41| ¡Es un decrépito!
Draco se tronaba los dedos esperando el momento que su padre lo llevarán.
-¿Qué pasa?- preguntó Hermione observando al rubio preocupado.
-Ya es hora- habló observando a su esposa.
Hermione hizo una mueca y observó a lejos a sus amigos quienes corrian hacia las gradas para poder ver el partido.
-¿Que les diremos a nuestros hijos?- preguntó Hermione preocupada- Les diré, "miren revivimos a su abuelo para que lo conozcan".
El rubio río y tomo la cintura de la chica acercandola a el.
-¿Te he dicho que me encantas?- preguntó el rubio cin una sonrisa.
-No siempre- contestó sonriente- No necesito que me lo digas, siempre me haces sentirme así.
El rubio la beso y está río, parecían dos adolescentes pero no le importaba.
-¡Uyyyy!-gritó Víctor desde la grada observando a la pareja.
-¡Papá, lo arruinaste!- gritó Victoria y nego divertida.
-¿Yo arruinarlo?-preguntó ofendido-Solamente le puse más acción al asunto- sonrió guiñandole el ojo a ambos.
-¡Víctor!- gritó Fleur- Deja de arruinar momentos romanticos
-Victor Riddle Lestrange arruinando momentos románticos desde que su padre nació sin nariz- habló Marcos.
Víctor se giro al pelinegro y río.
-Mi padre no nació sin nariz- habló cruzandose de brazos- Siempre tuvo nariz.
-Eso no es cierto- habló Víctor J.r riendo- A mi abuelo no se le veia la nariz por la magia que usaba.
-¿Acaso los villanos no merecen nariz?- preguntó Ginny divertida- Voldemort no tenía nariz, Dark Vader tampoco, es un milagro que tu tengas nariz.
-¿Acaso no podemos tener un momento de soledad mi esposa y yo?- preguntó Draco observando a sus amigos quienes se metían a la conversación.
-Creo que no-le susurró la castaña riendo.
La chica se alejó de el y camino hacía la entrada del lugar, Draco la contempló hasta que desapareció.
-Te quedaste solo- le gritó Fred.
-Solin- le siguió George.
-Solito- gritó Víctor riendo.
Draco rodo los ojos y caminó hacia una puerta cafe donde quedó de verse con el Nicolás Scamander pues el llevaria a su padre al lugar. Un carro negro llegó y se estaciono al lado del rubio.
-Malfoy- saludo Nicolás al bajar del carro.
-Scamander- contestó estrechando la mano con el.
-Todo salió de maravilla- habló el chico con una sonrisa- Tu padre lo tuvimos en observación por varias semanas y la resurrecion le quedó bien.
Otro carro negro llegó al lugar, de el bajo un tipo vestido de negro y abro la puerta trasera, de ahí salió un rubio que aunque habían pasado los años habia olvidado su mirada plata.
-Padre- susurró el rubio, el otro rubio sonrió y abrazó a su hijo.
-Draco- murmuro sin dejar de abrazarlo-¿Pero qué has hechó?
El rubio mayor observaba con ternura a su hijo, la mirada de este mostraba lo que nunca habia mostrado, amor, cariño.
-Tu no debiste haber muerto- contestó con una sonrisa.
-Bueno Malfoy-interrumpio Scamander- Un gusto hacer tratos contigo, cualquier cosa nos ponemos en contacto, señor Malfoy- paso su vista a Lucius.
El rubio murmuro un gracias que sólo oyó Draco, Nicolás les sonrió antes de subir al coche y desaparecer.
-¿Ya lo saben?- preguntó Lucius observando a su hijo, Draco negó lentamente.
-Solamente mi esposa- contestó Draco.
-No puedo creer que te hayas casado con Astoria, la verdad hijo nunca me cayo bien, siempre ha sido una criticona, alzada...
-Padre...- lo interrumpió Draco.
-...grosera, manacida, come cuando hay- seguia Lucius.
-No me case con ella- habló Draco interrumpiendo a su padre.
Lucius parpadeo varias veces observando a su hijo.
-¿Entonces con quien te casaste?- preguntó el rubio.
-¡Padre!- gritó un pequeño rubio que venía corriendo hacia ambos-...¡Mí madre me pide que vengas el partido ya va a comenzar!
El rubio le sonrió a su padre y luego hizo una mueca hacia Lucius.
-¿Padre?-pregunto Lucius- ¿Tienes hijos?- preguntó el rubio impresionado. Draco asintió.
Scorpius ignoro a ambos y salió del lugar regresando al partido, antes de entrar se giró a su padre.
-Es mejor que vengas, no querrás enfrentar la ira Granger- habló el rubio y desapareció.
Lucius con la boca abierta observaba al mini rubio y a su hijo.
-¿Te casaste con Granger?- preguntó sorprendido.
Draco asintió lentamente.
-Pasaron muchas cosas padre, desde que moriste los estatus de sangre empezaron a ser nada más eso, sangre, si querías ganarte el respeto tenías que hacerlo por ti.
-Pero como fue eso ¿Granger y tu?- preguntó- ¿¡Como es que no se han matado!?
-Me enamoré papa-contestó con simplicidad. Lucius observó a su hijo y sonrió.
Draco no era como el, era lo que le gustaba, el habia hecho cosas buenas y se notaba, había dejado los prejuicios de sangre convirtiendose en una persona de bien.
-¡Papá!- gritó una rubia enojada saliendo del estadio, está se posicionó delante de este-¡¿Vas a venir ó no?!
-Tranquila hija ya voy-contestó sonriente.
Lucius observaba detenidamente a la rubia, tanto en ella como el otro chico los ojos platas habían predominado como en su cabello. Sonrio.
-¿Y tu?- preguntó la rubia enarcando una ceja-¿Quién eres?
Draco observó a du padre y luego a su hija.
-Es tu abuelo Jean- habló el rubio.
Jean soltó una carcajada y observó a ambos rubios.
-Si claro, y Ron no come tanto- río.
-Hija- habló Draco- El es Lucius Malfoy, tu abuelo.
La rubio fruncio el ceño y observó al rubio.
-Pero el está muerto- habló sin entender.
-Lo revivi- habló Draco.
La rubia observó de arriba a abajo a Lucius cosa que incómodo a este, luego hizo una mueca de asco. Digna Malfoy.
-Pero...¡Es un decrépito!- gritó.
-Oye no me hables asi- habló Lucius- Soy tu abuelo y me respetas.
Draco se sorprendió ante las palabras de su padre.
-Mi madre se enterara de esto- habló la chica entrecerrando los ojos.
Antes de que caminara de vuelta al lugar; Hermione venia hacia ambos, la castaña se detuvo observando a ambos rubios y a su hija.
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