"No te creo"

"¿Que?", Mort no podía creer que su amigo Fido, un cocker Spaniel inglés de edad avanzada, que seguía trabajando en el hospital como pediatra, no le creyera, "Oh vamos Fido, hace cuánto que nos conocemos? Realmente crees que yo te mentiría respecto a esto"

"No creo que me estés mintiendo, Mort. Te conozco lo suficiente como para saber que no eres el tipo de perro que va por la vida diciendo este tipo de mentiras", Fido explicó mientras se quitaba los lentes y se acariciaba sus cansados ojos. Este se suponía que era su descanso, y lo estaba pasando hablando sobre cosas imposibles, "Lo que creo es; que lo que tú crees, que yo quiera que crea, no es algo real o mínimamente posible", Fido explicó.

"Es decir, te das cuenta de lo que me estás diciendo?", Fido lo vio directamente a los ojos, "Me estás diciendo, que ese cachorro por haya ...", el señaló en dirección a Alex que estaba ocupado jugando con un ábaco que había tomado del escritorio de Fido, "... Puede dejar a todos en este hospital sin trabajo. Es ridiculo, Mort"

"Está bien, se que es difícil de creer-"

"Prueba; imposible"

"-PERO, puedo probar que lo que digo es nada menos que la verdad", Mort le dijo, haciendo que Fido resopló. Este probablemente estaba a muy poco de llamar a alguien que sacará a Mort y Alex de su consultorio y llevarán al primero para checar por si este no estaba alucinando.

"Alex, puedes venir por un momento?" Mort llamó al cachorro, que dejó el ábaco y se acercó a ellos con curiosidad.

"¿Qué pasa, Mort?" preguntó Alex inocentemente. Mort se agachó y le puso una pata en el hombro a Alex.

"Mira, mi amigo aqui no cree que puedas despedir a todo el personal del hospital. ¿Podrías... demostrarle lo contrario?" pidió Mort, con una sonrisa esperanzada en su rostro. Este acercó a una de las orejas de Alex y le susurro al oído, "Y trata de hacerlo lo más dramático posible si es posible"

Eso le enseñará a Fido a no creerle ...

"¿Dramático? Uh, ¿okey?", Alex asintió de manera algo extrañada y se concentró un momento. De repente, comenzó a brillar con una luz dorada y una onda de energía se extendió desde él, abarcando todo el consultorio de Fido. En cuestión de segundos, todos los muebles se movieron solos, las luces parpadearon y el aire se llenó con un zumbido repentino.

La luz que recubría el cuerpo de Alex se concentro en un punto en específico, en su pata derecha. Haciendo parecer como que esté sostenía una pequeña estrella incandescente en la palma de su pata.

Este señaló dicha estrella en dirección a Fido. Haciendo que este se asustara al pensar que sería erradicado de la existencia o algo peor...

Finalmente, Alex chasqueo los dedos. Fido por reflejo cerro sus ojos, se cubrió el rostro e hizo una mueca, esperando oleadas del dolor mas agonico posible ... Pero, cuando esté no sintió ningún tipo de dolor, este abrió los ojos tentativamente.

Este no pudo dejar de parpadear. Sus ojos se sentían extraños.

"¿Que-que?". Este levanto una pata temblorosa y se quitó sus lentes. Lentes que esté había necesitado toda su vida para ver bien. Este volvió a parpadear múltiples veces. No creyendo lo que esté estaba viendo.

Su vista ... Su vista estaba completamente arreglada! El ya no nesecitaba sus lentes para ver.

Fido se quedó boquiabierto, sin poder creer lo que acababa de pasar.

Mort observaba la escena con una sonrisa triunfante en su rostro, mientras Alex miraba a Fido con curiosidad y ternura.

Después de unos segundos más de silencio en los que Fido no paraba de ver a su alrededor, Mort comenzó a preocuparse de que Alex le hubiera echo algo malo de manera accidental a su amigo.

"Fido, uh ¿estás bien?", preguntó Mort, acercándose con preocupación.

"... Huh!?", Fido parpadeó varias veces mientras veía a Mort, a este todavía le costaba poder creer lo que acababa de presenciar. Este se levantó lentamente de su silla, y siguió mirando alrededor de su consultorio con incredulidad. Todo estaba claro y nítido, como si nunca antes hubiera necesitado sus lentes.

Todo a su alrededor lucía tan claro, incluso Mort y el extraño cachorro ... Era como ver un nuevo mundo.

"No puedo creerlo... Mi vista... está ... esta perfecta", murmuró Fido, emocionado.

Fido se llevó las patas a los ojos, frotándolos por si todo aquello era una cruel ilusión, pero no, su visión seguía perfecta. Más que perfecta de echo. Una mezcla de asombro, incredulidad y felicidad se reflejaban en su rostro, mientras el anciano pediatra miraba alrededor con ojos brillantes.

"Mort ¿cómo... cómo es esto posible?" preguntó Fido, sin poder contener el sentido de extrañeza que se estaba acumulando en su interior.

"Eso es fácil de explicar", Mort sonreía ampliamente, feliz de haber demostrado la increíble habilidad de Alex y de haber presenciado la transformación en la vida de su amigo. El puso una pata sobre la cabeza de Alex, y sacudió el pelaje sobre esta, "Alex aquí tiene habilidades especiales, Fido. Puede hacer cosas maravillosas, como sanar tu vista y muchas, muchas cosas mas" explicó Mort con orgullo.

Fido miraba con incredulidad a Alex, tratando de asimilar lo ocurrido. Sentía una mezcla de gratitud y asombro, y su corazón se llenaba de emoción al simplemente pensar en todas las posibilidades que se abrían ante él gracias a la habilidad curativa de Alex.

El era un pediatra comprometido a ver a cada uno de sus pequeños pacientes en el mejor estado de salud posible, a este ya se le venían a la mente más de un par de cachorros a los que les vendría bien ser curados de enfermedades y padecimientos que probablemente los seguirán por el resto de sus vidas.

Antes de volver a hablar, Fido decidio calmarse, el se estaba adelantando. El aún no sabe las limitaciones o efectos secundarios que pueda tener algo como esto.

Regresando a su escritorio, el vio en dirección a Mort, "Está bien, Mort. Probaste tu punto. Te creo", el dijo con seriedad, el casi se vuelve a poner los lentes por puro reflejo, pero decidí dejarlos aún lado, "No puedo negar lo que mis propios ojos acaban de presenciar. Lo que sea que esté cachorro hizo es verdaderamente asombroso y, aun más que un poco difícil de creer"

Mort asintió con una sonrisa satisfecha. "Si. No te culpo por no creerme. Estoy feliz de que ahora puedas ver claramente. Traje a Alex contigo por qué creo que esté tiene mucho más que ofrecer, y seguro que su habilidad será de gran ayuda para muchos en el futuro"

Fido asintió, comprendiendo la importancia de la habilidad de Alex y todo lo que esta podría significar para quienes necesitaran de su ayuda. "Parece que tengo mucho que agradecerte, chico", comentó Fido, con gratitud en su voz.

Alex sonrió con humildad y se acercó a Fido, "Me alegra poder ser de ayuda"

"Eres un buen chico, Alex", Fido le dijo con una pequeña risa. Este luego vio a Mort, "Dime Mort, cuántas personas saben de momento sobre este chico y las cosas que puede hacer?"

"Mi hija, mis nietas, y mi yerno" respondió Mort, pensando en las pocas personas en quienes confiaba lo suficiente como para contarles sobre Alex y sus habilidades. "Además de ti, claro está. No quiero que Alex se convierta en un fenómeno de circo o algo así, quiero mantenerlo seguro y protegido. El aún es bastante joven".

Fido asintió de manera comprensiva, sabiendo lo importante que era mantener a Alex a salvo y protegido de personas que pudieran querer usar sus habilidades de manera irresponsable. "Entiendo, Mort. No te preocupes, el secreto está a salvo conmigo. Además, tendría que estar ciego para no ver como Alex tiene el potencial para ayudar a muchas personas de manera positiva. Nisiquiera te voy a preguntar donde lo encontraste".

Mort sonrió, agradecido por la comprensión de su amigo.

Los dos amigos se quedaron en silencio por un momento, reflexionando sobre la increíble habilidad de Alex y las posibilidades que se abrían ante ellos. El futuro parecía lleno de promesas y oportunidades.

"Gracias por guardar el secreto, Fido", dijo Mort, con una sonrisa sincera en su rostro. Y empujó un poco a Alex poniéndole una pata en la espalda, "Alex, dile gracias"

"Oh, eh, Gracias"

"No hay de que, chico", Fido asintió solemnemente, "Gracias a ti, por mostrarme lo que puedes hacer. Estoy seguro de que ayudarás a muchos en un futuro".

"En un futuro?", Alex se mostró confundido, y esté vio a Mort, "Pero Mooooort~", el hizo un puchero, "Pensé que me habías traído a este lugar para ayudar a todos en este lugar como lo hice con Fido"

Fido levanto ambas cejas en alto y le dirigió una mirada a su amigo, "¿Lo trajiste para hacer eso?"

"Eeeehhh. La idea se me vino a la cabeza. Pero entonces, me puse a pensar que eso probablemente causaría un montón de caos", Mort explicó, y su hija les había echo prometer que no causarían caso con las habilidades de Alex, "Es decir- solo imagina como reaccionaria alguien que acaba de perder una pierna o un brazo si de repente le volviera a crecer uno"

El puchero de Alex se profundizó y este se cruzó de hrazos. El aún recuerda como no hace muy pocos minutos, Mort tuvo que detenerlo más de una vez de restaurar la extremidad perdida de alguien cada que esté veía a alguien a quien le faltaba una o más de una.

Si Fido hubiera estado tomando café, el estaba bastante seguro de que lo hubiera escupido al escuchar eso. "Pu-puedes hacer volver hacer crecer extremidades pérdidas!?", el pregunto con incrédulidad. Cuales eran los límites de las habilidades de este chico!?

"Si. Si puedo hacerlo", Alex dijo mientras aún se notaba algo molesto, "Pero Mort no me dejaba; dijo que tenía que conocerte primero antes de que decidiera hacer cualquier cosa"

"O-oh ...", Fido asintió, entendiendo la preocupación de Mort por la seguridad y el bienestar de las personas en el hospital. "Es ... Es comprensible. Sería un cambio muy repentino y drástico para muchos", comentó, pensando en las posibles consecuencias de una habilidad tan poderosa como la de Alex.

Mort suspiró, sintiéndose un poco culpable por limitar las habilidades de Alex, el pequeño solo quería ayudar. Se sentía horrible cada vez que lo hacía, "Lo siento, Alex. No quería limitarte, pero quería asegurarme de que estabas en un lugar seguro antes de usar tus habilidades de esa manera", explicó, acariciando la cabeza de Alex con cariño.

Alex sonrió reconfortado por las palabras de Mort. "Okey", respondió, aceptando la decisión de su amigo. Sabía que Mort solo quería lo mejor para todos.

Fido observó la interacción entre Mort y Alex, sintiendo una profunda gratitud por tener a Mort como amigo.

"Entonces, Fido. Tienes alguna idea de cómo Alex aquí pueda usar sus habilidades para ayudar a las personas en el hospital sin que esté llame demaciado la atención a el mismo?"

Fido reflexionó por un momento, el no podía dejar pasar esta oportunidad. Pensando en la mejor manera de aprovechar las habilidades de Alex para ayudar a los pacientes del hospital de forma discreta. Finalmente, una idea brilló en su mente.

"Bueno, creo que podría haber una forma en la que Alex pueda ayudar a los pacientes de manera efectiva y sin llamar demasiado la atención", Fido explicó, mirando a Mort y a Alex con determinación.

"¿Oh, en serio?", Mort se mostró intrigado, "¿Qué tienes en mente, Fido?"

Fido sonrió, "Bueno, como ya sabes, soy un pediatra. Y se de muchos cachorros en el hospital que podrían beneficiarse de la habilidad curativa de Alex. Podríamos coordinarnos para que este visite a los cachorros que más lo necesiten y los ayude de manera discreta, sin que sea necesario revelar sus habilidades a todo el mundo afuera o dentro de el hospital".

Mort asintió, impresionado por la idea de Fido. "¡Ha! Sabía que era buena idea decirte sobre Alex.", elogio Mort, emocionado por la perspectiva de poder contribuir en ayudar a los niños del hospital de esa manera.

"¡Eso suena increíble!", Alex festejo, "Estoy emocionado por poder ayudar a los niños del hospital", exclamó, con entusiasmo en su voz.

Fido rió suavemente, contagiado por la alegría de Alex. "Estoy seguro de que serás de gran ayuda para los niños, Alex. Juntos, podemos hacer una diferencia positiva en sus vidas", Fido afirmó con convicción.

"Vengan de nuevo mañana, y tendré algo preparado. Si realmente vamos a hacer esto, entonces nesecito preparar un montón de cosa para que todo salga bien"

Mort y Alex asintieron emocionados por la idea de Fido, sintiendo que estaban en el lugar correcto y que podían marcar una diferencia positiva en la vida de tantos cachorros.

"Seguro, Fido. Estaremos aquí mañana listos para ayudar en todo lo que sea necesario", aseguró Mort, con una sonrisa amplia en su rostro. Se sentía agradecido por la oportunidad de dejar a Alex utilizar sus habilidades para ayudar a los más necesitados.

"¡Gracias, señor Fido!", exclamó Alex, lleno de entusiasmo. Estaba ansioso por comenzar a ayudar a los niños y hacer una diferencia en sus vidas.

Con eso dicho, Alex y Mort se despidieron, y dejaron solo a Fido en su consultorio, para que esté disfrutará el poco tiempo libre que a este le quedaba antes de volverse a poner hacer consultas.

Con su visita en el hospital terminada, Alex y Mort se dirigieron a la casa de la hija de este para comentarle todo lo que había pasado.

~~>>(Continuara)<<~~