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Pov. Jungkook
Hoy era uno de esos días donde todo lo que haces te sale un desastre, porque para mi este día empezó de lo peor.
Primero.
Me levante tarde porque mi alarma no sonó a la hora que debía, claro, olvide programarla la noche anterior. Que idiota!.
Segundo.
Por levantarme tarde, llegue tarde a mi primera clase tarde obviamente y lo peor es que era la materia con la cual tenia dificultades, pues no todas las materias parecen ser fáciles. Maldición por qué escogí esta carrera!.
Tercero.
Mientras iba corriendo a mi otra clase me caí, si, me caí nose como pero lo hice lo positivo es que ese pasillo estaba casi vacío así que a toda velocidad me levante y seguí corriendo. Ay que vergüenza!.
Cuarto.
Tuve un examen sorpresa, si examen sorpresa como leen y era de estadística II obviamente me fue mal no! me fue pesimo, como se le ocurre al docente tomar un examen sorpresa sin avisar puf!!!.
Quinto.
En la hora del almuerzo no se como, pero, ya había un almuerzo desparramado en el suelo y no era mío, pues por accidente golpee a un compañero con mi mochila e hice que derramara su almuerzo y bueno tuve que pagarlo, el pobre chico me miraba enojado, me disculpe y salí de ahí no quería problemas, no en este dia.
Y si, hoy fue un día raro ya que no soy una persona torpe, distraída, descuidada e irresponsable, lo contrario evito ser así, no soy perfecto lo se, pero por cosas de la vida hoy me pasó de todo, cosas que no suelen sucederme las experimente y espero que este día termine tranquilamente sin mas accidentes y ajetreos.
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Al fin terminaron mis clases por hoy, en la pantalla de bloqueo de mi celular marcaba las 3 p.m. y algunos minutos más, aun era temprano, así que seguiría dirigirme primero a mi departamento, después ir al Gym y finalmente regresar a casa y hacer mis tareas pendientes o prácticas que tenia, este día fue algo extraño? raro? no se tal vez ambos pero simplemente quería salir ya de la U y sin mas tome mis cosas las acomode en mi mochila tranquilamente para así después salir del aula en la cual me encontraba y dirigirme a la salida de manera tranquila sin apuros y fijando mi mirada al frente para no chocar con nadie.
No entiendo, la verdad es que no entiendo.
Si, no entiendo como es que al salir de la Universidad estaba lloviendo, si, no entiendo como, si estábamos en pleno verano y justo esta mañana estaba soleando de maravilla pero ahora llovía, aún así me encontraba tranquilo ya que este día al fin culminaría y como hace un momento sigo con mi camino de manera tranquila y fijandome siempre al frente para no chocar.
Caminando de manera tranquila y evitando mojarme caminaba para así llegar a la parada de autobús y con este llegar a mi departamento.
Note que aun me quedaba un largo camino para llegar a la parada de buses y no había indicios de que dejara de llover, entonces decidí comprar un paraguas que para mi suerte había una tienda cerca vendiendo paraguas, que bueno.
Continue con mi camino como lo hacia desde un principio de forma tranquila.
Desvío mi mirada a la calle contraria por unos cortos segundos, juro que solo fue segundos muy cortos.
Lo que observé fue que en la calle contraria se abrió una cafetería nueva, algo en ella me llamó la atención, llevaba como nombre "Love Your Self", tenia tonos morados en la pared y se diferenciaba de las demás tiendas que había a su alrededor, realmente no estaba nada mal el diseño que tenia esta.
Volviendo mi mirada al camino, siento como choque con alguien y también mis oídos escucharon como cosas se caían y en un susurro oí "esto no puede ir peor" así que sin mas baje la mirada y vi el desastre que ocasione, no cualquier desastre, era un lindo desastre que claramente también estaba siendo mojado por la lluvia. Pero aun así se via... Lindo.
Un bello chico con pelo rubio estaba levantándose del suelo mojado, se sacudió un poco y se dispuso a recoger unos libros, observe una libreta y bolígrafos tirados en el suelo, fue ahí cuando reaccione ya que había tumbado a alguien sin mas me agache y lo ayude a recoger sus cosas este día sin duda fue un desastre desde el inicio, pero, tal ves no terminaría tan mal después de todo.
Pov. Jimin
Mi día empezó horrible no sé si el mundo se puso en mi contra, ya que desde un inicio mi día empezó un completo desastre.
Primero, si primero porque no solo fue una y dos, sino varias.
Primero.
Me levante gracias a que sentía que me ahogaba, gracias a mi gran amigo Tae quien tenía el reto de despertarme con un balde de agua y asi lo hizo él desgraciado, no lo dejaré quedarse mas en mi departamento, nunca mas!.
Mi hermosa cama estaba empapada de agua y ni que decir de mi estaba todo mojado asi que primeramente heche a Tae de mi hogar y cerré con seguro para que no volviera a entrar, ya seguro me fui a tender mi camita en el balcón de la habitación para que seque en lo que va del dia y despues hice lo habitual asearme, desayunar y ya saben para finalmente dirigirme a la U.
Realmente pensé que solo aquel accidente en la mañana seria lo peor que pasaria el dia hoy, pero que equivocado estaba.
Segundo.
Llegue tarde a mi primera clase por haberme dormido en el autobús, quien se duerme en el autobús, claro yo!, como llegue tarde a la primera clase, el docente tuvo la grandiosa idea de tomar un examen sorpresa al cual no asistí ya que no me dejaron entrar por llegar tarde, uf que mal me cae ese viejo, solo llegue tarde 20 minutos ah.
Tercero.
A la hora del almuerzo fui a la cafetería, ya con mi bandeja de comida me dispuse a ir a una mesa vacía que estaba a unos 2 metros de mí más o menos, me encontraba tan concentrado siguiendo mi camino. Hasta que...
Un integrante del equipo de fútbol demostraba sus grandes dotes con el balón en una de las mesas, que no estaban tan lejos de aquel rubio que se encontraba concentrado en no hacer nada torpe y sumarle otro accidente de mala racha a este día.
El balón era muy bien manejado haciéndose maniobras con las piernas del integrante de fútbol, hasta que en un movimiento en falso, dicho balón salió volando en dirección a dicho rubio que se encontraba con su bandeja de comida, obviamente pasó lo que tenía que pasar, la bandeja de comida voló levemente hacia arriba y terminó regada por el suelo. Uh, mala suerte, creo que si.
Un rubio molesto se agacho y recogió la manzana y el jugo que salieron ilesos de tal accidente sin más se volteó para ver quién provocó aquel accidente, claramente esa mirada no era para nada amable y el contrario lo sabía con tan solo mirarlo, claro cómo no sentirse molestos cuando se meten con tu preciosa y valiosa comida.
– Oye tu idiota, más te vale recoger y limpiar todo lo que ocasionaste – reto el rubio mirando al contrario, sin más salió de la cafetería, pues si se encontraba molesto y bastante había perdido su deliciosa comida.
Estas cosas solo me pasan a mi – pensó, él sabía que era algo distraído y un poco, solo un poco torpe, pero este día él realmente no había hecho nada para ocasionar aquellos accidentes sino que otros lo hicieron.
Mis clases terminaron cerca de las 2 p.m. y me fui a la biblioteca que había en el centro estaba soleado, pero el ambiente aun así se sentía fresco así que el día no estaba tan mal después de todo.
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No!
No, estaba totalmente equivocado este día no podía estar peor, después de estar en la biblioteca aproximadamente una hora encontré los libros que quería y me dispuse a leerlos y tomar apuntes en la libreta que llevé junto a unos bolígrafos, solo lo necesario, ya que lo demás lo deje en mi casillero en la Universidad, mala idea.
No terminé de hacer mis apuntes, tenía hambre y con un estómago rugiendo por comida, uno no puede estudiar así, así que decidí pedir prestado los libros para terminarlos en mi departamento y así devolverlos mañana.
Recogí mis cosas, que era poco y me dirijo donde se encuentra la bibliotecaria, después de realizar el trámite corto para el préstamo de los libros, la bibliotecaria plastifico los libros y me los entregó con una sonrisa, no entendí la razón así que le devolví la sonrisa por su amabilidad y me dirijo a la salida.
