Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

18 - Extra

— Que sea lo que dios quiera, yo aquí tendré nieve por si acaso.

Él no escuchaba, bueno sí, pero no le estaba prestando la suficiente atención porque su cabeza estaba en si, sí, o no.

— Tengo de chocochip, con esa es suficiente.

Jisung mordía su labio con desesperación, no sabía si hacerlo o quedarse ahí estancado en el piso muriendo de la verguenza al sólo imaginarse haciéndolo que tenía en mente. Y no es que fuera algo malo, tal vez solo era Jisung dándole vueltas y más vueltas a lo que pasaba por su cabeza, pero de todos modos quería hacerlo; o sea sí, pero no.

— ¿Vas o no vas? Me estás hartando, mi vida, y créeme que eso es decir mucho porque eres la persona a la que mas quiero, pero desde hace días haces que me estrese. — Jisung comenzó a pucherear con tristeza, regresando a su asiento mientras dejaba la rosita en su escritorio.

— Es que, chicos, jamás he hecho algo como esto, y tampoco quiero que sea feo, quiero que él sepa que es especial y me gusta mucho.... — Jugó con los anillos en sus dedos, no quería verlo, porque
Hyunjin y Jeongin de seguro lo estaba mirando con caras de que tenían ganas de tirarse pedo.

— Es broma, ¿No? — Jisung se encogió en su asiento mientras negaba con vergüenza. — ¡Le gustas desde hace años!

— Dos

— ¡¿Y qué?!

— ¡¿Cómo qué 'y qué', Chicos?! — Uso el mismo tono de voz mientras arrugaba su nariz con molestia. — ¡Él es maravilloso y-! — Se cortó, bajando de nuevo la cabeza porque el solo hecho de hablar de Minho de esa forma le daba pena. El hecho de sentir algo luego de todo lo que había pasado es raro. — Y yo quiero ser suficiente para él. Lo soy para mí, ¿Pero lo seré para él?

— Eso no tendría por qué importarte. — Jeongin avanzó hasta él dejando un pequeño roce de sus dedos en el cabello del menor. — Eres más que suficiente, Hyun. Deberías de saberlo.

— Y lo sé, créeme que lo sé. Pero tengo miedo, un poco, porque él es maravilloso que me da un no sé qué por arruinarlo de nuevo.

— No vas arruinarlo, tú no podrías hacerlo. — Jisung se encogió aún más en su lugar. Escuchó la risa de Hyunjin y el como corría lejos, dejándolos solos sin siquiera decir algo. Y él quiso golpearlo.
— ¿Por qué piensas en eso? Soy una persona más aquí, un chico que está enamorado de ti. — Minho se sentó frente Jisung, mirando como este fingía no escuchar, seguido de estarse escondiendo entre su suéter, sin logar el cometido que quería. — Lo único especial en mí es estar enamorado de ti.

— ¡No, Minho! — Gritó con enojo, tomando los hombros del mayor con desesperación. — Tú eres maravilloso, muy lindo y dulce. Me gusta que te preocupes por mí, que aunque no entiendas algo trates de buscar un resultado para poder ayudarme. Me gusta cuando juegas con mis amigos y te ves feliz. Me gusta cuando haces empanadas y te manchas de harina sólo para hacerme reír. Me gusta cuando dibujas y lo haces de esa forma tan desinteresada pero te sigue quedando hermoso.

» Me gustas mucho, y hay tanto, a la vez tan poco del por qué, pero en ningún momento llegué a creer que podrías volver agustarme, y no porque no fueras lo que quería, si no porque no creí que mis ojos se volverían a posarían en ti... y darte otra oportunidad. — Acercó la cabeza de
Minho a la suya, rozando ambas narices sin querer mientras miraba los ojitos del mayor. — Y debió de ser así desde un inicio, porque me gusta que seas tú quien me ponga tan inestable, Minho.

Minho le sonrió, cerrando sus ojos para tallar su nariz con la del contrario. — ¿Por qué dices todo esto? — Porque quiero ser tu novio, quiero hacerte feliz tal y como tú me haces a mí.

Se escuchó la risa de Jisung, subiendo aun más su nariz sin dejar de acariciarla con la otra.

— Me gustas, Jisung, es obvio que te diré que sí, porque yo también me veo contigo, me siento feliz cuando estoy contigo.

Jisung sonrió, alejándose un poco, no por mucho, porque rápido regresó, pero esta vez con la pequeña flor, la cual acomodó detrás de la oreja de Minho, para poco después acercarse a dejar un pequeño besito en sus labios, uno tímido, uno que le hizo sonreír y esconder su cara en sus manos, aún cuando la risa del pelinegro atravesaba la pequeña barrera que los dividía.

— Te ves tan lindo.

— ¡No digas eso!

— Te amo.

Y Jisung chilló, porque seguía sin poder hacerse la idea de que Minho lo hiciera. Porque se sentía tan bien, le hacía sentir diferente.

Y eso estaba bien.

***

¡Gracias por leer!

Te amo, gracias por estar aquí <3

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro