"Enserio ustedes dos, deberian tener mucho mas cuidado cuando juegan con la realidad virtual ...", Suki comento a modo de regaño mientras le realizaba una operacion de chazis abierto a Kumiko con un soplete y una mascara de soldador. "Poner los receptores de dolor al maximo podria terminar friendo su sistema nervioso- o en el caso tuyo, kumi, cortocircuitando todo tu sistema de respuesta a traumas fisicos"

Marco, que estaba recargado en contra de una pared con los brazos cruzados, levanto una ceja al escuchar la charla tecnica de Kumiko.

"Como sabes eso?", el pregunto con cierto grado de curiosidad. Haciendo que Suki dejara escapar un suspiro, levantara su mascara de soldar y se girará para verlo.

"Chicos, ustedes dos enserio no leyeron para nada el manual de advertencias cuando compraron esas sillas de realidad virtual?"

Marco le dio un ligero encogimiento de hombros a la comadreja blanca antropomorfa. "Kumiko dijo que eran seguras y una idea practica para entrenar. Ella nunca menciono que pudieran ser peligrosas o fatales"

Suki puso una expresion agria y lentamente se volteó a ver de manera acusatoria a Kumiko, "Ella no lo hizo ...?"

Kumiko tuvo la decensia de apartar la mirada y parecer algo culpable, "Okey, tal ves se me olvido mencionar que pudiera haber siertos efectos secundarios nocivos si abusabamos de sobremanera con el sensor de dolor en cada simula- ¡aaahhh! ¡Ese destornillador no va ahi!", ella dejo escapar un grito adolorido cuando la punta de un destornillador toco un par de cables responsables de mandar señales de dolor.

Suki retiro el destornillador y vio de manera furiosa a Kumiko, "Kumiko ...", ella comenzo mientras le daba a la maquina viva una mirada que prenderia en llamas al mismisimo diablo, "... Puedes olvidar muchas cosas. Puede olvidar como repararte a ti misma. Puedes olvidar que demonios es un baño. Puedes incluso olvidar tu propio nombre por todo lo que me importa ...", Suki tomo una gran cantidad de aire, "¡Pero la unica maldita cosa que no tienes permitido olvidar son las cosas que puedes dejar a las personas en estado vegetativo!", ella grito. "¡Maquina Boba!" Marco detras de ella ya tenia sus orejas tapadas. El ya se las habia tapado desde el momento que vio a Suki tomar aire.

"¡Oh vamos! ¡No tu también!", Kumiko se quejo.

Marco, mientras veia de manera apatica como Kumiko era brutalmente abusada verbalmente, no pudo evitar recordar la ultima ves que Suki se habia molestado tanto. La ves en la que el le habia preguntado por que ella tenía un par de lencería para mujer en su equipaje.

'¡Eso no es algo que le preguntas a una chica!'

Con toda honestidad, en esos momentos Marco sólo queria saber por que ella traería algo tan fuera del lugar como eso, si ella jamas usaba ropa interior. El término suponiendo que era una cosa de chicas y lo dejo en eso.

Desgraciadamente, desde su temprana juventud, el comprendio que no todas las feminas pueden ser tan faciles de entender como lo eran Sky o su Maestra, que no tenían reparos en darle una explicación clara y rapida para cualquier misterio en el que este se terminará topando con relacion al misterioso mundo femenino.

'Maestra, las mujeres hacen popo?'

'Huuuuh!? Que acaso quieres verme hacer o algo?'

'Sky, por que las mujeres sangran de la entrepierna incluso si no son heridas?'

'E-es culpa de un, eh ..., mago? Si si, un mago, Marco. Dejemosla en eso'

'Un mago te hace sangrar de la entrepierna de forma periodica?'

'Uh, si, seguro- podemos seguir besandonos?'

'Quieres que vaya a matar a ese Mago?'

Sip, ellas eran las unicas mujeres en toda su vida que Marco pudo admitir poder comprender. Todas las demás, un misterio absoluto sin esperanzas de ser resuelto. El cazador humano simplemente no tenía su mente dirigida a analizar a detalle la anatomia humana del sexo opuesto, y mucho menos la de otras especies que an mostrado ser mucho mas abiertas a la hora de mostrar su determimada genitalia a todo publico.

Aun que, ahora que su mente está desviada en eso, el no pudo evitar reconocer algo en relación a la maquina viva que era Kumiko.

"Kumiko ...", Marco hablo con seriedad, haciendo que Suki dejara de gritar por unos segundo y ambas voltearan a verlo con las orejas en alto.

Kumiko parpadeo su opticas y vio a Marcó, "Uh, que pasa?"

