a su novia por todo el departamento, no había rastro de ella, la llamó un par de veces pero solo mandaba a buzón de voz. Tenía un mal presentimiento.

- ¿Donde estas?

Mientras tanto, la franco china se dirigió a la mansión Agreste, estaba nerviosa pero decidida a decirle a Gabriel que no quería ser parte de su plan. Estaba sin su kwami así que no tenía como defenderse si le llegará a hacer daño.

Da la media vuelta y vete Marinette, te estás poniendo en peligro. Le advirtió su conciencia pero no le hizo caso. Continuo su camino hasta llegar a su destino.

Fue recibida por el diseñador quien la llevó a su estudio - Hola Mari, llegas a tiempo para explicarte las cosas

- Sobre eso, debo decirte algo

Hazlo ya, no te acobardes.

- Lo lamento pero no puedo ayudarte - Dijo rápidamente

- ¿Que? No hablaras enserio ¿O si?

- Hablo enserio, esto es riesgoso y no quisiera que alguien tome su lugar

- ¿Hay una razón para que hayas cambiado de opinión? - La acorralo entre su cuerpo y la pared alarnandola ante aquella repentina acción - Dejame adivinar ¿Félix te contó lo que Adrien te hizo? Tal parece que si

No debiste haber venido, estas en un aprieto ¿Como piensas salir de esta?

- N-No es eso, yo...

- Pues lo siento si me dijiste que si no podrás safarte de la situación tan fácilmente, necesito de ambos miraculous para completar mi plan y tu al ser la guardiana eres la única que puede darmelos - Susurró en su oído y la tomó de la cintura

No te quedes quieta ¡Haz algo, rápido!

Pero su cuerpo no respondía, rogaba internamente que el hombre se alejara pero sabía que eso no sería posible, Gabriel estaba por conseguir lo que quería y aunque quisiera hacer algo estaría en desventaja.

- Los miraculous, Marinette, quiero los miraculous y bueno... Ya sabes que más quiero - Pasó sus labios por el cuello de la fémina, ella finalmente reaccionó y lo empujó aunque eso no lo detuvo - Adoro cuando te haces la difícil

La tomó nuevamente de la cintura y besandola sin piedad, la joven por más que intentaba safarse de su agarre rasguñandolo y golpeando su pecho era inútil, estaba en grandes problemas.

(...)

- No aparece, han pasado más de 3 horas ¿Donde diablos podrá estar?

Luka estaba desesperado. Alya, Nino y Kagami estaban igual de angustiados.

- Relájate Couffaine

- No me voy a calmar Alya, ella no desaparece de esta forma, estoy seguro de que esta en peligro

- Viejo calmate la hallaremos - Hablo Nino

- Creo que se donde podrá estar - Kagami dijo - Con Gabriel, recuerden lo que me dijieron hace unos momentos, él es capaz de cualquier cosa por querer recuperar a Adrien

- Mierda ¿Por qué no lo pensé antes? - Él músico sin pensarlo 2 veces tomó el miraculous del gato

- ¿Que? No, ese miraculous no recuerda... - La japonesa fue interrumpida

- Lo se pero si ella esta con Gabriel el cataclismo me puede servir de algo ¿no?

Se transformó y se fue rápidamente hacia la mansión.

(...)

La franco china pateó al diseñador en el estómago logrando alejarse y correr hacia la entrada pero cuando estuvo a punto de llegar este la alcanzó y la colocó en el piso aprisionado sus muñecas.

- ¡Sueltame!

- No te dejaré ir

- Dejame ir por favor

- Ya te dije que no ¿Acaso no lo entiendes? Volverás a ser mía - Desabotono la camisa y acarició sus piernas - Esta vez estarás consciente de cada cosa que te haré

Nuevamente logró liberarse, corrió por toda la mansión hasta encontrar un lugar donde esconderse, en un armario y esperaba que el Agreste no la descubriera.
Durante 3 horas estuvo escondida, estar en ese armario la comenzaba a sofocar. Se preguntaba si él se había rendido en su búsqueda o seguía esperando a que tuviera la guardia baja, de cualquier forma no se atrevió a salir.

Escucho unos pasos, intentaba mantener el control pero le era casi imposible pues quería soltarse a llorar.

No te muevas, no hagas ningún ruido.

- Se que estas por ahí Marinette, te deje esconderte un rato pero mi paciencia se está agotando - Sus pasos se oían cada vez más cerca - Si me das los miraculous ahora prometo no hacerte daño

No te muevas, no te muevas, ¡No te muevas!

Pero no lo logró pues accidentalmente había tirado de un estante una estatua de cerámica que se rompió en mil pedazos y que la había expuesto.

- Saldrás de ese armario por las buenas o por las malas tu decides

Piensa en algo, rápido.

La puerta se abrió y ahí es donde grito e intentó correr, Gabriel la tomó bruscamente y recargandola en la pared.

- Ya no te escaparás de mi - Beso su cuello

- ¡No, sueltame!

De pronto Kitty Black logró alejarlo de ella proporcionándole un golpe al hombre.

- ¡Déjala tranquila! - Lo amenazó de golpearlo con su baston

- No vas a arruinar mis planes estúpido gato, les quitaré los miraculous sea como sea

El felino activó su cataclismo apuntando al diseñador quien sonrió arrogante.

- ¿Vas a matarme? Quiero verte intentarlo

- Será un placer

Di el inicio de un enfrentamiento entre ellos, Kitty Black se estaba sintiendo débil lo que provocó que al querer usar su pode contra Gabriel este lo esquivara y terminara por destruir un mueble. El superheroe estaba en total desventaja hasta que la azabache actuó con rapidez al golpear al hombre con un jarrón y dejándolo inconsciente.

- Vámonos de aquí - Dijo entre sollozos

Salieron con rapidez de ahí y de inmediato llamaron a la policía explicándoles lo sucedido.

Les informo que ya tengo todos los capítulos ya escritos, los publicare poco a poco. Ya falta cada vez menos para acercarnos al final.
Hasta la próxima :3

Ladytori Agreste ❤