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Capítulo 24 : ABOUT FEELINGS

"Porque todos necesitan un poco de ayuda a veces. Todos necesitamos a quién llamar, todos tenemos que perdernos por dentro pero está bien, sí está bien. Sé que duele pero pronto estarás mejor, así que no dudes de ti mismo."
—Michael Schulte




dedicado a AnnieKim0309



Kim Seokjin era un profesional en su trabajo, o eso creía él hasta que un niño de veinte años lo obligó a dejar caer todas y cada una de las barreras que siempre había construido alrededor de la relación de trabajo que tenía con sus nadadores. Jungkook se deshizo de hasta de la más mínima de sus fieles creencias. Lo hizo a través de un par de ojos brillantes encantadores, una mirada necesitada de respuestas y muchas dudas que Jin podía entender tan solo echando la vista atrás a sus años de nadador profesional. Sin embargo, Jeon también suponía algo realmente desconocido que lo estaba empujando hacia el miedo de la irracionalidad, todavía no podía negarle ni una sola de sus peticiones aún sabiendo que debía hacerlo. Y aquello derrumbaba constantemente su fuerza mental atrapandolo en una red de cavilaciones que nunca parecían avanzar hacia el lugar correcto.

El pensamiento de culpabilidad lo persiguió durante la noche, las sabanas normalmente acogedoras parecían ahora una trampa enrevesada, una cadena que se envolvía en sus extremidades impidiéndole descansar. No había logrado cerrar sus ojos ni un solo minuto mientras se preguntaba si quizás las palabras de su amigo podrían tener sentido en su situación o no, quizás estaba dramatizando al respecto o tal vez tenía motivos de peso para sentirse preocupado.

Yoongi se lo había dicho, la diferencia entre la atracción y el que alguien te guste puede ser mucho más pequeña de lo que la mayoría piensa.

-Odio los aviones.

La voz de Jungkook sonaba lejana mientras el entrenador Kim se dejaba caer sobre uno de los asientos de primera clase que el staff de Jeon se había encargado de reservar. Podría estirarse sin problema todas las veces que quisiera en el amplio sitio del que disponía. Por supuesto había estado en primera clase antes pero nunca alrededor de algo como lo que sus ojos observaban. El equipo de Jungkook estaba poniendo todas las esperanzas en que este se convirtiera en la nueva promesa de Corea, quizás por eso sus patrocinadores seguían consintiendolo con todo tipo de regalos a pesar de su fama de atleta caprichoso, lo cual sin duda añadía nueva presión a su trabajo.

-¿Kim te encuentras bien?

Jin esquivó la mano de Jungkook tan pronto como lo presintió acercarse, por norma general nada terminaba bien cuando ese chico ponía su toque sobre él. Se sentía como un adolescente en plena etapa hormonal, así que lo mejor que podría hacer era crear una nueva barrera que marcase los límites. Incluso si sabía que esta sería derribada en algún instante.

-No es nada Jeon, solo estoy un poco cansado. No he dormido precisamente bien - la preocupación en los ojos del muchacho casi lo hizo derretirse - Dormiré tan pronto como el avión despegue, no tienes que preocuparte.

Jungkook asintió, no estaba ciego, podía ver la forma en la que su entrenador se continuaba apartando después de lo que había ocurrido la noche anterior. Con un suspiro de agobio Jeon se colocó el cinturón y escuchó los consejos de los azafatos fingiendo interés, sus ojos en cierta manera todavía se encontraban sobre Jin cuando este dejó escapar un sonido de crispación.

-¿Cómo puedo seguir con insomnio después de toda una noche sin dormir? - el hombre parecía frustrado consigo mismo mientras acomodaba la almohada que les habían proporcionado, o algo similar a eso pues sus dedos parecían estar estrangulando la tela sin ningún tipo de piedad.

-Puedes hablarlo conmigo si lo necesitas, ¿es por lo que paso ayer? - Jungkook puso su total atención sobre el entrenador dejando a un lado las explicaciones que ya conocía de memoria después de tomar aviones para asistir a competiciones durante gran parte de su vida.

-No importa Jeon, es mi propio problema. Yo mismo debería encontrar una solución para toda esta encrucijada de pensamientos que estoy teniendo. No tiene nada que ver con lo que pasó ayer sino con mis propias decisiones.

-Eso no suena a entrenador responsable de veintiocho años - Jungkook se acomodó en el asiento apoyando la cabeza contra su propia almohada mientras observaba a Kim - A veces puede ser bueno que otros te ayuden, fuiste un nadador así que probablemente sabes eso. Para que yo pueda ganar hay un enorme equipo detrás que me mantiene siendo la estrella.

