¿No les pasa? Que cuando aman tanto a una persona que cualquier cosa negativa de ella te hace de pronto odiarla.

Estar en mi auto encerrado para mí era uno de los mejores momentos porque así podría hacer un recuento de mis recuerdos memorables, a veces me estacionaba en cualquier parte y bajaba un poco la ventanilla para fumarme un cigarrillo mientras me perdía en el humo y en los recuerdos de esa persona especial.

Ahora mismo es la excepción cuando estoy encerrado en mi auto en el estacionamiento de la universidad con esa persona sentada en el otro asiento, ambos inclinados hacia el otro mientras nos comemos la boca de manera apasionada pero sin, aún, intenciones sexuales, simplemente quería besarla y ella quería besarme.

Elevo mi mano a su mejilla y la acaricio suavemente mientras ladeo mi rostro para buscar más profundidad en nuestro beso. Pero este se corta cuando el teléfono de ella suena.

Ambos suspiramos cuando nos separamos y mi mirada baja a su teléfono con una llamada entrante de ese imbécil.

Molesto pero sin poder decir nada me echo hacia atrás y cierro mis ojos al recostar mi cabeza en el espaldar, ella contesta con un simple 'hola' y suspiro cuando se calla y sé que él le está hablando nuevamente para reconciliarse.

— MinHo ya hablamos de esto, ahora simplemente quiero estar sola, solo... no me llames por favor. — dice calmada pero sé que él le está reprochando algo por cómo ella se lleva los dedos al puente de su nariz.— Puedo hacer lo que se me da la gana, deja de decir estupideces. — Murmura seria pero luego otra respuesta de él la hace resoplar.— Vete al demonio. — gruñe suave y la veo colgar.

Ella lanza el teléfono a la parte de atrás del auto para caer este sobre los asientos traseros. Suspira nuevamente y me mira para encontrar mi mirada fija sobre ella, sonríe suave como queriendo decir que todo está bien. Pero yo sé que no, sus ojitos algo brillosos lo dicen.

Mira al frente y resopla para luego girarse a mí y abalanzarse a mis labios que la esperan ansiosos. Luego de varios chasquidos húmedos ella separa sus labios y susurra sobre los míos:

— Cometí un grave error. — lo dice negando con su rostro haciendo que su nariz roce la mía. Abro mis ojos y capto como los suyos que siguen cerrados no logran detener una lágrima traicionera. Intento decir algo pero ella con sus manos en mis mejillas me atrae a sus labios otra vez.

— Cariño. — le llamo pero no me deja terminar cuando niega.

— No quiero hablar de eso. — sigue negando y asiento cuando abre sus ojitos y me mira. Me quedo simplemente limpiando su rostro y le sonrío suave.

— ¿Quieres ir a mi casa? Mis padres regresan en pocos días. — ella me mira a los ojos y asiente sonriendo suavemente. Imito su sonrisa y le doy otro beso pero esta vez uno corto.

Doy un beso a su frente antes de acomodarme en el asiento y ajustar el cinturón de seguridad. Enciendo el auto y comienzo a manejar para ir hacia mi casa.

***

— Pasa. — le indico a la hermosa chica detrás de mí y ella hace caso. Pasa a la habitación y deja su bolso en el suelo.

HeeSook pasa y admira toda la casa nuevamente, como si nunca la hubiese pisado.

— La noche de la fiesta no te dije pero... entro a tu casa y los recuerdos me invaden. — dice para luego girarse y mirarme con una pequeña sonrisa.

— Me pasa igual al verte de nuevo con mi casa de fondo... son tantos recuerdos. — murmuro acercándome a ella y la veo mirarme deseosa. Pero no cumplo su fantasía, en cambio me dirijo hacia el sofá detrás de ella y me siento mientras miro su figura de espaldas a mí.

