Capítulo 27
-¡M..Me rindo!
Solté de inmediato a la chica con la que estaba entrenando, ella se gira agotada pero yo le tendí la mano sonriendo.
-Luna, realmente se ha vuelto más fuerte -sonríe agarrando mi mano.
-Gracias... Me esfuerzo para que así sea -respondí.
Ella se puso de pie y se fue a tomar agua mientras que yo agarraba la pequeña toalla que traje para limpiarme el sudor.
-G..Genial, Luna... Jamás he visto a otra Luna pelear como usted.
-¿Huh? -miré sorprendida a quien había llegado- ¿Diana? Hace tiempo no sabía de ti ¿cómo estás?
-Muy bien, a usted se le ve mucho mejor -me sonríe-. Y por suerte no la atropellé esta vez.
Me reí al igual que ella pero entonces vi cuando me tendió una botella de agua que parece ser recién comprada.
-Gracias.
La tomé y la abrí para beber del contenido que definitivamente me hizo sentir mejor luego del entrenamiento de hoy.
-Oye, ¿qué pasó contigo? -pregunté.
-Pues ahora mismo estoy en unas pequeñas vacaciones de la universidad y quise venir a visitar la manada.
-¿Pudiste entrar? Eso es genial. Jacob me dijo que seguro llevabas prisa esa vez por los exámenes de admisión.
-Exacto, fue por eso y por suerte pude ingresar a una en la ciudad humana.
-Te felicito, es un gran logro.
-Gracias Luna, significa mucho viniendo de usted.
Ambas sonreímos con amplitud hasta que vi como ella abría los ojos de par en par. Mira hacia un lado pero antes de darme cuenta ya no estaba junto a mí, sino que ahora estaba en los brazos de Travis. Él había ido a guardar las cosas que usamos hoy para el entrenamiento... pero llegó justo en el momento para conocer a su Mate.
-Mía... -gruñe sonriendo.
-¿Q..Qué...? ¿C..Cómo? ¿L..Luna...? -me mira sorprendida pero sin poder quitarse a Travis de encima- ¿D..Delta, ha..habla en serio?
-¿A caso tú no lo sientes también? -Travis sujeta su rostro con una mano-. Jamás confundiría el aroma de mi Mate.
-E..Esto es... ¿c..cómo? ¿Ah?
Diana se veía realmente sorprendida pero se notaba que estaba feliz por encontrar a su Mate, aunque estaba segura que nunca se esperó que fuera el Delta de su propia manada. ¿Jamás se habían topado antes?
-Entonce es así -James se acerca de brazos cruzados-. Felicidades amigo.
Travis se endereza aún sin soltar a Diana. Nos mira sonriendo pero a ella con un brillo especial en los ojos.
-Bueno, yo los dejo... Tengo que irme a casa -mencioné guardando mi toalla y la botella en mi bolso el cual me coloqué colgado en el hombro-. Nos vemos.
-Adiós Luna.
Salí de allí para empezar a caminar hasta casa. Estaba agotada lo único que quería hacer era tomar una ducha y desmayarme por un día entero por lo menos.
Abrí la puerta principal de la casa pero me quedé inmóvil al ver a alguien desconocido en la sala viendo un libro. Me mira y sonríe de lado antes de dejar el libro a un lado.
-Pero bueno... -se acerca a mí-. No me esperaba que alguien tan guapa como tú llegara, ¿cómo te llamas, hermosa?
-Am... Christina -respondí confundida mientras lo observaba y guardaba mi distancia- ¿Tú quién eres? ¿Qué haces aquí?
-Un poco brusca pero me gustan de esas... -comenta haciéndome hacer una mueca. Agarra mi mano por sorpresa y la acerca a sus labios como si fuera a besar mis nudillos-. Me llamo Sebastián, es un gran placer conocerte.
-Sí... quisiera decir lo mismo -aparté mi mano- Aún no me dices qué haces aquí.
-Pues verás, bella dama, yo soy...
-Sebastián. -la voz de Jacob me hace relajar. Saber que está aquí es un alivio para mí.
-¡Primo! Justo me estaba presentando con la bella Christina.
Jacob pasa por su lado y me toma por la cintura. Viéndolo mejor y su forma de actuar... realmente podría ser pariente de Madelane, aunque eso sería algo raro para mí y Jacob... ¿Qué les pasa a los primos de ahora?
-Realmente te has conseguido un buen partido, te has lucido con ella -comenta Sebastián.
-Es mi Mate, Sebas... -le advierte Jacob.
-Lo sé, tiene tu olor muy impregnado en ella... -sonríe con tanto cinismo que me sorprende.
¿Aún sabiendo que soy la Mate de su primo y que estoy marcada como él por mí... coquetea conmigo? Que idiota.
-Entonces sabrás guardar tu distancia y comentarios.
-Sabes que cuando veo una obra maestra no puedo no halagarla -me mira y guiña un ojo, hice una mueca y Jacob gruñe molesto.
-Sebas...
Esto se volvió tan tenso y cansado para mí, siendo que yo solo quiero ducharme y dormir ahora, me giré para ver a Jacob.
-Estoy cansada... Iré a descansar ¿Okey?
Jacob asiente. Miré a Sebas de reojo y besé intensamente los labios de mi Mate haciendo reír al primo.
-Nos vemos -murmuré contra sus labios.
Jacob sonreía y yo a él antes de mirar a Sebas de pies a cabeza y despedirme con un gesto de cabeza. Me fui escaleras arriba y entré en la habitación. Finalmente... descanso.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro