Nicholas no estaba seguro, su amigo EJ le había retado a hacerle una broma a Hanbin, su esposo desde hace 3 años.

Aunque su linda pareja siempre sonreía sabía que era muy frágil y tan etéreo.

Pero su amigo había jurado pagar una cosa a elección de la pareja si Nicholas cumplía el reto, pagaría cualquier cosa sin importar lo cara que sea.

Y Nicholas quería comprarle  una entrada al concierto del grupo favorito a su lindo novio, pero no le alcanzaba el dinero.

Aunque Hanbin se enoje un poco por la broma, de todos modos estaría llenando de besos su rostro después de que se entere que le consiguió entradas a ese concierto al cual tanto quería asistir.

Suspiró mientras estacionaba el automóvil que tenían enfrente de su  departamento, era demasiado tarde, las 2am. Para ser exactos.

Tomó un labial rojo que compró por ahí esa misma tarde y formó manchas en su cuello difuminándolo un poco para que parezca un chupón, recordó las marcas que le hacía a Hanbin para poder hacerlas lo más realista posible.

Una vez listo lo cubrió con un parche hecho de gasa y cinta médica para que se quede en su lugar sin hacerse daño la piel.

-Solo falta el toque final- sacó una prueba barata de perfume de mujer y una botella de alcohol, se roseó un poco a si mismo con el perfume barato de mujer y se echó unas gotas de alcohol para que el olor sea perceptible.

Estaba listo, tenía el olor de un prostíbulo.... ¡perfecto!

Salió de su automóvil viendo que las luces todavía estaban encendidas, seguro Hanbin lo estaba esperando... pensó en no hacerlo, pero ya había llegado hasta ahí, no había vuelta atrás.

Tenía que actuar algo distante o probablemente todo se echaría a perder. Le dolería no besar esos dulces labios al llegar a casa al igual que no corresponder el abrazo de bienvenida que siempre recibía.

Metió la clave correcta para poder entrar al departamento, la puerta se abrió y se sintió confundido al no recibir la cálida bienvenida que siempre tenía, cerró la puerta tras él y vio a Hanbin durmiendo en el sofá con la pijama de parejas que tenían.

Murió de ternura antes de que Hanbin despertara por el sonido de la puerta cerrándose.

-¿Amor?- aún somnoliento su sonrisa no desaparecía, seguía siendo tan lindo.

-Ah... hola- evitó el contacto visual.

-¿Pasó algo malo? Si es así puedes decir... ¿Porqué hueles a alcohol? Tú ni siquiera bebes- se paró un poco mareado en dirección a Nicholas.

-No te importa- alejó la mano que Hanbin quería sostener.

-Claro que me importa...- lo siguió hasta la habitación que compartían. -Volviste muy tarde, ¿tanto duró la reunión que tuviste con tus amigos? 

-Si.

-¿Estás cansado? Vamos a... ¿qué te pasó en el cuello?- vio el parche que llevaba.

Nicholas solo lo esquivó haciendo como si no quisiera que Hanbin vea lo que hay detrás del parche.

-Vamos, si tienes un raspón o algo puedes decirme, yo te voy a atender- su sonrisa no desparecía... al menos no hasta que pudo quitarle el parche y vio las "marcas de beso" que se encontraban en esa zona.

De pronto su sonrisa desapareció, cambiando por una expresión confusa e incrédula, no quería creer lo que estaba pensando, pero cada vez sus creencias se hacían mas y mas fuertes.

-¿Qué... qué es esto?

-Es un rasguño.

-Pero... un rasguño no se ve así... eso no es un rasguño...

-Hace rato me pediste que vuelva pronto, ya estoy aquí.

-Volviste, pero volviste con eso en tu cuello. ¿Sabes lo preocupado que estaba? Te llamé tantas veces porque tú nunca regresas tan tarde.

-Durmamos de una vez.

-No... llevamos mucho tiempo juntos- recién asimiló la realidad y la aceptó -entonces ¿porqué?

-No sé a que te refieres.

-¿No sabes? ¿Enserio esa es tu mejor excusa?- sus pequeñas manos se apretaron en puños de la impotencia que sentía en ese momento.

-Fue solo una vez- miró el suelo evitando nuevamente el contacto visual.

-¿Sabes cuánto confié en ti?- sus ojos se cristalizaron soltando sus puños apretando la sábana abajo de él -Nunca te prohibí nada, no soy celoso cuando tus amigos son cariñosos, te dejo salir cuando quieres a donde quieres, por eso es que no comprendo ¿por qué?

-Lo lamento... no volverá a pasar, no me interesa... solo fue una vez.

-Confié demasiado en ti...- las lágrimas ya estaban bajando y por ende los sollozos no se hicieron esperar.

Nicholas volteó a mirarlo, le destrozó el alma ver llorar a su linda pareja, es como si hubieran agarrado su corazón y lo hubieran acuchillado, el rostro de Hanbin estaba tan triste, por sus mejillas corrían lágrimas sin parar.

Ahí fue cuando se activó una alarma en la cabeza de Nicholas "¡ABORTAR MISIÓN! ¡ABORTAR MISIÓN!" 

-Amor, no llores- quiso abrazarlo pero este se abrazó a sí mismo antes de que pueda hacerlo.

-¿Qué hice mal? - sus sollozos destrozaban a  Nicho.

-Amor, hablemos primero, te juro que no volverá a pasar.

No se esperó que Hanbin se levante rápidamente en dirección a la puerta.

-Espera... ¿A dónde vas?- sostuvo sus caderas impidiéndole abandonar la habitación y abrazarlo por la espalda al mismo tiempo.

-No te importa- intentaba solarse del agarre de su aún pareja.

-Solamente fue una vez, no volverá a pasar, te lo prometo.

-¿Cómo puedo creerte? Mejor vuelve con la zorra con la que fuiste. 

Nicholas estaba sorprendido, Hanbin no solía decir groserías, era demasiado raro escucharlo decir esas cosas.

-Solo mir--

-Nunca te prohibí que te divirtieras, te amé más de lo que amé a nadie, te dediqué tanto tiempo, siempre estuve ahí cuando me llamabas, siempre te consentía, yo... realmente pensé que una relación hermosamente duradera si existía... y era la nuestra... aparentemente me equivoqué.

-Escúchame- le dio la vuelta para poder ver su rostro -mira más de cerca... es solo labial.

Los ojitos de Hanbin se abrieron a la par mientras su cintura era sostenida por su esposo.

Nicholas se agachó para que Hanbin  pueda ver las "marcas" con más detenimiento.

Ciertamente se borraban muy fácil, entonces los ojitos de Hanbin se volvieron a cristalizar.

-¿porqué? Yo me sentí tan... sentí que todo mi mundo se estaba cayendo ante mis ojos, por un lado sabía que no eras capaz de hacerme algo así, por el otro... estaba asustado, tenía miedo de que te vayas- se quedó quieto mientras sollozaba.

-Amor~ adivina quiénes irán a concierto de BTS on:e- mostró las entradas que acababa de sacar de su bolsillo.

-Estás diciendo que...

-Sipi- besó la frente de su lindo Vietnamita.

-Te amo!- se lanzó hacia él mientras lo llenaba de besitos por todo su rostro -Te amo, te amo- estaba abrazado a él como un koala.

-Y yo te amo a ti- besó aquellos dulces labios que poseía la persona que estaba a su enfrente

Quiero mi venganza...

¿Quieren la venganza de Hanbin?

Si.

No.

Cami~