Drew se encontraba con las manos protegiendo su rostro, se fue acercando peligrosamente hacia mi y me lanzo un golpe el cual pude agarrar; en su rostro se pudo ver que estaba sorprendido, su puño seguía en mi mano así que aproveche para darle un golpe en su rostro desprotegido. Eso hizo que él retroceda, me sacudí la mano con la que le di el golpe y volví a la posición de defensa.

     Él vino corriendo hacia mi y me agarró el abdomen, comenzó a golpearme. Yo no me iba a dejar así que reaccioné y lo golpee con mi rodilla en su cara, ya le había hecho sangrar, no me detuve ahí, me acerque más a él, le agarre de los hombros, puse mi pie detrás de él haciéndolo tropezar para que cayera. No lo iba a dejar inconciente, lo único que hice fue darle un buen golpe en el pecho, eso hizo que él de vueltas de dolor y dándome a mi puntos por ganar.

     Escuché los aplausos de Eric junto con su voz diciendo: Bien hecho Iniciada —yo solo lo mire y también a Cuatro, asentí, y bajé de la arena.

     Eric se me acercó— Si sigue así probablemente llegues a ser líder cuando termines tu Iniciación —dijo y me guiño un ojo para luego irse dejándonos con Cuatro para que se ponga a supervisar las demás peleas que faltan.

     No podía evitar mirarlo, había algo que me atraía de él. Y hubo veces en las que encontré a Cuatro mirándome, eso hizo que algo dentro de mi se revuelva.

     De pronto siento la presencia de Eric, creí que había salido de aquí.

     Unos chicos pelean, al terminar la pelea Cuatro ayuda a uno de ellos a levantarse y salen juntos del lugar dejándonos solos con Eric.
   
     Era el turno de Christina contra Molly. Christina es alta pero no tanto como Molly, se podría decir que es más estrecha que ella, por lo que las ventajas de las llevaría Molly.

     Una y otra vez Molly golpeaba a Christina, ya le había hecho sangrar, y parecía que lloraba. Arrastrándose lejos de Molly dijo—: ¡Alto! —pone una mano en el aire— Alto...ya —tose— ya terminé.

     Molly sonríe, ella ganó. Eric se acerca hacia el centro de la arena parando por encima de Christina, con los brazos cruzados y dice:—Lo siento ¿Que dijiste? ¿Ya has terminado?

     Christina se para en sus rodillas con dificultad, y asiente en respuesta.

     —Levantate —dice él. Pero no en manera de grito, lo dijo de la manera más calmada posible. Tira de ella del brazo ayudándola a levantarse. Comienza a caminar hacia la salida del lugar.

     —Siganme —nos dice a los demás.

     Estamos cerca del río, puedo escuchar como chocan con la roca. Estamos en el abismo.

     Eric empuja a Christina contra la barandilla.

     —Súbete en ella —le dice.

     —¿Que? —dice Christina suplicante para que el ceda. Conozco a Eric, no dará vuelta atrás.

     —Súbete a la barandilla —repite Eric pronunciando lentamente las palabras—. Si puedes colgar sobre el abismo por cinco minutos, olvidaré tu cobardía. Si no puedes no permitiré que sigas con la Iniciación.

     La barandilla esta hecho de metal, es fría y resbaladiza. Dudo que Christina lo logré, cinco minutos es mucho tiempo teniendo en cuenta que hace poco le dieron una paliza tremenda, lo que la vuelve débil.

     —Esta bien —responde Christina con la voz temblorosa. Se dirige hacia la barandilla, antes de limpia las manos en los pantalones. Se agarra fuerte de la barandilla y uno por uno va sacando sus dos pies hasta que queda colgando.

     Pongo el tiempo en mi reloj. Veremos si ella logra hacerlo.

     Durante el primer minuto y medio ella va bien. Pero entonces una oleada del río golpea la pared salpicando su espalda. Ella choca su cabeza con la barandilla, grita. Sus manos resbalan quedándose sosteniendo solo con sus dedos. Trata de conseguir un mejor agarre pero sus manos ya se encuentran mojadas.

     Christina deja escapar un sollozo más fuerte que el río. Esta llorando. Eso no la ayuda en nada.

     Otra oleada más fuerte golpea contra la pared, salpicando su espalda aún más que la anterior. Sus manos vuelven a deslizarse pero esta vez una de ellas cae, ahora su agarre es de solo cuatro dedos.

     De pronto Al la apoya —Vamos Christina tú puedes —lo dice fuerte, aplaude— tú puedes agárrala de nuevo. Vamos, puedes hacerlo. Agárrala.

     Volteó hacia él, después vuelvo mi mirada hacia Christina. Yo pienso que esas palabras aunque donde aliento, la distraen. Ella necesita consentrarse para conseguir un mejor agarre.

     Christina balancea su brazo buscando a tientas agarrar el borde de la barandilla. Al aplaude y grita. Es el único que la anima. Pero como dije para mi eso es para dejarla desconcentrada.

     Veo mi reloj, pasaron cuatro minutos. Ella puede lograrlo. Un minuto más, solo uno más.

     De pronto escucho a Tris—: Solo queda un minuto más, tú puedes.

     Entonces la otra mano de Christina encuentra la barandilla, lo va a lograr estoy segura.

     —Vamos, Christina —dicen Al, Tris y Will.

     Ya falta poco.

     Otra ola salpica contra su espalda, ella grita. Se agarra de los barrotes. Ahora solo se le pueden ver los dedos, un poco más.

     El reloj indica que ya pasaron los cinco minutos.

     —Tiempo —dice Nathan.

     Eric se dispone a revisar su propio reloj, tomándose su tiempo.

     —Ya pasó el tiempo indicado, no hace falta que revises tu reloj —digo, pero inmediatamente me arrepiento. No estamos solos, no puedo hablarle así.

     —Bien —dice él.

     Entonces Tris y Will se lanzan para ayudarla a subir. Pero Eric no los deja.

     —Ella debe hacerlo por su propia cuenta—Tris y Will se quedan paralizados.

     Entonces Al reacciona, pasa por delante de los dos —No, no lo hará —gruñe— ella hizo lo que le dijiste. No es una cobarde. Hizo lo que le dijiste.

     Al es demasiado alto y la alcanza con facilidad, le agarra la muñeca y tira de ella logrando subirla, con un poco de ayuda de Tris.

      Cuando logran subirla ella se tira al suelo. Aún tenía su rostro manchado con sangre, tenía la espalda mojada y todo su cuerpo tembloroso.

     Llegué al dormitorio, no había nadie, así que decidí darme una ducha.

     Cuando salí los demás ya habían llegado.

     —Ey tu, Iniciada —me señala el moreno de la anterior vez. —¿Es cierto?

     Yo solo lo mire confundida, no entendía de lo que hablaba.

     —Hablamos de la chica que se colgó por encima del Abismo —dice la chica de su lado, tenía el pelo rapado por un lado y era corto.

     —Ah hablan de ella, bueno. Si, si se colgó por encima del Abismo —le respondo.

     —¿Y esta viva? ¿Lo logró? —pregunto la otra chica de a lado.

     —Si lo logró, con dificultades, pero lo hizo —respondo a sus preguntas. Volví a mi cama y me senté encima.

     —¿Por cuanto tiempo estuvo colgada? —dijo el moreno.

     —Saben algo son muy molestos, vayan a preguntárselo a Christina, y déjenme en paz —conteste mientras me tumbe en mi cama y me puse una gorra encima de mis ojos para ya no verlos y dormir.

    —Si quisiéramos ir a hablar con ella, lo hubiéramos hecho desde el inicio ¿No crees? —hablo una voz femenina, estoy segura que se trataba de la de pelo corto.

     —Bien, se colgó por 5 minutos. Ahora les pediría que me dejen en paz —digo y los escucho alejarse.

     Quise dormir pero no pude porque volví a escuchar voces cerca mío.

     —Parece que está dormida —dijo una voz masculina, no era el moreno era otro.

     —¿Pertenecía a Erudición? —esta vez habló una voz femenina.

     —Si —hablo el moreno— pero parece que no se lleva bien con sus antiguos compañeros de facción.

     —¿Hablas del rubio, y los otros dos castaños? —pregunta la chica de pelo corto.

     —Exacto, ella me dijo que no los conocía, que no tenía nada que ver con ellos —dijo él—. Ahora que lo pienso, nunca la he visto con alguien más que no sea ese Cordial. Parece que es su amigo.

     Eso me sorprendió, tenía razón. Yo siempre iba donde Nathan. Pero no me puse a pensar si es mi amigo o si al menos él me considera su amiga.

     El no me pidió que fuera su amiga, y yo tampoco. No sé si es un conocido o un amigo, porque hace tiempo que no tengo amigos. Desde que Eric se fue no volví a socializar. Así que no recuerdo cómo son o deberían ser los amigos.

     —Como sea...—hablo la chica de pelo corto alejándose— no me importa su vida, ni quienes sean sus amigos.

     —Yo iba a proponer que la hiciéramos parte de nuestro grupo —hablo el moreno. Comencé a poner atención.

     —¡¿Que?! No la conoces, no podemos confiar en ella, además no me cae del todo bien —dijo la chica del pelo corto.

     —Yo creo que sería buena idea, así no sería la única que tenga que soportar las estupideces de Lynn —dio una pequeña risa.

     Así que la de pelo corto se llama Lynn.

     —Hablaras de tus estupideces, porque soy yo la que sufre, Marlene —la de pelo largo era Marlene.

     —Ya chicas, calma —hablo el moreno con un poco de risa—. De todas formas estaremos un buen tiempo con ella, y si logra pasar la Iniciación no podremos evitar vernos la cara, así que sería bueno tenerla en nuestro grupo.

     —Bueno haz lo que quieras, pero cuando te golpee por la espalda no dirás qué no te lo advertí—dijo Lynn—. Hasta mañana.

     —Dejala, está loca —dijo Marlene alejándose.

     —¡Calla Marlene! —hablo Lynn.

     —Okey —hablo entre risas la chica—Buenas noches.

     —Hasta mañana chicas —habla el moreno. Hasta ahora no se su nombre.