Al salir de la biblioteca me di de cuenta que afuera llovía, ah, por eso plastifico los libros – pensé. ¡Que amable! sonreí.
Mire el cielo y con los ojos puestos en él busque el sol, pero no lo encontré, bufe porque pues estaba irritado, hasta el clima se puso contra mí pero que ¡clima mas bipolar!, sin más salí apresurado de ahí, tomaría el autobús directamente y llegaría a mi departamento así que a paso veloz estaba siguiendo mi camino.
Por milisegundos observó una nueva cafetería llamada "Love Your Self" que está al contrario de la calle, que raro ya que al ir no la vi pero ahora si, aun asi, me gusta el diseño y el nombre que tiene.
Después de milisegundos decido voltear la mirada para continuar mi camino, pero apenas avanzo otro medio paso y siento como caigo al frío suelo y en el proceso solté todo lo que llevaba abrazando en mis manos.
Que vergüenza, seguro choque con alguien por distraído, esto era increíble lo que faltaba, la cereza del pastel.
Estaba tendido en el suelo siendo mojado por la lluvia.
Me levanté, me sacudí y me dispuse a recoger mis cosas que estaban regadas en el suelo hasta que note como unas manos me ayudaban a recoger y lo vi.
Lo vi a él, era muy guapo no lo niego tenía el cabello negro, note sus ojos de bambi y unos labios finos.
A pesar de que yo fui el distraído quien chocó con el guapo pelinegro, el pensamiento de que este día, tal vez, solo tal vez podría mejorar un poco pasó por mi mente...
Terminaron de recoger todo lo derramado en el suelo y se arrinconaron a una tienda con toldo para evitar que la lluvia los siga mojando, olvidando que uno de ellos contaba con un paragua.
– Mmh... – carraspearon los dos al mismo tiempo.
– Eh... – no sabían que decir eso se notaba a kilómetros de distancia.
Después de unos segundos de silencio, donde ambos se dieron cuenta que solo balbuceaban, decidieron hablar.
– ¡Lo siento! – dijeron al unísono.
– No nada que ver, fue mi culpa – volvieron a decir al mismo tiempo de manera rápida y soltaron unas pequeñas risas después de lo dicho.
– Hola soy Jeon Jungkook, disculpa el incidente, estaba algo distraído – dijo el pelinegro con una sonrisa, alzando la mano para estrecharla con la del rubio que se encontraba frente a él.
– Hola y un gusto soy Park JiMin, creo que yo debo ser el que se disculpe ya que estaba distraído, lo siento. – dijo el rubio algo avergonzado y estrechando la mano del contrario en respuesta.
– Creo que ambos íbamos distraídos – menciona Jungkook, observando la calle contraria justo en dirección a la cafetería.
– Creo que si – suelta un risita el rubio, ambos viendo a la misma dirección.
– Te parece si tomamos unos cafés, mientras esperamos a que pase la lluvia – dice de pronto Jungkook tomando desprevenido al contrario con aquella invitación.
– Mmh... no lo se – duda Jimin – No te conozco del todo, señor Jungkook, como podría aceptar asi nada mas. – dice.
– ¿Señor? - pregunto el pelinegro con una sonrisa – Apenas tengo 22 años y me dices señor – dice con un tono ofendido – Y solo debes aceptar, no lo pienses tanto. – le sonrió socarrón.
– Yo tengo 21, eres mayor que yo. – contradice.
– Solo por un año o tal vez meses. – responde.
– Aun así. – continúa el rubio respondiendo.
– Que dices... – suspiro con un deje de nerviosismo, ni él mismo sabe del por que aquello –Tomamos un café. - vuelve a preguntar Jungkook con un brillo indescriptible en sus ojos.
– Esta bien – acepta – Pero, cada quien paga lo suyo, señor. – dice bromeando Jimin.
– Que tal si tu invitas y yo pago, eso suena mejor. – propone levantando sus cejas coqueto.
– Tonto – le dice provocando que ambos suelten tímidas sonrisas para nada incómodas.
– Lindo – responde inconsciente Jungkook observando al contrario.
– ¿Qu-é? - dijo sonrojado el rubio después de escucharlo y tampoco sabia el por que de su sonrojo repentino.
– Eres muy lindo – dijo el pelinegro mirando atento al rubio sonrojado – ¿Vamos? – señala a la cafetería frente a ellos y era la misma, la cual ambos habían visto antes del accidente que los llevó a conocerse.
- Y-yo, si claro, vamos.
Jungkook sin pensarlo tomo la mano del rubio y caminaron a la cafetería esperando a que la lluvia pasase.
Su primer encuentro...
– Así que estamos en la misma Universidad, como es que nunca nos hemos visto – dijo el pelinegro mientras le daba un sorbo a su café caliente.
– Tal vez será porque estamos en carreras y facultades diferentes – dijo obvio el rubio – Yo estudio danza y tú pues no lo se - dice JiMin con un deje de burla.
- Así que danza – dice tocando su mentón – Bueno yo estudio arquitectura y pues si, nuestras facultades están muy alejadas tal vez por eso nunca nos hemos visto – termina.
– Si, creo que si – suspiro – Es bonita – dice de repente observando su alrededor – Me agrada la paleta de colores morado, un poco de negro y el blanco le da unos toques únicos y el ambien mas la musica de fondo lo hace... nose ¿especial?. – soltó un pequeña risa el rubio ante lo dicho y Jungkook no se perdió ni un solo detalle de ello.
– Si, no lo niego, a mi me distrajo lo peculiar que es y bueno por dentro es mas hermoso aun – dijo Jungkook mirando al rededor de la cafetería al igual que Jimin.
– Si es hermosa – dice.
– Bueno, ya la lluvia está pasando – cambia de tema el pelinegro viendo por el ventanal como la lluvia baja de intensidad.
– Si – responde esta vez posando su vista en el gran ventanal que dejaba ver la calle.
– Dame tu número. – dice de repente Jungkook.
– ¿Qu-é? – preguntó sin entender del todo Jimin.
– Dame tu número de celular – dice.
– Y-yo... – pero que directo pensó JiMin sin saber qué responder.
– No lo pienses tanto, no está mal hacer amigos de vez en cuando.
– ¿Amigos? – yo apenas te conozco volvió a pensar Jimin.
– Si amigos, seamos amigos ¿te parece?. – dijo cruzando sus brazos sobre la mesa – Me caes muy bien y también pareces una persona muy interesante, eres lindo – dice el pelinegro quien vio que los mofletes del rubio se sonrojaron.
– Y-yo, esta bien dame tu teléfono – dice para que aquel pelinegro dejara de hablar cosas sin sentido o eso pensaba Jimin, él pelinegro saco su celular lo paso y Jimin anotó su número y se lo devolvió tan pronto como terminó.
El pelinegro llamó a dicho número y de repente se escucho el teléfono del rubio sonar y mostrando en la pantalla una llamada entrante de un número desconocido y miro con la ceja levantada al pelinegro frente de él.
– ¿Qu-é? – dijo Jungkook por la mirada que recibía del contrario – Es para asegurarme que no me dieras un número falso y también para que agendes mi número – dice con una mirada obvia – ¿Cómo te agendo?
– Con mi nombre, no es obvio.
– No, tiene que ser un sobrenombre bonito de acorde a ti.
– , Pero que dices, solo pon mi nombre y listo – dijo el rubio.
– Tú, ¿con qué nombre me agendarás?
– Jungkook – dijo simple.
– No – negó, acomodándose en la silla mejor – También quiero un sobrenombre lindo.
– No.
– Si.
– Dije que no.
– Te pondré Minnie – hablo repentinamente terminando la guerra de afirmacion y negacion.
– ¿Minnie?
– Si, Minnie porque suena más tierno y tu eres tierno y también dulce.
– Como sabes que soy dulce.
– Porque veo en tu mirada a un chico lindo, hermoso, bondadoso y con un corazón enorme.
– Wow, todo eso ves en mis ojos, que miedo. – dice en burla.
– Si eres hermoso – responde de forma seria observando y JiMin se volvió a sonrojar.
– Esta bien, deja de decir que soy hermoso, yo te agendare con Kookie.
– ¿Kookie? – lo mira y asiente – Kookie... me gusta, agendame así.
– Listo – dijeron al unísono después de poner dichos sobrenombres.
– Te parece si... nos volvemos a encontrar en esta cafetería, ¿el jueves en la tarde a las 4 p.m.? - pregunto Jungkook al rubio, la verdad es que no quería dejar ir al rubio, él en verdad sentía una paz y su corazón se inquietaba con el solo el pensamiento de ver a Jimin todo los dias.
– Y-yo nose que decir. – respondió.
– Solo acepta y así podríamos conocernos mejor.
– Esta bien, acepto solo porque eres muy directo e insistente.
– Si, aja.
– ¡Enserio! – dice el rubio con un puchero ya que Jungkook lo estaba molestando.
Terminando entre pequeñas guerras de Sí y No, risitas y sonrojos finalizó su velada con la promesa de escribirse apenas llegasen a sus respectivos hogares y con una próxima cita pendiente.
La cita coordinada fue la primera de muchas más, donde poco a poco el amor comenzaba a nacer entre la pareja, JiMin se sonrojaba cada vez que Jungkook le decía "hermoso, lindo, Mochi, etc", Jungkook no se quedaba atrás ya que JiMin también le decía apodos tiernos como "Kookie, Nochu, Conejito, etc", era como una competencia de ver quien se avergonzaba más o quien se ponía más tímido frente al otro.
El tiempo que ambos compartían era muy valioso para ambos, porque poco a poco ambos fueron conociendo las distintas etapas que había en ellos y disfrutando de cada una de ellas.
Después de aquel accidente donde ambos se conocieron bajo la lluvia y compartieron un café en aquella cafetería, varias cosas cambiaron.
Se convirtieron amigos y siempre compartían su tiempo libre el uno con el otro, después de 6 meses mas o menos conociéndose y gustándose en secreto mutuamente, porque si, tanto Jungkook como Jimin tenían claro que les gustaba el contrario pero decidieron que sea un secreto que claramente solo cada uno lo sabía y que esperarían al momento adecuado para decirlo en voz alta.
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Jungkook como siempre sin filtro y directo le pidió a JiMin ser su novio formalmente tomando desprevenido al antes mencionado.
– Minnie me gustas. – dijo Jungkook quien había llevado a JiMin a un parque lleno de hermosas flores y quien escondía unas rosas hermosas de color blanco y rosa en su amplia espalda. – ¿Quíeres ser mi novio?!. – termino de decir al mismo tiempo que mostraba el ramo de rosas que escondía, y JiMin era otro cuento ya que empezó a toser después de escuchar a Jungkook, pues se había atorado con la malteada que estaba tomando y que había sido comprado justo por el chico frente a él.
JiMin después de estabilizarse y todo rojo miró a Jungkook, pues tenía sentimientos encontrados se encontraba feliz y brincando de alegría en su interior porque era correspondido, pero también se encontraba molesto ya que Jungkook siempre lo tomaba desprevenido haciendo que se quede mudo o que se encuentre avergonzado, y pues estaba muy avergonzado porque se atoro con la bebida, ¡que verguenza!.
– ¡Jungkook! – le dio un manotazo suave en su brazo luego de tomar el ramo de rosas ya que este después de auxiliarlo se reía por lo antes sucedido y porque el rostro de Jimin aun se encontraba rojo – Cuántas veces te he dicho que no digas las cosas así muy directas, por tu culpa casi me ahogo con la malteada – dijo tratando de sonar molesto.
– Minnie sabes como soy, deberías de haberte acostumbrado ya – dijo revolviendo el cabello rubio de Jimin.
– Repite lo que me dijiste antes – dice el rubio con un puchero.
– Me gustas mucho Minnie, quieres ser mi novio – repitió esta vez posando su mano en la mejilla del contrario – No puedes decir que no, porque ya tomaste el ramo de rosas – dice apuntando con su dedo índice a dicho ramo que era sostenido por JiMin.
– Me gustas mucho Kookie – dijo el rubio ruborizado – Y no pienso negarme, porque también quiero que seas mi novio – dice rojito y con una sonrisa plasmada en su rostro.
– ¡¿Eso es un si?! – dice Kook.
