Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

El comienzo del caos

La oscuridad como la mierda misma, y el frió más culero, de esos que cala tus huesos. A veces se pregunta
¿Porque sigue con este show? Pará que salva gente que jamás le agradecerá, era estúpido ni siquiera le agradaba aquella gente.
Debió escoger otro camino, tal vez ahora sería mecánico, o incluso sacerdote. ¡Pero no! De todos los jodidos autos que había en la maldita ciudad tenía que robar el de Batman.
¡En que mierda pensaba!

Una roca le hace salir de su ensañamiento, solo para ver el trasero del actual robín subir una cornisa.
¿Como es que dejo que aquel engendro se uniera a aquella misión? ya suficiente tenía con sus propios problemas como para tener un ojo puesto sobre el bastardo de Batman.

-Hey estúpido gremlin, fíjate donde mierda pisas- y como esperaba, es completamente ignorado por el menor, quien avanza cada vez más rápido a aquel almacén sucio y oxidado.
¿Que tienen todos los villanos para esconderse en esos lugares no podía ser... no se en las vegas o en un antro?

Ahora tenía que ir a un almacén lleno de ratas, olor a humedad y con gente que no se baña, todo por una jodida alarma. Realmente ninguno de los dos sabe bien que show, solo sabe que fue una orden del jefazo informando de que habían llegado cargamentos gigantes a ese lugar y temían que fuera armas, drogas o incluso personas, y para su mala suerte el pequeño bastardo se cruzó en su camino y se negó a irse.

-¡Robín, espera! - grito en un susurro al ver como el engendro se metía dentro del maldito almacén, por una grieta en el techo.

- ¡Maldita sea, hazme caso estúpido mocoso! - rápidamente aumento su paso detrás del estúpido gremlin, solo para descubrir que la maldita abertura era demasiado pequeña para su tamaño.

-Mierda- grito en coraje, el mocoso ya había entrado y conociendo su maldita forma de ser estaba a nada de escucharse disparos y gritos. Esperaba que mínimo alguien le disparara en el culo para ver si así aprendía a comportarse.
Intento buscar rápidamente otra forma de entrar sin hacer tanto escándalo, hasta que se empezó a escuchar un fuerte grito, junto a golpes estruendoso.

-¡A la mierda el factor sorpresa!- Tomó una de sus bombas haciendo volar la maldita pared, solo para ver el culo gordo de un gorila, arrojando cosas a una mierdecilla que conocía bien.

-Corre chingaderita, corre, porque si él no te mata lo hare yo-

-Vete a la mierda red Hood-

El gigantesco gorila volteo dejando en paz a robín, que se escabullo detrás de las cajas.

-Red Hood-

- Gorilla grodd, amigo mío.
¿Qué te trae por aquí? esto es un almacén, se usa para guardar cosas, debiste roban un supermercado ahí si hay bananas -

El rugido, y los manotazos del gigantesco gorila se pudieron contra él, y en un mal paso king kong logró prensar una de sus piernas lanzándolo al otro lado del almacén, donde la pared se encargó de sacarle el aire.

-Que alguien... Llame a... godzilla-

-Déjate de juegos Hood- regaño Damián que se había acercado

-A ti, acabando esto te voy a dar tus nalgadas -

-Quiero que lo intentes maldito idiota- hubieran empezado a pelear entre ellos, pero el furioso grito de king kong los hizo callar, quien rápidamente empezó a teclear cosas en la gigantesca máquina que no habían notado por estar peleando entre ellos.

-¿Qué es eso?- preguntó al ver cómo algunas partes de aquella máquina empezaban a brillar.

-No sé, ¡Porque no le preguntas a tu amigo el chango! -

-¡Es un gorila idiota no tiene cola, y no es mi amigo! - le refutó mostrándole lo obvio.

-Pensé que si ¡Como los dos tienen cara de idiota!-

-Llegan muy tarde, mi maquina ya está lista, en poco tiempo empezará y nada podrá detenerla. Iré al pasado donde nadie pueda detenerme y lo gobernarse todo-

-Okey mocoso tenemos que detener esa jodida máquina, antes de que haga lo que se supone que debe hacer. Tu distrae a nuestro amigo peludo y yo desactivare la máquina.
Entendido-

Volteo a ver a donde se supone debería estar Damián, pero ya no se encontraba en su lugar, volteo a ver en todas las direcciones solo para verlo a lo lejos sacar su espada para empezar a cortar los cables.