Kim bufó divertido notando el tono juguetón que Jeon usaba, ambos sonrieron entonces. La calma regresando de forma alarmante a la mente del entrenador quien dejó caer sin tan siquiera pensarlo dos veces sus barreras más recientes.

-Estrella dices, a eso se le llama un niño egocéntrico. -Jin dejó escapar un bufido fingido mientras relajaba su mente con la conversación - Sea como sea, tienes razón. No sueno como una persona responsable, mis pensamientos tampoco suenan de ese modo y definitivamente mis actos dejan mucho que desear al respecto. Necesito un poco de calma, volveré a estar cuerdo en algún momento.

Jungkook no dijo nada durante varios segundos, sus ojos estaban clavados en la mirada cansada de su entrenador y las ojeras que se habían dibujado en su mirada debido a la falta de sueño.

Ojala fuese fácil, pero no lo era. Jeon comprendía que su comportamiento no era el mejor, estaba tratando de exprimir más y más a su entrenador por el único motivo de que los besos, manos y cuidados de este se sentían como una perfecta variación a su rutina. Le gustaba cuando el entrenador Kim atacaba su boca con labios duros, incluso si aún no sabía cómo enfrentarse a su propio disfrute.

-¿Deberíamos simplemente hacerlo y dejar que la tensión desaparezca? - Jungkook bajo la voz sintiendo ahora en su cuerpo la necesidad que la noche anterior había sentido, antes de que Kim lo dejase desahogarse contra su cuerpo. Sus mejillas se tiñeron de rubor al recordarse a sí mismo, su forma de rozar su miembro contra el entrenador como si todo lo que pudiese ver fuese a ese hombre que llenaba su cabezota de incógnitas. Él realmente no podía resistirse a descubrir misterios - Todo debería calmarse, tú lo quieres y yo también. No te atrevas a negarlo después de la forma en la que me miraste ayer, era como si estuvieses a punto de saltar sobre mi cuerpo.

-¿Qué te hace creer que tener relaciones podría solucionar algo? Esto no es una película Jeon, sigues confundido y tienes curiosidad, por eso el hecho de que follemos traería más problemas y dudas que soluciones. ¿Y qué pasaría si nos gusta?

-¿Repetimos? - Jungkook estaba tratando de bromear, sin embargo entendía a la perfección lo que Jin decía, porque este ya se lo había explicado antes y él estaba demostrando ser ese niño al seguir insistiendo al respecto. Además, si no funcionaba tendrían dos opciones: verse la cara cada día haciendo el entrenamiento más complicado o separar sus caminos por completo.

-Deja de hacer eso niño, no es un asunto tan fácil. Si alguno de nosotros se enamora estaremos perdidos, yo no podré afrontar el hecho de verte lesionandote o lastimandote en una piscina. Tú no podrás tomarte en serio los entrenamientos porque romperiamos por completo la diferencia entre familia y trabajo.

-Oh, Kim. Eso me ha dolido, ¿crees que no soy lo suficientemente perfeccionista como para saber distinguir ciertas cosas? Además, es absurdo pensar que podamos enamorarnos por el simple hecho de tener sexo, el mundo no funciona así. Hay gente de todo el planeta teniendo relaciones sin caer en el amor por muy moderno que eso suene para ti. Solo… siento esta tensión entre nosotros, creí que solo era yo hasta que ayer me dejaste hacer eso...

Kim frunció el ceño abandonando la amabilidad, a veces le costaba recordar que Jungkook solo era un niño acostumbrado a ganar siempre. A pesar de su buen corazón había demostrado ser implacable con sus anteriores nadadores, y aunque Jin sabía que tenía sus motivos concretos… seguía demostrando una clara faceta difícil de sobrellevar.

Una faceta que por otro lado llegaba del perfeccionismo, aquello era cierto y él no dudaba de que Jungkook pudiese seguir un entrenamiento con o sin una relación de por medio. En cambio sí dudaba de si mismo, y de lo débil que su corazón siempre se mostraba ante el verbo amar. Había caído antes, se había lastimado y había derramado lágrimas por amar a las personas inadecuadas. Su puntería en cuestión de relaciones era nula y su nadador ni siquiera quería ir más allá del sexo.

-Te lo explique dos veces Jungkook, no habrá una tercera. No voy a ser tu experimento mientras sientes dudas acerca de lo que te gusta, por supuesto que ayudaré, pero el sexo es algo a lo que no llegaremos.

-¿Sabes porque no puedo entenderlo Kim? - Jungkook sabía que su entrenador había sufrido por amor, recordaba las palabras del día anterior en la playa pero su noche también estuvo cubierta de pensamientos, reflexionó lo suficiente como para alcanzar muchas más preguntas que respuestas - Porque cuando me he puesto a pensar… he llegado a la conclusión de que los besos son mucho más íntimos que el sexo.

El entrenador dejó escapar una carcajada a su lado.

-Quizás nunca has tenido el tipo de sexo adecuado Jeon, ¿quieres que te folle ahora? Podría hacerlo, maldita sea, ni siquiera me importaría meterte en el baño para darte una lección pero lo cierto es que no soy tan cruel, nunca has estado con un hombre y tu primera experiencia con uno no debería ser simple y sencillo sexo. Todos podemos hacer eso, simple y vacío placer… pero a mi no me gusta salvo cuando estoy completamente necesitado.

Jungkook bajo la mirada, no podía comprenderse a sí mismo. Él jamás se había comportado así antes, tan repetitivo e insistente sobre algo, quería librarse de las dudas y la presión en su pecho… pero quizás el entrenador tenía razón en una cosa, comprobarlo de forma apresurada y falta de sentido podría tener un efecto muy diferente del que él creía.

-Oye - la voz de Kim se volvió más dulce cuando percibió como los ojos de su nadador se volvían tristes - No quiero hacer las cosas más complicadas para ti niño, sé lo aterrador que es todo esto. Tu cabeza probablemente es un enorme lío de dudas…

-Gracias de nuevo entrenador, gracias por tener paciencia. - Jungkook suspiró notando como sus ojos se cristalizaban - Solo quiero librarme de esto por completo, me gustaría aceptarlo en voz alta pero ni siquiera puedo decirlo con claridad en mi mente. Sé que me gustan los besos, también me gusto lo que hicimos ayer pero en mi cabeza algo sigue dejando una migaja de esperanza acerca de que cuando me encuentre en la cama con alguien de mi mismo género…. yo…

-¿Crees que eso te devolverá al concepto social de normalidad verdad? Que si intentas acostarte conmigo o cualquier otro hombre tu mente se va a curar.

-Yo no… - Jungkook trató de explicarse sintiendo un golpe de ansiedad en su pecho al entender lo mal que su idea sonaba en voz alta - No quiero decirlo de esa manera, solo…

-Nunca olvides que estuve en tu lugar, Jungkook - Kim posó su mano sobre la del nadador y la sostuvo con cuidado comenzando a masajear sus dedos con cuidado - Intente lo mismo. Yo realmente decidí acostarme con un chico y acabé enamorándome pero él no tenía la misma idea de amor que yo, para él fue simple placer, un bonito chico joven al que engañar y quitarle la sexualizada virginidad… desde entonces decidí que es más fácil cuando antes de entrar en la cama de alguien o dejar que alguien entre en la tuya, hay un acuerdo mutuo y claro entre ambos, de esa forma nadie sufre. - Jin hizo una pausa cuando el avión comenzó a moverse - Si te estoy contando esto es porque aunque no lo creas la primera experiencia sexual de una persona es importante, pueden surgir muchos sentimientos en función de cómo te traten. Puedes acabar adorandolo, odiandolo o simplemente sentir que has desperdiciado la oportunidad, porque la primera vez nunca es fácil sin importar si eres hombre o mujer. La persona que elijas para ayudarte a saber quién eres, qué quieres… debe ser importante para ti. Alguien de tu confianza que no termine haciendo que veas todo de forma negativa, un paso equivocado y esa burbuja en la que te estás encerrando se hará mucho más grande y aterradora niño lindo.

Jungkook asintió cerrando los ojos mientras sentía las caricias del entrenador sobre la piel de su mano.

-Entrenador - dijo sintiendo que el sueño llegaba hasta él - realmente creo que no podría elegir a nadie mejor que tú.

Kim no pudo evitar sonreír ante las palabras del chico, quizás debido a eso su mente se relajó lo suficiente como para conciliar el sueño. Con los dedos de Jeon fuertemente entrelazados a los suyos, posó la cabeza sobre el almohadón y continuó observando al muchacho que se encontraba a su lado hasta que sus parpados pesaron.

En dos horas se encontrarían en Tokio.







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Hiiiii!!!
Tuve unos cuantos problemas con drive y no había forma de abrir el documento en el que había guardado el capítulo así que debido a eso he tardado más de lo habitual.

Lo siento por eso baes.

Un beso, Mel 😘

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