« — Quieres ir por tu helado favorito?

— Me pondré más gordo y menos bonito.

« — Me dejas darte un abrazo?

— No, porque llorare si me abrazas más de lo necesario. «

« — ¿Por qué siento que te alejas?

— Tengo miedo de que tú también quieras hacerme daño. «

***

Ambos habían logrado tener a Jisung a su lado, el menor parecía querer alejarse a la primera oportunidad, pero sabían que lo que menos necesitaba era estar lejos.

Habían momentos en los que le daban su espacio, porque era lo que necesitaba, pero habían otros donde Jisung pedía un abrazo por más miedo que tuviera.

Y allí es donde ellos lo abrazaban y le decían lo importante que era en su vida.

Por eso Jeongin lo mantenía abrazado de la cintura en el patio de la escuela, los ojitos de Jisung se cerraban con cansancio por falta de sueño, y todo lo que Jeongin pedía es que durmiera aunque fuera unos diez minutos.

Hyunjin también estaba preocupado, le hacía caras locas solo para llamar su atención y sacar una sonrisa de sus labios. Pero todo termina siendo en vano porque Jisung cubría su cara para no verlo.

— Ha pasado una semana y lo extraño mucho. — Se escuchaba apagado, dolido. Y eso solo causaba tristeza en Hyunjin.

— ¿Entonces porque aceptaste terminar? — Jeongin jugó con sus cabellos, se removió en su lugar buscando una mejor posición. No estaba cómodo y su trasero dolía, pero lo soportaba por el, por Jisung. — Se que estabas enojado y decepcionado, pero ya ha pasado algo de tiempo y te ves como si quisieras gritarle en la cara que olvide todo y regresen.

Jisung guardó silencio mientras buscaba el calor de Jeongin.

En parte si era lo que deseaba, por qué lo veía ahí caminado y todo lo que quería era correr a su brazos y besarlo. Pero el lado menos romántico le decía que no, que el valía lo suficiente y no debía soportar eso.

Lo cual terminaba ganando.

— Jisung no merece a Minho. — Hyunjin estaba ahí de nuevo, pidiendo que esto no sucediera. Pues era el que más comprendía a Jisung y luego de ver como fue lastimado por Minho, lo que menos deseaba es que estos dos estuvieran de regreso. — Le puede seguir gustando y se puede sentir igual de enamorado, pero eso no quiere decir que ambos tengan que estar juntos.

— Ya lo se, pero no quiero verlo así.

— Yo tampoco, pero esa no es la solución.

— Sé que no, pero sigue siendo decisión de a Jisung si quiere volver con Minho o no. — Jisung cubrió sus ojos del sol con su mano, no quería prestarle atención a lo que ambos decían, porque no sabía exactamente qué hacer. Aunque era inevitable irse, porque quiera estar ahí con ellos.
— Entonces tu y yo lo único que deberíamos hacer es quedarnos callados y aceptarlo.

— Pero no se que quiero... — Mordió su labio con inquietud mirando por un hueco el rostro de sus amigos. — Me gusta mucho, le quiero, pero le da miedo que solo sea un juego. También me siento usado porque el parece no importarle lo qué pasó con nosotros y- y por otro lado, quiero olvidar lo qué pasó y no tener miedo e inseguridades.

Hyunjin observó a Jeongin, ambos se acercaron hasta estar puestos de rodillas frente a Jisung, besaron su frente y le acariciaron el rostro. El menor lloraba en silencio pero también aprecia estar riendo por cada beso.

— Tu eres bonito, ¿Si? Eres dulce y encantas a cada persona que te conoce. — Jisung negó en medio de una sonrisa con ojos llorosos, Hyunjin volvió a besar su frente sintiendo a lo que Jeongin decía.

— Lo eres, eres tan encantador. Por eso mismo no mereces a ese chico, ¿Quien podía jugar con algo tan delicado? ¡El sabía bien que te estaba haciendo daño! — Jeongin lo golpeó cuando Hyunjin subió la voz. Pidió disculpas a Jisung que rio cuando vio como Jeongin lo golpeaba. Eso hizo reír a Hyunjin y Jeongin, porque la sonrisa de Jisung estaba volviendo a aparecer, y a ellos les encantaba ver a su amigo feliz. — No pienso comprender el porque hizo aquello, porque más coraje me da, pero respetaré lo que desees hacer.

Jisung abrazo a los chicos, por un momento de sintió en paz, feliz por tener a Hyunjin y Jeongin de su lado.

No quería pensar en lo otro, al menos no por un tiempo.

Porque sentía que lo estaba asfixiado poco a poco.