“ᴛᴏᴅᴀ ᴄɪᴇɴᴄɪᴀ ᴠɪᴇɴᴇ ᴅᴇʟ ᴅᴏʟᴏʀ. ᴇʟ ᴅᴏʟᴏʀ ʙᴜsᴄᴀ sɪᴇᴍᴘʀᴇ ʟᴀ ᴄᴀᴜsᴀ ᴅᴇ ʟᴀs ᴄᴏsᴀs, ᴍɪᴇɴᴛʀᴀs ϙᴜᴇ ᴇʟ ʙɪᴇɴᴇsᴛᴀʀ sᴇ ɪɴᴄʟɪɴᴀ ᴀ ᴇsᴛᴀʀ ϙᴜɪᴇᴛᴏ ʏ ᴀ ɴᴏ ᴠᴏʟᴠᴇʀ ʟᴀ ᴍɪʀᴀᴅᴀ ᴀᴛʀᴀ́s”.

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⟡ Im Yeon Sun ⟡

     Minutos después de que Jung Kook se marchara por la ventana dejando el momento tenso e incómodo, mi prima entró por la puerta de mi habitación y la cerró con fuerza detrás de ella, estaba muy colorada y animada, parecía una mujer nueva, una mujer que había tenía una noche pasional junto al amor de su vida.

     —¿Cómo te fue con Jung Kook? ¿Mi tío preguntó por mí? ¿Por qué estás sola y con esa cara? ¿Estoy castigada? —Hizo una pausa buscando muy en el fondo de su cabeza que podría ser— No me digas, ¿Mi tío los descubrió y echó a Jung Kook mal herido a la calle? —Se acercó a mí con cautela y se sentó a mi lado. Miré a los lados, ella no traía a Cookie consigo— No te preocupes, está con Jaewoo. —Asentí, ¿Por qué debía sentirme de esta forma? Jung Kook solo me confunde— Dime qué pasó, prima, aquí estoy para tí.

     —Curé a Jung Kook, había llegado muy mal herido, pero algo en él se encendió y comenzamos a besarnos... —Corté sin dar tantos detalles. No quería ser explícita con un momento tan privado— Sólo se marchó enojado por algo que ya había pasado —Mi prima me abrazó sin pensarlo, me acomodó en su pecho y sobó mi espalda dándome esa tranquilidad que me faltaba, Jung Kook se la había llevado con él.

     —Estás logrando tu cometido, tienes a ese hombre en la palma de tu mano, pero también caíste en sus encantos. Eso no está mal, el amor no es malo, todo lo contrario —Su voz tranquila y melodiosa me hizo entrar en razón, debía hablar con Jung Kook, no podía dejar que él cargara con ese sentimiento de culpa.

     —Lo sé, Yeonnie. —Me dejé acariciar y mimar un rato más— ¿Cómo te fue con Yoongi? —Me atreví a preguntar, pero conociendo al personaje, apostaba a que habían tenido sexo en la casa del mayor.

     —Fuimos a cenar y luego a dar un paseo por el parque, fue lindo. Se me hizo tarde y por ese llegué a esta hora luego de desayunar —Ella sonaba muy entusiasmada, mientras contaba lo que había pasado anoche.

     —No suena creíble. Conociéndote, lo calentaste y tuvieron sexo —Comenté honestamente, pero mi prima negó.

     —Él es diferente, simplemente, me ha atrapado —Confesó y podía jurar que le salían corazones por todo el cuerpo.

     Ambas estabas igual de jodidas.

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     Entré al café, había ido con un suéter morado porque a esta hora de la tarde hacía mucho frío y un jeans azul oscuro rasgado, junto a unos zapatos deportivos morados; no vendría con esas cholas otra vez. Busqué con desesperación a Jung Kook, pero no se encontraba en el café atendiendo, habían pocas personas y la mayoría se estaban marchando, tal vez había llegado tarde y estaban cerrando.

     Min Yoongi me vió buscando desesperadamente con la mirada a Jung Kook y decidió acercarse a mí con esa sonrisa tan linda que tiene en su rostro.

     —Yeon Sun, que alegría verte, ¿En qué puedo ayudarte?

     —Vine a hablar con Jung Kook y no lo encuentro —Fui directo al grano, papá no me había dado tanto tiempo para estar en la calle a estas horas, porque mañana tenía clases a primera hora.

     —Está en el vestidor cambiándose. Vamos, te muestro dónde es.

     Atravesamos el gran salón con mesas y sillas, la cocina y otras partes que estaban detrás de unas puertas que decían «Sólo personal autorizado» a paso rápido, Yoongi parecía apurado, pero con muchos ánimos de ayudarme. Caminamos por un estrecho pasillo color café hasta llegar a otras puertas que decían «Vestidor de caballeros» y «Vestidor de damas», ambas blancas.

     —A Jung Kook no le molestará si entras y lo ves sin ropa —Me guiñó el ojo izquierdo y no pude hacer más que sonreír.

     Yoongi era encantador.

     —Gracias por tu ayuda.

     —No te preocupes. Sé que él también necesita hablar contigo, Yeon Sun, sólo sé sincera con él y todo estará bien —Me sugirió antes de marcharse para darnos cierta privacidad.

     Ingresé al vestidor, pero no podía creer lo que estaba viendo, Yuna y Jung Kook se estaban besando en una de las esquinas del vestidor como si tuviera años sin besar o tocar a una chica, parecía desesperado.

     —¡Eres un imbécil! —Grité con enojo, arrepentimiento y decepción.

     Había venido para nada, Jung Kook jamás cambiaría por mí, solo fue una ilusión y yo me dejé llevar por ella.

     La pareja se separó al escuchar mi grito, Jung Kook parecía preocupado y apenado, suponía que era por encontrarlo en su trabajo comiéndose a besos a Yuna, pero ella no mostraba un ápice de vergüenza, porque ella lo estaba disfrutando.

     —¿Chica fresa, qué haces aquí? —Jeon parecía molesto, pero me importaba un rábano, molesta estaba yo por creer que ambos sentíamos lo mismo, por confiarme.

     Yuna agitó su mano y acomodó su vestimenta, solo para salir a la velocidad de la luz por la puerta.

     —Vine a hablar contigo, Jung Kook, pero llegué en mal momento. —Sonreí falsamente— Lamento haberte interrumpido —Realmente, no me sentía mal por haberlos interrumpido, es más, me hubiese gustado llegar un poco antes, así ambos no tendrían ese color carmesí en sus rostros.

     —No, realmente no lo hiciste —Él aseguró, pero sabía que sí lo había hecho.

     —Parecía que sí —Ya no sabía que decir, ni que hacer, tenía mucha impotencia dentro de mí.

     —Lamento que hayas tenido que ver eso —Intentó acercarse a mí, pero me alejé con cautela.

     —Pensé que estábamos en sintonía, pero me equivoqué, Jung Kook. Volví a equivocarme. —Le recalqué. Si tan solo yo no hubiera aceptado sus besos o si tan solo hubiese perdonado a Namjoon, no tendría aquel revoltijo en mi estómago— Lamento haber venido sin avisar. —Seguí disculpandome como una tonta, no quería sacar a flote lo que sentía dentro de mí— ¡Pero sigues siendo el mismo imbécil! ¡Me sentí mal por tí y vine a decirte que ya no te echaras la culpa por algo que ya pasó, pero alguien más se me adelantó y te animó a besos! —Le grité, sin importarme de tirar todas mis emociones por ahí, al suelo.

     —¿Cuándo vas a entenderlo,
Yeon Sun? No soy bueno para tí, mi estilo de vida no está hecha para tí y debiste odiarme luego de dejarte ir sola a altas horas de la noche, en vez de venir a mi nuevamente. No sabes de lo que soy capaz —Su voz fue disminuyendo, hasta susurrar lo último.

     Su mirada era fría y una mezcla de sentimientos se arremolinaban dentro de él, podía verlo reflejado en sus ojos marrones.

     —No te tengo miedo —Murmuré alejándome de él, no permitiría que me lastimara de nuevo.

     —Deberías —Murmuró de nuevo, mirando al suelo.

     Me dí la vuelta y me marché sin mirar atrás, no quería encontrarme a Yoongi, él posiblemente se sentiría culpable porque de haber sabido no me acompañaba hasta el lugar donde Jung Kook se comía a Yuna. Me adentré a mi auto y la anteriormente mencionada se acercó a mi auto imponiéndose, tocando la ventana con ímpetu.

     —¿Qué demonios quieres? —Le escupí en el otro lado de la ventana.

     —Baja esto —Su voz aguda se hizo presente y sin pensarlo bajé un poco la ventana de mi auto sólo para saber que quería decirme.

     —¿Y ahora? ¿Vas a burlarte de mí en mi cara? Hazlo, estoy cansada de este espectáculo —Escupí con dureza.

     —Vine a advertirte, ya sabes, de mujer a mujer. —Me burlé en su cara, ¿Ella en serio quería ayudarme a mí? Eso era nuevo— Jung Kook solo quiere a las mujeres para follar y si no le dan el placer que él exige, entonces, él se irá a buscar a alguien más —Ella replicó con amargura.

     Un nuevo flash de dolor llegó, pero lo ignoré.

     —¿Eso es todo?

     —Sólo trato de ayudar. Jung Kook es un idiota y lo siento si pensabas que él podría sentir algo por tí. —Me miró de arriba hacia abajo, fingiendo un tono dulce— No eres suficiente para él. Lo siento, él es despiadado.