– Eres directo, si, pero eres lento procesando – dice JiMin soltando una risita y empuñando la chaqueta que Jungkook tenía puesta para ponerse de puntitas y besarlo demostrando lo que sentía con aquel íntimo acto.
Los ahora novios agradecen que aquel día se hayan conocido bajo la lluvia, ya que encontraron el amor, un amor que florece día a día compartiendo pequeños detalles y momentos juntos...
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2 años después...
Esa hermosa relación que había nacido hace dos años atrás, día tras día creaban momentos que atesoraban y esperaban contar a sus futuros hijos, muchas cosas pasaron durante ese tiempo donde ambos se amaban con más intensidad que el día anterior, no faltaban las discusiones, discusiones que no eran de gran magnitud ya que después de hacerse novios como 4 meses después decidieron vivir juntos, algo apresurado pero ellos no lo vieron así, sintieron que era el momento y así fue.
Pero ahí es donde las discusiones empezaron, ahí, haciendo que cada día sea más amena porque eran cosas casi sin importancia, discutían por quien debía hacer el desayuno-almuerzo y cena, lavar la ropa, limpiar el departamento, ir al supermercado a hacer las compras, regar la plantas, pero al final siempre terminaban haciendo las cosas juntos con besos robados, abrazos cálidos y llenos de amor, demostrando que todo lo que quisieran hacer lo podían hacer juntos.
Ambos terminaron sus carreras universitarias, JiMin como un gran bailarín quien ahora trabajaba como profesor en una de las academias famosas en Seúl y Jungkook como un gran arquitecto famoso quien trabajaba en la empresa de su padre y pronto él tomaría el mando.
Justo el día de hoy cumplían dos años de noviazgo, pues Jungkook y JiMin quedaron en celebrarlo en un restaurante con una cena romántica y después ir a dar un paseo por el río Han, algo simple pero no necesitaban más, para ellos era suficiente con solo estar juntos.
Jungkook le dijo a JiMin que saldría y regresaría para ir juntos al restaurant, solo faltaban 10 minutos para la hora en la que habían quedado ir y JiMin esperaba a Jungkook ya listo en la sala de su departamento, justo en ese momento tocan la puerta y se dirige a abrirla.
Abre la puerta encontrándose con un gran ramo de rosas blancas y rosas como aquella vez en que Jungkook le pidió ser su novio, como olvidaría aquel hermoso dia y aquel bello detalle, solo que esta vez dicho ramo era mucho más grande y tapaba a la persona que se encontraba tras ella.
– Amor, cásate conmigo – dice Jungkook bajando el ramo de rosas y mostrando en una cajita de terciopelo con un par de anillos hermosos de compromiso y como siempre con su forma peculiar de decir las cosas muy directamente, así tomando a JiMin desprevenido quien se encontraba en ese momento en shock y con sus ojos cristalizados por las lágrimas que se acumularon en sus ojitos.
– Tonto – dice después mirando a Jungkook a sus hermosos ojos profundos y tomando en sus manos el gran ramos de rosas – Repítelo, por favor amor – pide soltando pequeñas lágrimas de felicidad había oído bien, pero quería escucharlo nuevamente para responder a su propuesta.
– Amor, cásate conmigo – repite – No puedes negarte ya aceptaste el ramo de rosas - lo acusa, "deja vu".
– Acepto casarme contigo Kookie – dice JiMin acercándose a Kook y dándole un pequeño beso tierno en su nariz al pelinegro, Jungkook le pone el anillo y JiMin le pone el suyo, después de terminar dicha acción Jungkook lo toma de la cintura acercandolo más hacia el – Siempre directo y tomándome desprevenido – le sonríe mirando el hermoso anillo que posaba en su dedo mostrando que ya está comprometido y prontamente serían esposos – Te amo Kookie, te amo mucho, me haces muy feliz mi amor. – dice dándole pequeños besos en los labios finos de Jungkook, claramente aquel ramo fue dejado de lado por el gran tamaño que tenía este.
– Te amo demasiado Minnie, te amo mucho amor mio - dice abrazando al rubio y dándole besos en su cabellera rubia – Pensé que era pronto para casarnos, pero luego dije que ya era el momento de planear nuestra boda – dice sincero.