     En ese momento se apagaron las luces, y al fin pude dormir.

     A la mañana siguiente me levanté y corrí a la cafetería, porque me había despertado tarde.

     Por suerte llegue a tiempo. Lo primero que vi fue el tablero, me puse a buscar mi nombre pero en el intento encontré una pelea interesante.

      Tris iba a pelear contra Peter, no sé si lo lograría pero lo más probable es que no. Peter es más grande que ella. Y vi sus entrenamientos no estaban a la misma altura.

     Luego encontré mi nombre, hoy me tocaba pelear contra Molly. No va a ser fácil, pero con la lucha que dio ayer Christina pude localizar fácilmente los lugares donde los golpes la afectaban.

     Caminé y vi pelear a Edward con uno de los chicos de ayer. Tal vez ayer haya ganado pero hoy no. Edward es más alto, en cambio el chico es más pequeño y flacucho.

     Más allá vi a Tris, Al y Christina hablar entretenida mente así que decidí acercarme.

      Estaban hablando de cómo podría pelear contra Peter.

     —Hola chicos —los saludé. Vi a Christina tenía el rostro lleno de manchas moradas por los golpes.

     —Hola —dijeron los tres a la vez.

     —¿De qué hablan? —me puse curiosa.

     —De como Tris se puede salvar de la pelea contra Peter —me respondió Christina.

     —Yo puse la idea de que resista unos golpes y luego finja caer desmayada —dijo Al.

     —No es una mala idea —digo y Tris voltea la mirada. Parecía enojada —Oh vamos Tris, no te enojes ellos son veraces no te van a mentir —pase mi brazo por sus hombros.

     >> Hasta vos sabés que no tienes posibilidades contra Peter. Solo no quieren que salgas lastimada, por eso esas opciones —digo, ella levanta mi brazo de sus hombros, la hice enojar más—. Pero es tu decisión si tomarlas en cuenta o dejarlas —me alejé de ellos, creo que logré que se enoje así ella podrá desahogarse golpeando a Peter y tendría buen rendimiento.

     Veo el final de la pelea con Edward. La próxima pelea era de Tris y Peter.

     —¿Estás bien allí, Estirada? —dice Peter—. Parece que vas a llorar. Podría ir fácil sobre ti si lloras.

     Peter se pone en posición de defensa.

     —Vamos, Estirada —dice él—. Solo una pequeña lágrima. Tal vez unos ruegos.

     Tris le lanza una patada al costado de Peter, pero el logra agarrar su pierna y le hace desequilibrar. Haciéndola caer.

     —Deja de jugar con ella —dice Eric bruscamente—. No tengo todo el día.

     Entonces Peter la golpea. Le lanza un golpe, haciendo que Tris se balancee.

     Ella se aleja de él, pero Peter logra alcanzar la y le da una patada en el estómago. Ella cae.

     Peter la agarra del cabello con una mano y golpea su nariz con la otra. Ella lo empuja, pero él la vuelve a golpear pero esta vez en las costillas.

     Me doy la vuelta, no quiero ver eso. Voy a un saco de boxeo y comienzo a practicar mis golpes.

     Ya era mi turno de pelear contra Molly. Subí a la arena y me puse en posición para poder defenderme.  Ella es más alta que yo por centímetros, y es más ancha.

     Ambas estamos girando entre nosotras, y veo la señal. Entonces me acerco. La golpeó en su barriga pero creo que no le afectó mucho, su grasa era como un escudo.

     Me aleje rápido antes de que me dé un golpe. Acerté, ella como no me alcanzó un lado de su cara estaba desprotegida así que la golpee lo más fuerte que pude. Ella al recibir el golpe giro su cabeza, le agarre el brazo y comencé a golpear muchas veces sus costillas.

     Ella se soltó de mi agarre y me hizo caer, sus manos estaban en mis hombros. Antes de que me aplaste le di un golpe con mi rodilla en su estómago. Eso le hizo ponerse a un lado, me levanté rápido y aproveché para darle una patada mientras ella estaba en el suelo. No pare la seguía pateando hasta que Cuatro dijo que me detuviera.

     Lo mire, y luego a los demás todos veían a Molly. Ella estaba en el suelo escupiendo sangre. Bajé de la arena y salí de ahí. Escuchaba mi nombre pero no hice caso solo me fui.

     Llegué a la habitación y me senté en mi cama. No pude controlarme, eso no me pasa hace tiempo. Me pongo a pensar, no recordaba lo que hice con Molly, solo recuerdo que estábamos en posición de defensa, lo demás se me olvidó mientras venía.

     Escuché a alguien entrar, volteé y era.....

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Hola, tarde mucho en actualizar pero las tareas que me dejan en la escuela no me da el suficiente tiempo para seguir con mis historias.

Por el momento estoy en las últimas semanas de el primer trimestre, una vez acabe yo creo que podré actualizar más seguido, esperen porfavor. Y voten en la historia, comenten.

Si quieren que haya algún suceso en la historia pueden o bien mandarme mensaje o comentarlo.

Gracias por su apoyo. Cuídense y disfruten.