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Disculpen por la demora 😞
Jimin y Yoongi intercambiaron una mirada incómoda, sintiendo una profunda pena al ver al gran Kim Namjoon, normalmente tan fuerte y seguro, llorando desconsoladamente y pidiéndole disculpas a su esposo.
Su voz temblorosa y sus palabras suplicantes hacían que el ambiente se volviera aún más tenso.
Mientras tanto, Seokjin se encontraba con los brazos cruzados, negando con la cabeza en un gesto de desaprobación y tristeza.
Aunque también él sentía el impulso de llorar al ver a su esposo en ese estado de vulnerabilidad, se esforzaba por mantener la compostura, sin querer mostrar su debilidad ante él.
Su rostro reflejaba una mezcla de preocupación y amor, mientras luchaba por no soltar lágrimas.
—Por favor, amor mío, haré las cosas bien, perdóname—suplicó Namjoon, dejándose caer de rodillas al duro piso, su voz temblorosa y llena de desesperación, su mirada suplicante se clavó en la de su esposo, buscando perdón y comprensión. Seokjin desvió la mirada mordiendo su labio inferior con fuerza.—no terminemos con lo hermoso que tenemos, no nos divorciemos por favor...—haré las cosas bien—tocó su pecho.
Yoongi se mostró sorprendido por la escena, pero su expresión no reflejó egoísmo ni burla, en su lugar, sintió una profunda empatía hacia Namjoon,
El también sabía que habría reaccionado de manera similar si estuviera en su lugar, y que también se arrodillaría y suplicaría para no perder a su bonito amor, Jimin.
Conmovido por la escena, Yoongi jaló con delicadeza a Jimin, llevándolo hasta la habitación del rubio, pues sentía que estaban de más y que la pareja necesitaba un momento de intimidad para resolver sus problemas.
Dejaron solos a Namjoon y Seokjin, esperando que pudieran encontrar una solución para su relación.
—Ya levántate, Kim—dijo Seokjin, arrugando su frente en un gesto de preocupación y frustración.—Hey...
—No quiero que nos divorciemos, amor... —
—Levántate—repitió, con un tono de voz un poco más fuerte, pero sin perder la calma.
Namjoon asintió, poniéndose de pie y extendiendo sus manos para agarrar a Seokjin, pero este apartó sus manos, no queriendo que lo tocara. Después soltó un largo suspiro y lo miró a los ojos, con una mezcla de tristeza y decepción.—Ya es muy tarde—dijo, Namjoon se soltó a llorar aún más, negando con su cabeza en un gesto de desesperación.—Por tu culpa, mis hijos y yo hemos sufrido—continuó Seokjin, su voz temblando de emoción—. Siempre ha estado primero tu familia, tu sobrino y después nosotros...—Una lágrima traicionera comenzó a rodar por su mejilla, pero Seokjin se la limpió bruscamente con su mano, no quería mostrarse débil ante su esposo.—Y no es así, no has sido justo con nosotros—prosiguió—. Mucho menos con Taehyung, tu propio hijo...
—El pelinegro se arrodilló de nuevo, su rostro desencajado por la desesperación y el miedo.—Pero ya no será así, cambiaré, juro que lo haré—suplicó, su voz llena de angustia—ustedes serán mi prioridad, solo ustedes.
—No Namjoon.
—Cariño...—con un tono de voz suplicante.
—Vete—señaló hacia la puerta—no hagas esto más difícil...
Namjoon lo miró, las lágrimas seguían bajando como cascadas en sus mejillas, pero asintió levantándose, luego acuno con sus manos las mejillas de su esposo.
Después, le dio un beso suave en la frente, en un gesto de amor y arrepentimiento.
—Me iré, pero volveré—prometió, su voz temblando de emoción—. Volveré a suplicarte de rodillas que me perdones, volveré y le pediré disculpas a mis hijos por mi comportamiento. No importa si me toma toda una vida o me arrastre por ustedes, por su perdón, pero los amo y por ustedes haré cualquier cosa.—Una débil sonrisa se dibujó en su rostro, mientras sus ojos seguían brillando de lágrimas.—Te amo, Kim Seokjin, jamás lo olvides—le dijo, antes de darle un último beso en la frente. Finalmente, se dio media vuelta y se retiró del departamento, dejando atrás una estela de tristeza y arrepentimiento.
