Mina se despertó el martes con una sensación de peligro en todo su cuerpo que le decía que se fuera.

Después de haber invitado una malteada a Sana por dejarla sola las primeras horas del lunes, se sintió sofocada que le fue imposible quedarse junto a ella más minutos que los quince que aguantó, y entonces Sana le dijo que podían verse al día siguiente en la preparatoria cuando esté mejor.

Mina no la dejó que la acompañara a casa, sino que Mina acompañó a Sana a su casa para luego irse a la propia y poder estar tranquila.

La ponía inquieta que alguien sepa su ubicación, aún cuando es Sana, eso solo da posibilidades de que alguien irrumpa en su paz.

La mañana de un martes no eran mejores que los despreciables lunes, era de un poco calor y se levantaba de mal humor por haber dormido con el hombro aplastado y que ahora le duela moverlo.

Se recordó a sí misma que tenía educación física ese día y suspiró porque tendría que escaparse si la querían obligar a alguna cosa que implique sacarse las prendas de más que tiene encima.

Desayunó, se alistó, corrió para llegar antes y esperó a Sana afuera, todo para que la menor no tenga que entrar con miedo o inquietud, aunque Mina estaba segura que la dejaron en paz después de lo que dijo e hizo el día anterior.

- No creí que llegarías tan temprano, Sharon - una voz ya conocida se hizo presente, Sana apareció detrás de ella mientras le sonreía con esa alegría usual en ella. Sharon solo asintió y sonrió aún cuando no se podía ver.

- Hoy pude levantarme a la hora correcta - divertida le dijo mientras ambas entraban inclinándose un poco ante el guardia y luego yendo directamente al aula donde darían matemáticas mañanera como siempre. Aunque Sana solo la acompañaba porque no tenía esa clase en la mañana como Sharon - Puedo decir ahora que nadie te tocará, hice algo necesario para que deje de pasar aquello - Sharon le informó mientras se sentaban en sus ya usuales asientos, juntas.

- ¿Tiene que ver el por qué Kai de último año me vio con odio y tenía notablemente nariz más grande que Pinocho por tener tanta venda encima? - la manera en que Sana lo dijo tan simple hizo reír a Sharon aunque paró cuando Sana se veía seria - No me gusta la violencia - dijo un poco nerviosa cuando se envolvieron en un pequeño silencio incómodo.

Sana no quería que Sharon se incomodara con ella o dejara de ser su amiga solo por una idea diferente, así que se arrepintió de decirle aquello de esa manera. Después de todo, Sharon la ha salvado, defendido e incluso vengado de los abusos que tenía.

Estaba bien sin decir nada, ahora sentía pena de sí misma.

- Está muy bien - Sharon le habló haciendo que Sana la mirara - Está bien que no te guste la violencia, ya que sí, no es buena en muchísimas ocasiones. Pero en estos casos la violencia se detiene con acciones legales, palabras o con más violencia, y yo aplico las últimas dos - levantó su dedo índice y medio - Lo hago porque no tolero los abusos, ya que un día yo fui como tú - a eso, Sana la miró desconcertada - Humillada, burlada, objeto de burlas, víctima de grandes golpes de los cuales tengo cicatrices que me durarán toda la vida, juguete de toda la institución - dijo todos las descripciones mientras ni se inmutaba mucho.

- ¿Lo fuiste? - Sana no podía imaginarse a Sharon siendo humillada, pues desde que la conoce es muy fuerte al punto de no inmutarse con nada de lo que hay a su alrededor.

- Sí. Hasta que llegó una chica y me salvó, me enseñó cómo defenderme y fuimos amigas - eso llamó mucho la atención de Sana.

- ¿Tenías amigas? - y no lo dijo con mala intención, solo que Sharon siempre se ve como muy apartada de las personas, como teniendo una necesidad de alejarlas.

Sharon la miró por un momento.

- Una amiga. Me enseñó a defenderme y luego pasó todo; yo no era una humillación, no era la burla, ni la 'lesbiana asquerosa' como me decían - Sharon miró por un momento a Sana para ver si había un rastro de disconformidad pero Sana parecía comprenderla. Tal vez los rumores eran ciertos - Yo solo era una estudiante más que ahora estaba tranquila.

- Como yo ahora, pero yo sin saber defenderme - Sana concluyó asintiendo un poco, luego sonriendo inocentemente hacia Sharon.

- ¡No te voy a enseñar a golpear! - entre susurró y gritó Sharon al ver esa sonrisa la cual desapareció por su respuesta. Sharon carraspeó - No vengo a enseñarte a pelear, esa parte me gusta más a mí - dijo desviando su cabeza a otro lugar. Sana rió de su comentario mientras asentía.

- Me siento dependiente a ti. Siento que en algún momento de irás y perderé a una compañía agradable tanto como mi seguridad. No quiero sentirme así - Sana confesó con una mueca, mirando como Sharon desviaba la mirada de nuevo.

- Te entiendo, pero ya te dije que no te preocupes. No haré que golpees a alguien como defensa propia. Haré que ellos no tengan ni el pensamiento de golpearte - dijo y la profesora llegó, avisando a Sana que las clases ya comenzaron y tenía que irse a la suya cuanto antes.

- Luego hablamos, Sharon - le dijo Sana recibiendo un asentimiento de la mencionada. Sana paró un momento y la miró con una expresión peculiar, ojos abiertos y labios apretados - Gracias - Sharon asintió sin saber muy bien a qué se refería pero dándose una idea.

Pero en su charla ninguna había hablado en el idioma japonés.

Lo que ninguna sabía era que una rubia, con lentes y un suéter de lana, estaba una mesa detrás de ellas cuando iniciaron y acabaron la charla, inevitablemente escuchando todo aquello y sintiéndose culpable después por escuchar.

Sharon incluso le dio una mirada como si supiera que escuchó todo, pero en realidad Dahyun solo estaba en pánico por si la descubrieron escuchando charlas ajenas.

En realidad, Sharon le había dado un vistazo pero para verla como todos los días hace, admirando un poco lo bonita que era Kim Dahyun, y luego desviando la mirada por un reclamo de su mente que le decía claramente que deje de hacer estupideces.

"Estupideces" que entre ellas dos, solo Dahyun no evitaba.

#♡>☆

La educación física fue la parte favorita de Mina en distintas ocasiones cuando ella y su amiga se la pasaban jugando alegremente, pero esos tiempos se fueron después del suceso que la marcó por completo.

La educación física se fue porque Mina tenía un total disgusto por vestirse con la ropa corta que mayormente se usaba, así que esa vez había comprado ropa para poder llevar debajo y que su piel quede sin verse a las demás personas, como debe ser según Mina.

Su piel marcada y asquerosa.

Sana le hacía compañía y daba ánimos. Ninguna de las dos había decidido continuar con la charla de la mañana, simplemente pasaron el almuerzo hablando de cosas comunes pero entretenidas mientras comían un poco. Ahora la japonesa menor le hacía compañía mientras estaban en los vestidores, obviamente esperaron a que estuvieran desocupados.

- No quiero salir - Sharon confesó sintiéndose segura de que ya no verán su cuerpo, pero nerviosa por la atención que recibirá, lo que será mucha si es sincera consigo misma.

- Te acompañaré y apoyaré, Sharon - las palabras lindas y suaves de Sana la hicieron salir haciendo que Sana la mirara y estudiara completamente.

Sana tenía que admitir que Sharon tenía un aparentemente buen cuerpo, solo que la mayor no le gustaba que quedara expuesta su piel y por eso lo tapaba. Sharon le explicó antes, que el problema es su piel, no la forma de su cuerpo.

Sana no se sintió identificada, pues para ella el problema en sí misma era la forma de su cuerpo, ya que había estando aumentando de peso en la semana.

- Estás muy bien. Nada se ve y podrás moverte bien si te dicen que hagas ejercicio o que participes en el juego - Sana la animó mientras le sonreía en grande, notando que la entrenadora de vóleibol ingresaba y les decía que se apresuren - Ahora vamos.

Sharon se miró a sí misma en un espejo del baño antes y pudo ver sus prendas, quedando satisfecha con la vista.

Tenía mallas hasta la cintura. Su torso tapado con una manga larga con cuello de tortuga, abajo de la camisa del uniforme de educación física. Combinaba el negro de la blusa manga larga junto a la blusa holgada color naranja. Sus manos estaban tapadas con sus usuales guantes sin dedos para poder tomar cosas sin que se le resbalen. Sus pies estaban cubiertos con los mismos zapatos típicos y cómodos que ella tenía siempre.

Su figura marcada no se veía muy bien porque la blusa del uniforme era holgada y no se ceñía a su cuerpo, algo que le alegraba un poco. Los pantalones cortos hasta un poco arriba de la rodilla le daban una sensación de comodidad y a la vez de sentirse fresca.

Todo estaba en su lugar, mucho más aquel cubrebocas y los lentes negros

Casi nada de su piel se veía.

Sharon estuvo muy satisfecha y ya salió de los vestidores para parar en la cancha de vóleibol dejando a la vista a la conocida Sharon.

La Sharon a la cual todos voltearon a ver con la necesidad de saciar la curiosidad que tenían siempre pero nada de eso fue posible, ya que Sharon estaba completamente tapaba como siempre y ahora lo nuevo era que se le veía el cabello negro completamente.

Su cara era totalmente tapada y su cuerpo igual, lo único que pudieron curiosear los presentes fue que su cuerpo estaba en forma, en una muy buen forma.

- ¡Ay, por favor! ¡¿Hasta en física?! - algunos rieron por el comentario de una chica aleatoria entre los estudiantes.

Sharon ignoró a la típica payasa de la clase, y se colocó lo más alejada de todos pero bastante cerca del grupo para seguir instrucciones de la entrenadora.

No entendía por qué estaban tan obsesionados por querer verla, a veces los adolecentes podían ser muy chismosos.

- Sharon, me alegra que pudieras salir - la entrenadora le comentó con una sonrisa amable, a lo que Sharon asintió, con sus manos en los bolsillos y su vista directamente en la entrenadora - Espero sea de tu agrado participar en vóleibol, porque es exactamente lo que vamos a jugar. ¡Den diez vueltas a la cancha y estirense un poco! - para la suerte de Sharon, todos hacían lo que la entrenadora les dijera.

- Es porque es muy amable y perfecta, todos la quieren aquí - Sharon no sabe como Sana pudo ver la confusión en el rostro pero la chica la sorprende cada día - ¿Estarás bien interactuando con los demás?

- Me enternece tu preocupación, pero no soy antisocial. Sé como tratar con amabilidad, educación y respeto a los demás, puedo hacerlo por hoy - Sana asintió un poco avergonzada por su propia pregunta pero sacudió su cabeza y sonrió.

A Sana, la educación física le gustaba, pues hacía ejercicio y tal vez podría bajar un poco de peso.

Aún soportando que algunos la excluyeron muchas veces.

Después de unos minutos ya todos estaban terminando las vueltas aunque algunos se libraron de hacer las diez completas aprovechando cuando la entrenadora no prestaba atención a ellos.

Sharon las había hecho junto a Sana siempre a su lado, porque no se iba a permitir que alguno quiera aprovechar el tumulto para hacerle algo a Sana y salir ileso al confundirse con los demás estudiantes.

Solo tuvieron dos minutos para estirar brazos y piernas ligeramente para cuando la profesora dio el aviso de que escogería a dos estudiantes y estos elegirían al equipo.

- Que no me toque a mí. Que no me toque a mí. Que no me toque a mí - Sharon se murmuraba para sí misma, un murmuro que algunos alrededor confundieron con rezos pero Sharon en lo menos que piensa es en rezar - Que no me toque a mí - Sana la miraba divertida a su lado.

- Sharon y Hwang Hyunjin son los que elegirán los integrantes de cada equipo - Sharon se maldijo mentalmente y miró a Sana, quien no se burlaba, sino que le sonreía en apoyo.

Sana era muy diferente a su amiga de Japón, su amiga de allá ya se hubiera burlado severamente de su mala suerte.

Sonrió ante el recuerdo de su amiga, pues esta podía burlarse de ella diciéndole 'Jesús', 'Jesucristo' o 'Cristo' sin problema solo para hacerla reír, no para molestar.

- ¿Cara o cruz, Sharon? - y estuvo tan metida en el recuerdo que no se había dado cuenta que estaban haciendo a la suerte el que eligiera primero.

Sharon apuntó a Hyunjin para que elegiría primero.

- Cara - eligió el chico sin mucho pensar.

Desde hace días estaba siempre con la mirada perdida y con una expresión rara, en el punto de vista de Mina. Una expresión entre seria y curiosa, como pensando demasiado a todo minuto.

- Sharon 'cruz', y Hyunjin 'cara'.

La entrenadora lanzó la moneda y cayó cruz, haciendo que Sharon tenga un leve recuerdo al escuchar la palabra 'cruz'.

- Bien. Sharon elige primero - y obviamente fue Sana a quien primero eligió para su equipo, nada nuevo y nada inesperado, pero aún así Sana tuvo una sonrisa alegre a la elección, ahora solo esperaba que Sharon no eligiera a alguien que quiera tumbarla en el juego.

Afortunadamente para Sharon, todos tenían un gafete con el nombre propio en la parte derecha del pecho.

Y Afortunadamente, fueron mayormente chicas y algunas que nunca se le acercaron a Sana para nada ni le dieron segunda mirada. Sana prefería que fueran las que la ignoraban, que las que la molestaban.

Dahyun y Chaeyoung estaban entre el equipo de Sharon, pues esta no las conocía pero les veía una sensación de que nunca molestaron a Sana y que sabían jugar bien. Tzuyu fue la única entre el trío de amigas que quedó en el equipo de Hyunjin, pues el chico rubio la observó muy apta para su equipo.

Hyunjin mayormente eligió a hombres, a sus amigos o a chicas fuertes y altas. Sharon miró esa escena que estaba del otro lado de la red y suspiró porque era absurdo.

Sharon miró a su propio equipo y se podía decir a simple vista quién era el ganador.

El equipo de Hyunjin se veía en las de ganar, pero Sharon no lo veía así.

Ni la entrenadora.

- ¿Te decidiste en elegir a los más débiles o qué? - uno de los dos chicos que había allí habló, sin estar muy conforme con la elección, pues él quisera ir al otro equipo mejor.

- Hwang sigue siendo muy tonto - dijo sin inmutarse a las quejas que empezaron entre algunas pocas chicas y los dos únicos chicos. Callaron y la miraron como si hubiera dicho algo prohibido - Eligió los que tienen masa muscular mayor pero él no sabe jugar, ni manejar bien la pelota - si Sharon recordaba, a Hyunjin solo le gustaba jugar al futbolito en la tienda que tenía su tío, es el único recuerdo de Hyunjin jugando con una pelota.

- ¿Cómo sabes eso? - con la pregunta de Son Chaeyoung, Sharon se dio cuenta que hasta Sana la miraba con curiosidad.

- Se le ve - cortamente contestó - Eligió a los de más fuerza, no a los que saben jugar. Yo elegí a los que vi que parecían interesados en jugar y, por lo tanto, sabrían jugar más, ¿o me equivoco? - no, no lo hacía.

Todos estuvieron de acuerdo aceptando aquello, pues allí a todos les gustaba el deporte y jugaban en los descansos a veces.

- ¿Quiénes se quedarán en la banca en este primer juego? - preguntó uno de los chicos. Sharon tenía entendido que serían tres juegos, y se intercambiaron los que perdieran uno, con los que estuvieran en la banca.

Había catorce en su equipo así que habría grupos de siete que estarían en la banca. Eran muchos para estar en un solo grupo para todos los juegos.

- ¿Quiénes tienen las energías para el juego que ya empezará? - algunos levantaron la mano pero otros no parecían muy convencidos de jugar el primer juego - Ustedes cinco que no levantaron la mano estarán en la banca junto a otros dos - ordenó muy seriamente, sin mucha preocupación. Ya sabía que le tenían miedo.

- Puedo ir a la banca en la primera - Sana se ofreció pero Sharon la miró inmediatamente.

- Entonces yo también - dio por condenado mientras se dirigía a la banca junto a Sana y los cinco allí, los cuales eran Lily, una llamada Sullyoon, otra pelinegra llamada Jiwoo, la única chica pelirroja llamada Seulgi, y otra tal Joy.

En grupo que jugará estará compuesto por dos rubias, o sea Dahyun y Chaeyoung, también una pelicorto de nombre Ryujin, dos amigas llamadas Chaeryeong y Lia, y los dos chicos, Felix y Jeongin.

- Pero eres la capitana de este grupo - una chica que jugaría el primer juego le comentó a Sharon.

- ¿Hay alguna regla que me prohíba estar en la banca el primer juego? - sin voltear, Sharon preguntó a nadie en específico.

- ... No - la misma chica le contestó.

- Entonces tu argumento no es válido - dio por finalizado y la entrenadora preguntó si ya estaban listos todos, a lo que respondieron afirmativamente mientras los siete adolecentes avanzaban hacia un lado de la red.

- ¿Tú crees que ganemos? - Sana le preguntó a Sharon cuando se sentaron juntas, un poco alejadas de las otras cinco que se pusieron a hablar entre ellas.

- Ya veré. Si saben comunicarse entre ellos, sí - Sharon no era muy competitiva, pero deseaba ver la frustración en Hwang por lo menos esa vez, demostrándole que equivocado estaba.

- ¿De dónde conoces a Hyunjin? - Sharon volteó de inmediato a la pregunta de Sana - No me mires así. Puede que no te conozca mucho pero a Hyunjin se le ve muy atleta que incluso puedo decir que los balones puede manejarlos como sus propias manos. Aunque tú digas lo contrario, lo parece en serio - Sharon volteó hacia el chico mencionado.

Notaba que este sí parecía atleta con buen cuerpo pero a la hora de la cancha se le veía indeciso y muy alejado de la pelota, solo metiéndose cuando los demás no podían pero huyendo cuando venía hacia él.

Sharon sabía que era muy dramático y podía hacer hasta un berrinche si se le torció un poco una uña, a menos que haya cambiado esa manera de ser en los últimos años.

- Él estuvo en Japón cuando yo era menor, fuimos amigos por un buen tiempo y luego se mudó. Pensé alguna vez que me alegraría de verlo de nuevo si de casualidad me lo encontraba, pero logró decepcionarte mucho cuando lo vi en el pasillo pateando tus cosas - comentó mientras prestaba atención al juego - No te dije que lo conocía porque creí que pensarías que era amiga de él, como Kim - ahora dirigió su mirada a la última mencionada, notando que parecía divertirse junto a su amiga mientras iba detrás de la pelota cada vez que se dirigía cerca de ella.

- Hay diferencia, Dahyun lo ayudó de tus golpes. Tú lo golpeas y Dahyun lo ayuda - Sharon asintió entendiendo que no necesitó ocultarlo - Se me hace extraño que no te reconozca - a eso Sharon tragó saliva duramente.

- Él no me conoce como Sharon, ya que Sharon es mi nombre americano, de cuando vivía en Estados Unidos, y él me conoce como el nombre que usaba en Japón. No te lo voy a decir porque no me gusta - Sana asintió a su corta explicación. Hoy aprendió otra cosa nueva de Sharon.

Ocultaba muchas cosas, pero sabía que no era su asunto.

Y Sharon descubría que era realmente buena para mentir, porque no era que no le gustase llamarse 'Mina', sino que no quería que nadie lo supiera.

Su amiga de Japón se lo había dicho varias veces, que las mentiras le salían como palabras sinceras, pero Sharon nunca lo supo en realidad ya que nadie más se lo decía y tampoco mentía muy a menudo.

- Te conoció antes de que decidieras taparte entera - Sana dijo, sin sonar como pregunta, era una confirmación.

- Sí, por eso tampoco me reconoce - y terminó la charla, ya llegaba el turno de ellas ya que el grupo de siete que jugaba había perdido contra los del equipo de Hyunjin.

Sharon a muy diferencia del otro grupo, les preguntó en qué eran buenos para poder colocarlos en diferentes zonas de su lado. A Sharon le gustaba ganar o aceptar su derrota sin ninguna queja, pero ahora estaba intentando ganar porque se dio cuenta que todos del otro equipo estaban burlándose de su propio equipo con muecas, y ella no defraudaba a su propio equipo.

- Los idiotas parecen más idiotas que de costumbre - la chica llamada Joy comentó sintiendo un enojo por su pecho al ver las burlas hacia ellas, pues todas no tenían complexión muy musculosa ni aparentemente fuerte, pero sabían jugar bien.

- ¿Ustedes también se enojaron con ellos? - Sharon se dirigió a las que estaban en las bancas, quienes asintieron mirando con leve molestia al equipo de Hwang - No debieron - el duro comentario de Sharon los hizo molestar más.

Solo Dahyun y Chaeyoung parecían hablar entre ellas y poner atención, sin molestarse y solo escuchando.

- Oh, pues rara, no somos robots para ser inmutables como pareces serlo tú - la chica Seulgi le dijo, ella no era muy busca problemas pero le enojaba que Sharon le diga lo que debe y no hacer.

- ¡Maldita puta estupida! - Sharon exclamó en alto dejando todo en silencio por su tono enojado y alto. Sana la miró desconcertada y con el ceño fruncido en una leve molestia.

El equipo la miró por un momento y se miraron entre sí, luego miraron a Sana cuestionandole con la mirada.

Lo que dijo Sharon fue en otro idioma. Ninguna persona allí, a parte de Sana, entendió lo que dijo.

- No somos bilingües, ¿qué dijiste? - Joy le preguntó con hastío, pues notó que el tono que usó Sharon fue grosero.

- ¿No me entendiste, verdad? - Sharon se dirigió a Seulgi.

- No - la pelirroja le contestó.

- Pues eso puede ser un ejemplo para las burla e insultos que les dan aquellos - Sharon apuntó al equipo contrario que estaban hablando con la entrenadora de algo - Te acabo de insultar en japonés, pero como no me entendiste no le diste un significado para tus emociones y tus emociones no reaccionaron.

Se dirigía a todos en general, pero miraba a Sana ya que podía ser un consejo para ella.

- Imagina que te hablan en otro idioma. Sus insultos no significan nada para ellos más que molestarte, tú eres la que le das un significado y haces que tus emociones reaccionen. Ignora y deja que se ahoguen solos en su odio innecesario mientras vives en tus propios asuntos, en este caso, jugar - Sharon se dejó llevar, soltando cada palabra a como recordaba.

Su amiga le había dicho esas mismas palabras cuando Mina le confesó que no soportaba la palabras groseras y ofensivas de los demás, aunque su amiga no la insultó en japonés como ella hizo con su equipo, sino en coreano, ya que en aquel tiempo Sharon no sabía coreano.

Ni siquiera se daba cuenta de que la atención que tanto odiaba estaba en ella, solamente que todo parecía darle recuerdos, como diciéndole que siempre la perseguirán.

Y eso la hacía perderse en su mundo un rato.

- Wow. Eso fue... profundo, pero muy cierto. Creo que es mejor divertirnos y que el ganar quede como segundo objetivo, ¿no, nueva? - Jiwoo se dirigía con un poco de diversión a Sharon, como un tipo broma y burla pero de la amigable, a lo que Sharon asintió.

- Exactamente.

- ¡Chicas, ya empieza. Dejen de charlar y a acomodarse! - la entrenadora les hablaba a lo que, más motivadas, se posicionaron donde eligieron - ¡Les repito que quien rebase con tres partidas ganadas al contrario, será el equipo ganador! ¡Esfuercen ese talento! - las animaba.

Y efectivamente, ganaron seguidas solo por concentrarse en el equipo y no en enojarse por las burlas, enojos y insultos que lanzaba el otro equipo.

Sharon tuvo razón.

Sana miraba eso y no evitaba pensar:

¿Por qué me viene una sensación de preocupación?

. . . . .

Ahorita les vengo a avisar, que la relación MIHYUN se desarrolla un poco adelante. Esto se basa mucho en los problemas de Mina y cómo trata con ellos, así que las interacciones entre ellas son pocas por la actitud insegura de Dahyun, y la personalidad de evitación que Mina desarrolló hacia los sentimientos más allá de amistad.

Así que probablemente el primer beso o la relación amorosa esté más allá del 20 o 30 capítulo, pero en estos habrá algunas interacciones que las harán avanzar.