"Ahi algo que me a molestado ultimamente respecto a ti, y quiero pregutarte ...", Marco con una cara tallada en piedra, sus ojos bajaron y vieron una parte en específico del cuerpo de Kumiko, "... Por que tienes una vagi-"

~~~>>(En otro lugar)<<~~~

Delgado estaba trotando mientras arrastraba con dos grandes sacos llenos de arena amarrados a su espalda. Su maestro lamentablemente en estos momentos no estaba para revisar su progreso.

Lo que significaba que el tenia que ser extra duro consigo mismo, y seguir el régimen impuesto por su maestro sin su supervisión o ayu-

"¡Eso no es algo que le preguntas a una chica!/¡ Eso no es algo que le preguntas a una chica!"

Delgado no pudo evitar tropezar un poco cuando escucho el repentino y ruidoso par de gritos. El se detuvo y vio con una ceja en alto en direccion al aerodeslizador. Esos gritos eran de la señorita Suki y Kumiko? Que estara pasando ahí dentro?

"Esto es patetico ..."

Las orejas de Delgado se animaron al escuchar una voz a sus espaldas. Al voltearse, este rapido fruncido el ceño cuando observo a la niña humana.

Alice estaba viendo con desprecio los sacos de arena. Ella se agacho y tomo sin esfuerzo alguno una de los sacos.

"... Llamas a estas cosas entrenamiento?", ella pregunto, dejando que la saco lleno de arena se deslizara, "Cuando me dijeron que padre estaba entrenando a uno de ustedes, esperaba algo mucho menos triste y patetico" ella le dijo al can adolecente.

Delgado dejo escapar un gruñido molesto y vio a la niña con los ojos en blanco, "Que es lo que quieres?"

"Solo queria ver si eras alguien digno de el entrenamiento de padre ...", ella le dijo, "No es sorpresa que no lo seas, feh", ella escupio y despues le dirigio una sonrisa de superioridad al dalmata. "Un tonto animal simplemente no tiene lo que hace falta para el verdadero entrenamiento de padre"

"¡Hey!", Delgado ladro molesto, "Cual es tu problema conmigo? No te e echo nada"

"Tsk", Alice fruncio el ceño con ira, "Mi problema contigo; es que no eres mas que un tonto animal que no merece lo que tiene!", ella le dijo con desprecio antes resoplar y darle la espalda. "No se por que padre elige perder el tiempo contigo. Un perro tonto y debilucho como tu nisiquiera vale el mio. No se por que estoy hablando contigo ahora mismo. Mejor me voy hacer algo mas ¡Hmmp!", ella le dijo en una rapida susecion, antes de marchar molesta lejos de Delgado.

El Dalmata antropomorfo vio extrañado a la rara niña humana retirarse. Cuando esta estuvo fuera de su visión, Delgado no pudo evitar comentar: "Que niña mas insoportable. Ella es mucho peor que Clarissa", el mencionó, antes de reanudar su entrenamiento. Las palabras de la niña no lo habían afectado en lo absoluto.

Su maestro ya le habia dicho que, las palabras hirientes, son las principales y mas comunes armas de las que el tiene que volverse invencible si desea volverse más fuerte de lo que ya es.

El estaba determinado a probar que podía hacer eso. Incluso si su entrenamiento aún no a subido de nivel, el sabia que este iba a ser un camino lento pero valioso.

'Escucha pupilo ...', La voz de su maestro se escucho en su cabeza, 'Te voy a ser completamente honesto. No se que tan fuerte se puede volver un perro. No tengo idea si algun dia podras superarme en fuerza física o mental. ¡Pero no te equivoques! ¡Con estas palabras no estoy diciendo que sea imposible! ¡Solo te hago saber que a partir de ahora! ¡Estas recorriendo un camino solitario y confuso por el que ninguno de tu especie a recorrido antes!'

'Que-que significa eso Maestro'

'Significa ... Que ahora mismo estas recorriendo un camino muy similar al mio', La voz de su maestro resono, 'Y sólo por eso, te hago saber con antelación que elegiste el camino con mas difurcaciones. Cada acción que decidas tomar con lo que aprendas de mi, decidirá si puedes o no romper tu propio limite'

'Mi propio ... Limite?'

'Si, Limite. Todo el mundo tiene uno, y es sólo en el momento en que lo rompemos, que podemos mostrarnos a nosotros mismos de lo que en realidad estamos echos', el le había dicho, 'Dime pupilo, alguna ves as roto tu propio limite?

'Eh-Yo, no-no creo, Maestro'

'Ya veo. Entonces el próximo paso de tu entrenamiento es hacerlo. No me importa como lo hagas. Pero siquieres avanzar al siguiente nivel, tienes que hacerlo sin importar que'

Delgado estaba determinado a hacerlo. El le mostraria a su maestro y a cualquiera que dudara de el, que el podia ser mas fuerte. El les demostraría que el podia obtener la fuerza necesaria para proteger a toda su familia.

Delgado decidió agregar unas cuantas piedras a los sacos de arena antes de volver a reanudar su trote. Ambos sacos ya pesaban más de 110 kilos.

Ambos sacos eran una prueba irrefutable de su fuerza en crecimiento. El entrenamiento de su maestro realmente estaba dando resultados.

El jamas penso que pudiera correr tan rapido cargando tal cantidad de peso. Sus musculos talves ardan como el demonio, y su boca tenga un ligero sabor a cobre, pero su maestro le aseguró que si seguia así, este terminaría topandose con su limite.

Y todo lo que hacia falta para romperlo, era toparse con el. Y si su cuerpo logra sobrevivir a eso, el estara un paso mas adelante para completar su sueño y obtener la fuerza que su familia nesecita.

Arriba en el aerodeslisador, Alice observaba desde el borde de la cubierta al can seguir entrenando. Sus duras palabras no habían echo nada para hacer menguar la resolución del can.

"¡Alice!", el niño ciervo exclamó positivamente cuando al fin Encontro a la niña humana. Esta no volteo a verlo.

"Te eh estado buscando por todas partes, sabes?", el niño ciervo exclamó mientras se paraba aun lado de la niña y veía de manera curiosa a donde esta estaba viendo, "Que estamos viendo?"

"Nada", Alice rapido respondio, y luego esta señalo en direccion al Reino puro corazon. "Quiero ir a explorar ese lugar", ella le dijo. "Vamos"

"Eh, okey", El niño ciervo exclamó inseguro y vio algo preocupado a su amiga retirarse. Al unirse a ella, el pregunto,  "Alice, te pasa algo?"

"No", ella le dijo sin dejar de caminar.

"Estas segura?", el niño ciervo decidió presionar, "No pareces tu misma. Aun sigues molesta por que tu papa no te hace caso?", el pregunto. Haciendo que la niña se detuviera y el flequillo de esta ensombreciera sus ojos.

Viendo la reaccion de Alice, el niño ciervo hizo una mueca y se maldijo así mismo por ser tan directo con su pregunta. El estiro una pezuña y la colocó en el hombro de Alice.

"Alice, si sientes como que nesecitas hablar sobre lo que te esta pasando, te escucho", el le dijo.

"...", Alice permanecio viendo en absoluto silencio el suelo por unos segundos, antes de levantar la vista, ver al niño ciervo directo a los ojos y comentar: "Skippy, crees que vendan postres en el valle puro corazon?"

El niño ciervo dejó caer sus hombros y suspiro. El le dio una sonrisa a Alice. "Con un nombre como ese, creo que seria un crimen si no lo hicieran", el bromeo.

"Hmm", la niña solo exclamo en señal de reconocimiento, antes de reanudar su caminar. El ritmico *clip-clop* a sus espaldas, le hizo saber que el niño ciervo le estaba siguiendo.

~~~>>(Corte)<<~~~

El Valle Puro Corazon.

Era raro, de eso no habia ninguna duda. Alice y el niño ciervo no pudieron evitar pensar al unísono, mientras mas se adentraban, que acababan de entrar en alguna especie de extraño lugar habitado por muñecos de peluche antropomorfos.

La mayoria de los habitantes del reino se veían en extremo inofensivos. Pequeñas e inofensivas criaturas que rondaban de izquierda a derecha sin parecer tener ninguna preocupación en el mundo.

"Nunca pense que hubiera un lugar tan surreal como este ...", el niño ciervo pensó en voz alta mientras escaneaba a sus alrededores. Este lugar era en extremo diferente a Hubei.

Por el lado de Alice, no teniendo tacto alguno, no se limitó de ninguna manera cuando esta se separó un poco del niño ciervo y tomo con sus manos al corazoncito más cercano que esta tuvo.

Era un pequeño rinoceronte Rosadito. La extraña criatura rosada parecia que estaba hurgando en la basura antes de ser repentinamente tomado por las curiosas manos de Alice.

Alice se llevó a Rosadito al rostro. Ella lo miro fijamente y en silencio directo a los ojos.

Rosadito simplemente le regreso la mirada a la niña y parpadeo.

...

...

...

"... Tu eres mio ahora", Alice le terminó diciendo al pequeño rinoceronte Rosadito, antes de maniobras su pequeño cuerpo y sostenerlo debajo de su axila derecha.

"Eh, okey. Estoy bien con eso", fue todo lo que Rosadito dijo encogiendose de hombros, antes de permanecer estático y dejarse ser manipulado como si fuera una especie de muñeco de peluche vivo por Alice.

Ella pronto regreso aun lado de con el niño ciervo, y pregunto: "Skippy, donde crees que este la dulceria?", sacando al ciervo de su estado pensativo.

Las orejas del niño ciervo se animaron en direccion a Alice antes de que este despavilara y volteara a verla, "Huh?", el exclamo al ver a la niña humana, "Alice, uuuhh, que es eso?", el pregunto extrañado mientras señalaba al pequeño rinoceronte rosado que Alice cargaba.

"No lo se", ella le dijo en un tono plano mientras se giraba y lo veia con los ojos en blanco, "Lo encontré en la basura. Pense que era algo lindo, haci que lo tome y ahora es mio", ella ... Le informo de forma concisa y directa.

"... Huh", el niño ciervo exclamó y parpadeo viendo en direccion al corazoncito, sin saber muy bien como reaccionar.

Rosadito, al darse cuenta de que el niño ciervo ahora lo estaba viendo, le dio un saludo, "Hola", sin parecer afectado en lo mas mínimo por la situacion en la que se encontraba actualmente.

El niño ciervo sacudió una pezuña en direccion al corazoncito, "Hola", el saludo antes de ver a Alice, "Tal ves el sabe donde ahi una dulceria?"

"Tal ves", Alice exclamo y asintio estando de acuerdo. Ella maniobro al corazoncito y lo tomo con ambos brazos frente a su rostro, "Jeriko segundo", el Nuevo nombre de Rosadito, "Sabes donde ahi algun establecimiento donde se venda comida dulce? Tu nueva y poderosa maestra nesecita aliviar su nesecidad de comida dulce", ella le dijo.

Jeriko segundo, "Conozco un lugar", dijo con una voz algo ronca antes de señalara en una direccion, "Por ese lugar ahí un carrito de helados que siempre se pone a estas horas"

"Helado, dices?", Alice murmuro interesada y giro su cuello momentáneamente en la direccion a donde el recién apodado; Jeriko Segundo, habia señalado. Ella pronto regreso su mirada a Jerko Segundo, "Gracias por la información Jeriko. Sólo por eso, te as ganado un rascadita en la cabeza", ella prosedio a acariciar la cabeza del corazoncito.

"¡Sssiii!", Jeriko festejó mientras pataleaba feliz ante el refuerzo positivo administrado por Alice.

Con la acaricia administrada y una direccion a la cual partir. Alice se volteó a ver a su segunda mascota que la veia algo divertida y le presentó a Jeriko Segundo.

"Toma Skippy, carga a tu hermanito"

El niño ciervo dejó de sonreír y abrió mucho los ojos cuando Alice le presentó a la pequeña criatura para que lo cargara. "Hermano?", el pregunto de forma incrédula viendo al corazoncito. El pequeño corazoncito al instante le dirigio una sonrisa espelusnante.

"Hermanoooo~"

El niño ciervo no pudo evitar dar un paso hacia a atrás por puro reflejo y asco, "A-ahm, que tal si mejor tu lo cargas?", el tartamudeo, "Yo, eh, no me siento del todo comodo cargando algo que estuvo en la basura hace muy poco tiempo"

Alice se encogio de hombros ante la explicacion, "Meh, tu te lo pierdes", ella le dijo para luego abrazar cerca de su pecho al pequeño y rosado Jeriko segundo, "Jeriko Segundo parece ser bastante suave y apachurrable"

"¡Si! ¡Tu te lo pierdes!", Rosadito exclamo emocionado y viendo al cerbatillo. "¡Perdedor sin astas!"

Un tick de irritacion al instante aparecion en la cabeza del niño ciervo mientras más veia al corazoncito, "Pensándolo mejor, que tal si me dejas cargarlo por unos segundos"

Alice inclino su cabeza confundida mientras veia al niño ciervo, "Por que ahora si quieres cargarlo?"

"Recuerdas esa cosa que dijiste hacerca de que era apachurrable?", el pregunto y Alice asintió en señal de reconocimiento, "Fue eso", el rapido agrego, "Ahora prestamelo unos segundos"

Eso sonaba como una razon bastante logica para Alice. Ella pronto le pasó al rosado y pequeño roniceronte corazoncito.

"Gracias", exclamo y asintio, tan pronto como el niño ciervo tuvo al pequeño corazoncito en sus pezuñas delanteras. Este se dio la vuelta y, como si fuera un balon de fútbol, pateo al corazoncito muy lejos en el aire hasta que este aterrizó con sonoro *trumb* en el interior de un camión de basura que estaba pasando al final de la calle y estaba siendo conducido por un pequeño perro rosado.

"... Buena patada", Alice no pudo evitar comentar mientras dejaba de ver el camion de basura que se llevaba a Jeriko Segundo y se giraba para ver al niño ciervo, "Pero, por que hiciste eso, Skippy?"

"Queria ver si Jeriko Segundo, ademas de apachurrable y suave, tambien era pateable", el niño ciervo explicó mientras se sacudia las pesuñas y luego veia a Alice, "Resulta que si lo es"

"Ah, si, eso tiene sentido", Alice asintio deacuerdo con la explicacion, "Supongo que eso sera algo importante para saber cuando lo vuelva a encontrar", ella penso en voz alta para si misma.

Dicho eso, Alice, para mucha sorpresa del desprevenido niño ciervo, usando la punta de su dedo meñique derecho, toco con extrema y veloz precision unos cuantos puntos nerviosos en el cuerpo de niño ciervo.

El apenas había sentido que la niña lo habia tocado. Este incluso pensó por unos momentos que Alice le habia intentado hacer cosquillas. Pero los resultados de tan aparente inofensiva accion, pronto dieron sus resultados ...

El niño ciervo abrió mucho los ojos y dejó escapara un tambaleante, "woaaa~", mientras se tambaleaba un poco, sintiendo como su cuerpo de repente perdia su centro y toda sensacion de equilibrio. Este no tardo en caer en una posicion a cuatro patas.

"Huh?", el niño ciervo exclamó viendose confundido, cuando este trato de levantarse de nuevo en una posicion mas erguida. La misma sensación de vértigo y perdida de equilibrio volvio a invadir su cuerpo, forzandolo de nuevo a una posicion a cuatro patas.

Percatandose de que algo extraño le estaba pasando a su cuerpo, este volteo a ver a su amiga. "Alice, puedes por favor explicarme que demonios me acabas de hacer y, lo mas importante, por que?"

"No mucho", ella le dijo mientras brincaba y se sentaba en los lomos del niño ciervo, "Solo toque algunos cuantos nervios en tu cuerpo que te ayudaban a pararte recto", Ella explico, como si fuera de lo mas común en la vida inhibir la capacidad de alguien para pararse recto.

"Siiii, creo que puedo notar ESO- pero la pregunta aun prevalece; por que sentiste que era necesario hacerme eso?", el pregunto, "Si sabes que si querias que te cargara solo tenias que preguntar, verdad?"

"Esto es un castigo por quitarme a Jeriko Segundo", ella le explico, "Ahora llevame a los helados, fiel mascota y montura", ella exclamo, haciendo un gesto hacia delante con su mano.

Habeces, era aterrador recordar lo hábil que Alice era con sus manos. El niño ciervo, sólo ahora recordo que Alice, de echo, era alguien muy capaz de desabilitar a una personas sólo usando su dedo meñique.

Pero aún con eso, el niño ciervo no se pudo obligar a tenerle miedo.

"Solo para que lo sepas, no me arrepiento de haberlo pateado", el niño ciervo exclamó mientras procedia a a empezar a caminar a cuatro patas. Llevando a la niña en su lomo.

"No espero que te arrepientas", Alice exclamo con un ligero encogimiento de hombros, "De otra manera no serias un ciervo. Se sabe muy bien que los de tu especie son criaturas muy orgullosas", ella informó.

El niño ciervo suspiro y rodó los ojos, "Ahora me vas a decir que tienes un problemas con eso?"

"Para nada Skippy, yo soy basicamente igual", ella le dijo. "El orgullo es algo muy importante, al fin y al cabo"

"Bueno ... No me siento muy orgulloso ahora mismo", el niño ciervo comentó.

"Oh, eso probablemente es por que perdiste tus astas-"

El interrumpio, "Y por que estoy caminando en cuatro patas como un animal? Eso podria ser tambien la razon, no crees?"

Alice lo ignoro, "-ya veras que cuando vuelvan a crecer, te sentiras mucho mas orgulloso", Ella le dijo.

El negó con la cabeza en señal de derrota antes de volver a hablar, "Alice, puedes decirme que lo que me hiciste no es permanente"

"No es permanenete", Alice rapido le aseguro, haciendo que el niño ciervo dejara escapar un suspiro de alivio. El no queria caminar de esta manera por mucho tie- "En ocho horas volveras a poder cami- Oh Mira, el carrito de helados!"

"¿¡Ocho horas!?", el niño ciervo grito y se volteo para ver furioso a la niña que cargaba en su lomo, "Alice que demo-", el dejo de hablar cuando se percato que la niña ya no estaba en su lomo, "Eh?", el exclamo confundido, y cuando regreso su mirada al frente. Este pudo vislumbrar a Alice frente al carrito de helados que estaba a un par de metros lejos de el.

Ella estaba sonriendo mientras sostenia una copa dorada que habia sacado de la voveda de su padre, el Santo Grial, frente a el heladero, que era un pequeño y tierno borregito con un lindo sombrerito de cono de helado.

"Mucho gusto, que puedo darle?", el heladero pregunto con una sonrisa amable y servicial. Su voz era aguda e infantil.

Alice empujo la copa dorada en direccion a el borregito, "Voy a comerme tu Colon y hacerme una bufanda con tus tripas si no me llenas esto con helado de chocolate", Alice ... Solicito amablemente?, "Asegurate de ponerle chispitas o tu familia pagara las concecuencias"

"... ... ... ... ... Que?", el heladeto pregunto tras guardar silencio por unos considerables segundos. Esta era la primera ves que alguien lo amenazaba con un tono de voz que no era para nada compatible en relación a las consecuencias. Acaso esta niña acaba de amenazarlo con sacarle las tripas? Nha, seguramente el debió escuchar mal.

"¡Alice!", el niño ciervo llamo y pronto se colocó aun lado de la niña. Este la vio con una mirada de regaño, "¡Esa no es forma de pedir helado!", el regaño.

"No lo es?", ella pregunto bajando la copa y viendo a su mascota. Pedir helado de esta manera siempre le habia dado resultados en este planeta. Por que su mascota pensaria que no era la manera correcta?

"No, no lo es", el mencionó pareciando cansado, "El helado, o cualquier cosa, no se pide extorsinando con sacarle las tripas a las personas"

Las orejas del heladero se animaron al escuchar las palabras del niño ciervo. Ah, entonces el si habia escuchado bien.

Esta bien, no hay razón para entrar en pánico. El sabia que hacer en estas situaciónes. Primero, el tenia que guardar la calma y parecer inofensivo. Segundo, el tenia que presionar de forma discreta el boton de pánico que siempre guardaba con el y conectaban con las oficinas del sheriff. Por suerte, el niño ciervo estaba haciendo un trabajo espectacular distrayendo a la niña.

"Ah no, entonces como se supone que se pide el helado?", Alice le pregunto.

"Ah no lo se, tal ves sea pidiendolo con amabilidad y ofreciendo un pago justo", El niño ciervo exclamó viendo a su amigo con los ojos en blanco, "Alguna ves haz intentado hacerlo de esa manera?"

"Espera espera espera, me estas diciendo que tengo que pagar por el helado!?", Alice pregunto pareciendo shokeada por el echo, "No se supone que es gratis?"

"Quien te dijo que el helado es gratis!?"

"¡Nadie!", Alice grito de regreso, "¡Eso es algo que descubres cuando la gente te lo da gratis todo el tiempo!"

"Tal ves los heladeros no te lo darian gratis todo el tiempo si no los amenazadas con sacarles las tri-"

"¡Alto ahi! ¡El sheriff a llega-"

"¡Callate!/¡Callate!", Alice y el niño ciervo le gritaron al Sheriff, que acababa de hacer un aterrizaje de super héroe cerca de donde ellos estaban teniendo su conversación.

Mao Mao retrocedió un poco al escuchar ambos pares de gritos dirijidos en su dirección. El fruncir el no tardo enfruncir el ceño mientras veia a los niños discutir acaloradamente sobre; 'si amenazar a los heladeros con sacarles las tripas era o no una buena tactica para conseguir helado gratis, pese a lo poco etico que eso sonaba' frente a el.

"Esa no es forma de hablarle al sherriff ....", Mao Mao murmur de mal humor mientras se cruzaba de patas y esperaba pacientemente a que los niños dejaran de discutir.

Tras unos segundos, Colosal y Adorabat se unieron de una forma mas tranquila y menos teatral a su mejor amigo/Mentor. Ellos procedieron a ver de forma extraña a los niños discutiendo.

"Uh, amigo, por que no estamos haciendo nada para, ya sabes, detenerlos?", Colosal pregunto mientras se rascaba la parte trasera de su cabeza, "No es ese como nuestro trabajo o algo haci?"

"Eres libre de intentar", Mao Mao exclamo haciendo un gesto con su pata en direccion a los niños.

"Vamos amigo, se que no te gusta mucho tratar mucho con este tipo de cosas, pero que tan dificil puede ser. Son sólo dos niños inofensivos", Colosal exclamo mientras avanzaba y se dirigia en direccion a los niños. Con la intención de acabar con la discucion.

Adorabat no tardo en aterrizar aún lado de Mao Mao y esta jalo de su capa para llamar la atencion de este, "Oye Mao Mao, esa niña no te parece algo familiar?", ella señaló.

Tras darle una mejor mirada a la niña, Mao Mao comentó, "Bueno, ahora que lo mencionas ...", el exclamo de forma contemplativa, en unos pocos momentos sus ojos no tardaron en conectar los puntos. El no tuvo tiempo para advertirle a su mejor amigo que estaba a punto de confrontar a la (posible-mas que probable) hija de una criatura muy peligrosa.

"¡Espera Colosa-!"

"Okey niños, ya basta de gritos. Que tal si mejor dejamos de- ¡AAAAAHHHHH!"

Mao Mao y Adorabat hicieron multiples muecas de dolor mientras veían y escuchaban lo que acontecia frente a ellos.

Tras unos segundos de gritos de dolor y golpes, Colosal regreso a lado de Mao Mao arrastrando las patas. Su brazo robótico estaba muy dañado, y tenía varios aruñasos, mordidas y un ojo morado.

Colosal no tardo en sucumbir ante sus multiples heridas superficiales, y este cayo de rodillas frente a Mao mao antes de caer de lleno al suelo. El se hizo triste bolita en el suelo. Algunos sollozos no tardaron en escucharse. "Por que solo se quedaron ahi viendo ...?", el les pregunto a su mejor amigo y protegida, "La unica razon por la que sigo vivo es por que el niño evitó que la niña fuera por la garganta"

"¡Alice! ¡No debiste haber golpeado a ese sujeto de esa manera!", el niño regaño, "Vas a meternos en muchos problemas con la señorita Suki si se entera!"

"¡Que acaso no viste como ese gigantesco tejon invadió mi zona de muerte instantanea!", Alice gesticulo de manera infantil a su alrededor, "¡El practicamente estaba pidiendo ser brutalmente golpeado! ¡No hice nada malo!", ella grito y se cruzo de manos.

''Mao Mao, quiero irme a casa", Colosal gimio desde el suelo.

Mao Mao, al escuchar a su amigo, se agacho y coloco una pata en la cabeza de este, "No te preocupes Colosal. Yo me encargo de esto a partir de ahora, descansa un poco", el le dijo, desenvainando su katana y avanzando en direccion a los niños, "Adorabatt, cuida a Colosal", el le dijo a su pupila antes de seguir.

Alice levanto una ceja cuando vio al gato negro apuntarle con la katana. "Y tu que quieres, gato?", ella pregunto de manera agresiva.

Mao Mao entrecerro los ojos, "Acabas de golpear a un oficial de la ley", le le dijo, haciendo que el niño ciervo abriera mucho los ojos. "Voy a nesecitar que me des el número de tu padre, para avisarle que estas en muchos problemas"

Mao Mao nunca dejo de señalar a la niña con su katana. Si la niña se parecía de cualquier manera a su padre, lo que menos tenia que hacer justo ahora este era bajar la guardia.

Al mencionar a su padre, Alice bajo levemente la cabeza y sus ojos se oscurecieron detras de su flequillo. Este gato realmente le acaba de pedir que le diera el número de su padre?

El niño ciervo, notando la reaccion de Alice, rápido se colocó protectoramente entre ella y el sheriff, y vio de manera nerviosa al ultimo.

"Eh, se-señor- No hay de casualidad alguna otra manera de solucionar esto?", el niño pregunto, intercambiando rapidamente una mirada en direccion a Alice antes de volver a ver al Sheriff, "Que-que tal si mejor nos da una multa? Podemos pagarla justo ahora si eso sirve de algo"

"Muevete ...", Mao Mao le dijo al niño sin perder de vista cada movimiento que pudiera hacer la niña, "... Esto es entre esa niña y yo. Ella tiene que entender que no puede hacer lo que quiera en este lugar sin esperar concecuencias"

El niño ciervo dejó su nerviosismo de lado y vio de manera sería al Sheriff, "Señor, usted realmente no quiere hacer e-"

"Mejor escucha lo que dice el gato, Skippy", Alice interrumpió, haciendo que el niño ciervo volteara a verla. Ella se habia llevado una mano al cuello y se lo estaba tronando, "Si lo que el quiere es pelear. Pelea es lo que le voy a dar", ella mencionó antes de golpear sus nudillos juntos y sonreir de manera salvaje en direccion al Sheriff, "¡Voy a patear el trasero de este gato tan fuerte que va a olvidar como sentarse de nuevo!"