-Maldito idiota escúchame un segundo- pero Damián solo mostró su dedo de en medio
-Ha... Conque así se siente-

-Suelta ahí maldito niño- grito grodd empezando a correr a la avecilla.

Disparo contra el gigantesco gorila una y otra vez, esquiando como podía los bloques gigantescos que eras lanzados hacia su persona, hasta que unas alarmas empezaron a sonar.

-Son unos malditos idiotas -

Se distrajo por un momento buscando la ubicación del enano, lo que provocó que en su descuido grodd lo aventara fuera del maldito almacén, aturdiéndolo tanto por el golpe y la falta de aire de sus pulmones.

Los golpes siguieron, el estridente sonido de la alarma sonaba sin cesar, observó al mono correr huyendo rápidamente de la escena.

No había visto salir al engendro.

-¡Robín sal! - grito mientras se paraba con esfuerzo
-¡ROBIN SAL DE AHÍ AHORA!-Volvió a gritar mientras corría devuelta al almacén con el corazón a tope. Pero aun así fue demasiado tarde.
La explosión se hizo presente mandándolo a volar unos metros.

-No- grito mientras volvía a ponerse de pie con los tímpanos en aquel molesto pip - Damián ¿¡Dónde estás!? - grito mientras empezaba a remover los escombros con desesperación, uno tras otro buscando el cuerpo del petirrojo.

Esto le traía malos recuerdos y ganas de vomitar, no podía perder al pequeño de la familia, no podía morir igual que él.
-¡Damián si me escuchas grita maldita sea! - nada, ni un ruido, ni rastro del niño, no encontraba ni una mierda. Tenía que llamar a la familia, ¿Pero que diera? ¿¡Que mierda se supone que dijera!? Halo Batman, robín explotó como el pajarito se shrek.
Ni a él mismo le hizo gracia ese chiste, entraba en desesperación, cuando por fin sus ojos notaron lo que era la capa de robín bajo una lámina.

-Damián o mierda ya voy aguanta -
Cuando por fin pudo quitar la lámina encontró un diminuto cuerpo envuelto en la ropa de robín.

-¿Damián?- preguntó aún sorprendido de lo que veían sus ojos, notando cómo aquel pequeño cuerpo se encontraba completamente inconsciente mostrando muestras claras de que le resultaba difícil respirar. Al tomarlo en brazos, noto con mayor claridad lo diminuto y delgado que era. Lo más preocupante es que aquel cuerpo estaba helado, su carita de un tono azulado y su nariz de un preocupante morado, y es cuando noto que el pequeño tenía una ligera capa de nieve en el cabello.

-¿¡Que mierda!?- Expresó asustado.

Rápidamente tomó la capa que se encontraba en el suelo para envolverlo, he intentar que su temperatura aumentará. Intentando no moverlo demasiado, corrió rápidamente del lugar.
Que se encargará la policía de encontrar al gorila y de recoger la demás mierda.

Avanzó entre los callejón manteniendo un ojo sobre su pequeña carga, hasta donde estaba escondida su motocicleta
-Bueno pequeña mierda, por lo que más quieras no te muevas - imploro mientras acomodaba al infante contra su pecho, envolviendo su cuerpo también con su chaqueta para intentar que obtuviera mayor calor y el aire frío de la noche en Gotham no golpeara el delicado cuerpo. Rápidamente arrancó dirigiéndose a la cueva para ver que mierda le había pasado a Damián.

Las luces de la cueva lo iluminaron, bajo casi de un brinco de la moto avanzando a paso rápido.

-¡Alfred! ¡Alfred! ¿¡Donde estas!? ¡Tenemos un problema, un serio problema! - grito en la cueva con todo lo que sus pulmones podían, escuchando el eco de los característicos zapatos de Alfred caminar en un paso apresurado.

-¡Joven Jasón! ¿Qué pasó, está herido?- preguntó preocupado por el bienestar de uno de sus chicos

-Yo no alfie, pero creo que el si- dijo mientras desenvolvía al niño que aún no mostraba signos de querer despertar.

-Oh Dios mío-

....

Nota chicos, espero que disfruten de esta nueva historia que llevaba tanto planificando.
Esta, como siempre en todas mis historias tratara temas medio fuertes, pero esta a diferencia de los otras tendrá mayor comedia.
Espero mucho su apoyo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro