OO1. A unknown boy
El sonido de la música sonaba fuerte opacando los gritos de los amigos de Jimin.
Esa vez, el había ido de fiesta con ellos, quería estar lejos de su novia unos momentos, lo asfixiaba en ocasiones, no podían culparlo por eso.
Solo necesitaba algo de aire.
El licor que quemaba y raspaba ligeramente su garganta lo mantenía en ambiente mientras bailaba en la pista, su camisa de botones negra que abrazaba su figura hacia que ganara miradas interesadas, pero no estaba interesado.
Para Jimin la gente en general no parecía demasiado interesante, chicas, las chicas eran algo simples a su vista.
Aveces le disgustaba el picor que dejaba sus colonias, o sus manos con larguísimas uñas, ¡Tenía una piel algo delicada!
El ritmo de la música continuaba sonando, el tomaba tragos de su vaso rojo, no sabía cómo se llamaba la bebida, pero sabía deliciosa.
Siempre que comenzaba a tomar, él sabor del licor le disgustaba, solo era cuestión de tiempo, dos vasos, o quizás seis y la bebida sabía tan bien que se tomaría tres botellas completas.
Su mirada se paseo por el lugar, sus amigos Taehyung y Hoseok, estaban caminando al baño tomados de la mano mientras se balanceaban.
¿Que iban a hacer?
Ni siquiera el estaba TAN borracho, y ya debía llevar unos 7 vasos.
"¡Gracias por heredarme la resistencia al alcohol mamá!", pensó para sus adentros, continuando pasando su mirada alrededor, un bonito rubio se posó en su radar.
Ojos grandes, flequillo inmaculado aunque algo rebelde debido al sudor, cuerpo bonito, se veía atlético, nariz linda, labios delgados color rojo cereza natural.
Quizá era el alcohol haciendo estragos en su sistema, pero el hombre le parecía muy bonito.
Sus miradas conectaron, y recibió una sonrisa llena de coquetería que respondió, no sabía por qué, pero le llamó mucho la atención.
El rubio bonito caminó algunos pasos y luego chocó con un hombre de hombros anchos, parecían conocerse, ambos se miraron con intensidad y entonces Jimin presenció por primera vez como dos hombres se besaban.
Veía los labios chocar con hambre, en una esquina del lugar, el rubio bonito tenía al otro, se comían la boca con tanto desespero que por un momento Jimin sintió ese clásico cosquilleo en su parte baja, la forma en sus labios se movían y brillaban en un rojo cereza.
Se preguntaba si sabrían igual de bien.
"Pero que demonios piensas Jimin", se recriminó, retirando su mirada, camino al baño del lugar, buscaría a Hoseok y Taehyung.
"Lo que me faltaba" volvió a pensar, mientras veía a los dos comiéndose la boca en el baño, "no sabía que eran gays", rio para sus adentros, aunque ya se lo esperaba.
Viendo que no podía hacer más ahí, salió del baño topandose con el rubio bonito.
— ¿Estas solo? —preguntó el rubio de nombre desconocido.
— Mis amigos se están comiendo la boca, así que si, estoy solo —respondió alzándose de hombros, la risa del otro sonó ligeramente, como un timbre agradable que hizo que su columna fuera atravesada por un extraña corriente placentera— ¿Y tu?...
— Solo vine a una despedida, ahora estoy solo —sonrió con coquetería, ¿sería muy atrevido de su parte pedirle un beso al rubio bonito.
— Mmm, ¿y hay algo que necesites? —preguntó Jimin, sonriendo de medio lado, se habían acercado sin pensarlo demasiado, sus respiraciones chocaban con descaro mientras se acercaban más.
— Quizás, pero no se si te moleste —Murmuró el otro contra sus labios, sin poder contenerse demasiado e impulsado por la valentía momentánea del alcohol, Jimin conectó por fin sus labios.
El vaso cayó al suelo mientras ambos movían sus labios, se sentía tan bien como se veía, Jimin no podía expresar con palabras lo mucho que había deseado ese beso.
Los belfos ajenos color cereza, también sabían bien, el ligero sabor a alcohol le daba un toque lascivo al encuentro de sus bocas.
Como sus labios movían con la misma hambre que Jimin lo había visto, las manos suaves del contrario acercando su cuerpo la cintura, mientras el pasaba sus brazos por el cuello ajeno.
Se separaron debido a la falta de oxígeno, y Jimin pudo ver ese brillo destellar en los ojos del rubio bonito.
De repente, el sonido de una arcada y después un ¡Hoseok!, interrumpieron el momento, sin mirar de nuevo al rubio bonito, Jimin suspiró abriendo la puerta del baño de nuevo, Hoseok estaba tirado en el suelo vomitando y Taehyung tenía la boca tan hinchado que parecía pato.
— No puedo dejarlos solos un minuto porque adiós a la normalidad —se quejó Jimin.
Haciéndose cargo de levantarlo con la poca fuerza que tenía, Jimin se llevó a Hoseok en dirección al auto, luego tuvo que volver por Taehyung, ya que se había quedado de pie sin moverse.
— ¡Hey! —El rubio bonito llamó su atención— Nos vemos el mismo día.
Tragando saliva Jimin asintió con lentitud, el alcohol parecía pasar de su cuerpo como un balde de agua fría.
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