"Tu trataras ...", Mao Mao exclamó mientras entrecerraba aun mas sus ojos y alistaba su Guardia, "... Y fallaras. El único que saldra con un trasero pateado el día de hoy seras tu, eh ... Lo que sea que seas"

"Ya veremos"

El niño intercambio miradas entre el sheriff y su amiga por un par de momentos antes de dejar caer la cabeza en señal de derrota, "Oh bueno", el suspiro, "Que no se diga que no trate de detener esto", el dijo antes de marchar y unirse a lado de los otros dos espectadores, Colosal y Adorabatt.

Colosal y Adorabat, le lanzaron una mirada al niño ciervo, el cual no tardó en regresarselas. "Hola", el saludo, "Lo siento de antemano por su amigo. El probablemente no va a-", el niño ciervo se calló cuando un borrón oscuro paso volando frente a el y los otros dos.

*Trash*

El cuerpo de Alice voló e impactó de lleno en contra de una farola. Haciendo que esta hiciera una mueca de dolor cuando su espalda choco encontra del palo de metal.

"Sobrevivir ...?", el niño ciervo terminó de hablar mientras giraba su cabeza de regreso al Sheriff que ...

Acababa de golpear fuertemente con su katana a su amiga Alice. Ella no se habia esperado que el gato tuviera tanta fuerza de bateo, ese corte en horizontal le habia dejado un rasguño bastante ligero en el pecho. Pero sin embargo ...

Esta se impulsó fuera del suelo y con un salto se levantó de nuevo para ver al gato. Parece que el sheriff de este lugar no es tan débil como parece. Su tamaño y la contextura algo regordete de su cuerpo habían logrado tomar por sorpresa a Alice.

Ella terminó resoplando, ella limpió la suciedad de su pecho y le lanzó una mirada al gato.

"Buen golpe ...", ella le dijo, "Casi lo senti. Ahora dejame mostrarte como se hace, Gato!", ella mencionó, antes de desaparecer en un estridente boom sonico y administrar un potente derechazo en el plexo solar de Mao Mao, destruyendo cada una de sus costillas.

O eso hubiera pasado si el gato no hubiera reaccionado a tiempo y alcanzado a levantar la hoja de su katana frente a su pecho para que esta absorbiera la mayor parte del poderoso impacto.

El cuerpo de Mao Mao pronto fue arrojado hacia atrás. Sus patas traseras se hundieron en el concreto mientras estas daban lo mejor que tenían y trataban de detenerlo. Para cuando este se detuvo, sus musculos ardían y la hoja de su katana aún estaba vibrando por el fuerte golpe que se vio obligada a soportar.

Cuando este vio a la niña no pudo evitar abrir mucho los ojos cuando captó que esta ahora estaba sosteniendo algo en su mano izquierda.

Eso-eso era su capa? Cuando esque ella habia-

"Una capa, huh?", Alice se burlo mientras inspeccionaba la capa roja. Ella pronto tuvo una gran idea, y decidió ponérsela para burlarse del gato. "Creo que esto se me ve mucho mejor a mi, no crees, Gato? Tu ya estas muy grande para usar capa", ella le pregunto cruzandose de brazos de manera orgullosa y de forma burlesca. La capa de Mao Mao ahora hondeaba a sus espaldas.

Mao Mao dejó escapar un gruñido molesto ante la burla. Antes de que este pudiera decir algo al respecto, la niña volvio a desaparecer de nuevo en una mancha de movimiento.

¡Detras de el! Mao Mao no alcanzo a reaccionar a tiempo. Alice logro conectar una patada en la espalda media del gato, empujando a este hacia delante.

Cuando Mao Mao se recompuso y giró con su katana lista y en guardia, este no pudo evitar volver a abrir mucho los ojos cuando captó que la niña de nuevo le habia logrado quitar otra de sus heroicas prenda de vestir.

¡¿Como es que ella esta haciendo eso?!

"¡Grr! ¡Deja de de hacer eso!", Mao Mao rugio en direccion a la niña.

"Una faja? Hablas enserio?", Alice se volvió a burlar mientras veia divertida el ancho cinturon de Mao Mao. "Que acaso le da verguenza ocultar su barrigita al gatito", ella se burló mientras arrojaba detras de ella la prenda de vestir.

"Tipo ...", Colosal exclamó mientras giraba su cuello fuera de la pelea y veia al niño ciervo, "Tu amiga realmente es mala"

"Lo se~", el niño ciervo exclamó viendo de manera soñadora a su amiga. Le tomo pocos segundos captar que Adorabatt y Colosal lo veian extraño para aclarar su garganta un poco y exclamar en un tono un poco mas avergonzado; "Uh, es decir- ¡Trate de advertírle a ese sujeto que esto era una mala idea! ¡Alice es despiadada cuando pelea!"

Adorabat al escuchar eso, se giró para ver preocupada a Colosal, "Colosa, crees que Mao Mao pueda ganarle a es niña?"

"No lo se Adorabatt ...", Colosal exclamó en direccion a su pequeña amiga, "Esta es la primera ves que Mao Mao de echo se enfrenta con alguien igual de molesto que el cuando peleamos con los piratas de cielo"

En efecto, la niña ahora mismo estaba jugando con Mao Mao de una manera bastante similar a la que haría dicho Sheriff cuando se enfrenta a los piratas del cielo. Si ellos estuvieran aquí ahora, era obvio a quien le echarian porras. 

En el caso de Mao Mao, en estos momentos estaba teniendo dolorosos flashbacks de cuando sus hermanas se metian con el por ser tan blandengue.

La niña simplemente era demasiado rápida y hábil para el. Cada movimiento que esta hacia, lo hacia con una aterradora cantidad de brutal precisión. Era como intentar pelear en contra de una de sus hermanas!

"Oh mira, ahora tengo tus guantes", La niña exclamó después de volver a patear por la espalda a Mao Mao, , "¡Aww, mira tus lindas patitas! ¡Son tan pequeñas! ¡Hahahaha!", ella se rió.

Mao Mao al captar su falta de guantes, casi por reflejo ocultos sus pequeñas patas detras de su espalda. "¡No son pequeñas! ¡Son tamaño promedio!", el le gritó.

"Si son tan promedio como dices, entonces por que las escondes con vergüenza, Gatito?", Alice pregunto con una mano en la cadera y viendo con una media sonrisa al Sheriff.

"Yo-yo no-"

"Eres patetico, eso es todo lo que eres", Alice silencio al gato, "No puedo imaginar por que alguien tan patético como tu elegiría pelear en contra mia. Seguramente no eres mas que la patetica vergüenza de toda tu fami-"

Alice se detuvo en medio de su discurso y al instante atrapó un objeto esferico negro que la pequeña murciélago azul de repente le habia arrojado. 'Huh, que se supone que es esta cosa?', ella se pregunto mentalmente. Tras inspeccionar un poco mejor el objeto esferico, está se dio cuenta demaciado tarde, de que lo que sostenia, era de echo una-

*¡BooM!*

-Bomba de humo. Una bomba de humo le explotó muy cerca de la cara a Alice. La cosa no le habia echo nada, la metralla de las bomba era demaciado blanda como para hacer algo mas que fastidiar a la hija de Sky.

Cuando el humo se despejó, Adorabatt y Colosal estaban frente a Mao Mao de forma protectora.

Alice levanto una ceja al verlos. "Por que protegen a ese insecto debilucjo?", Alice pregunto, "Que acaso no ven que es la viva representación de la palabra patetico"

"Mejor callate de una ves, niña", Colosal exclamo con desprecio y en un tono serio que pocas veces se veia obligado a usar, "El es nuestro amigo y ya no vamos a dejar que sigas metiendote con el de esta manera, escuchaste?", el pregunto a la niña mientras señalaba con su brazo cibernético en modo caño.

"¡Si! ¡Ya no vamos a dejar que sigas diciéndole mentiras a Mao Mao!", Adorabatt agregó, "¡El es el héroe mas valiente y fuerte de todo el mundo!", ella defendió.

