Vivianne se mantenía apartaba de como Jasper y Emmett jugaba un poco -Demasiado- sucio un videojuego sobre futbol soccer, los gritos y reclamos entre ellos perturbaban su paz interior que no tenía, pero quería hacerles creer que tenía.

- Hola, cariño - La saludo Esme- ¿Ya te cansaron los gritos de los chicos? - La mirada dorada de Esme estaba en su laptop

- Son unos niños, más cuando fueran en esa cosa - Se sentó sobre la mesa de trabajo de Esme- ¿Toda la tarde después de clases hacen eso?

- Hacen sus deberes escolares en minutos o segundos, así que se podría decir que sí - Poso su mano izquierda en el muslo de Vivianne- Si estas aburrida ve con las chicas o con Edward a casa de Bella

- Prefiero quedarme aquí - Miraba atentamente el plano de lo que parecía ser de una casa a su lado- ¿Para quién es la casa, corazón?

- Es un proyecto personal, no es una casa, es un bueno bloque para la casa - Aclaro- Las chicas tienen la idea de hacer algún pequeño bloque para nosotras solamente, una zona de spa privada

- ¿Spa? Es ese lugar donde llegan las personas a masajes y cosas así ¿No? - Miro a Esme confundida

- Exacto, contigo aquí sin llevar una vida tan humana y civilizada con mayor razón lo quieren - Acariciaba la suave piel pálida que dejaba en exposición la falda blanca- Sabemos que has evitado todo con lo humano exceptuando los humanos de los que te alimentas

- No tienen nada que me llame más la atención que su sangre - Admitió con una sonrisa inocente mientras se encogía levemente de hombros

Esme negó con diversión para seguir trabajando, para ella Vivianne era una dulce chica con un pasado inquieto por la batalla que se vivía en esos tiempos, no la culpaba de nada y mucho menos veía esa Vivianne sádica y salvaje que Laurent les había descripto.

- ¿Puedo tomar un lienzo junto con unos pinceles y pinturas? - Señalo las cosas de una esquina

- Toma todo lo que desees, cariño - Contesto siendo responda por un chillido emocionado de la mayor

Vivianne se bajó de la mesa para besar la mejilla de Esme emocionada e irse hacia donde estaban las cosas, tomo un lienzo de 20x20 junto a unos pinceles que creía que le servirían y unas pinturas.

Acomodo el caballete de madera y lo acomodo con el lienzo ya posado en él, se sentó en el taburete y se dejó llevar por lo intuitivo que era la paleta para mezclar las pinturas y lo que quería hacer.

- ¿Qué piensas pintar? - Le pregunto Esme desde su lugar

- No sé, siempre quise intentarlo, más cuando pasábamos por algunos museos y veía esas pinturas tan bonitas - Contesto mirando el lienzo blanco- Tal vez haga un bosque, hay que empezar con algo sencillo

Esme asintió en silencio para molestar la concentración de Vivianne, ambas se quedaron en silencio demasiado concentradas en sus asuntos, solo el pequeño sonido de las pinceladas de Vivianne y el sonido del teclado de Esme.

Emmett y Jasper junto a Alice y Rosalie habían entrado al despacho de Esme por petición de Vivianne cuando termino su gran obra maestra, Emmett no dudo en reírse a carcajadas mientras que el resto miraba con ternura y diversión a Vivianne que estaba encogida en sus hombros con una gran sonrisa inocente.

La gran obra maestra de Vivianne era todos los Cullen cazando mientras ella los observaba asqueada, lo que daba gracia a los cuatro era que las personas estaban hechas de palitos y bolitas al igual que los animales y pinos.

El sol era una bola con puntas, ambos amarrillos y tenía una carita enfadada, porque las nubes tapaban todo el cielo y no dejaba que sus rayos entraran e iluminara todo Forks como rara vez lo hacía. Sin duda, tenían a una niña de cinco años como pareja.

- ¿En serio me veo así? - Emmett señalo sus brazos

- Sí - Lo miro con inocencia- Solo es una lineada curveaba hacia arriba

Emmett se carcajeo ante su respuesta, Esme se reía entre dientes desde su silla, se levantó para ver la gran obra maestra de su compañera.

- ¿Cómo es que dibujaste eso y terminaste manchada del rostro, cariño? - Pregunto confundida

- Lo mismo me pregunto - Entrecerró los ojos pensando

Los cinco se rieron de su compañera, Rosalie hizo que soltara los pinceles para llevarla a su habitación y la limpiara, con toallas húmedas empezó a limpiar su hermoso rostro.

- ¿Te gusto mi obra de arte? - Le pregunto con diversión mientras agarraba la cintura de Rosalie

- Me encanto - Contesto con diversión sin dejar de limpiarla- Pero estoy igual de intrigada que Esme ¿Cómo terminaste manchada?

- Cosas de la vida - Sonrió con la punta de la lengua mordía entre sus dientes y se encogía de hombros

Era tan tierna e inocente esa versión de Vivianne enterneciendo demasiado a Rosalie, beso sus labios con cariño para seguir limpiando el rostro de la castaña, le limpio sus manos ya que también habían acabado ligeramente sucios.

- Eres como una niña con la pintura - Negó con diversión limpiando los últimos rastros de pintura de su mano derecha

- ¿Qué? La pintura es divertida y desestresa - Se excuso con el ceño ligeramente fruncido

Rosalie negó riendo entre dientes y abrazarla por sus hombros.

- Eres todo un caso, cariño

Vivianne la acerco más a ella para besarle con cariño, las manos de Vivianne se aferraban a Rosalie con posesividad mientras que la rubia la rodeaba con la misma posesividad.

- He estado con Edward y Esme, me faltan varios - Ronroneo ante el aroma de Rosalie- Me encanta como hueles rosas

- Tú apestas a sangre humana - Arrugo ligeramente la nariz- Te hemos dicho que, si sales a cazar, te cambies y bañes

- ¡Pero me da pereza! - Se quejo infantilmente- Yo me pongo romántica y tú te pones de mamona. Suéltame, me iré con Alice para que me de mis mimos mejor - Alejaba su rostro de Rosalie

- No seas dramática - Rodo los ojos con diversión- Hueles a miel y vino tinto

- ¿Vino tinto? - Miro extrañada a Rosalie- En mi vida humana no tome ni una gota de vino tinto, no tenía ni para un pan ¿Cómo mierda huelo a vino tinto?

- ¡Lenguaje! - La regaño Esme desde la sala

- Perdón, corazón - Sonrió nerviosa haciendo reír a Rosalie

- Hueles a vino y punto final - Beso castamente sus labios para soltarla

- ¿He? ¡No me sueltes, tonta! - Hizo que la abrazara por los hombros de nuevo- ¡Jasper, Alice y Esme salgan de la casa! ¡Emmett, Rosalie y yo haremos cosas inapropiadas!

- ¡Sí! - Celebro Emmett para aparecer en la habitación y quitarse la gran camisa de color gris que usaba dejando a relucir su gran cuerpo- ¡Mi momento de brillar ha llegado!

- ¡Adiós! - Se despidió Alice con diversión llevándose a Esme y Jasper con ella

- ¡No rompan nada! - Esme les pidió con severidad

- ¡No prometemos nada! - Los tres sonrieron con inocencia

Esme suspiro profundamente preparándose mentalmente para el desastre que podría encontrarse de regreso, Carlisle y Edward habían sido avisados por mensaje de texto así que se quedarían unas horas más en el hospital y casa de Bella respectivamente o llegarían a sus terrenos sin acercarse ni un poco a casa.

- El pantalón afuera igual, amor - Señalo la prenda de Emmett

- Como ordene la jefa - Emmett no dudo en sacar sus pantalones dejándolo totalmente desnudo

- ¿No usabas ropa interior? - Le pregunto Rosalie confundida mientras Vivianne se carcajeaba

- ¡Tenía que estar preparado para este gran momento! - Contesto alzando las manos en forma de rendición con una mirada inocente

- Ven aquí, mi hombre oso - Le ordeno Vivianne riendo entre dientes- Hay que quitarle esto a nuestra sexy chica - Metió sus manos por debajo de la blusa de Rosalie

Emmett apareció detrás de Rosalie acercando su entrepierna a ella, por primera vez en muchos siglos se sentía nerviosa, las manos posesivas de ambos la estaban agarrando con la suficiente fuerza para que se diera la idea que lo que pasaría no sería nada suave y romántico.