La Corbata del Secreto
—Jiminnie —dijo Min Yoongi mientras me miraba.
—¿Sí, Hyung?
—¿Vendrías hoy a mi casa? Te invito a comer.
—Lo intentaré. Hoy tengo planes, pero si llego temprano, estaré allí.
Hablaba relajadamente, tratando de no tensarme frente a Taehyung, quien simplemente sonrió y se fue.
—Uff~ Creo que te quiere para algo específico, después de todo lo que me contaste de él —yo solo le sonreí pícaramente.
—¿Sigues con eso, Taehyung-ssi? —solo bufé.
—Bueno, después de que lograras lo que querías, ¿no crees? Puedo ver que tus deseos se cumplen.
—Vamos, Taehyung-ssi, no pierdas la esperanza. Si te acercas a Sae-Ron, podrías tener una oportunidad con ella. Si solo la miras y no hablas, no tendrás oportunidad.
—¿Crees que debería intentarlo? Sabes que soy... demasiado tímido... —él se rascó la nuca.
—¡Claro que sí! Deberías hacerlo. Primero ten una buena conversación con ella, y verás cómo todo sale bien —le di un leve golpe en el hombro.
—Intentaré acercarme a ella, 'intentaré' —dijo con comillas y una leve risa.
—Vamos, tú puedes hacerlo. No dejes que el miedo te domine. Si lo haces, no serás el Kim Taehyung que conozco —reí un poco y tomé un sorbo de mi té helado.
—Termina de comer, falta poco para que suene el timbre.
—¡No me apresures! Sabes que siempre como lo que sobra escondido en clase.
—Nunca cambiarás, Taehyung.
Finalmente, sonó el timbre y nos dirigimos al salón donde el profesor de Matemáticas nos esperaba. Vi a Min Yoongi cerca de la puerta, pidiendo permiso al profesor para salir a practicar baloncesto.
—¿Práctica? ¿Por qué nunca me avisaron? —pregunté a mi hyung, confundido.
—No habrá práctica. Solo quería sacarte.
—¿Para qué? ¿No tienes clase?
—¿Qué le dijiste a Kim Taehyung? —su voz era firme, una voz que tanto me gustaba.
—¿A... a Tae...? No le dije nada, hyung —respondí, mirando al suelo para que no se diera cuenta de que le había contado todo a mi mejor amigo.
—¿Nada? —se acercó a mí.
—N... nada.
—¿Estás seguro?
—S... sí, hyung. Se... seguro...
Me tomó de las piernas indicándome que saltara para enredarlas alrededor de su cintura, y así lo hice.
—Jiminnie~ ¿Le contaste todo, verdad? —dijo mientras me sentaba en el lavabo de un baño público, con el espejo detrás de mí.
—No, hyung... en serio, no estoy mintiendo.
—Tus mejillas dicen otra cosa —acarició mi mejilla mientras lo mencionaba.
—Hyung...
Él juntó su boca con la mía, sin quitar su mano de mi mejilla, y luego la bajó para acariciar mi cuello, haciendo que soltara un leve jadeo.
—Hyung, no aquí.
—¿Por qué no? —siguió besándome.
—Pueden entrar...
—Ahg... —se separó de mí y fue hacia la puerta para cerrarla con seguro—. ¿Así?
—¿Y si nos escuchan, hyung?
—Mm... —quitó un poco la corbata y la usó para tapar mi boca—. Esto debería disminuir el ruido.
Asentí, ya que no podía hablar. Comenzó a besar y lamer mi cuello, sus labios húmedos recorrían la piel mientras intentaba quitar mi corbata y desabotonar mi camisa para luego bajarla por mis brazos hasta dejarla a la mitad. Llegó a mi clavícula, besándola, lamiéndola y chupándola, dejando marcas. Bajó más hacia mis pezones y los lamió, y cada vez que bajaba, mi cuerpo se tensaba y gemía bajito mientras jadeaba por debajo de la corbata. Min siguió bajando mi camisa hasta quitarla, y me recargué en el lavabo con ambas manos. Después, bajó aún más hasta mi torso, besándolo y chupándolo mientras desataba mi cinturón y bajaba la cremallera del pantalón, y me lo bajó hasta dejarme solo en bóxers. También se quitó la ropa para quedarse desnudo, y pasó su mano sobre mi bóxer, haciéndome jadear mientras me recargaba del lavabo con ambas manos y respiraba agitadamente. Min metió su mano dentro del bóxer y tocó mi miembro, y me recargué en el lavabo con ambas manos mientras jadeaba con la respiración agitada. Min también se masturbaba mientras me miraba fijamente y se mordía el labio. Estaba a punto de venirme cuando Min dejó de hacerlo.