Alice dejó de sonreír y guardo sus manos en sus bolsillos, una masiva aura de intencion asesina comenzó a ser expulsada desde su espalda, "Ah, con que eso es un héroe. Si eso es verdad, entonces deberia dejar de hablar y empezara a pelear de manera seria, no creen?"

Pronto, esta alcanzo las dos empuñaduras de las espadas del caos que comenzaron a surgir desde el centro de su pecho. Las cadenas unidas a ambas espada resonaron en el suelo caundo estas cayeron.

"Veamos de que les sirve defender a esa patetica excusa de heroe"

El niño ciervo, notando las peligrosas espadas, no pudo evitar rapidamente exclamar en direcciona a su Amiga; "¡Alice, no! ¡Ellos no son malas personas! ¡Ellos sólo están tratando de proteger a su amigo!"

Alice le dirigió una mirada glaciar al niño ciervo, "No me importa. Estos tres no me caen bien y me pidieron algo que nisiquiera yo conozco; el número de mi propio padre. Eso es razon mas que suficiente para usar fuerza fuerza leta- ¡Aaaaaahhhhh!", Alice comenzó a gritar de dolor cuando su oreja derecha fue repentinamente tomada por un agarre de acero.

Una coro de; "Eh?/Eh?/Eh?/¡Señorita Delilah!?", se pudo escuchar al instante.

En efecto, una Dalmata antropomorfa adulta se habia presentado y habia pasado todas las defensas de Alice.

"¡Que piensas que estas haciendo, Alice!", Delilah grito mientras seguia administrando su castigo maternal a la hija humana de su casero, "¡Tu papá va estar muy enojado contigo cuando descubra que estas haciendo travesuras y peleando con desconocidos frente a el hospital!"

Espera, hospital? El niño ciervo pensó, y cuando este observó un poco mejor su alrededor, se percató que el carrito de helados al que ellos habian venido estaba frente a el hospital. Hospital donde Delilah tambien resultaba trabajaba como enfermera moviendo a los enfermos.

"¡Sueltame perro!", Alice exclamó mientras trataba de sacudirse del agarre de la matriarca canina sin hacerle daño. Ella podia sacudirse de esto fácil, pero eso conllevaría dañar a la dalmata adulta, algo que ella no podia hacer, por que eso pondria furioso a su padre.

Delilah les dirigió una sonrisa avergonsada a Mao Mao y a Colosal. "Realmente pido disculpas por esto. Espero que Alice no le haya echo ningun daño permanente"

"¡Lo hubiera logrado si no hubiera enturrumpido! ¡Perro entrometida!", Alice exclamo mientras aún trataba de sacudirse de el agarre que Delilah tenia sobre ella.

"¡No uses ese tono conmigo jovencita!", Delilah ladro dirigiendole una mirada furiosa en direccion a Alice, ella dejo de sacudirse al notar la mirada intensa de la matriarca de 99 cachorros. "¡Sabes mi nombre! ¡Usalo! Entendido!?"

"En-entendido", Alice se encogió ante la mirada. Sorprendiendo a todos los espectadores, que procedieron a verla con los hocicos abiertos.

"¡Ahora quiero que vayas y te discúlpes con esos sujetos a los que golpeaste!"

"Que?! Pero ellos-", Alice se cerro la boca tan pronto como noto que la mirada de la dalmata adulta se intensificaba a nuevos y aterradores niveles. Que clase de técnica estaba usando esta can en su contra? Ella no lo sabía, pero seguro como que el infierno tiene fuego, la hacia sentir raro.

Delilah soltó la oreja de Alice, se cruzo de patas y le hizo un gesto con la cabeza a la niña para que fuera a disculparse. Mirandola de manera desaprovativa en todo momento.

Alice refumfuño y avanzó en direccion a Mao Mao, Colosa y Adorabatt. Cuando ella estuvo a pocos pasos del trio, se sonrrojo, evitó la mirada de todos y, en un susurro apenas escuchable, exclamó: "Lo siento"

"¡Mas fuerte Alice!"

Alice se rápido se giró para ver a Delilah; "Hablas enserio!? ¡Esto es muy vergonzoso!"

"¡No me hagas repetirme, Alice!"

Alice evitó la mirada de Delilah, y dejó escapar un gruñido antes de volver a ver a Adorabatt, Colosal y Mao Mao, que ahora le estaban sonriendole de forma victoriosa.

Esas sonrisas hicieron que lo que estaba a punto de pasar fuera mucho mas difícil y vergonzoso para Alice.

"¡Alice!"

"¡Ya voy!", ella grito a Delilah y regreso su mirada al trio, "Lo siento por golpearlos"

"Yyyy?", Delilah exclamó, sabiendo que seguramente eso no era todo lo que Alice habia echo.

"Decir cosas malas sobre ese sujeto", Alice señaló a Mao Mao.

"Yyyy?"

"Desvestir a ese sujeto", ella rodó los ojos y volvio a señalar a Mao Mao.

"Yyy- Espera, tu hiciste QUE!?"

"Desvestir a ese sujeto?", ella vio confundida a Delilah mientras señalaba con un pulgar a Mao Mao, "Por que suena tan sorprendida? El no estaba usando mucha ropa que digamos. Sólo un estupida capa, una faja y un par de guantes"

"¡Ese no es el punto Alice!", Delilah regaño, "Ya deberias saber que es muy mal visto desvestir a otros a la fuerza! Tu padre escuchara todo sobre esto en cuanto llegemos a casa!", ella informó, "Ahora regresale su ropa a ese sujeto!"

Alice pronto hizo lo pedido, quitandose la capa y los guantes, y regresandoselos echas bola a Mao Mao. "Toma tu tonta capa y guantes- Alcabo que ni los queria"

"Hehe, espero que te castiguen de por vida", Mao Mao le dijo con bastante rencor a Alice. Ojala sus padre hubieran actuado de esta manera cuando sus hermanas se metian con el. Eso le hubiera ahorrado tantas terapia.

"No tendras tanta suerte la proxima ves que nos encontremos", Alice entrecerro sus ojos y susurro amenazadoramente. "¡Hmmp!", ella le dio la espalda al gato y se dirigió en direccion a su mascota. Delilah la siguio con la vista en todo momento.

"Tu tambien estas en muchos problemas, Xerneas", Delilah exclamó ahora viendo en direccion al niño ciervo, haciendo que al instante este la viera de una manera incrédula.

"Y yo que hice!?"/"Quien infiernos es Serenias?", Alice y el niño ciervo preguntaron al mismo tiempo.

"Tu sabes lo que hiciste, jovencito", Delilah señaló, "Es tu responsabilidad hacerle saber a Suki cuando Alice quiere salir a pasear"

"Por que lo dice como si yo fuera el perro de todos aqui?", Alice cuestiono, y fue ignorada.

"Y desde cuando es mi responsabilidad hacer eso!?", el niño ciervo volvio a preguntar a la dalmata adulta.

"¡Desde que cosas como estas pueden pasar!", Delilah señaló lo obvio antes de dejar escapar un suspiro cansada, "Tienes dos años mas que ella, Xer, eso te deberia hacer el mas responsable de los dos"

El niño ciervo no pudo terminar evitando la mirada de la matriarca de 99, esta tenia una forma muy eficaz para hacerlo sentir mal consigo mismo. Casi le recordaba a cuándo su propia madre lo regañaba.

"... Lo siento", el se disculpó.

"Eso ya no importa", Delilah exclamo en un tono mas calmado, "Ahora, regresen a casa. Ya luego veré que el padre de Alice y Suki se enteren de lo que pasó aqui"

Alice y Xerneas, pronto se dieron la vuelta y comenzaron a marcharse de regreso a Casa. Alice saltando a lomos de Xerneas y dejando que este la cargara todo el camino. Cuando estos estuvieron fuera de la vista, Delilah regreso su atención a Mao Mao y Colosal.

"Siento mucho que tuvieran que ver eso", ella se disculpó, "Los niños de hoy en dia son mas ... Activos de lo que solían ser antes"

"Uh, no hay problema señora", Mao Mao exclamó sintiendose algo temeroso de Delilah, "Nos enfrentamos con cosas peores todos los dias", mentira, "Gracias a su intervención, su hija no causó ningun daño permanente"

"Oh no, ella no es mi hija", Delilah rápido aclaro, "Ella es la hija de mi casero", les dijo, "Y no se preocupen, vere que ella y su amigo sean debidamente castigados cuando llegue casa"

"Por favor, vea que ese sea el caso", Colosal rápido exclamó mientras se unía aun lado de su amigo y veían a la Dalmata, "Esa niña enserio nesecita que sus padres le llamen la atencion en algún punto"

Delilah dejó escapar un suspiro triste, "Creanme, pienso lo mismo", ella dijo, "Ahora, si me disculpan, tengo que regresar a mi trabajo", con eso dicho, la dalmata se dio la vuelta y camino de regreso al hospital. Dejando atras al trio.

"Mao Mao ..."

"Que pasa Colosal?"

"... Quiero irme a casa"

~~~>>(corte)<<~~~

"Como sigues haciendo eso!?", Kumiko exclamó de manera frustrada en direccion a Marco. Este estaba sosteniendo su katana ... Con todo y el brazo que se negaba a soltarla.

Ambos ahora estaban entrenando en un claro rodeado de árboles que no se encontraba muy lejos del aerodeslizador. La tierra estaba llena de cortes y había manchas de hierba quemada en distintas secciones.

Marco no tardo en arrojarle de nuevo su katana y brazo a Kumiko. Ni la conexión, ni el marco magnetico habian sido dañados, así que sólo era cuestión de volver a conectar el apéndice para que este volviera a funcionar de manera optima.

Marco se cruzo de brazos, "Aún no as aprendido a mantener tu guardia en alto en todo momento", el le explico a la maquina viva, "Con una guardia abajo, me permites hacer lo que yo quiera contigo"

"¡Tenia mi guardia en alto!", Kumiko grito, "Pero tu sólo desapareciste y lo próximo que supe es que me faltaba mi brazo bueno. Como haces eso?"

"Supongo que no hace daño decirte como lo hice ...", Marco reflexionó dejando escapar un suspiro, el enserio queria que Kumiko lo terminara descubriendo por si misma. "Si vamos hacer aliados, supongo que te servirá saber esto por adelantado"

Kumiko vio de forma interesada a Marco, "Saber que exactamente?", ella pregunto, "Que secretamente tienes poderes de teletransportacion", ella bromeó.

"No, nisiquiera parecido", Marcó exclamó mientras veia con absoluta seriedad a Kumiko, "Lo que estoy a punto de revelarte, Kumiko, es la base de todas mis tecnicas imaginarias. Es lo que me permite moldear mis manos en espadas, lanzas, o incluso hasta martillos", el detalló mientras hacia tres gestos diferentes con su mano, "Lo llamo: El Dominio Absoluto De Los Cinco Dedos"

"Yo ... Nunca habia escuchado sobre eso antes", Kumiko comento mientras seguia viendo de forma interesada a Marco. "Es alguna especie de arte marcial de tu mundo?"

Marco asintió, "Si, la inventé durante el entrenamiento de mi Maestra; cuando esta me lanzo desnudo y desarmado a un pozo lleno de monstruos para que sobrevivierá todo un mes entero", el explico.

Kumiko vio sorprendida a Marco, "Ella hizo QUE!?", pregunto, "Marcó, estas seguro de que tu maestra no queria sólo matarte? Arrojar a alguien a un pozo lleno de monstruos, me suena a una forma bastante eficaz para matarlos"

"Esa era la idea de mi Maestra sobre el entrenamiento", Marco le dijo con un encogimiento de hombros, "Pero volviendo al punto, El Dominio Absoluto De Los Cinco Dedos, es un arte marcial que se divide en diez niveles, cada nivel es mas mortal que el anterior", el explico, antes de levantar un dedo, "Lo que estoy usando en tu contra, es sólo el Nivel 1. Este nivel, es el nivel del ladron. Me permite aprovechar la guardia baja del enemigo y transformar mis manos en veloces ganchos imaginarios que pueden arrancar lo que yo quiera de mis adversarios"

Kumiko no puedo evitar verse sorprendida y algo asustada ante tal explicación, "Pero, si lo que dices es verdad. Entonces como lograste arrancarme el brazo ¡Mantuve mi guardia en alto en todo momento!", ella estaba seguro de que lo habia echo.

"No, te equivocas. Tu guardia no estaba en todo lo alto que deberia de estar", Marco exclamó, "En orden de subir tu percepción del peligro al máximo. Tienes que poder verme y sentirme como una verdadera amenaza para tu vida", el señaló, "De otra manera, seguiré podiendo hacer ESTO!"

Fue ... Aterrador. Fue instantaneo. Una sensación de terror invadió y recorrió todo los sistemas de Kumiko. Lo próximo que ella supo, es que Marco estaba detras de ella, su brazo derecho estaba extendido y su mano encerrada en un puño.

Kumiko tenia miedo de preguntar.

"Que-que fue lo que me quitaste?", y sin embargo, ella lo hizo.

"...", Marco no respondio. El sólo abrió su puño extendido, y ocho tornillos rodaron fuera de este. Las pequeña piezas de metal calleron inutiles al suelo. Entonces el hablo, "No importa que tan pequeño sea el objeto. Nada escapa del primer nivel Del Dominio Absoluto De Los Cinco Dedos", el susurro.

Segundos pasaron, antes de que el chasis de Kumiko cayera frente a ella con un ruido sordo al suelo. Revelando el núcleo palpitante de esta. Su fuente de energía y vida ahora estaba expuesto.

Kumiko bajo la vista y vio su chasis caído. Ella no tenia palabras para lo que acababa de pasar, ahora que ella tenia una explicación, el entrenar con Marco ahora se veia mucho mas peligroso. El rápido palpitar de su nucleo lo decia todo.

Ella tenia miedo.

Sólo ahora, ella podia ver por poco para el tipo de cosas que Marco la estaba buscando preparar. Criaturas que podian matarla con un sólo movimiento.

"Durante nuestro entrenamiento, quiero que me veas como un enemigo que busca matarte, Kumiko", Marco le dijo mientras se paraba derecho, "Haz eso, y podras percibir mas facilmente los movimientos"

Ante eso, Kumiko sólo tenia una cosa que decir; "... Entendido"

"Quieres seguir entrenando?"

Kumiko se dio la vuelta para ver a Marco y ella asintió. Sus opticas se llenaron de resolución. Ella no estaba dispuesta a caer de un sólo golpe cuando el apocalipsis empieze.

Ella era Kumiko, la maquina con un alma. Ella no sólo va a sobrevivir el apocalipsis. Ella lo va a combatir. Y para hacer eso, ella, justo ahora, tiene que ver a Marco como la representación máxima de lo que el futuro tiene almacenado para arrojarle directo al rostro.

Ella no volvio a colocar su chasis. Eso podia esperar, esto no. Ella tomo su katana con ambas patas y alistó su Guardia. "¡Estoy lista!"

Marco tuvo que contener una pequeña sonrisa que amenazaba con salir. Para el, Kumiko sólo apenas ahora estaba en guardia.

Esta vez, cuando el desaparecio en una mancha de velocidad e intento hacer lo mismo. Las opiticas de Kumiko se abrieron al limite, esta rapido apuñaló su katana en el suelo y presionó un botón en la empuñadura de esta.

Varios cristales en extremo puntiagudos de hielo brotaron a su alrededor. Ocasionando que Marco tuviera que detenerse para evitar ser empalado encontra de estos.

Limitandose a sólo usar el nivel uno del Dominio Absoluto, Marco rápido dio un salto hacia atrás, y en cuanto sus pies tocaron el suelo, este volvio a desaparecer en una mancha de velocidad. Una mancha que saltaba en circulos alrededor de los Cristales de hielo que ocultaban la forma de Kumiko.

Kumiko, aún con su katana apuñalada en contra del suelo, activo otro interruptor en la empuñadura de esta. Los cristales pronto se transformaron en un denso y caliente vapor que le dificultaron por poco la vision a Marco.

Antes de que el pudiera hacer un ataque frontal directo a donde la mayor cantidad de vapor se habia originado, este escuchó el traqueteo de la electricidad. Seguido de eso, una veloz figura se abrió paso entre el vapor y se precipitó de frente a el.

*¡StinK!*

Marco levanto ambas cejas cuando este se encontró de cara a cara con Kumiko. La afilada y electrificada hoja de su katana estaba intentando cortar a su brazo Abel.

"Oooh", Marco exclamó, haciendo que Kumiko le diera una media sonrisa. "Impresionante, al fin lograste verdaderamente levantar tu guardia", el le dijo mientras aún permanecían encerrados en esta competencia de fuerza. "Ahora veamos cuanto tiempo puedes mantenerla!", el le dijo, antes de patearla y retirarse hacia atras.

Para mucha irritacion de Kumiko, el volvio a desaparecer tan pronto como esta se recuperó de la patada. Kumiko optó por no desactivar el efecto electrico de su katana. Esta le estaba dando una mejora de velocidad que realmente nesecitaba en estos momentos si quería poder seguirle el paso a Marco, ahora que ella podía verlo.

¡Detras de ella! Ella rápido se giró y volio a rechazar el ataque de Marcó. Las chispas volaron mientras esta golpeaba el brazo metalico de Marco y lo empujaba hacia atras. De nuevo, el cazador humano desapareció en una mancha borrosa tan pronto como sus pies tocaron el suelo.

¡Izquierda! ¡Derecha! ¡Por detras! ¡En frente! ¡En frente!

¡Arriba! Kumiko tu que patear el suelo para evitar un ataque desde arriba. Pronto Marco impacto con la fuerza de un meteorito, su puñetazo impacto y dequebrajo una gran cantidad de suelo en contra de donde ella habia estado parada hace pocos segundo.

¡Esta era su oportunidad! Mientras Marco estaba ocupado desenterrando su puño, Kumiko eligió capitalizar el aparente descuido. Presionando los tres interruptores en la empuñadura de su katana al mismo tiempo, ella decidio atacarlo en una cegadora y poderosa ronda de tres cortes elementales.

Este ataque, tenia nombre: Kumiko le gustaba llamarlo: Festival De La Locura Elemental. Tres lunas crecientres, una de hielo, otra de Fuego y una electrica, se funcionaron y viajaron en contra de la figura de Marco.

Las tres lunas crecientes rápido impactaron y explotaron en un torbellino de hielo, fuego y electricidad en contra de donde el permanecia.

Kumiko sonrió de manera vistoriosa al notar esto. ¡Ella habia logrado un golpe directo! ¡Por fin ella le habia logrado regresar algo de daño a Marco!

Las aberturas en cada una de las articulaciones de Kumiko no tardaron en expulsar una gran cantidad de vapor, cuando esta se detuvo, y estas tuvieron tiempo para respirar un poco, ya que parecia que se estaban sobrecalentando.

Kumiko por supuesto noto esto y no pudo evitar hacer una mueca de Dolor al esta registrar el intenso ardor que se estaba acumulando en estas. La velocidad a la que Marcó la obligaba a reaccionar, habia echo que esta empujara cada una de sus articulaciones al máximo.

Por unos momentos y mientras regesaba su mirada el lugar donde Marcó habia estado, Kumiko se permitió por fin sentir orgullo por si misma por ser capaz de hacertar un ataque directo al cazador humano.

Por desgracia, ella aun no era tan habilidosa como para permitirse distraerse con su propio orgullo.

Su guardia sólo flaqueo por unos segundos, pero esos cortos momentos de distracción le costaron caro ...

"¡Agk!", Kumiko gruño de Dolor cuando sintió que algo rosaba por breves momentos su rostro.

El orgullo que habia sentido hace poco lo costo su optica derecha.

La distracción de perder su optica derecha y el shock de haberla perdido de manera tan fugaz, le costó su pierna izquierda.

Fue un efecto dominó, del cual Marco capitaliso con brutal eficacia cada momento. Este comenzó a desarmarla, cada perdida hacia flaquear aun mas a Kumiko, hasta el punto en el que ....

"¡ME RINDO!", Kumiko exclamó aterrada. Haciendo que Marco reaparecierá frente a ella, su mano derecha a pocos centímetros de robar su núcleo. "... Me rindo. Por favor para", ella volvió a exclamar.

Marco retrajo su mano y se paro recto. Su vestimenta ahora tenía algunas cuantas manchas de quemaduras. Viendo hacia abajo a lo que quedaba de Kumiko. El pronto noto que sus piernas y brazos habian sido desconectado, y su optica derecha faltaba.

Ante el estado actual de Kumiko, Marco sólo tenia una cosa que decir, "... Lo siento", el se disculpó, "Creo que me deje llevar un poco cuando vi que por fin me habías acertado un golpe"

Al escuchar las palabras de Marco, Kumiko no pudo evitar sonrrojarse por el puro enojo que sentia y gritarle, "Tu crees!?", ella grito, "Marco, realmente crees que terminar de esta maldita manera todo el tiempo es entrenamiento?!"

"Si"

"¡No!", Kumiko volvio a gritar, "¡Casi me matas, Marco!"

"Sacarte el núcleo no te mata-"

"¡Si! ¡Si lo hara!", Kumiko interrumpió, "Sacarme el condenado núcleo me apagará, Marco", ella le dijo mientras dejaba escapar unas cuantas lagrimas de su unica optica, "Que te apaguen es similar a la muerte, maldito idiota", ella reveló.

Las cejas de Marco se dispararon hacia arriba al escuchar eso, "No lo sabia", el le dijo, "Pense que estarias bien si te llegara a apagar durante nuestro entrenamiento. Es por eso que decidí empezar con las lecciones mas avanzadas tan pronto", el explico, "Por que no me dijiste que apagarse se sentia como la muerte, Kumiko?"

"Enserio me estas preguntando eso?", ella le pregunto mientras lo veia como si fiera un idiota, "¡Es por que pense que era obvio! ¡Dhuu!"

"Bueno, no lo es", Marcó respondió al instante, "No soy una máquina, así que no tenia forma de saberlo. Deberias haberme dicho esas cosas desde el inicio. De esa manera, me hubiera contenido un poco mas"

"¡Esto no es mi culpa!", Kumiko volvió a gritar, queriendo abofetear a Marco antes de recordar su falta de apendices, "¡Marco! ¡Conecta mis brazos de nuevo para poder abofetearte!"

Marco dejó escapar un suspiro y negó con su cabeza. Era claro que Kumiko se sentia mal por perder de manera tan ... Desarmada.

"Creo que el entrenamiento termina por ahora ...", el término por decir, mientras procedia a recoger cada parte del cuerpo de Kumiko esparcidas por todo el claro.

"Ahora tengo que pensar una mejor manera para prepararte, Kumiko", el mencionó mientras se agachaba y tomaba con un brazo a Kumiko del suelo y con el otro, sus demas partes. "Lo bueno es que por fin mejóraste en mantener tu guardia en alto encontra de algo que amenaza con quitarte la vida ... Eso, y lograste hacertar un golpe. Eso es algo, supongo"

"¡Hey! ¡Dije que conectaras mis brazos para poder abofetearte!", Kumiko grito mientras se sacudia como un saco de papas muy enojado.

"Mejor dejemos que Suki haga eso", Marco le dijo a una muy enojada Kumiko, "De esa manera las dos pueden gritarme al mismo tiempo cuando le digas que casi te mato entrenando", el se lamentó, "Últimamente, parece que gritarme es un pasatiempo que las dos disfrutan mucho hacer"

Enserio, Kumiko y Suki parecen disfrutar mucho cuando se trata de romperle los tímpanos, cada que este hace algo. El silencio actual de Kumiko, sólo validaba el echo de que esta prefería mucho mas gritarle en equipo que sóla en el bosque.

~~>>(Continuara)<<~~