Lección 16: Tener una crisis existencial
Dentro de su brazalete, BaekHyun encontró una fotografía, realmente parecía solo un pedazo de papel bastante doblado y un poco deteriorado, pero al verlo bien, pudo reconocer algo.
Había una hermosa mujer con su misma piel blanca de alienígena, ella sonreía al portar una larga túnica verde militar con un listón negro atado por debajo de su pecho. Tampoco tenía cabello, pero en su caso las protuberancias que tenía eran menos pronunciadas de lo que las suyas y las del joven hombre serio posicionado a su lado, con esas prendas similares, pero que, por su parte, mostraban un color rojo. También tenía una división, más a la altura de su cintura, y esa misma le abría la túnica para enseñar un pantalón debajo de ella a diferencia de la que creía que era su esposa.
Además, notó, un poco tarde, que en los brazos del hombre se cargaba una pequeña bolita blanca, la que jalaba con su diminuta mano el collar de la mujer. Aquello probablemente arruinó la foto cuando ya estaba por ser tomada.
Una bolita envuelta en otra túnica pequeña de color morado y un lazo blanco.
BaekHyun no solo reconoció con eso una cosa, sino dos, porque el collar en esa foto, la ropa y la composición en general de la imagen le decía lo obvio: era él. Él y su familia.
Su familia de sangre.
Las lágrimas nublaron sus ojos por esto, las cuales casi le hicieron perder la visión, si no hubiera parpadeado y dejado que ellas cayeran por sus mejillas.
Sin importar ese aspecto, tomó la foto entre sus dos manos y la acercó más a su rostro al ver que una de sus lágrimas había mojado el papel que intentó limpiar tan pronto al decir de nuevo, ahora en el idioma que conocía como humano:
"Mamá... Papá..." eso le trajo otro par de sollozos, porque nunca se imaginó estar viendo esto realmente. Podría haber sido criado por los Oh, crecer en una vida humana, y pertenecer a algo completamente distinto de lo que esas dos personas en la foto habían tenido, pero, de cualquier modo, habían sido sus padres, quienes le dieron la vida, y a los que él había perdido sin razón alguna.
O eso era lo que pensaba al seguir sin saber nada con respecto a ello.
Si a eso le añadía todo lo que ya venía cargando de los últimos días, BaekHyun sencillamente se dejó llevar y lloró sin consuelo.
"¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué me toca vivir a mí todo esto? ¿Por qué he tenido que llegar aquí, y luego de tantos años, cuando creo que he podido encontrar la razón por la que, tal vez, he sido creado de este modo y vivido tanto en las sombras solo buscando la justicia, el bien y dar una imagen de esperanza, simplemente todo se desmorona con estas personas haciendo tanto daño?"
Sollozó e hipó incluso al mover de un lado a otro la foto entre sus manos. Evidentemente, no obtuvo respuesta, por lo que siguió:
"¿O soy yo el que hace daño? ¿Qué...? ¿Qué soy realmente, mamá y papá? ¿Qué, para que me hubieran dejado y abandonado en un mundo que desconocía y a una edad tan temprana? ¿Qué soy yo y por qué...? ¿Por qué provoco tanto daño?"
Tiró la foto y se deshizo del brazalete al aventarlo lejos ahora que pareció verse liberado de su piel después de tanto. Entonces, se dejó a sí mismo caer contra su almohada para hacer llegar lágrima tras lágrima sobre ella, de tal modo que no pudo ver cuando el brazalete con la foto anexada golpeó contra su pared más próxima y se escuchó un pequeño quiebre del interior en el artefacto, pero que logró activar algo más que quizá iba a ser la voz de todas sus respuestas.
Un holograma se proyectó del brazalete, con una imagen idéntica a la del hombre en la foto, en un tamaño real, rodeada de una luz azulada que le dejaba a cualquiera notar que no era una persona presente, aunque eso no le evitó dejar salir una voz en un idioma que poco y nada reconocía, a pesar de que en su interior lo entendía, porque no importaba cuánto tiempo hubiera pasado y que él ya no utilizara el idioma, de alguna manera era como si tuviera dentro de sí insertado ese chip con los conocimientos más básicos de este, por lo que pudo entenderlo solo al escucharlo. Como si solo necesitara volver a oír hablar a alguien en este para que todo lo que sabía del lenguaje se reactivara en su memoria y pudiera hasta hablarlo. No escribirlo ni leerlo, pero de menos era algo, porque entre sus sollozos, eso le hizo parar al escuchar:
"¿Está encendido esto? ¿Ya, ya está encendido? ¿Entonces ya puedo hablar?" alzó rápido la cabeza, y sobre más lágrimas, vio la imagen sonreír en su dirección, con manos entrecruzadas al frente al terminar de decir: "Bien, entonces, aquí vamos."
"Papá," exclamó, con poca voz, ronca, pero fue sorprendido, porque pronto, en cambio, obtuvo:
"Hola, hijo," y pestañeó, para verlo mejor, con lo que sacó sus pies de la cama al querer probar algo: "Sé que tienes muchas dudas ahora, y quizá también miedo, o tal vez sientas soledad y desesperanza. Pero no te preocupes, yo estoy aquí, y aunque tal vez no sea lo que esperabas, deseo poder darte suficientes palabras para calmar tu alma."
Quedó parado frente a la figura solo un poco más alta que él, a menos de unos centímetros para tocarlo. Era un hombre realmente alto, la tonalidad de su piel se veía mucho más pálida que blanca, sus hombros se notaban cuadrados, lo que le daba una espalda ancha, pero que terminaba en una cintura un poco más angosta de lo que se esperaba. No tenía una figura como él, parecía que había salido un poco más a su madre en ese aspecto, quizá como SeHun ya le había dicho al mencionar que su cueroo se veía más andrógino, pero eso no evitó que sí mirara algunos detalles en su rostro que se parecían, como sus ojos negros y ovalados que eran de un mismo tamaño que los suyos, sus labios un poco gruesos también se veían similares. Su nariz era algo más ancha, mas, por la parte de sus orejas, ya veía de dónde las había sacado ligeramente grandes. Aun al inspeccionar todo esto, se detuvo, y asintió como si con él hablara. De ese modo, esperó a que la imagen temblara y otras palabras de su padre se escucharon.
"La verdad no sé si lo sepas, pero, por si no te ha quedado claro, yo soy Byun DongWook, tu padre y quizá para estos momentos yo esté muerto."
No le sorprendió la revelación, porque ya la había escuchado en boca de alguien más, y aunque él no entendía por qué así había sido, saber que su padre lo había predicho incluso antes de que de él se separara era lo que realmente lo desconcertaba.
"Pero no llores por eso, hijo, porque si las cosas siguieron como tu madre, InNa, y yo lo esperábamos, es muy probable que lo hubiéramos hecho por una buena causa. Lo hicimos por ti, para que tú vivieras, hijo."
No, no. Realmente eso no podía estar pasándole.
Se cayó sobre su trasero, y quedó ahí respirando hondo varias veces y cubriendo con sus manos desde sus orejas hasta su cabeza mientras pasaba sus dedos blancos entre los montículos de ella.
Estaba intentando asimilar todo esto, mas, saber tal verdad, que lo que le dijo aquella horrible mujer dorada de su pueblo era real... No lo estaba dejando vivir tranquilo.
A pesar de eso, la grabación de su padre siguió hablando y viendo hacia la nada, como si no le costara tener que decir esas palabras.
«Murió por mí. Murieron por mí. ¿Por qué...?»
"Seguro tienes muchas preguntas, como ya lo dije, sobre todo si ya eres grande, porque debes sentirte muy perdido en donde estás, y tal vez no pueda resolver cada una de ellas justo ahora, pero..." la imagen parpadeó, al igual que él que aún sacudía la cabeza por estar negado a mirarlo un minuto más. "Puedo decirte por qué me he sacrificado por ti y lo volvería a hacer con tal de saber, en donde sea que tú o yo estemos, que has tenido la vida que te mereces."
¿Y la tenía? Realmente, ¿esta era la vida que sus padres querían para él?
¿Este era el BaekHyun que ellos deseaban ver crecer?
"Sin embargo, BaekHyun, hay una razón más grande por la que hemos tenido que sacrificar tanto y alejarte de nuestro lado. Quizá tú no lo sepas o solo has intentado suprimirlo por adaptarte en el lugar al que te hemos mandado, pero hay algo en ti que te hace especial entre tantos. Especial para nosotros e invaluable para nuestro pueblo, y si hubiéramos sabido a lo que nos estábamos arriesgando, no te hubiéramos creado de este modo. Pero también lo hicimos por una buena causa..."
Volvió a parpadear. BaekHyun ya estaba sollozando de nuevo, al mismo tiempo que cubría sus ojos lagrimosos junto a ambas manos. Le estaba costando respirar, sentía que no podía más, pero ¿cómo paraba eso?
Él tenía que escucharlo, quisiera o no. Era su obligación, se lo debía a todas las personas que por él habían sufrido tanto hasta ahora.
"Tienes un gran poder en ti, hijo, y ello es único de nuestra especie. Te explico, nuestra raza posee habilidades impresionantes, como las que ya has de saber o descubrir que tienes. Sin embargo, cada una de ellas es una parte de tu pasado. Tu madre y yo, al solo tenerte a ti, hemos quebrado una parte de nosotros para otorgarte a ti esta fuerza y esta vida que te pertenece. También lo han hecho tus tíos y abuelos, porque eres el heredero del apellido Byun, y merecías esto y más con todo lo que has demostrado tener. Pero las habilidades que creíamos que te correspondían por derecho, han resultado ser tu y nuestra perdición, porque la avaricia existe aquí y en cualquier lado, ya lo debes ver. Nuestro gobernante, el gran Rey HyunWoo ha escuchado de lo que eres y puedes ser capaz. Hemos recibido hace poco un comunicado, el Rey dijo que quería conocerte, porque eres el primer niño que, luego de él, en nuestro mundo, tiene más de cinco habilidades. Evidentemente algo de eso no nos dejó tranquilos, supimos que ese comunicado no era una invitación o una felicitación, es una advertencia. Él te quiere, BaekHyun, porque sabe que eres el único ser vivo que podría estar a su nivel y serías capaz de desafiarlo en un futuro."
¿Y realmente él podía hacerlo? ¿Desafiaría a ese Rey para qué? ¿Quedarse con su Reino? ¡Ni siquiera lo conocía antes ni ahora! No sabía siquiera qué poderes tenía él, cómo usar los suyos en su contra. Todo esto era absurdo. ¿Un Rey psicótico quería hacerle tanto daño por temer que le quitarían su feo y sucio Trono?
Él no podía creer esto.
"Sé que es difícil de creer, sobre todo porque ahora eres un niño, y serías incapaz de hacerle el más mínimo daño a un insecto, pero supongo que cuando tienes tanto poder, a veces, simplemente, explotas. Tu madre y yo lo hemos descubierto de buena fuente no hace mucho. El Rey te quiere, pero para quitarte todas tus habilidades y transmitírselas a sí mismo. Así será el hombre más poderoso de nuestro mundo. Es un asunto difícil lo de los poderes en Luce, nuestro mundo, BaekHyun, no como en algunos otros lados que conocemos, algo que ha provocado grandes problemas, en los cuales nosotros estamos profundamente involucrados. ¿Loco, cierto? Seguro ahora debes de preguntarte por qué tenemos este tipo de gobernante y cómo funcionan algunas cosas aquí. Esa tal vez sea una historia para otro día."
BaekHyun no podía creer que su padre hiciera chistes y bromas en este momento, en ese mensaje y de tal modo. Como si no hubiera mencionado un crimen atroz, como si no lo advirtiera de un destino incierto y no hubiera hablado de su muerte hace unos segundos con la que ahora no mantuviera a BaekHyun pensando. Su planeta, Luce, por fin conocía un poco más al respecto, pero al mismo tiempo... seguía en blanco sobre ello.
"Lo importante, BaekHyun, es que no permitas que eso pase. Porque si tu madre y yo hemos sacrificado tanto, es por ti, porque te amamos, te creamos con amor, no con ninguna otra intención, y esperamos que eso sea lo que tú estés transmitiendo donde quiera que estés. Vive una vida plena, crece, aprende, enamórate, ten una familia o vive para ti mismo, pero no dejes que nadie gobierne tu vida, no dejes que algún loco avaricioso de poder vaya a vencerte para robar todo por lo que eres especial y te quite la vida con ello para vanagloriarse. Esperamos que, cuando las cosas mejoren, quizá este sacrificio que hagamos no solo sea para darte la vida que te mereces, sino el mundo que debiste conocer, así como muchos otros niños. Puede que por eso mismo te planeáramos en algún punto con una misión, pero ahora las cosas han cambiado y tú... Ya sabes para lo que realmente estás hecho, hijo."
¿Estaba hecho para dar amor? ¿Para recibir amor?
¿Para dar amor y esperanza?
La imagen parpadeó, pero al terminar su padre de hablar y mostrarle una sonrisa, ella cambió y mostró ahora una distinta.
Era su madre, a la que no veía, todavía muy entretenido al darse pena a sí mismo, hasta que le escuchó decirle:
"Mi niño," sus ojos tomaron poder propio entonces, y al detener el llanto, las lágrimas y todo, BaekHyun alzó la mirada y vio a su hermosa y tierna madre.
Si bien había dicho que las mujeres de su pueblo debían ser horribles por la imagen que la mujer en las Fuerzas Doradas le daba, eso era porque evidentemente no había visto aún a su madre.
Ella sí que era hermosa, y su dulce sonrisa le dejaba más que enamorado. Tenía las facciones más delicadas, de la misma forma que sus montículos en la cabeza, sus ojos eran pequeños, al igual que sus labios blancos, pero el tamaño de su boca era más grande. Su nariz terminaba como botón que asemejaba la suya, así como una pequeña marca sobre su labio y junto a su ojo derecho, parecían lunares grises, idénticos a los que él se había puesto en su versión humana sin siquiera saber la razón en un principio.
Era única.
"Yo sé que has escuchado mucho ya por tu padre. Sé que algo de ello te ha podido asustar o doler, así que, por eso, yo quiero decirte, en cambio, una sola cosa," se agachó, casi como si supiera que estaba ahora tirado en el piso. Ella posicionó sus manos sobre su regazo y sonrió. "Te amo, hijo, y eso es todo lo que tienes que saber para entender lo que hemos hecho por ti. Realmente habría deseado pasar mucho más tiempo a tu lado, y si tu padre y yo hubiéramos tenido la oportunidad, nos habríamos ido contigo, pero con mucho esfuerzo estamos haciendo posible tu huida. Sin contar que nosotros todavía tenemos una misión aquí que no hemos cumplido, así que, por más que nos pese todo esto, hemos tenido que tomar tal dura decisión."
BaekHyun sonrió, al igual que ella al verla suspirar, colmados los ojos de ambos por lágrimas, pero eso no le evitó que soltara una risita divertida, como si no se creyera lo que hacía y decía al pasarse una mano para eliminar eso que él con un solo movimiento no podía.
"Tu padre también te ha dicho muchas cosas ya, sobre ti y sobre tu vida, pero yo voy a añadir algo más a eso, para que te quede claro: no sufras, hijo, no por nosotros. Porque, aunque en la vida no todo puede ser alegría, paz y tranquilidad, quiero que al menos aprendas por mí que siempre para todo lo malo hay algo positivo, alguna luz que dé solución y esperanza. No hagas nada que te haga sufrir por las decisiones de otros y lo que alguien te haya hecho."
Estiró su mano. BaekHyun casi pudo verla tocando su mejilla con amor y cariño, pero él solo hipó al querer recargarse sobre ese peso y descubrir que no había nada que lo sostuviera.
"Mi más grande tesoro, nos veremos algún día, de eso no tengas duda. Te amo."
La grabación se detuvo con eso y su imagen se perdió. No hubo más, ella desapareció, al igual que su padre, su historia. Solo quedó el brazalete deshecho y la foto aún en la esquina.
Sin embargo, aun así, BaekHyun no pudo parar su llanto. Porque, aunque su madre y su padre le dijeran que viviera y que no sufriera por algo que ellos habían decidido, todavía no podía superar que todo fuera cierto.
Que él no solo hubiera provocado muerte ahí en la Tierra, sino también con sus padres.
¿Cómo podía traer esperanza si él era la causa de tales obras? ¿Cómo podía ser luz si oscuridad se había otorgado a otros por su causa?
No importaba lo que sus verdaderos padres, SeHun, Bul o incluso el mismo JongDae en algún punto habían creído: esto era demasiado.
Él ya no se sentía un héroe al igual que antes.
Y la soledad en su casa fue la única que le dio brazos abiertos para consolar en esa noche todo aquello.
Seguimos con la parte triste... Lo sé, lo siento, pero esta vez la cosa fue más corta.
Espero que estén disfrutando de la historia, a pesar de todo~
En serio, estamos ya tan cerca del final, pero al mismo tiempo parece que hay tantas cosas por resolver todavía, ¿cierto? No se preocupen, todo llegará a su momento 😌
Por ahora, solo les dejaré una pregunta: ¿cómo se sentirían ustedes si estuvieran en el papel de BaekHyun?
¿Y creen que haya algún punto en el que todo esto se concilie? ¿O habrá algún suceso importante más adelante que nos dará motor para seguir y terminar con todo este dolor que estamos acarreando desde hace ya unos días?
¡Nos leeremos! Saben que los quiero 💙
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