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Meiling se abría a paso por el camino, mientras avanzaba. Tenía la cabeza firme y caminaba sin dar ningún paso intermitente.

Pasaba por el lado de los demás, cómo Rick, Lori o Shane o simplemente el círculo de adultos que debatían entre ellos, solo caminaba sin mirar a su alrededor.

Solo tenía un propósito: su mochila.

Entró a su tienda de acampar con cautela y tomó su mochila para finalmente extraer de ahí: su pistola.

Lo miró sin decir nada, la había guardado ahí todo este tiempo, probablemente desde que llegó al campamento. Simplemente por el hecho de que no lo necesitaba o porque el lugar estaba sin caminantes.

Pero ahora estaban en peligro, y más caminantes podrían aparecer.

Así que considero que era momento de usarla.

Una exhalación se abrió paso a sus labios y se preocupó al pensar que Lori o cualquier otro adulto tendría que quitársela. Nadie sabía que la tenía hasta ahora.

-Meiling, debo limpiarte la herida- se oyó la voz de Lori entrando a su tienda, lo cuál de inmediato la niña lo escondía en una parte de su camisa.

Por suerte, Lori no lo había notado.

-Esta bien.- asintió, cuando la mujer se retiró. Esta suspiró con pesadez y al sacarla nuevamente, la vió con algo de repulsión.

No era momento de usarla.

Por ahora.

[...]

Salió de la caravana de un gran salto, ya cambiada de ropa, con un overol y una camisa blanca y chamarra café, con dos coletas de cada lado colgando, sujetados por dos listones celestes, hechos de seda.

Para ella, le había ocurrido una tragedia, pues ayer, en ese mismo dia sus lentes se rompieron y su ropa favorita se llenó de sangre.

Amy había muerto. Estaba triste, pero no había llorado por su muerte, porque no sabía como llorar ahora mismo.

¿Cuando fue la última vez que lo hizo?

Cuando lo recordó, y cuando lo hizo desvío el tema al instante, precisamente fue el tema que trató de evitar siempre.

Su madre.

Solía llorar por las personas que eran muy importantes para mí, y eso, eso solo significaba una cosa. Que apesar de todo su maltrato, insultos y comentarios hipócritas hacía mí, quería a su madre.

Desde su mente y pensamientos, la perdonaba aunque ella no tuviera idea.

¿Será que lo hago por que le enseñó a perdonar a las personas?

¿O será locura y puras tonterías?

Su historia solo era un desastre, zarandeando entre las penumbras de dolor y recuerdos, un sinfín de motivos por las que quiero olvidar. Su madre solo era la viva imágen de la hipocresía

A veces me pregunto ¿hay alguien ahí contando su historia?

¿O seré yo?

Quizás si estés tu ahí, oliendo cada rincón de mi vida como una pequeña entrometida. Quizá tenga ganas de detenerte, pero no. No opongo resistencia

Sus ojos eran azules, desconcertados y rasgados, con una pizca de sufrimiento en ellos, no eran apagados, eran brillantes. Y hacía lo posible para que nadie los apagara. Nadie ni yo

Porque a veces puedes hacerte daño a ti mismo

Y sin darte cuenta

[...]

Lori se tardó una hora y media en desenredarme todo el cabello, probablemente no me había cepillado el cabello por una semana entera, fue fatal.

Todavía seguía traumatizada por el de desastre de ayer, el corte de su labio me ardía y lo único que pude hacer para limpiar la sangre fue probarla con su propia lengua

Y me supo bien.

Me sentó en mi tronco, siempre solía sentarme en el mismo, todos los días, con una sonrisa alegre plasmada en mi rostro, pero ahora... solo veía como los demás quemaban los cuerpos de los errantes.

Odiaba demasiado a los errantes, tanto, tanto, tanto. Eran mis mayores enemigos

Ese solo es el comienzo.

Ya llegará el día en el que mires a una persona con más odio del que ya sientes, cuando te arrodilles ante él.

Deseaba ponerme de pie para ayudarlos, sin importar que mi ayuda sea poca ¿y por qué no lo hacía? Simple, soy una debilucha

Piernas de alambre y brazos de perchero, Dios, debía comer más seguido.

En la ciudad, el grupo de Rick encontró un pequeño grupo, según él, que aparecieron de la nada y por poco, Rick los mataba al pensar que eran caminantes.

Eran cuatro, de ellos conformaban un hombre, de aspecto robusto y piel morena llamado Tyreese, y si que era muy fuerte, luego venía su hermana Sasha, ambos hermanos eran muy buen equipo, ahora la hija de Tyreese, llamada Julie, junto con su novio, Chris, aunque Tyreese dijo que solo estaban juntos, no tuvieron un tipo de afirmación si lo eran o no

Eran cuatro personas más a nuestro grupo, quién sabía si alguien de ellos duraría menos que el otro. Veía como Tyreese llevaba los cuerpos de los errantes a el fuego, llevaba cada uno a su hombro, con tanta facilidad.

-¿Te mordieron?

-No, me hice un rasguño en el ataque.

-¡Te mordieron!

-Estoy bien

-¡Muéstrame, Jim!

Todos estábamos atentos a la conversación, y algunos como Daryl o T-Perro esperaban para poder entrar en acción.

Jacqui rápidamente se alejó de el para exclamar lo siguiente

-¡Lo mordió, un zombie mordió a Jim!

Los hombres se acercaron a el hombre, rodeandolo por completo, logrando intimidarlo.

-¡Vamos, muéstranos!- gritó Daryl, tomando su pico, Jim en un intento inesperado de que no le tocaran, tomó la pala y se volteaba por todos lados, desesperado.

-¡Vamos Jim, baja eso!

En un descuido, T-Dog corrió hacía el con prisa y lo tomó de los brazos, Daryl se acercó a él y le levantó la camisa rápidamente, dejándose ver una mordida en su abdomen, los dientes estaban bien marcados y la sangre se escurría por ahí

Jim estaba mordido

El moriría

Sin embargo, el hombre parecía estar tranquilo, incluso se repetía "estoy bien"

Y no lo estaba.

[...]

-¿Quieres dulces, niño?

-Suenas como si estuvieras apunto de secuestrarme.

-Si- asentí con la cabeza, él me vió con miedo notable- pero no lo haré. Ten- le entregué unos dulces.-

Apartada, observaba como los adultos eran parte de ese pequeño círculo, tomaban decisiones y debatían entre ellos, buscando soluciones de como poder ayudar a Jim.

Eso a mí personalmente me parecía imposible y solo perdían su tiempo, pero no por ser egoísta, solo era la cruda realidad.

Y como había dicho

"El campamento no estará seguro por siempre"

-En el ataque del campamento, escuché que me llamabas Mei- volví a hablar.

-Si, es un apodo. Tu nombre es muy largo. ¿Te gusta?

-Si, es bonito. Nadie nunca me había llamado así.

-Entonces seré el primero- sonrió con ternura.

Alcé una ceja, viéndolo. Pero después no dije nada más.

Carl volteó para verme, con el rostro confundido, viéndome comer, se veía demasiado preocupado por la situación en el campamento, a diferencia de mí, yo estaba más tranquila.

Él frunció sus ceños y como Jorge el curioso que es, vió dentro de mi bolso, logró visualizar mucho más dulces, galletas y otras cosas más, aparte de mis latas de comida que solo las consumía yo.

-¿Por qué tienes tantos dulces?

-¿Acaso eso importa?- el se encogió de hombros- una vez le robé dinero a mí mamá, se lo merecía por haber sido mala conmigo ese día- por un segundo me arrepentí de haberla mencionado, pero ya era tarde, Carl ya se encontraba relativamente confundido.

-¿Por eso la mataste?

Analicé su pregunta por unos segundos, sin poder creerlo, fruncí mis cejas, ligeramente molesta, girando lentamente mi vista.

-¡Yo no maté a mi madre!

-Yo ví que le clavaste un cuchillo en su cráneo.

Me quedé por unos segundos en silencio, pero volví a protestar

-¡Ella ya estaba muerta!

-Si entonces estaba muerta, ¿por que le hiciste eso?

Dejé de fruncir mis cejas, suavizando mi rostro, desesperada por buscar una explicación, solté una bocanada de aire, viendo a otro lado de reojo.

