En efecto, al día siguiente todo salió según lo planeado, a la hora indicada uno de las canciones más ruidosas de RAVI sonó en el celular de Wonsik, despertándolos a los dos. El peliblanco se levantó para preparar el desayuno mientras Taekwoon se arreglaba.

En un inicio se había comprado un traje especial para ese día, pero dados los eventos de la noche anterior tuvo que decantarse por un suéter negro de cuello alto que cubriera las marcas tanto en sus brazos como en su cuello, aunque la suave tela negra pegada a su cuerpo también lo hacía ver bastante elegante.

Un día antes se había ido a cortar el cabello, no demasiado corto de manera que para ese momento caía en ordenadas ondas alrededor de su rostro hasta poco más arriba de sus mejillas.

—Te ves increíble, —alabó Wonsik, dejando el plato del omelet frente a él.

Taekwoon no dijo nada, pero se ruborizó ante el cumplido. Wonsik rio y le dio un rápido beso en los labios. Así la mañana transcurrió con rapidez, cada vez que los nervios querían volver a aflorar en el pelinegro, solo tenía que apretar la mano de su novio para poder evitarlo y sentirse mejor.

Con aquel apoyo Taekwoon se pudo presentar frente al panel de jurados y defender su tesis, no había otros familiares más allá de Wonsik pero eso era suficiente para él, y aún cuando dudaba una simple mirada bastaba para ayudarlo. Al final todo salió bien y obtuvo su liberación de título por unanimidad.

En cuanto salió del aula magna fue recibido por los brazos y los besos de Wonsik.

—¡Muchas felicidades! Sabía que lo lograrías.

—Sí, al fin ha terminado, ahora quiero ir a casa a descansar de tantas emociones.

Ante eso, la mirada de Wonsik se tornó un poco preocupada.

—Bueno... ¿puedes esperar un poco? Hoy viene Hyuk, va a entrar también a esta escuela así que quiere que le dé un tour.

Taekwoon lo miró con el ceño fruncido.

—¿Hyuk, quién es él?

—Ya te había platicado, es mi primo, SangHyuk.

Taekwoon suspiró, sí, recordaba que le había hablado de él, pero lo que menos quería era estar con más personas en ese momento.

—Si quieres puedes quedarte con él, yo quiero ir al departamento a descansar un poco.

—No, no quiero que te quedes solo de nuevo. Anda, quédate conmigo un rato más, luego te llevaré por algo rico de comer para festejar y de ahí directo a casa ¿sí?

No muy convencido, Taekwoon terminó por aceptar, así que los dos se dirigieron a la entrada de la universidad, donde ya estaban reunidos Hongbin y Jaehwan con Hyuk. Este último se lanzó a abrazar a su primo en cuanto lo vio, era igual de alto y musculoso que él a pesar de su edad así que no le costó nada tomarlo por el cuello.

—Por fin aparecer larva, pensé que tendría que buscarte por toda la escuela.

Wonsik lo alejó con algunos golpes solo un poco más fuertes de lo usual.

—Cuida tu boca, tú pequeño mocoso, te recuerdo que ahora no solo soy mayor que tú, sino que además soy tu senior.

Hyuk se separó y le sacó la lengua un par de veces.

—Lo que sea, ¿y quién es él? —preguntó señalando a Taekwoon.

El pelinegro había permanecido un poco detrás de Wonsik, con los brazos cruzados y la mirada aburrida.

—Ya te había hablado de él, es mi novio, Jung Taekwoon (aiñ, ¿saben qué bonito se siente escribir esto?)

—¿Es él? Me imaginaba alguien diferente, alguien igual de alocado y extravagante que tú —se acercó al mayor y le tendió una mano—. Mucho gusto, soy Han SangHyuk, cuida de mí por favor, —pidió formalmente.

Taekwoon le dio la mano de manera rápida, antes de girarse hacia Wonsik.

—En verdad no me siento bien Wonsikkie, por favor vayamos a casa —le pidió en voz baja.

Hyuk lo miró por algunos momentos antes de inflar las mejillas.

—Pues vete si no quieres estar aquí, pero Wonsik me prometió que me enseñaría la escuela —dijo, cruzándose de brazos.

Wonsik rio ante el comportamiento de su primo, sin darse cuenta de la tensión que se había creado entre él y su pareja, lo molestó revolviendole el cabello.

—Anda, no te portes como un chiquillo, ya eres todo un universitario.

—No, oficialmente no lo seré hasta dentro de dos semanas, así que puedo hacer todo el berrinche que quiera.

