De amigos, de esperanza, de todos despojados

Una vez solo, la mente de Rory examinó sus opciones. Aparentemente no había sido afectado por el efecto que la sangre de Ethan había tenido en los otros vampiros; parecía que dependía de él evitar que agotaran a su amigo.

Rory razonó que les tomaría un poco de tiempo averiguar de quién era la sangre y luego llegar a la casa de Ethan, por lo que tuvo un poco de tiempo para trabajar. Primero, tenía que advertir a Ethan, y luego podrían trabajar para resolver el problema.

Rory sacó su teléfono del bolsillo y fue a encenderlo. Nada. Desesperado, lo intentó una y otra vez, antes de finalmente recibir las palabras: "Batería baja".

Gimiendo para sí mismo, se dio cuenta de que había olvidado por completo cargarlo. Trató de recordar cuándo se había quedado sin carga. Debe haber sido hace más de dos semanas... Se sintió bastante culpable por el efecto de su olvido. Echó un vistazo a la habitación, esperando encontrar en vano algún lugar para cargarla. Fue inútil. No solo no tenía conexión, sino que el edificio del Consejo ni siquiera tenía enchufes. Por lo que Rory sabía, ni siquiera estaba conectado al suministro de electricidad.

Entonces, el contacto estaba fuera. Podría, por supuesto, ir directamente allí y advertirles, pero para cuando lo hiciera, los vampiros probablemente ya los habrían rodeado. Probablemente incluso su visita a la casa de Ethan los alertaría sobre la identidad del dueño de la sangre.

Estaba por su cuenta.

¿Qué harían los demás? Rory reflexionó sobre esa pregunta. La respuesta inmediata de Benny sería mágica, la de Sarah sería atacar. Ninguna de esas eran opciones realmente viables para Rory. La solución de Ethan sería investigar un poco sobre el problema.

Rory frunció el ceño y miró alrededor de la cámara. Debe haber alguna pista sobre lo que los había afectado tan fuertemente. Sus ojos se iluminaron en el libro abierto del que Anastasia había estado leyendo. Quizás eso podría explicar el ritual, y cómo podría ser detenido.

Caminando hacia él, gimió internamente al ver el garabato pequeño y apretado. ― No podría haber sido impreso, supongo... ― murmuró para sí mismo mientras miraba la letra de cangrejo. Por lo poco que había visto, parecía estar en la mano de Anastasia. ¿Ella escribió los antiguos rituales de vampiros? Qué edad tenía ella, reflexionó Rory.

Frunció el ceño al leer las diversas partes relevantes: ― ... el ritual del pleno verano envía al vampiro a su estado natural mientras su concentración permanece... el proceso puede ser destruido por una fuerte distracción... los vampiros en este estado tendrán mayores habilidades... sentido del olfato alterado... la sed de sangre aumenta... posibilidad de fijación si se expone una fuente de sangre...

Rory se detuvo en la última línea. Eso fue lo que sucedió, entonces. En el estado extremo en el que se encontraban más cerca de su naturaleza vampírica, la presencia de la sangre de Ethan, dispersa cuando Rory estornudó - que, a su vez, lo había sacado del rito-, se había metido en el subconsciente de su vampiro. Rory siguió leyendo. ¿Había alguna forma de eliminar el impulso sin satisfacerlo?

― ... La reversión solo es posible si la fuente se drena ... ― No era conveniente para Ethan. ―... la fuente se destruye ...― Posiblemente aún peor para Ethan ― ... o si el maestro de la orden termina el ritual.

Rory gimió. Lograr que Anastasia hiciera algo que no quería hacer era casi imposible, incluso cuando no estaba ansiando sangre. Pero, por difícil que pareciera, esa era la única opción que no significaba la muerte de Ethan. Tenía que intentarlo.

Echando un vistazo a su reloj, Rory supuso que los vampiros debieron haber deducido que ya era Ethan. Probablemente Erica los llevaría a su casa. Rory hizo una mueca. No tuvo mucho tiempo. Al salir del edificio, voló más rápido de lo que había hecho antes a través de la ciudad a la casa de Ethan.

En el camino, notó que parecía estar volando hacia una nube baja, aunque no estaba volando más alto de lo habitual. Se estaba volviendo más difícil ver a dónde iba, y estaba teniendo dificultades para orientarse, pero debía estar cerca de allí ...

Iᴄᴇ Cᴏᴏʟ Wʜɪᴛᴇᴄʜᴀᴘᴇʟ

¡Crack!

Ante el sonido en la ventana, Ethan y Benny levantaron la vista de su juego en una reacción instintiva.

― ¿Qué fue eso? ― preguntó Ethan, levantándose y dirigiéndose a la ventana. Había una gran marca circular en la ventana como si algo se hubiera estrellado contra ella a gran velocidad, aunque ya se estaba desvaneciendo.

