— ¿En serio crees que con esa cartita de estúpido vas a hacer que te perdone?

— No.

— ¿Entonces por qué mierda no estas haciendo algo?

— Porque quiero darle su espacio

— ¿Y después de eso?

Pausó, pues no quería decirlo, pero no quería que su relación fuera cayendo poco a poco hasta que ambos se convirtieran en dos tóxicos. — Le daré más tiempo, incluso puede que terminemos.

— ¿Y lo vas a dejar ir?

— Mamá, no se trata de que si lo quiero dejar ir o no... es que tú no lo viste, las lagrimas caían de sus mejillas con enojo, se sentía usado y yo me sentía peor por lo que había hecho.

— No lo veo tan grave.

— ¡Jugué con lo mismo que le hizo mucho daño! — Golpeó la almohada sobre su estómago con enojo, porque no sentía que su madre lo estuviera entendiendo, ella más bien esperaba que fuera detrás de Jisung y le pidiera con besos que lo perdonara. Y no, el no lo veía así de fácil porque conocía a su bebe, ese chico no lo iba a dejar entrar de nuevo a su corazón así de fácil.

— Te conté de las veces que lloraba y me decía que no se sentía suficiente para mi, que tenía miedo que fuera a dejarlo por otro, que no quería estar conmigo porque tenía miedo a que su inseguridad fuera acabar con todo. Por eso mismo el intento cambiar, estar mejor para el y lo que quería... y yo me pase por el culo todo ese año entero en el que trabajo consigo mismo para que en dos días se volviera el mismo chico que desconfiaba de si mismo.

— Bueno, eres una mierda.

— ¡Vaya, dato! — Empujó a almohada contra su rostro con enojo e ignoró la presencia de la mujer.

La señora Lee cortó la distancia de la puerta a la cama, y se sentó en el hueco libre.

— Pero será peor si al menos no te disculpas.

— No creo que el quiera mi perdón.

— No lo sabrás si no te acercas y le dices.

La retiro y le miró con enojo. — ¿En serio crees en esa telenovela donde el tipo le hace daño a su novio y terminan volviendo una y otra vez creando un ciclo tóxico y asqueroso?

—...si.

— Estas mal, mujer. — Volvió a la misma posición, esperando que así se fuera, porque comenzaba a sentirse asfixiado y no era exactamente por la almohada.

— ¿Que puedo decir? Me gusta lo tóxico.

— Si, y por eso mismo papá te dejo.

— ¡No deberías hablarle así a tu madre!

— ¡Y tu tampoco deberías darle consejos tontos a tu hijo! No es así, no me gusta eso. Y me siento mal por haberle dañado, ¡Y yo sabía que esto iba a terminar pasando y aun así lo terminé haciendo!

— Hay cosas que están destinadas a pasar.

— Entonces ojalá Jisung encuentre a alguien mejor.

— Minho, yo no críe a un cobarde.

— Pero papá si crío a un hijo que se hace cargo de lo que hace. Por eso, no voy a pedirle regresar. Si, le pediré perdón y le dire que lo amo, pero que no me siento capaz de estar a su lado cuando jugué con lo más feo de su pasado. — Tiro la almohada a un lado. Se puso de pie y fue en busca de sus tennis. — El necesita sanar y yo tengo muchas cosas en que pensar. Y, — La miró, viendo esa mueca de desaprobación mientras en sus ojos veía ese brillo de orgullo que le hizo sonreír. — te juro que me está llevando la mierda en este momento, pero no pienso luchar por su amor hasta que no sea el momento. Quiero que se sienta igual que antes de todo esto, y es ahí, cuando volveré y le pediré que seamos un nosotros nuevamente.

Besó la frente de su madre, y salió apurado de su casa hacia la del menor. Le dolía lo que iba a hacer, pero no pensaba seguir con todo que no estaba bien.

***

Perdón por haberme tardado en publicar el capituló.

Gracias por leer <3