Comencé a balbucear tonterías que ni yo misma entendí. Carl me miró como una completa rara, levantándose de su asiento, viéndome confundido, y algo temeroso.

Retrocedió unos paso, quizá correr hacía su madre, quizá huyendo de mí

Pero antes de eso, me levanté de mi asiento, tomé su brazo con brusquedad y lo jalé hacia mí, impidiendo su paso, con fuerza. El soltó un quejido de dolor, le estaba apretando demasiado fuerte y le había arañado el brazo, pero no me importaba en lo absoluto en ese momento.

-¡Carl!... ¡Carl!- lo llamé enfadada- ¡ella era un caminante, maldita sea, quería comerme!- gruñí

Pensé, por un momento, que si correría a su madre, no volvería a acercarse a mí, nunca más.

Y yo me volvería a sentir sola.

Quizá si el no me importara, lo dejaría huir de mí

Pero no lo hice

Carl dejó de forzarse, dejó de intentar zafarse de mi mano.

-Le hice eso porque iba a atacarme, no la maté porque quise, fue necesario- terminé, suspiré y me acerqué un poco más a el, ahora algo tranquila- fue necesario porque si no lo hubiera hecho.... ahora mismo debí haber estado muerta

El me miró por unos segundos, con remordimiento. Si quería una explicación, ya se la había dado ¿no?

-¿No me estás mintiendo?- formé una mueca confusa, ¿por que me preguntaba eso? ¿no era obvio?

-Por supuesto que no...

Mentiras.

Puras mentiras.

Meiling Rockwell es una mentirosa.

[...]

Daryl intentó matar a Jim

Cosa de todos los días claro...

Y obviamente que fue detenido por el Sheriff al apuntarle a su cabeza con su arma, recordándole "no matamos a los vivos" y el comentario que hizo Daryl me dio tanta gracia "es gracioso que me lo diga un tipo que me está apuntando a la cabeza"

Después de unos momentos, Amy despertó en un caminante, Andrea no se exaltó ni nada, estuvo sumamente tranquila cuando vió sus ojos, los ojos azules de Amy ya no eran los mismos, eran grises y apagados, daba tanta lástima verla así

Andrea asumió su responsabilidad, tomó su pistola y la mató, acabando finalmente con ella

Era de día, todos estábamos sentados en troncos, rodeando la fogata que yacía apagada

Escuché varios pasos, al igual que todos. El narizón Walsh y el señor Woody (Menudo dúo eh)

-Estuve... estuve pensando en el plan de Rick. Oigan, no hay garantías en ningún caso; soy el primero en admitirlo- aseguró, mientras levantaba la cabeza para ver a su amigo- conozco a este hombre desde hace mucho y confio en su instinto. Creo que lo más importante es que todos estemos juntos- hizo una leve pausa- Así que... los que estén de acuerdo, salimos mañana a primera hora ¿está bien?

[...]

Narrador omnisciente.

La niña corrió hacía el auto, para subirse al cofre y sentarse en este, junto a Carl y Lori.

Sonrió dulcemente, mientras se retorcía de dolor por dentro, apenas había despertado de su siesta y sus piernas le dolían, al igual que su estómago. Era algo común de ella, una niña muy débil y desnutrida. Parásitos que la obligaban a no acabar su comida, falta de calcio en sus huesos. Le ocultaba a todos sus problemas, como si su sonrisa retorcida se ocultaba una muy tierna.

-¡Muy bien, gente!. Escuchen, para los que tengan radio, estaremos en el canal 40; no lo usen para conversar ¿está bien?- hablaba Shane, mientras sostenía su escopeta. Todos habían tenido que amanecer incluyendo a la niña, para partir hacía el CDC ( centro control de enfermedades ) a averiguar si había algo que no solo fuera muertos, todos estaban en un círculo, fuera pero cerca de sus vehículos que estaban listos para arrancar.

Meiling se sentía agotada, pero no era porque Lori le había despertado temprano, ¿que podíamos suponer? quizá era uno de sus síntomas de su desnutrición o anemia.

Shane seguía hablando pero para Meiling la voz se difuminaba al pasar el tiempo, sin darle importancia a lo decía.

Hasta que la mirada de Shane cayó en la rubia y ella lo sintió, sonreía burlesco o quizá era de ternura, quién sabe. Meiling tenía dos coletas de cada lado de su cabello, sujetadas por infantiles listones celestes, quizá por su baja estatura o rostro inocente, la hacía ver muy tierna e indefensa.

Pero no se sentía así, ya no.

La ojiazul frunció sus ceños ligeramente. Y rodó sus ojos para luego quitarse sus listones con fuerza, su cabello rubio quedó suelto.

Podía molestarse, solo un poco, o en broma, con alguien que la viera tierna, solo de alguien que haya tenido buenos tratos. Pero de Shane... le incomodaba bastante.

Nadie parecía preguntar, pero la cabeza de la familia Morales empezó a hablar.

-Nosotros... no vamos a ir

El lugar quedó en silencio solo por unos segundos, Shane y Rick no sabían que decir, pero al instante. La esposa de Morales rompió el silencio

-Tenemos familia en Birbimgham. Queremos ir con nuestra gente

-Van por su cuenta, nadie les cuidará la espalda- Meiling soltó un resoplido molesto, para nada a la niña le parecía unas palabras alentadoras. Parecía sonar, asegurandoles que morirían y eso no era agradable ni para los hijos de Morales

Cansada de escuchar a Walsh, saltó del cofre del auto para entrar a la caravana. Sin escuchar lo que decían. Pues se sentía cansada, con sueño, hubo muchos días en la que tuvo insomnio, simplemente la causa era que, quería pasar guardia, solo algunas veces, pero esta vez quería dormir, ni siquiera la conversación le tomaba mucha importancia.

Meiling se mordió el labio, incapaz de levantarse y despedirlos, después de todo no los había conocido lo suficiente.

Volvió a cerrar sus ojos, su cabeza por poco se caía cuando quiso dormir, logrando que se sobresaltara. Miró al rededor, dándose cuenta que ya estaban entrando a los autos y la familia Morales se iba, ella salió de la autocaravana y se acercó a Lori, a indicación de ella

-¿Tienes sueño?- preguntó la mujer, mientras tomaba su mano, para que no se perdiera o se cayera, porque parecía su cuerpo estar tambaleando por el cansancio o el dolor de su cuerpo

Digamos que Meiling Rockwell pertenecía a la familia Grimes. Pues cuando Shane y Lori encontraron a la niña en la carretera al haber "matado" su "madre". Lori decidió que era mejor llevarla, obviamente, no podían dejar a una niña sola

Aunque todavía recordaba como Shane le decía que no era buena idea, que estaba algo loca porque sonreía justo después de haber matado a su madre. Y no pidió ningún pañuelo para limpiarse la cara de sangre de muerto.

Pero aún así, Lori no le importó lo que decía Shane, ella sola se hizo cargo de Meiling y al ver el desacuerdo del amigo de su marido, le recordó que no se tenía que preocupar por ella en nada, ella la iba a cuidar y esa fue su decisión.

-Si

La niña levantó la vista a ver la mayor, esperando algún regaño como lo haría su madre, quizá reprochandole de ser una niña muy débil, con pantorrillas esqueléticas y brazos de perchero

Aunque Lori no sabía la principal razón por la que tenía esos problemas

No hasta después...

Hubo una pequeña referencia a Negan al principio del cap. No lo tenía planeado poner, pero me fue buena idea.

Les juro que estoy emocionada para llegar a esa parte de Negan.

Holaaa gente, como andan?

Yo estoy re triste porque ví candy candy por 112929 veces y aún no supero la muerte de un personaje 😭

Alta serie

Woooo, les juro que estoy demasiada emocionada para entrar a la s2!!

Por cierto, saben quien es Aiko Tanaka? ♡

Bueno se los hago saber, es el personaje que me inspiró a crear a Meiling!!

xoxo

Fecha de publicación : 20.12.23

pd : vieron que Sasha y Tyresee llegaron a la serie? Como dije, tendría algunos cambios por el cómic, pues Tyresee ( Sasha no existe en el cómic </3 ) llega mucho antes que la prisión

La imagen de el inicio es la estética de Meiling del capítulo 9 hasta el final de la temporada.