― Probablemente solo un pájaro, o algo así. ― dijo Benny, mirando por encima del hombro de Ethan hacia la ventana. Fue a sentarse frente a la pantalla.

― Sí... Puede que tengas razón, eso espero. ― murmuró Ethan, tratando de mirar por la ventana. Sin embargo, estaba muy nublado, y apenas podía ver un pie en la noche, y ciertamente no podía ver el suelo. Si se trataba de un pájaro que acababa de estrellarse contra la ventana, entonces esto podría no haber sido algo malo.

― Ven aquí, Ethan. ― engatusó Benny desde el ordenador. ― Estamos tan cerca de terminar el juego. Olvídalo, fue una paloma estúpida. Lo único que podría ser, aparte de un ave, es un vampiro, y todos están en una reunión, ¿recuerdas?

Tranquilizado por eso, Ethan se unió a su amigo en el suelo. ― Supongo que sí... Ahora, ¿dónde estábamos?

― Estábamos a punto de entrar al templo de Ud-Shamragoth...

Iᴄᴇ Cᴏᴏʟ Wʜɪᴛᴇᴄʜᴀᴘᴇʟ

Rory se sentó atontado. La casa de Ethan era realmente dura... Se frotó la cabeza con tristeza y se puso de pie. Había aterrizado en un macizo de flores. Lo miró con culpabilidad. Estaba bastante aplastado ahora. Hizo un intento a medias para suavizar el daño, pero lo reconoció como una causa perdida. Se disculparía mañana, después... después...

Una nueva resolución se apoderó de Rory. Después de haber salvado a Ethan, por supuesto.

Volvió a mirar a la casa, considerando brevemente si debía llamar a la puerta y pedirles ayuda a Benny y Sarah. Eso podría no ser una mala idea. Después de todo, solo Ethan estaba en peligro por los vampiros enloquecidos. Sin embargo, fue su culpa... Tal vez debería intentar solucionar el problema por su cuenta. De esa manera, su error no se vería tan mal.

Rory frunció el ceño para sí mismo. Tal vez si él hiciera esto, y se enfrentara a todo el Consejo sin ayuda, entonces no pensarían que era tan inútil, confiable  distracción solo para ser capturado o noqueado por lo que sea que pelearan esa semana. Se había vuelto vergonzosamente regular recientemente, pensó, un poco avergonzado. Entonces tal vez podría salvar el día por su cuenta. Sé un héroe, por una vez. Eso incluso podría hacer que Erica se dé cuenta y evite que lo ignore todo el tiempo. Había, sintió, tan lejos que podía llegar la devoción obstinada. Él todavía estaba enamorado de ella, pero parecía estar un poco más lejos de lograr su objetivo. Solo un pequeño reconocimiento estaría bien.

Pero, por otro lado... este era todo el Consejo al que se enfrentaba. Todos los vampiros en Whitechapel estaban en contra de él ― incluida Erica―. ¿Tal vez podría ser un héroe en otro momento, tal vez un momento con probabilidades ligeramente mejores de éxito?

Rory tomó su decisión y se dio la vuelta para caminar hacia el frente de la casa. Fue entonces cuando se dio cuenta de que su elección ya había sido hecha para él.

La casa de Ethan estaba completamente rodeada por vampiros. No había forma de que Rory pudiera alertar a Benny y Sarah sin poner a Ethan en peligro, porqué en el momento en que abrieran la puerta, los vampiros entrarían.

Suprimiendo todos sus miedos, Rory se dio cuenta de que iba a tener que actuar solo, lo quisiera o no. Es hora de ser valiente, entonces.

Enderezándose y cuadrando los hombros, lo que aún no lo hacía sentir realmente impresionante, Rory miró desafiante las filas de los vampiros.

Iᴄᴇ Cᴏᴏʟ Wʜɪᴛᴇᴄʜᴀᴘᴇʟ

―Se está poniendo muy brumoso allá afuera, Sarah. ― dijo Ethan mientras él y Benny bajaban a la cocina a tomar un aperitivo.

Sarah miró por la gran ventana delantera. ― Sí... No puedes ver nada excepto esa niebla blanca. Espeluznante. ― Ethan asintió distraídamente y siguió a Benny - y los malvaviscos - escaleras arriba.

Mirando hacia el vacío, Sarah se estremeció, sintiéndose un poco nerviosa. Se levantó de la mesa y cerró rápidamente las cortinas. Cuando volvió a hacer su tarea de biología a regañadientes, se sintió un poco mejor por haberlas cerrado.

No se habría sentido así si hubiera notado la cara presionada contra el cristal de la ventana detrás de ella, con los colmillos extendidos y los ojos brillantes. Con los auriculares puestosb y se concentró en su trabajo, Sarah estaba completamente ajena a la batalla que se lidiaba a fuera.