– Y lo es amor, es hora de planear nuestra boda – responde el rubio mostrándole su eyesmile y dándose cuenta de la hora – Es hora de ir al restaurant o nos quitarán la reservación y además tenemos que festejar nuestro compromiso – dice entrando y tomando nuevamente el ramo que fue dejado a un lado y lo puso en la sala.
– Vamos amor – Jungkook toma la mano de Jimin y salen juntos de la mano para festejar que pronto estarían casados y serían esposos.
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Así es como esta hermosa pareja encontró el amor en un día lluvioso, ahora esposos ya con 7 años feliz y hermosamente casados, después de un año de casados decidieron que ya era hora de que en la familia se uniera un nuevo miembro, donde claramente ambos disfrutaron mucho del proceso.
Tiempo después JiMin quedó en cinta, durante todo el embarazo de Jimin, Jungkook lo mimaba mucho y cumplía cada uno de sus antojos, pero también seguían al pie de la letra cada indicación del doctor ya que por ser primerizo debía de cuidarse más y alimentarse de manera saludable sin dejar sus antojos con la advertencia de que no debía excederse.
Nueve meses después el hermoso Jeon Jungmin se unió a la familia, el pequeño Jungmin era muy parecido a su papá Jungkook ambos padres le dieron la bienvenida al nuevo integrante felices y orgullosos, un par de años después Jimin le dio la gran sorpresa de que se encontraba en cinta a Jungkook y claramente este estaba muy feliz una nueva personita se uniría a su familia, y así otros nueve meses después llegó una hermosa niña quien se unió a la familia con el nombre de Jeon Mina.
La pareja estaba muy feliz pues tenían a sus dos preciosos tesoros, eran felices y no necesitaban mas, solo estar juntos, darse mucho amor y comprensión.
La cafetería "Love Your Self" era el lugar favorito de la familia, ya que ahí tuvieron muchos recuerdos hermosos que compartieron desde que se conocieron y ellos les contaban a sus bellos hijos como se habían conocido aquel día, no se cansaban de contar como había sucedido y sus hijos muy felices y alegres por sus papis no se cansaban de oír su bella historia de amor.
– Recuerdas como nos conocimos amor – menciona Jungkook de repente dándole un tierno beso en la frente.
JiMin y Jungkook se encontraban en su dormitorio, con el aun rubio entre los brazos de Jungkook, esté apoyado en el espaldar de la cama y con la espalda de JiMin pegado a su pecho así abrazándolo por la cintura y con su mentón apoyado en el hombro disfrutando de este íntimo momento junto a su esposo, mientras sus hijos descansaban en sus respectivos dormitorios.
– Pensé que ese día era el más horrible – continúa hablando Jungkook, mientras JiMin le da leves caricias en las manos que se encontraban en su abdomen.
– Pero cuando te vi simplemente me olvide de todo, hasta olvide que llovía y mientras nos mojábamos yo pensaba que este día no podía ser más hermoso – JiMin voltio su rostro para observar mejor a su esposo quien relataba cuando se vieron por primera vez y él tambien lo habia sentido asi, aquella primera vez cuando se vieron, por primera vez.
– Porque después de que nuestras miradas se conectaron y que de nuestros labios salieron balbuceos – soltó una pequeña risa recordando aquel momento especial para ambos como olvidaría aquel día, si para ambos era uno muy especial, uno donde ambos unieron sus vidas poco a poco. – Supe que te encontré, mi amor, que te encontré amor y por eso ese día es un día especial, ahí es donde inicia nuestra bella historia de amor con tan solo una mirada supimos que éramos, somos y seremos un nosotros.
– ¡Te amo, mi amor...! – dicen al unísono sellando aquellas valiosas palabras con un íntimo beso sin dobles intenciones, solo demostrando cuán fuerte era y es su amor y recordando cada momento que vivieron juntos, único, especial y valioso cada momento.
¡Te encontré, amor mio...!
– JJK y PJM –
Hola hermosas personitas, ¿como están?
Espero que todos se encuentren muy bien, por favor manténganse saludables.♡
Este es un pequeño OS espero les guste y le den mucho apoyo y amor.
Sin más me despido, tengan un hermoso día, bye besitos...^^
– 5010 –
Love Your Self!.
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