Había llegado al aeropuerto. Mi padre simplemente se despidió, dejó mis maletas y se marchó, tenía trabajo. Entré al lugar, que era inmensamente grande, como era de esperar en un aeropuerto. Suspiré profundamente mientras caminaba hacia donde una señorita tomaría mis datos para llenar una ficha antes de abordar mi vuelo hacia Washington.

Después de pasar entre una multitud, me dirigí hacia la puerta que indicaba -Washington-, mi destino. Mi mente seguía pensando en Yoongi. ¿Por qué no apareció? ¿No se dio cuenta de que quería verlo? Me sentía deprimido, pero no había vuelta atrás...

Finalmente, mis maletas fueron trasladadas para ser cargadas en otro avión. Estaba a punto de entregar mi boleto y pasar por la puerta. Miré hacia atrás una vez más, esperando ver a Yoongi, pero no había rastro. Suspiré y pasé por la puerta después de entregar mi boleto. Una azafata me guió hacia mi asiento y me ayudó a ubicarlo.

Me sentía desesperado, triste... No verlo una vez más, no saber si seguiríamos en contacto. No quería que esto fuera un adiós.

-Yoongi Hyung. <3

¿Cómo estás? Hola Hyung, solo... Ahg, no sé cómo expresarme contigo. Quería verte hoy, ¿sabes? Pero no estuviste ahí... Tal vez estabas ocupado y por eso no pude verte. ¿Me extrañará? Yo lo extrañaré demasiado, son 5 largos años, en los cuales quizás me convierta en un gran hombre. Ja, criaré a una pequeña niña que no es mi hija. Espero ser un gran hermano mayor para ella. Espero con ansias esos 5 años para volver a verte.

Extrañaré demasiado tus caricias, tus besos y tus abrazos, Hyung...
Te amo...

...

Escribí eso en mi borrador de mensajes, esperando enviarlo en cuanto llegara y obtuviera una respuesta. El avión ya se dirigía a Washington. Mi corazón latía acelerado. Nunca había estado en ese lugar antes.

El tiempo pasaba lentamente y no podía dormir. ¿Eran mis nervios? Probablemente, pero no quería llegar agotado. Intenté dormir todo lo que pude y sin darme cuenta, me quedé dormido durante todo el trayecto hacia Washington. Sí... muchas horas desde Corea hasta Washington... Pero si restamos las casi 10 horas que no pude dormir, más las otras que me levanté para ir al baño o comer... Fue mucho.

Me dolía la cabeza y ya no sabía qué hacer. Me levanté dos horas antes de aterrizar y pasé ese tiempo escuchando música y observando las nubes por la ventana ovalada. Eran nubes grises y el cielo se oscurecía, estaba atardeciendo.

-Perfecto. Ahora tendré problemas para encontrar un lugar donde dormir.

Cuando salí del aeropuerto, encendí mis datos móviles y me senté en una banca. Mi celular estaba lleno de mensajes de Yoongi Hyung...

-Hey JiMin, perdón por no haber podido ir.
-¿Estás bien?
-¿Ya subiste al avión?
-¿JiMin?
-Lo tomaré como un sí.
-¿Ya llegaste?
-Han pasado 2 días, bebé...
-JiMinnie...
-Quiero estar contigo ahora...
-¿Podrías contestar?
-Cariño?
-Amor?
-Esperaré tu mensaje, bebé.

¿Por qué no se los había dicho? Durante este tiempo, Yoongi y yo nos hicimos novios. Todo comenzó cuando fuimos al parque... Pero ese no es el punto ahora.