Nota: Este capitulo esta deciado a CaroAlvarezM winteryoung_  @@Lectora1-Andy y a @llasyl  gracias por su apoyo chicas y su ayuda en estos capitulos. Si más que decir espero les guste.

De un movimiento rápido Hiccup esquivo el hacha con la que atacaba su primo Patán, logro sentir como por un momento rozaba su cabello.

-¡Otra vez!-grito su padre desde la lejanía.

-¿Es enserio?-protesto el castaño.

-Regla número uno-de lado derecho clavo el hacha que rozaba su hombro en un árbol-Nunca te distraigas-

-¿Acaso no hay descanso?-protesto el castaño-Creo que ha sido demasiada emoción para un día-

-Nunca es suficiente si quieres ganar-hablo su padre con tranquilidad-Tú te metiste en esto y ahora tu sales de esto-

¿Cómo sucedió todo esto? No llevo ni un día de entrenamiento y ya me explotan peor que a un esclavo, se quejaba mentalmente.

Bien sabia Hiccup que la competencia no sería nada fácil, al momento de hacerle aquella promesa a Merida no había vuelta atrás. Una promesa hecha por el era algo valioso, por lo que ahora estaba atado a ello.

Al momento de pedirle ayuda a su padre este no dudo en pedir refuerzos, y con refuerzos se refería a sus amigos que volaron desde Berk a Dunbroch. Claro que antes hubo una plática con Elinor a lo cual ella acepto sin protestar, toda su fe estaba en el joven vikingo.

-Vamos Hiccup, se que puedes hacerlo mejor-grito con mucho ánimo Heather-No me obligues a patear tu lindo trasero-

-Mi trasero y yo estamos bien así, aunque gracias por preocuparte de mí retaguardia-alardeo.

El día transcurrió con rapidez, lamentablemente no con los resultados que esperaba Hiccup. Odiaba admitirlo pero Patán Moscoso le había dado una gran paliza, realmente estaba fuera de forma en cuanto se refería a combate. Algo que noto Estoico, especialmente su decepción al perder contra su primo.

-Lo harás mejor-con unas palmadas en la espalda lo animo Heather-Solo necesitas practica-

-Gracias por el consejo-sonrío forzadamente-Vayan a comer algo, yo necesito recuperar energía-

-No tardes o iré por ti-un pequeño golpe en el brazo fue lo que recibió de parte de la azabache para después retirarse.

Hiccup ya cansado decidió dejarse caer junto a la sombra de un árbol, tanto esfuerzo físico lo había dejado agotado.

¨No debí meterme en esto, si Astrid estuviera aquí ya estaría muerta de la risa por la patética actuación del día de hoy¨ se dijo a si mimos mientras con su antebrazo ocultaba su cara.

-Parece que agotaste todas tus reservas-la voz de su padre interrumpió sus pensamientos-Creo que debería decirle a tu madre que te de doble ración de albóndigas-

-Paso-dijo Hiccup sin ánimos.

Algo no estaba bien dentro de Hiccup y Estoico se había dado cuenta, desde que su esposa había regresado con ellos era más fácil diferenciar cuando Hiccup estaba de un buen o mal humor; la clara evidencia de que este no había sido un día bueno era el tono de su voz.

-Hiccup-paso su mano por el cuello-Creo que debemos hablar-

-Si vienes a decirme que renuncie pierde tu tiempo-hablo el castaño sin ver a su padre-Y si se trata de mi estado emocional, no debes preocuparte por eso-

Para el mayor de los vikingos le era difícil hablar de ello, en todas las charlas que había tenido con su hijo le costaba trabajo mantener una conversación amena. Por lo general la que tenía más tacto con él era su esposa, pero al insistirle que ella hablara con el su respuesta fue negativa.

¨Ya es tiempo de que hables de esto con Hiccup, ambos son hombres y se entenderán mejor¨ fueron las palabras de Valka hacia Estoico.

-Parece ser que la princesa y tu son buenos amigos-comenzó a hablar su padre-Aunque me parece muy frágil y recta igual que su madre.

Una carcajada salió del castaño, realmente le hacía gracias el comentario de su padre y eso era debido a que Merida era todo lo contrario a la imagen que ambos hombres presenciaron.

-¿Qué es lo gracioso?-levanto una de sus cejas en espera de una respuesta.

-Papá-quito su antebrazo para verlo-Merida es muy diferente a lo que piensas, puede que tengas esa primera impresión por lo que viste pero puedo jurarte que es lo contrario-

-Bueno-levanto sus hombros con tranquilidad-Nunca nos hablaste de ella en las cartas, solo nos decías que estabas bien y sobre el paisaje de Dunbroch-

La sonrisa que prevalecía en el rostro de Hiccup desapareció en un abrir y cerrar de ojos, ahora se sentía culpable por no comentarle algunas cosas. Ya que la mayor parte del tiempo se dedicaba a escribirle a Astrid o simplemente hacer enojar a la princesa.

-Papá...-se animó a hablar-¿Crees que sea capaz de ganar?-

La pregunta tomo por sorpresa a su padre, especialmente con el tono de voz que tenía parecía preocupado por algo o quizás por alguien.

-¿A qué viene esa pregunta?-la curiosidad de Estoico por la respuesta de su hijo era igual a la de él.

-Se que no soy el pescado parlanchín de hace años atrás pero...-se detuvo reflexionando un momento-Realmente quiero ganar, debo ganar a toda costa-

Las palabras de Hiccup salían como cualquier conversación normal, un padre siempre logra distinguir cuando algo estaba bien o mal en un hijo. En este caso algo lo preocupaba y el nombre de esa preocupación era Merida, fue cuando se dio cuenta que su esposa tenía razón al hacerlo hablar de hombre a hombre.

-Parece que la princesa es muy importante para ti hijo-coloco su brazo sobre los hombros de su hijo-¿Quieres contarme?-

-No puedo darte muchos detalles-se apresuró a decir Hiccup-No quiero romper mi promesa, pero puedo contarte solo lo básico ¿Esta bien?-el hombre de gran barba roja asintió.

Hiccup hablo con tranquilidad, obviamente al principio recibió un regaño y mirada de desaprobación al escuchar cómo había tratado a la princesa; entendía su porque pero no era justificable cuando alguien solo estaba siendo amable y educado. Aunque eso cambio cuando le conto como la pelirroja buscaba vengarse de él, especialmente lo de los pescados y sanguijuelas le provoco grandes carcajadas al hombre.

-¡Oye no es para que te rías!-protesto el vikingo divertido-Es para que apoyes a tu hijo-

El hombre notaba como al hablar de aquella mujer su hijo liberaba un gran brillo y emoción, especialmente en aquel combate a mano armada que tuvo con la chica. En la imagen de Estoico aparecía más como una vikinga que una princesa, lo cual sinceramente aprobaba ya que en su pueblo se apreciaba más una mujer que fuera fuerte e inteligente. Por un momento creía que su hijo solo lo decía por hacerla ver bien, pero con cada palabra que salía del joven noto el entusiasmo que no veía desde hace mucho tiempo.

Fue en ese momento que el chico llego a la parte donde sus padres llegaron, con coraje y enojo contaba como aquellos hombres llegaron para quitarle sus derechos a ella y su familia, narraba como ella en cada momento buscaba enfrentarlos pero al quedar en un callejón sin salida acepto las condiciones que dieron.

-Y es por eso que te opusiste y entraste a la competencia ¿verdad?-analizaba con mucho cuidado y rapidez los datos proporcionados por su hijo.

-Es una injusticia-reprocho cansado-No podía quedarme de brazos cruzados si había una posibilidad de ayudarla, le debo eso al menos-con algo de frustración el Cataño paso su mano por su cabello-¿No hubieras hecho tú lo mismo si mamá estuviera en la misma situación?-

La respuesta era un claro sí, ya que amaba con todo su corazón a su madre. El dolor de haberla perdido años atrás era muy grande pero lo oculto para que su hijo no sufriera, sin embargo la alegría de recuperarla era más grande y valiosa que cualquier otra cosa.

-Creo que no lo lograre-hablo Hiccup-No me siento capaz de hacerlo-

-¡Oh nada de eso!-se levantó su padre-Veras como ganaras, no pienso dejar que dejes en ridículo al Clan-coloco sus manos en su cintura.

-Sabes, en este momento es cuando tú dices algo inspirador y me levantas el ánimo-dijo con mucho sarcasmo-Y después todos nos abrazos y volvemos a ser felices-

-Hiccup ¡Somos vikingos!-exclamo animadamente-No hacemos ese tipo de cosas, simplemente golpeamos algo, nos lastímanos para ponernos de pie y enfrentar lo que sigue-

-¡Dolor! Si me encanta-el tono de voz de Hiccup era cada vez más sarcástico-¡Yupi!-

-Hiccup cuando tenía tu edad-¡No por Odín! Todo menos esa platica, se quejaba mentalmente Hiccup-Mi padre me demostró de lo que era capaz un vikingo, de abrirse caminos, tomar mares. Si eso puede hacer un vikingo común y corriente-coloco su mano en el hombre de su hijo-Entonces dime ¿De que eres capaz tú? Lograste ser el primero en montar y domar un dragón, algo que ninguno de nosotros fue capaz de hacer en miles de años-

Gran parte era verdad lo que decía, la mayoría de los vikingos hacían eso y mucho más; pero lo que más lo sorprendió fue que reconociera su logro con Chimuelo. A pesar de siempre alardear y decir que era su orgullo nunca hablaba de ello, esta era la primera vez en 5 años que hablaba sobre lo sucedido.

-Yo se que eres capaz de grandes cosas hijo-sonrío con tranquilidad-La cuestión aquí es ¿Quieres hacerlas o no? En base a tu decisión sigue tus acciones, corre, cae y vuélvete a levantar. Al menos así no dirás que no lo intentaste, pruébate a ti mismo que eres capaz de poner en alto a tu pueblo pero sobre todo a ti-

-Tú padre tiene razón-con un paso tranquilo pareció su madre sonriente-Lograste grandes cosas hijo, derrotaste a un loco que buscaba en control y destrucción de todo lo que amamos. Hiciste que todo un pueblo que asesinaba dragones viviera en armonía con ellos, estoy segura que entre más empeño le pongas a lo que te propongas lo lograras-

-Tengo miedo de fracasar-suspiro con pesar Hiccup-Miedo de no poder cumplir otra promesa.

Ambos adultos sabían a qué promesa se refería, sin decir más Valka abrazo a Hiccup. Al igual que ella las inseguridades dominaban gran parte del tiempo, pero la determinación y el valor era algo que solo padre e hijo compartían.

-Da tu mejor esfuerzo-respondió Valka- Si lo que quieres es ayudar a esa joven, entonces demuéstralo y pelea hasta el final-

-Haré mi mayor esfuerzo-respondía Hiccup un poco más animado-Papá... ¿es posible que entrenemos de otra manera?-

Aquello saco un poco de lugar a Estoico, pero al ver la sonrisa de Hiccup entendió que algo se estaba maquinando en su mente.

A la mañana siguiente Hiccup se levantó muy temprano, era claro que el método de su padre no funcionaba muy bien en él. Por lo que la noche anterior le solicito diversas cosas a su majestad y ayuda a sus amigos.

Todos aceptaron con gusto, especialmente los gemelos que buscaban hacerle alguna broma al castaño en el transcurso de su entrenamiento.

-Bien Hiccup-estiro sus manos con tranquilidad-Muéstrame que tienes-ambos puños se levantaron en el aire-Hoy toca combate cuerpo a cuerpo-

-¿Eso tan siquiera existe?-levanto su ceja sumamente confundido.

-No preguntes y entrena-grito desde los arboles su padre.

Como era de esperarse Hiccup recibió el primer golpe dejándolo en el piso, los gemelos parecían murmurar algo mientras que Heather observaba todo recargada en uno de los árboles.

-¡Vamos Hiccup!-grito patán desafiante-¿Acaso quieres otro ojo morado?-

Con decisión el castaño se levantó de su lugar y subió sus puños en espera de que su primo lo atacara, al principio logro desviar dos golpes pero al tercero fue derrumbado otra vez.

-Hay un largo camino por delante-suspiro su padre.

Cada mañana era la misma rutina, a base de gritos y de amenazas proporcionadas por Heather con lanzarle algún hacha o espada Hiccup corría la mayor parte del bosque, claramente cuando noto que la velocidad del chico aumentaba; el nivel aumento ahora tratando de esquivar los ataques por todo el bosque.

-¡Vamos piernas de rama!-gritaba Heather al lanzar otra hacha-No me hare responsable si te llevas una cicatriz-

Al caer la tarde era el momento del entrenamiento con su padre, basado en tratar de levantar algunos de los troncos derribados del lugar. Obviamente el chico luchaba por levantarlo, ya que solo era mínimo lo que lograba levantar, y así variaba desde eso hasta lanzamientos de hacha, arco, y más.

Algo que no se había dado cuenta es que desde ciertas parte una chica que lo conocía muy bien lo observaba, todo el esfuerzo que hacia día y noche y las pocas horas que dormía con tal de entrenar.

¨No parece alguien que se dedique a la condición física¨ pensó la chica.

A la mañana siguiente Hiccup despertó con gran motivación, el tiempo se terminaba y tenía que avanzar rápido si quería llegar bien a los juegos.

-¿Qué dices Hiccup? ¿Qué quieres pelear hasta morir?-de su lugar quito el hacha enterrada en el tronco.

-¡¿Qué?! ¿Quién dijo eso?-

Patán no espero y ataco mientras Hiccup saltaba para esquivarlo, con cada ataque de patán Hiccup lo esquivaba con más facilidad.

¨Un patrón¨ recordó el castaño.

En todas las pelas que habían tenido era la primera vez que se había dado cuenta que seguía un patrón de ataque, por algo le resultaba más fácil saber por dónde atacaría.

-¡Hey Hiccup!-grito Heather lanzándole un hacha.

Sin pensarlo dos veces el joven vikingo la tomo con agilidad en el aire, al saber que los ataques iban de arriba, derecha, derecha, abajo e izquierda logro reprenderlos antes de que se acercaran a él. Al ver que la mayor cantidad de su energía la había utilizado en tratar de alcanzarlo tomo la delantera, con solo tres movimientos hizo volar el hacha hasta la mitad del patio.

-No esta nada mal-sonrío el azabache-Pero veamos que te parece esto-

Patán se abalanzo hacia el castaño con su puño, Hiccup lo que hizo fue soltar el hacha y esquivarlo. Nuevamente trato de emboscarlo pero cuando menos lo espero sujeto su puño para darle un puñetazo en la cara, logrando así derribar a su primo.

-¡Porque hiciste eso!-grito patán adolorido-Espera tengo que...-sin embargo no termino la frase.

Todos menos los gemelos corrieron en ayuda de su primo, Heather levanto su cabeza para examinarlo.

-Eso fue increíble-comento Brutilda.

-Si ¿Quién diría que el delgado vikingo de una pierna podía lograrlo?-observo como los tres buscaban reanimar a Patán-

-Hermano sea acabo, no queda nada más-respondió Brutilda-Ya no podremos burlarnos de él-pero una sonrisa apareció-Pero la parte buena es que Patán recibió un golpe en la cara-

-¡Sí!-exclamo emocionado Brutacio-Si lo pudiera disfrutar... ¿A quién engaño? Lo disfrutare de todos modos- la risa no tardó en hacerse presente por los gemelos.

Mientras Estoico, Heather e Hiccup esperaban a que Patán reaccionara.

-Mamá, papá Hiccup me golpeo-comentaba algo mareado-Necesito un vaso con agua-sin embargo todo eso cambio al ver como Heather se acercaba para examinarlo-Aunque pensándolo bien la respiración boca a boca funcionaria-estirando sus labios se acercó a Heather.

-Si, esta bien-soltó de golpe su cabeza.

Por fin los resultados de su entrenamiento físico estaban dando resultado, cada vez le parecía más fácil correr con más rapidez y evitar la mayor cantidad de los ataques de Heather. Las hachas y flechas caían cerca del centro, mientras que en un enfrentamiento con su padre casi logro desarmarlo.

Su padre realmente estaba impresionado por el empeño que había puesto su hijo cada día, los resultados se estaban dando lo cual lo animaba más. Cuando llego la hora de levantar el tronco no lo levantaba aun del todo, pero más de la mitad ya había podido levantarlo.

Parte de las tarde ahora lo ayudaba su madre, si en realidad iba a haber carreras de dragones era esencial que lo entrenara. Aquello le pareció ridículo a Hiccup ya que contando un furia nocturna eso era pan comido, más su madre le advirtió que no se confiara en ello. Pues cualquier cosa podría pasar, no solamente entreno con chimuelo, Cizalladura, Brinca nubes e incluso el resto de los dragones se ofrecieron a ayudar al joven vikingo.

Para cuando llego el momento de ver a su padre sabía que se definiría todo, aquel era el último día antes de que la reina mandara las invitaciones. Si no lograba levantarlo, caminar unos pasos y dejarlo caer todo estaría perdido en esa área.

-Bueno-se cruzó de brazos-Muéstrame que tanto has avanzado-

Tras un suspiro y calentar, tomo el pesado tronco. Era realmente pesado los troncos de los pinos escoceses pero debía hacerlo, tenía que al menos levantarlo. Entre algunos gritos y ceños fruncidos logro levantar el tronco que al poco momento cayó al piso.

-¡Ese es mi hijo!-grito victorioso Estoico.

Mientras que Hiccup no podía creer lo que sus ojos veían, quizás no logro caminar con él en brazos pero si lo había levantado. La emoción y decepción se habían hecho presentes.

-No pude caminar con él-su voz estaba llena de decepción-Soy un fracaso-

-¿De que hablas?-pregunto su padre-Lograste levantarlo-

-Pero se cayó a los pocos minutos-

Estoico sabía a que se refiera, el esperaba que lograra unos pasos con él. Había llegado el momento de contarle.

-Hiccup, no tienes que cargar con el tronco-comento avergonzado su padre a lo cual Hiccup lo miro intrigado-Alguien te ayudara a sujetarlo, solo debes caminar con él lo más que puedas y dejarlo caer-

-¡¿Qué?!-dijo el castaño con sus ojos abiertos-Lo que intentas decirme ¡Que es me estuve entrenado para nada!-grito enojado-¡Hay dioses!-

-Claro que no-bufo su padre-Hiccup si te decía la verdad no hubieras puesto todo tu empeño, solo habrás hecho la mitad. Ve el gran avance, fuiste capas de cargarlo por unos minutos. Imagínate que podrás hacer cuando esa persona te ayude-

Realmente aquello no había pasado por la mente del castaño, una vez más la sonrisa regreso a su cara.

-¡Si!-grito emocionado-¡Lo hice!-

-¡Ese es mi muchacho!-con gran velocidad estoico abrazo a su hijo-Ahora debes descansar, tienes una competencia que ganar dentro de unos días-

La felicidad de vikingo no se podía comparar con nada, estaba orgulloso de lo que había logrado en poco tiempo. Era verdad que le faltaba afinar detalles, pero al menos en lo que llegaran los hijos de aquellos hombres se daría el tiempo de hacerlo.

Mientras que escondida entre los arboles la silueta de una chica observan sonriente como aquel chico celebraba con emoción.

Pfff... como podrájn ver es un capitulo bastante largo, o al menos cuando lo escribi me parecio bastante... pero bastante largo. 

¿Qué les parecio? ¿Les gusto ver el entrenamiento del castaño? Decidi agregar unas imagenes para que le diera drama y se dieran una mejor idea de su entrenamiento, es que se me agotaban las ideas de paso XD ¿Creen que nuestro castaño vikingo logre ganar? ¿Cual sera la primera prueba? ¿Quién es la chica misteriosa que lo vigilaba? Espero que les haya gustado el momento Padre e Hijo que agregue en la historia, puede ser algo tedioso pero me parecio algo conmovedor y necesario.

Ya que como bien sabemos nos mataron a Estoico en la segunda pelicula :,v pero en esta versión el esta vivo ¡Hurra! 

Como siempre espero sus comentarios y teorias.

¡Nos leemos luego!