6| Existe el perdon
Draco se observó al espejo por última vez, debía ir al Congreso de magia para checar lo que había pedido. Se veía extraño, era como ver a Hermione, negó lentamente y tomo tomó su abrigo.
Hermione pláticaba animadamente con Narcissa cuando ente bajo, ambas se giraron y le sonrieron.
-Hijo, te vez...-habló Narcissa y lo observó, era ver a su nuera y eso la confundía, a veces hablaba cosas de mujeres con el hasta que el le recordaba que era Draco- Diferente.
-Sera horrible querida suegra- habló Marcos con una sonrisa mientras bajaba las otras escaleras, el rubio se cruzó de brazos indignado- En cambio yo, siempre me veo bien.
-Ay ya vaz a empezar Marcos- habló el rubio - Yo siempre he sido el rey y tu eres mi sirviente.
El pelinegro soltó una carcajada y se sentó en el sillón observando al rubio.
-Tu eres mi elfo- habló Marcos con una sonrisa.
-Oigan, amos no me metan a mi- habló Dobby sobresaltado a ambos- ¿Van a salir algún lado los amos?
Draco asintio y termino de bajar las escaleras, le dio un beso a sus esposa y caminó hacia la entrada.
Tomo su escoba y se giro hacia el cielo, si había la posibilidad de ello, su padre podía salir de Azkaban antes de tienpo y conocer a sus nietos. Tomo su celular y llamo.
-...estupido celular no quiero venderme en mercado negro- habló Víctor desde la otra linea- Hola maldita
-Hola estupido- habló Draco-¿Me vas a acompañar si ó no?
-A donde tu quieras ir guapo- contestó este y río, Draco hizo una mueca de asco.
-¿Si irás?
-Si, claro que ire- contestó Víctor y sonrio- Además no tengo ganas de trabajar hoy, le dire a Fleur que ire al Ministerio aunque no vaya y...
-¿A dónde vas a ir Víctor Riddle Black?- se oyó el gritó de Fleur en la linea- No iras a ningún lado, la otra vez me habías dicho lo mismo y te fuiste con Marcos al caldero chorriante a hacer apuesta de quién tomaba más.
- Hola Fluer- gritó Marcos al lado de Draco.
-Hola Marcos- contestó esta- No vas a ir.
-Andale déjame ir, mañana te limpió la casa pero déjame ir, no me has dejado salir desde ese día, ya ha pasado un mes de eso, andale- le rogo.
-Hey Fleur, déjalo ir y te lo vamos a dejar temprano- habló Draco intentado convencerla- Si lo dejas ir, cocinara todos los dias.
-¿Que?- preguntó Víctor sin entender- No mejor ya no voy.
Fleur observó el telefono y luego a su esposo, este le hizo un puchero.
-Hecho- contestó la rubia y sonrió con malicia- Y como lo estoy dejando ir el viernes no tenemos nuestra noche.
-¿Qué? ¡No! Fluer por merlin no, los chicos llegan el sabado y no podemos hacerlo luego- habló Víctor.
-No, luego me duelen al otro dia mucho mis piernas-habló está.
-¡Ya basta por favor! No quiero escuchar las cosas asquerosas que hacen- habló Marcos e hizo una mueca de asco.
-Nos vemos chicos- habló Fluer- Al rato los alcanza Víctor.
Colgó.
Draco hizo lo mismo y bloqueo el celular
-Creo que Víctor no tendrá acción el viernes- río Marcos seguido de Draco.
***
-¿Qué se supone que vamos a hacer?-pregunto Víctor mientras subían las escaleras del Ministerio.
-Ya veraz- habló el rubio y toco una puerta, está fue abierta por un elfo y los tres pasaron-Vengo a ver a Nicolas Scamander.
El elfo asintió y desapareció, Marcos recorría con la mirada la sala de estar, se acercó a una maqueta de quiddich que estaba en una mesa de caoba, toco a los jugadores y rompió uno.
-Por melin- murmuro el chico intentado acomodar el pequeño muñeco.
-¿Qué hiciste?-murmuro Víctor a su lado, este le sonrió inocentemente-
¿Lo rompiste?
-Ni siquiera lo toque- habló este en un murmuró, ambos intentaban remediar el error.
La puerta se abrió dejando ver un hombre de la misma edad de ellos, este saludo a Draco y se sentó en el escritorio observandolo, su pelo era color caoba y sus ojos azules y con facciones delicadas.
-Veo que trajo a unos amigos- habló este y observó a ambos chicos quienes dejaban las piezas de la maqueta.
Draco observo a ambos y se maldijo en su mente, debió haber ido sólo. Camino hacia ambos y los arrastró por la sala hacia donde el estaba.
-El es mi cuñado Marcos Street- ambos hicieron un asentimiento de cabeza-Y el es mi primo Víctor Riddle.
-Un gusto-habló este y les sonrio- Veo que les llama la atención mi maqueta- señaló.
-Un poco, no mucho-habló Marcos y Victor le pegó en una costilla.
-Tendré qe arreglarla cuando se vayan, vi que un parte se rompió ¿No es así?
-¿Cómo lo supo?- preguntó Víctor-¿Acaso tiene cámaras?- preguntó observando el techo.
Nicolás Scamander sonrió y negó, ofreció a los tres a sentarse, mientras lo hacia Draco los mataba con la mirada.
-Me contó mi padre que vino a buscarme- habló este y le sonrió.
-Si, fue un honor conocer a Newt, siempre quise conocerlo por las grandes cosas que ha hecho-contestó Draco.
-Disculpe ¿Su padres Newt Scamander?- pregunto Marcos, este asintió y sonrio- ¡Oh por merlin! ¿Podria conseguirme un autógrafo de el? Soy su fan.
Nicolás sonrió y asintió.
-Claro que si, cuando lo vea se lo pedire-habló este, observó a Draco- Supongo que viene a ver lo que me pidió.
-Asi es Nick- contestó el rubio, este le sonrió.
-Hay la posibilidad de que el hombre salga antes de la fecha señalada, mis abogados se han encargado de ello y los cargos han minimizado cada día más.
Draco sonrió y observó a sus acompañantes lo miraban sin entender .
-¿Y cuando me dirá la fecha de la salida?- preguntó el rubio con una sonrisa.
Nicolás sonrió y se paró de su sillón.
-En dos semanas, espero que antes, le mandaré una carta junto con mi thresthal para definir la fecha.
Draco sacó unas monedas y se las dio a Nicolás, este asintió y le sonrió.
Víctor y Marcos observa sin comprender nada, Marcos dejo el frasco de dulces, guardo los dulces en su bolso
-Gracias Nicolás, ha sido un placer volver a verte-habló Draco levantandose y estreschando la mano con el castaño- Saludame mucho a tu padre
-Sera un placer hablar de ti y de tus primos hacia mi padre- contestó este.
Draco tomo su abrigo y jalo del brazo a su primo y cuñado, salieron de la oficina.
-Podrias explicarnos ¿Que estás haciendo?- habló Víctor cruzandose de brazos.
Draco lo miro
-Scamander me está ayudando para sacar a mi padre de Azkaban antes que se cumpla su condena.
-¿Por qué?- pregunto Marcos abriendo un dulce.
-Quiero que conozca a mis hijos.
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