Estoy por mirar su trasero cuando ella se gira y me mira con una sonrisa pequeña y pensativa. Camina un poco al colocarse entre mis piernas abiertas y me ve con esa mirada sensual que me seduce siempre. Me quedo fijo en sus ojos cuando se inclina y se sostiene con sus manos en el respaldo a ambos lados de mi cabeza, veo sus labios cuando su rostro está cerca del mío y sonrío suave para morder mi labio inferior haciendo que ella lo muerda luego de que lo suelto. Y cuando siento sus dientes apretar suavemente mi labio inferior... me entrego a ella totalmente.

Con mis manos en su cintura la ayudo a colocarse a horcajadas sobre mi regazo mientras con mis labios tomo los suyos que ya me deseaban. Chupo su labio inferior al terminar el beso y nos quedamos en esa posición mientras acaricio su cintura por debajo de su camisa, sintiendo su piel suave y cálida cuando ella acaricia mi cuello con sus pulgares y los otros dedos aprietan un poco en mi nuca. Todo eso bajo unas miradas calmadas que solo admiran la belleza del otro.

¿Y ahora que hago con esto que siento?

¿Qué voy a hacer si ella se aleja de mí?

¿Qué hago si ella se reconcilia con su novio?

Son preguntas que me hacen suspirar y aún así me siguen carcomiendo el cerebro y el corazón.

Me pierdo nuevamente en su perfume cuando se acerca y me besa con otra intención que es bastante clara.

***

HeeSook permanece dormida a mi lado mientras su cabeza está sobre mi hombro y su pierna desnuda sobre mi abdomen bajo. Se había quedado dormida luego de hacerle el amor y eso es algo que me enamora aún más.

Su teléfono vibra en un mensaje y lo veo con la pantalla encendida al estar sobre la mesa de noche. La curiosidad puede conmigo cuando suavemente saco mi brazo de su encierro y tomo el teléfono para ver el mensaje por encima de la pantalla de bloqueo.

MinHo♡

En verdad lo siento HeeSook, sé que ese día estaba algo entonado cuando te hice ese comentario. Sé que me has dicho muchas veces que lo has superado, pero es que la inseguridad puede conmigo. Cuando puedas escríbeme por favor.

No me puedo quedar así sin saber qué le dijo que la hizo enojar, mucho menos diciendo que ella lo ha logrado superar. Sé que allí se refiere a mí, es una suposición muy segura.

Me quedo con la curiosidad cuando veo movimientos de ella, dejo el teléfono donde estaba y le sonrío cuando abre los ojos algo adormilada aún, ella me devuelve la sonrisa y su brazo en mi cintura me aprieta suave en un abrazo cálido que se ve que necesita cuando suspira al enterrar su rostro en mi cuello.

Llevo mis dedos a su rostro y la acaricio para darle un beso en su pómulo.

— ¿Te sientes bien? — pregunto contra su mejilla y ella tarda unos segundos para asentir con sus ojos cerrados. Yo sé que no es así, pero también sé que no me dirá nada, así que me limito a suspirar y besar cortamente su rostro.

Luego de varios minutos allí recostados en la misma posición sin mencionar nada me levanto para colocarme la prenda inferior y luego colocarme un pantalón deportivo de chándal. Ella me mira y se sienta en la cama, la veo luego tomar su teléfono y desbloquearlo, y me percato de cómo abre la bandeja de mensajes haciendo una mueca cuando seguramente ve el mensaje del idiota de su novio. Meto las manos en los bolsillos y carraspeo mi garganta para verla con mi ceja alzada cuando ella me mira.

— ¿Seguro que todo está bien? — pregunto. Ella me ve un rato a los ojos y luego reacciona parpadeando.

— Todo está bien JungKook. — asiente con una sonrisa suave. Y luego baja la mirada al teléfono.— creo que debo irme a casa, es muy tarde. — murmura.

— Te llevo. — le digo mientras voy de una a tomar mi camisa del suelo.

— Ah no es necesario, tomaré un taxi. — sonríe suave y se levanta para buscar su ropa y vestirse.