Siguieron bromeando así un poco más, pero Taekwoon se mantenía en silencio y sujetaba con bastante fuerza la mano de Wonsik hasta que este lo miró atentamente. Estaba pálido y las ojeras bajo sus ojos se notaban aún por debajo del maquillaje que había utilizado, por lo más llamativo era la mirada triste y cansada que al parecer intentaba ocultarlo.

Al final se decidió, cuando llegaron a la cafetería de la escuela detuvo a todo el grupo.

—Lo siento chicos, debo irme. Pero te dejo en muy buenas manos Hyuk, aquí estos dos malandros te enseñarán todas las instalaciones y las cosas más divertidas de la escuela.

—¡Pero, Wonsik! Tú me prometiste llevarme, y ayudarme a encajar.

—Lo sé, y lo siento, pero en verdad debo irme. Prometo compensártelo después.

—Tranquilo Hyuk, —Hongbin intervino, pasando un brazo por los hombros del menor—. Además, no necesitas a este "amo de casa" para encajar. Te irá mejor si somos Ken y yo quienes te orientamos.

Hyuk refunfuñó un poco más antes de aceptar.

—De acuerdo, pero en verdad espero una graaaan compensación por esto, o te acusare con mi tía.

—Prometo que será algo inigualable, —aseguró el peliblanco.

Al final Hyuk no pudo hacer mucho más, así que terminó por aceptar aquello. Sin embargo cuando se acercó para despedirse de ellos, se acercó un poco más a Taekwoon.

—Ganaste esta vez, pero no dejaré que me robes a mi primo —le dijo en un susurro para que Wonsik no escuchara, y aunque hubiera podido parecer una broma no había nada de juguetón en su tono, parecía por el contrario una amenaza en toda regla.

Taekwoon se quedó algo descolocado así que no alcanzó a responder mientras el menor se alejaba y volvía a abrazar al peliblanco para despedirse, sin embargo para Hongbin y Jaehwan no pasó desapercibida la ira que brilló en sus ojos.

Al final la pareja se marchó, pasaron por algo de comida para llevar antes de volver al departamento de Taekwoon, donde se cambiaron por ropa más cómoda (Taek tuvo que prestarle una de sus pijamas), y ambos terminaron en la cama, comiendo lo que habían pedido y descansando por fin.

Una vez que terminaron Taekwoon se acurrucó en el pecho de Wonsik, adormilado. Wonsik comenzó a hablar de manera pensativa, acariciando el cabello de su novio.

—Estaba pensando, ahora que Hyuk vino a la ciudad está rentando un departamento parecido al tuyo, y me hizo pensar en que cómo yo sigo viviendo con mis padres aunque ya acabé la carrera, creo que debería irme a vivir solo.

>Pensé en mientras decirle a Hyuk que me deje vivir con él, como su roomie, y así puedo ayudarle con los gastos...

El cuerpo de Taekwoon se tensó debajo de él, aunque ocultó el rostro en su pecho.

—¿Qué ocurre? —preguntó Wonsik aún así.

—Bueno, yo había pensado algo parecido, pero, pero no estaba muy seguro, —dijo con la voz amortiguada.

—¿De que se trata? Anda, dime.

—Bueno, estos departamentos son para estudiantes así que no podré quedarme aquí por mucho tiempo.

>Pensaba en rentar una casa, pero, no quiero vivir solo en un gran lugar, entonces yo, había pensado...

Desde su escondite pudo sentir cómo el corazón de Wonsik se aceleraba.

—Taekwoon, ¿qué estás intentando decirme?

—Bueno, si lo que quieres es, ser un roomie, ¿por qué no te mudas conmigo?

Por algunos momentos Wonsik no contestó, imaginando aquello: el vivir con Taekwoon 24/7 y poder cuidarlo. No quería abandonarlo como había hecho aquella primera vez, ni mucho menos como lo había hecho su propia familia.

—Lo, lo siento, si no quieres no es necesario, solo es algo que estaba pensando...

—Taekwoon —Wonsik esperó hasta que el pelinegro levantó la mirada—. Me encantaría vivir contigo, —dijo con una sonrisa confiada.

Emocionado, Taekwoon se lanzó a besarlo con fuerza, feliz por saber que después de poco tiempo tendría a su Wonsik completamente para sí.

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Solo paso a comentar que ya estoy escribiendo los últimos capítulos de esta historia y que la estoy amando, espero que ustedes también.

Nos leemos la siguiente semana