» ¿Podrías venir? Estoy en el parque del centro, aquel donde nos dimos nuestro primer beso... te recuerdo perfectamente ahí sentadito, sonriendo en mi dirección esperando por mi... yo- necesitó hablar contigo, aclarar lo que ha sucedido... ven, ¿si? Te amo mucho «

***

Y ahí venía el menor, su cabeza era cubierta por un gorro de lana por la mañana que estaba siendo fresca, más ese abrigo de la misma tela que lo hacía verse chiquito.

Quería decirle tantas cosas, besarlo y volver a tenerlo en sus brazos. Pero Jisung era demasiado duro cuando se molestaba, sumado a eso, que creía que lo estaba dañando.

— Te ves muy lindo. — Comentó sin poder evitarlo. Jisung le sonrió y agachó su cabeza a sus manos.

— ¿Qué es lo que quieres decirme? — Fue directo, sentándose a su lado sin volver a verlo porque sentía que no era lo correcto.

Minho frunció los labios y asintió. — Me da vergüenza decir esto, más porque después de un rato caí en cuenta de lo que estaba haciendo, aun cuando yo mejor que nadie sabe lo mal que la pasaré hace años.

— No le des tantas vueltas y dime, por favor. — Minho negó, porque quería darle las vueltas que fueran suficientes para que Jisung al menos no lo dejara tan rápido.

Suspiró y respiró su vista al frente, no se sentía bien al estar viendo, menos con lo apenado que estaba por todo. — Meses atrás creí que podría buscar alguna manera para verte celoso, no entendía el porqué no eras de esa forma. Tal vez, yo solo estaba acostumbrado a esas actitudes tontas de mis anteriores parejas. Y tu... tu siempre fuiste diferente en todo.

— ¿Sabes porque nunca he sentido la puta necesidad de celarte? — Su voz fue dura, y su rostro se veía serio porque no le encontraba cordura a todo eso. — Porque yo no tengo motivos para hacerlo. Confío en ti y confiaba en mi. ¿Porque iba a pensar que no era suficiente cuando me decías día a día lo lindo que era estar juntos? ¡Es que tú pensaste en ti y romantizaste esto!

— ¡¿Es que no ves que me arrepiento?!

— ¡¿Y a mi de que me sirve?! ¡Quieres que piense en ti cuando tú no lo hiciste conmigo! Y, y — Sus labios temblaron, recordando aquellos meses en donde solía vivir con miedo, porque no estaba confiando como hace unos días solía hacerlo. — me siento estúpido. Porque te conté todas esas veces donde lo veía besar a otros... te conté todo lo que le hizo daño y aun así decidí que quería algo mejor para mi.

No quiso decir el por qué, pero sintió justamente ese malestar en su pecho que le hizo sentir mal. — Te juro que soy lo mejor para ti.

Jisung negó. — Una vez tú le dijiste 'no soy aquello que mereces, pero si lo que necesitas' ... ¿Yo necesitaba que prefieras pegarte a Félix para hacerle sentir mal?

— No.

— ¡Sé que no querías eso! ¡Pero deja de pensar en lo que quería un momento! ¿Qué no estás viendo que tus decisiones nos dañan a ambos? — Escondió sus manos en el suéter, llevando las mismas a sus mejillas para limpiar las lágrimas que salían. — Y yo se, Minho, que soy un tonto que arma drama por cualquier cosa.

— No es así...

— Y se bien que puedo ser irritante por momentos porque siempre quiero darte mismos. También Félix es tu mejor amigo y que no podrás verlo de otra forma porque no te gusta... pero con todo y eso, me hiciste sentir un tonto reemplazable.

— No, no...

— Yo no necesito esperar y ver hasta donde quieres llegar, ¡He esperado lo suficiente como para hacerlo nuevamente! Y, Minho, no quiero que le guste un chico que un día le va a hablar bonito y al otro va actuar como un tonto mientras busca donde esconderse. Yo no soy Felix, no pienso estar estar esperando por ti solo porque quisiste jugar.

Se levantó de la banca, aquella misma que no había podido ver, porque con el solo sentir ya había sido suficiente para querer besarlo y decirle que todo estaba bien, que no importaba nada más que ellos.

Pero no, porque Minho no pensó en cómo se iba a sentir, porque prefiero seguir con esa idea tonta aun cuando conocía los miedos de su novio.

— Te amo... — Él no parecía estar pensando claro, y en medio de su desesperación de no dejarlo ir, tomó su mano pidiendo a susurros que se quedará. — Sé que hice mal pero, ¿Podrías... entenderme?

— Podría hacerlo, Minho, — Alejó su mano que estaba un poco mojada con el llanto, y sin mirarlo, avanzó un poco de regreso. — ¿Pero tú podrías entender como yo me siento?

Y con eso, se fue a paso rápido porque no quería seguir allí escuchando los sollozos ahogados de Minho.

***

Pequeña aclaración; Minho estaba tan acostumbrando a que sus otras parejas le pusieran límites y lo celaran, que el hecho de que Jisung lo tratará diferente lo hizo no pensar con claridad en lo que estaba pasando.

No quiero justificar a Minho, pero quería dejar en claro esa pequeña parte.

Gracias por leer Bye <3