Asiento pero internamente siento mi corazón desmoronarse. Tengo que parar esto de una vez antes de que termine peor de lo que estoy, ya que parece ser que ella no tiene intenciones de ir más allá conmigo, nunca ha tocado ese tema y no tiene intenciones de hacerlo por como siempre se desvía.

¿Pero cómo puedo terminarlo si cuando la veo me siento como un estúpido? Ella me deja sin habla y no me veo capaz de decirle que no podemos seguir en esto cuando yo me muero por ella.

Es una tortura constante el no querer despegarse de lo que más amas.

Cuando ella sube al taxi y la veo por la ventana me siento peor. No soy un estúpido como para no saber que va a verse con MinHo.

Pero tú mismo te lo buscaste al ceder a sus encantos JungKook, tú mismo fuiste un idiota al aceptar inconscientemente ser su amante cuando la amas tanto como si fuese aún tu novia.

Y eso es un error que me está costando caro.

Pensar en ello me hace recordar aquel amargo día hace más de cuatro meses.

FLASHBACK

— ¿Por qué tardaste tanto? Se supone que vendrías a las cuatro y son las cinco. ¿Dónde estabas? — pregunto molesto y ella me ve cansada.

— Fui a dejarle unos apuntes a HyunSuk que me prestó ayer. — me responde con su rostro cansado.

— ¿HyunSuk? ¿Desde cuándo tú y él son tan amigos? — le pregunto molesto y confundido. Es que maldición llevaba una hora esperándola en mi auto y cuando aparece viene corriendo y no de su casa.

— JungKook no discutamos eso de nuevo ¿sí? No hay nada, simplemente me dio prestados sus apuntes no más. — recuesta su codo de la ventana del auto y masajea su frente con su mano.

— Por algo evades el tema ¿no? Quien sabe que tendrás oculto. — digo con mi ceja alzada mientras enciendo el auto.

Nunca debí decir eso.

— ¡Basta! — Exclama viéndome furiosa.— ¿Sabes qué? Ya no tolero tus malditos celos, me tienes cansada con tanta desconfianza... nunca te he defraudado como para que desconfíes de esta manera de mi. — aclara y noto como se le quiebra la voz al final. Eso me crea un nudo en la garganta.— Y ya no lo puedo soportar más... — susurra y abro la boca para decir algo pero ella me interrumpe.— Se acabó JungKook... terminamos.

— HeeSook no... Lo siento de verdad yo... — ella niega y abre la puerta.

— No me pidas disculpas... porque esto siempre va a ser así. — dice por último al bajar del auto.

— HeeSook. — no termino de decir cuando cierra de un portazo y se va rápidamente hacia su casa.

Observo cómo camina hacia su hogar y mis ojos se vuelven agua de pronto. Tomo aire e intento controlar mis emociones. Salgo del vehículo y me acerco a la puerta para tocarla incesantemente, sin obtener respuesta.

— HeeSook amor, lo lamento... De verdad, por favor ábreme, hablemos ¿sí? — me acerco a la puerta y pego mi frente a esta.— Te amo nena. — murmuro y siento mi voz quebrarse.

FIN DEL FLASHBACK

Ese día es el peor pero no el único. Los mensajes de mi parte fueron tantos que terminó bloqueando mi número, y luego de intentar llamarla simplemente me decía que estaba fuera de servicio. Luego supe que había cambiado de número y entendí que no debería de fastidiarla si ella no lo deseaba. Dejé de insistir y a los tres meses ella comenzó a salir con MinHo partiendo mi alma en mil pedazos.

Recuerdo que ese día tomé incansablemente hasta quedarme dormido. No supe que pasó ese día. Sólo sé que luego caí en un cuadro depresivo del cual un psicólogo se hizo cargo cuando mis padres me llevaron. Actualmente las cosas me molestan pero mantengo la calma.

Y ahora que me doy cuenta el JungKook de antes hubiese reclamado por la llamada del imbécil, pero no, mantuve la compostura e intento no demostrar que me duele.

Aunque no sé cuánto tiempo pueda soportar estar así.