—¿En serio, Min Yoongi? —solo lo miré confundido, pero él solo sonrió y bajó un poco la corbata de mi barbilla para juntar nuestros labios en un beso tierno, y luego comenzó a acariciar mi miembro nuevamente, haciéndome soltar un gemido mientras interrumpía el beso.
—Ah... Yoongi... —murmuré bajito para que nadie nos oyera.
—No grites fuerte, no queremos que nos oigan —susurró en mis labios para volver a besarme mientras movía su mano en mi miembro.
—Yoongi... Me voy a venir... —interrumpí de nuevo.
—No, aún no.
Me volteó hacia el espejo, y sentí sus dedos en mi trasero mientras mordía mi labio para evitar gemir, y luego comenzó a mover los dedos dentro de mí en un vaivén lento. Un chillido escapó de mi boca al sentir que ya no eran solo dedos, sino su miembro que entraba lentamente en mí. Me sonrojé al verme en el espejo, y él susurró en mi oído mientras se movía más rápido, jalando mi miembro al mismo tiempo.
—Trata de controlarte, Jiminnie —susurró en mi oído.
—Uh... Pe... Ah... —gemí de nuevo.
Otro chillido agudo salió de mi boca mientras él seguía moviéndose más rápido y tomaba mi miembro para jalarlo más rápido.
—Yoongi... Me voy a venir... —murmuré bajito.
—Espera un poco más...
Continuó moviéndose más rápido y jalando mi miembro.
—Yoongi... Ya no puedo aguantar más... —murmuré de nuevo.
—Está bien, hazlo ahora, Jimin...
Susurró en mi oído, y me corrí en su mano mientras él se corría dentro de mí. Sentí algo caliente, y su miembro salió de mí mientras nos volvíamos a besar tiernamente.
—Me encantas, Jiminnie —dijo mientras su mano aún estaba en una de mis nalgas, apretándola y haciéndome sonrojar.
—También me... encantas, hyung... —solo sonreí.
—Deberíamos ir a bañarnos —sugirió.
Asentí levemente y nos dirigimos a ducharnos juntos, y luego salimos para tomar nuestras prendas y vestirnos.
—Debes controlar tu sonrojo, Jiminnie —sonrió.
—No estoy sonrojado... —me interrumpió con un beso corto.
—Sí lo estás.
Suspiré, sabiendo que era fácil sonrojarme.
—Deberíamos ir al salón —dijo, y asentí.
Ambos limpiamos lo que habíamos ensuciado, dejándolo todo como antes, y salimos del lugar. Cada uno fue a su salón, y cuando llegué, vi a la maestra de Química. ¿Qué hacía aquí? La última clase ya había terminado, y miré mi reloj para asegurarme de que no había perdido demasiado tiempo.
Ambos limpiamos lo que hubiéramos "ensuciado" dejándolo como antes y salimos del lugar, cada quien fue rumbo a su salón, al llegar pude ver a la maestra de Química, ¿Que hacía ella aquí? Toca hasta última, mire mi reloj y es donde me di cuenta que saldríamos en cinco minutos, en serio tardamos tanto?
Solo pedí permiso para entrar al aula, a lo cual me dejo, dijo que guardáramos nuestras cosas y es lo que hice, toco el timbre y todos salimos del salón.
Caminaba con Taehyung hasta casa, donde llegue y me despedí de el. Entre a casa Encontrándome con Mamá. ¿Acaso no fue a trabajar?
-Recuerda que irás a clase.
-Lo sé.
-A las 3 en Myeong-dong. Yo me tengo que ir, tengo una junta. Adiós.
Ella se fue a toda prisa ¿Junta? ¿En su trabajo? Hum... Que raro.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro