Johannah se incorpora en la cama con una rapidez sorprendente, sus ojos ampliados con una expresión alegre. Es hora. Ella lo sabe. Finalmente su hijo consiguió valor. Se siente tan orgullosa y todavía Louis no ha dicho nada.

—Habla con nosotros, cariño. —Lo anima, dando palmadas en la cama invitándolo a sentarse junto a ellos.

Louis traga saliva, sintiendo cómo sus pies se adhieren al piso, evitando que pueda avanzar hasta la cama. Rayos, es tan difícil. Jamás pensó que fuera tan difícil. Acaba de olvidar todo el discurso practicado. Quiere darse la vuelta y salir corriendo, pero entonces Johannah se pone de pie y camina hacia él antes de que logre escapar, como un instinto materno.

—Mi amor, ¿estás bien? Todo estará bien, cielo. —Lo toma en un fuerte abrazo, y Louis se siente tan diminuto en este momento.

Mark los observa desde la cama, sin entender realmente de qué va la situación. Él sólo quiere dormir porque ya es muy tarde y debe trabajar al día siguiente.

—Habla, bebé. Por favor di eso tan importante que tienes que decir. Queremos escucharte. —Su madre lo anima una vez más, pero Louis tiene los labios sellados, y tiene tanto miedo que comienza a temblar.

—Y-yo... No puedo. —Sacude la cabeza. Johannah suspira profundo, pensando en algo más efectivo para ayudar a su hijo en esta difícil situación. No quiere esto para Louis, odia verlo tan asustado tratando de confesar algo que es importante para él. Odia ver esa mirada de terror en su rostro, simplemente no lo soporta.

—Lou, somos tus padres, nada malo va a pasar. Puedes confiar en nosotros, lo sabes. —Insiste. Louis se muerde la lengua, observando a su padre por encima del hombro de Johannah.

Él no lo va a aceptar. Tal vez su madre lo haga, pero sabe que su padre no lo aceptará. ¿Y si se va del país como hizo el papá de Harry? ¿Y si destruye el matrimonio de sus padres? Eso sería fatal.

—Es que yo... Yo no... Ugh, perdón, no puedo hablar. —Tira de su cabello con frustración. Es tan estúpido y tan cobarde. Quiere llorar de la impotencia, pero siempre termina en la misma situación cada vez que intenta confesarlo. Esta vez no quiere terminar igual.

Johannah hace una mueca—. Respira profundo, no sientas miedo, mamá está aquí para ti. ¿Recuerdas cuando eras un pequeño y venías corriendo hacia mí cuando sentías miedo? —Louis asiente, levando la vista para ver los ojos de su madre—. Lo mismo sucede ahora. No temas de mí, por favor. Siempre voy a apoyarte.

—¿De qué se trata tanta palabrería emocional? —Mark comenta con diversión desde la cama. Johannah se gira hacia él, con el ceño fruncido.

—Mark, tu hijo atraviesa una crisis nerviosa. ¿Podrías cerrar la boca y acercarte? Louis nos necesita. —Habla con firmeza.

—Claro. —Mark se levanta de la cama y se acerca a ellos con rapidez, tomando a Louis en un fuerte abrazo—. ¿Qué sucede, hijo?

Ahora ambos padres se encuentran frente a él, interrogándolo, y se siente tan pequeño y aterrado. Louis tiembla, y Johannah sólo quiere abrazarlo y mimarlo para mostrarle todo su apoyo incondicional, le rompe el corazón verlo tan asustado y vulnerable, sabiendo lo que está a punto de confesar. Había esperado tanto para esto. Para que Louis sea feliz.

—Sólo no sientas miedo de hablarnos, Lou. Estaremos bien, sea lo que sea. —Louis asiente. Tomando una larga respiración.

Louis piensa en Harry. Él merece esto. Sólo trata de imaginar la sonrisa de felicidad en el rostro del menor cuando todo se sepa y puedan ser libres y mostrar su amor sin tener que ocultarse. Harry sería feliz, quiere esto más que cualquier otra cosa, Louis no puede seguir siendo un cobarde, no puede hacerlo esperar un minuto más después de todo lo que Harry acaba de contarle. No quiere recordarle a Jacob, Louis no es igual a él. Louis lo ama.

—Yo... —De nuevo su lengua parece quedarse trabada en su paladar. Johannah acaricia su espalda con suavidad.

—Tú puedes, sólo dilo. —Asiente, cerrando los ojos, imaginando que está solo en la habitación.

—Uhmm sí. Me... Me gusta alguien. —Comienza. Johannah sonríe ampliamente, y Mark la observa con una ceja enarcada.

—Eso está bien, no hay nada de malo con eso, amor. —Comenta la mujer sin dejar de sonreír. Louis sacude la cabeza, aún con los ojos cerrados.

—No, no hay nada de malo. —Se repite a él mismo.

—¿Quién es la chica? Es una bailarina de ballet, ¿cierto? Por eso terminaste tu relación con Brianna. —Comenta Mark, Johannah lo observa con molestia.

—¡Mark! —Exclama. Louis se muerde el labio, incluso más nervioso que antes.

—No papá, no es... No es una... Ugh, bueno, no es una chica. —Confiesa finalmente, atreviéndose a dar ese gran paso únicamente para complacer a su chico y cumplir esa promesa que tanto anhela.

Hay un silencio en la habitación después de eso. Y Louis no abre los ojos, no quiere saber la reacción de sus padres, sólo quiere correr y salir de la habitación lo más rápido posible.

—¿Cómo? —Pregunta Mark, atónito. Johannah le susurra algo que Louis no es capaz de escuchar, entonces Mark se vuelve más confundido.

—Yo, uhmm, él es un chico. M-me gusta un chico. —Dice, abriendo los ojos para observar a sus padres frente a él.

—¿Un chico? —Pregunta Mark, realmente incrédulo. Louis asiente débilmente.

—Sí. Soy gay. —Se muerde el labio, agachando la cabeza.

Johannah quiere gritar. ¡Lo hizo! Finalmente lo hizo. Su corazón late con mucha rapidez, con una alegría que no cabe en su pecho. Está tan orgullosa de Louis, y tan feliz por él.

—Te amo. Ven aquí, cariño. —Louis levanta la cabeza con asombro al escuchar a su madre. Y sin dudarlo se lanza sobre ella para recibir ese abrazo tan esperado por Louis—. Estoy orgullosa, no sabes cuánto.

Mark todavía no logra reaccionar, y no quiere decir nada que seguramente afecte a Louis, esperará hasta mañana para hablar con él, primero tiene que procesar todo esto.

—¿Mark? —Su esposa lo llama, pero él sacude la cabeza y sale de la habitación sin decir nada. Y Louis se siente un poco decepcionado—. No te preocupes, él va a estar bien, fue por agua seguramente. Tú no te preocupes.

—Lo siento. —Murmura el chico, agachando la cabeza. Johannah levanta su mentón para verlo a los ojos.

—No lo hagas. No te disculpes. Nadie se disculpa por estar enamorado. —Asiente.

—Lo estoy. —Johannah suspira profundo, sintiendo emoción.

—¿Quién es él? —Louis sonríe inconscientemente, y Johannah no puede evitar sonreír de igual manera al ver a su hijo enamorado por primera vez.

—Él es tan lindo, mamá. Cuando lo conocí jamás pensé que estaría enamorado de él dos meses después. No pensé que pudiera sentir algo tan fuerte por una persona. No había sentido nada como esto por una chica. —Confiesa, y Johannah adora la confianza que Louis consigue para admitir eso.

—Debe ser un chico especial. —Él asiente.

—Lo es. Se trata de... —Mark entra nuevamente en la habitación con un vaso en la mano, interrumpiendo la conversación.

—Es hora de dormir. —Dice mirando fijamente a Louis, sin ninguna expresión. De repente se siente incómodo por estar allí.

—Sí, buenas noches. —Louis agacha la cabeza mientras camina hacia la puerta.

—Louis. —Lo llama antes de que salga por la puerta. El chico se gira para mirarlo con algo de esperanza—. Hablaremos mañana sobre esto. —Louis sólo asiente, y Mark suspira profundo—. Duerme bien.

Esa noche Louis se duerme sintiéndose liberado. Claro, todavía no les ha dicho a sus padres quién es el chico que le gusta, pero acaba de dar un gran paso. Acaba de salir del closet con sus padres.

Se duerme sintiéndose orgulloso de sí mismo, y más enamorado que antes.

                               ×××

El miércoles cuando Zayn llega a la universidad, busca a Liam por todo el recinto, pero antes de que pueda dar un paso más, Gigi está sobre él, llenándolo de besos.

—Gigi por favor. —Dice con amargura, tomándola por los brazos para apartarla—. Sabes que no me gusta esta clase de afecto.

La chica se endereza, mirando a su alrededor, esperando que nadie haya visto el rechazo de su novio.

—Sabes que no me gusta que me rechaces en público. —Murmura ella, apretando la mandíbula. Zayn pone los ojos en blanco.

—¿Has visto a Liam? Necesito hablar con él. —Sigue buscando con la mirada, ignorando a su novia por completo.

—Sí, él está muy enojado con Danielle, me dijo que se enojó con ella sin ninguna razón. ¿No es raro? Liam nunca se enoja sin razón alguna. —Pregunta de manera decrépita. Zayn la observa con molestia.

—¿Por qué no te preocupas por entrar a tus clases? Te veo después. —Le da la espalda sin esperar una respuesta.

Gigi simplemente sonríe, tratando de lucir feliz, como si su novio realmente no fuera una basura la mayoría del tiempo. Le duele su actitud, Zayn nunca ha sido un chico romántico, pero ella nunca se cansará de presumir de él como el mejor novio del mundo, para ocultar lo que verdaderamente es.

Zayn camina directamente hacia su salón, pasando por los largos pasillos de la universidad. Cuando está cerca del salón, logra ver a Josh mientras éste sale del baño. Sus miradas se encuentran, y Josh camina con rapidez para no cruzarse con el moreno. Puede ver en su mirada que está molesto, y trata de escapar, pero Zayn corre hacia él, sin ocultar su enojo.

Cuando lo alcanza, lo empuja contra los casilleros y le estampa un golpe en la mejilla izquierda. Josh se estremece ante el contacto, pero no intenta defenderse.

—¡Maldito traidor! —Grita el moreno, empujándolo contra los casilleros por segunda vez.

Josh toma sus manos antes de que Zayn intente volver a golpearlo.

—¡No le dije, no le dije! ¡Cálmate! No le dije la historia completa. —Se excusa. Zayn cierra los puños con fuerza, derrochando molestia.

—¡Lo hiciste! Te pedí que no le dijeras a nadie, ¡te lo supliqué! ¿Por qué quieres arruinar mi vida? —Josh sacude la cabeza.

—Él me pidió...

—¡Cierra la boca! ¡Arruinaste mi amistad con Liam! —Grita, interrumpiéndolo.

—Zayn, perdón, yo no... —No le permite terminar la oración.

—No me digas nada, no quiero escucharte. Me das asco, eres repugnante. Alejate de mí, y no te metas en mi camino. Te detesto.

Lo empuja una última vez contra los casilleros antes de alejarse con rapidez hacia su salón. Y Josh se odia por haber revelado el secreto de Zayn. Lo ama, aunque el moreno no sienta una pizca de amor por él.

Cuando Zayn entra en el salón de clase, nota como Liam rueda los ojos al verlo. El moreno hace una mueca triste antes de caminar cabizbajo hacia su puesto, justo al lado de Liam.

Ninguno de los dos dice nada, Liam no le dirige la mirada en ningún momento, mientras que Zayn lo observa de reojo, ignorando completamente la clase que dicta el profesor.

—¿Liam? —Lo llama, pero el castaño hace caso omiso—. Li, háblame por favor, no quiero estar mal contigo.

Liam lo mira de reojo, y nota cómo Zayn se acerca, rozando su brazo con el suyo.

—Perdón, tenía miedo de contarte, no quería que nadie lo supiera. Tenía vergüenza, y todavía la tengo. No quería que pensaras mal de mí, yo no busqué que eso pasara, Liam. —Susurra, y Liam se va relajando con cada palabra—. Mi papá odia a los homosexuales, lo sabes, él me mataría. Tenía miedo de que la historia llegase a oídos de mi padre.

—Jamás se lo diría a tu papá, Zayn, sé lo mucho que odia a los homosexuales. No quiero que nada malo te pase, eres mi mejor amigo junto con Lou. —Zayn sonríe débilmente.

—Lo sé, fui un tonto, debí confiar en ti. —Liam lo observa con atención.

—¿Seguirás fingiendo? —Los ojos de Zayn se amplían.

—Liam... —El castaño lo interrumpe.

—Debes aceptarte, Zayn.

—No soy gay, Liam. —Asegura, frunciendo el ceño.

Y Liam decide dejarlo pasar, simplemente porque no quiere sacar el tema de esa noche, cuando Zayn en su máximo estado de ebriedad confesó su homosexualidad frente a Josh y él.

Zayn necesita aceptarse.

                              ×××

Harry se incorpora en la cama cuando la puerta de su habitación es abierta por Louis, quien está cargando una bandeja de comida.

—Buenos días, chiquito. —Dice con una sonrisa amplia mientras empuja la puerta con su cadera para cerrarla. Harry se estira un poco antes de reaccionar, ya que prácticamente acaba de despertar.

—Louis, no tienes que traerme desayuno, yo soy el mucamo, no tú. —Habla con voz ronca y cansada. Louis pone los ojos en blanco.

—¿Está mal que quiera mimar a mi mucamo como se merece? —Pregunta con picardía. Harry se sonroja, sacudiendo la cabeza con timidez. Louis está complacido con su reacción.

—No.

—Bien, porque no pensaba detenerme. —Se acerca, dejando la bandeja en la mesa de noche a un lado de la cama.

—¿Por qué actúas tan lindo esta mañana? —Pregunta el menor antes de bostezar, cubriendo su boca. Es la máxima expresión de la ternura, Louis no deja de pensar.

—Tengo buenas noticias. —Anuncia, sentándose a su lado.

—¿De verdad? —Harry abre los ojos con curiosidad.

—Sip.

—¿Cuáles noticias, Louis? —Se coloca de rodillas frente a Louis para tener una mejor vista de él.

—Oficialmente salí del closet con mis padres. —Comenta con orgullo. Harry queda boquiabierto por un minuto.

—No lo hiciste. —Dice sin poder creerlo. Louis se ríe de su expresión sorprendida.

—Es verdad, ayer les confesé a mis padres que me gusta un hermoso chico y que estoy enamorado profundamente de él. —Le guiña un ojo, y Harry se derrite a simple vista.

—Oww basta. —Se sonroja bajando la cabeza. Louis sonríe mucho más al ver sus mejillas coloradas—. ¿Ellos saben que se trata de mí? —Pregunta tímido. Louis hace una mueca.

—No. Me faltó decirles eso. —Claramente ve cómo se entristece de un momento a otro—. No lo hice por una razón, Harry, no pienses que no quise decirles que se trata de ti. No me avergüenzas, de hecho me sentiría orgulloso de decir que estamos juntos. —Explica con calma.

—¿Por qué no lo hiciste?

—Mi papá me sacó de la habitación, literalmente. —Harry abre los ojos como platos.

—Oh, ¿él se enojó? —Louis sacude la cabeza, aunque en realidad no sabe la respuesta.

—Eso creo. La verdad no quiero pensar en eso ahora. —Se encoge de hombros.

—Gracias por el desayuno. Nadie me había traído desayuno a la cama, nadie que no fuese mi mamá, o Jennifer cuando quiere animarme o pedirme algo... ¿Quieres pedirme algo, Louis? —Pregunta expectante. Louis se ríe.

—No, sólo quiero consentirte. —Pero Harry no parece muy seguro de la respuesta.

—Oh. ¿Pero realmente no quieres pedirme algo? Cualquier cosa, lo que sea. —Louis lo mira fijamente antes de responder.

—No Harry, no lo hago por ningún interés. —Harry respira con alivio al notar la honestidad de Louis, y asiente.

—Okay. —Responde tranquilo, tomando un pan con mermelada de la bandeja.

—Ayer no fuiste a la academia, y hoy tampoco estás listo. —Comenta, observando la pijama de Harry. El menor agacha la cabeza.

—No iré. Voy a dejar la academia. —Louis se sorprende al escuchar eso, y frunce el ceño, decepcionado.

—¿Fue por Brianna? —Harry lo niega, pero Louis sabe que miente—. No voy a permitir que dejes la academia. Tú amas el ballet, es tu vida, no puedes renunciar a tu sueño por un enfrentamiento que tuviste con Brianna.

—Louis, ella me humilló frente a la instructora y frente a todas las chicas. No quiero ir, tengo vergüenza. —Se encoge, sintiéndose diminuto.

—Vas a ir. No puedes abandonar la academia, es lo que te hace feliz. No voy a permitir que nadie arruine tus sueños. En este momento te pondrás tu linda lycra y te llevaré a la academia, quieras o no. —Dice con voz autoritaria.

—Louis...

—No me iré. Estaré contigo durante toda la clase, y no voy a permitir que te humillen. Lo prometo. —Harry asiente, todavía inseguro.

—Bien. —Acepta.

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>

Hola bellezas ❤❤ ¿Esperaban eso? Comenten sus sinceras opiniones 😙

Capítulo dedicado a:

xharriexloux, LadyOfRavenPuff, XDollHouseX, camuly, MichelleVallejos, LouisForroDeXvida, ruxenniall, -fucklarry, StylieTommo, Pagina2_, _ThemagicUnicorn_, freedomOpsHi, lemonhazz, Amdeh5

Cada día los amo más!! *--* besos!!

Copyright © yafanfiction