[...]
—Es triste ver al señor Kim de esa forma—comentó Jimin, apenado, mientras Yoongi le acariciaba suavemente el vientre con la palma de su mano, en un gesto tierno y reconfortante. Algo en su instinto lo llamaba a hacerlo, como si necesitara ofrecerle consuelo y tranquilidad en ese momento. Estaban acostados en la cama de Jimin, rodeados de la calidez y la intimidad de su espacio personal.—Pero también entiendo al señor Seokjin y a mi soulmate—hizo una pausa—pero que tonto ha sido el señor Nam—dijo Jimin en un tono un poco molesto, abultando sus esponjosos labios y volviendo ligeramente su cabeza para mirar a Yoongi, sus ojos buscando conexión y comprensión. —Cuando adoptemos... —La voz de Jimin se desvaneció por un momento, como si estuviera sopesando sus palabras. Yoongi asintió con la cabeza, su rostro pálido pero lleno de emoción. Jimin continuó, su voz llena de convicción.—Nuestro bebé tiene que ser tu prioridad... —La mirada de Jimin se clavó en la de Yoongi, buscando asegurarse de que entendiera la importancia de sus palabras.
—Yoongi sonrió, su rostro iluminándose con una expresión de amor y devoción. —Los dos serán mi prioridad—corrigió, su voz llena de convicción. —Tú y nuestro bebé serán siempre mi principal preocupación, mi amor.
—Te amo mucho, Gigi—sonrió Jimin emocionado, abrazando a su amado con fuerza y escondiendo su pequeña nariz en el cuello blanquecino de Yoongi, inhalando el aroma familiar y reconfortante de su piel.
—Y yo te amo a ti, mi amor—soltó Yoongi enamorado, dándole un beso suave en la cabeza, su voz llena de ternura y devoción.
Sus brazos se cerraron alrededor de Jimin, acunándolo en un abrazo cálido y protector.
Su burbuja de amor se reventó bruscamente cuando escucharon un fuerte sollozo que resonó en la habitación contigua.
Jimin se sobresaltó y se levantó de la cama rápidamente, su rostro reflejando preocupación y se fue corriendo hasta la sala, sin siquiera mirar atrás, mientras que Yoongi, igualmente preocupado, le siguió de cerca.
Cuando llegaron a la sala, encontraron a Seokjin sentado en el piso, con su cabeza escondida entre sus brazos y piernas, su cuerpo sacudido por sollozos.
La escena era desgarradora, Jimin y Yoongi se miraron entre sí, compartiendo una mirada de preocupación y compasión.
—Señor Seokjin...—Jimin se acercó a él, arrodillándose y acariciándole la espalda con suavidad, intentando ofrecerle consuelo, pero antes de que pudiera decir algo más, la puerta se abrió, Jimin y Yoongi miraron en dirección a ella, encontrándose con Kim Taehyung, que entró con una sonrisa de felicidad en el rostro.
Sin embargo, su expresión cambió drásticament, su sonrisa se desvaneció y una mirada de preocupación y sorpresa tomó su lugar. Tiro sus cosas en el piso bruscamente y, al igual que Jimin, se arrodilló junto a su papá, abrazándolo con fuerza.
—Tu papá vino—susurró Jimin, avisándole.
Taehyung simplemente soltó un suspiro, su mirada clavada en la espalda de su papá, que se sacudía por los sollozos.
—Papi, aquí estoy...—dijo Taehyung suavemente—ya no llores más...
Pero entonces, Seokjin habló, y las palabras que salieron de su boca dejaron a Taehyung atónito.
—Le pedí el divorcio a tu papá—dijo Seokjin, su voz quebrada por la emoción.
Hasta ese entonces, Taehyung no sabía.
Él había supuesto que su papá estaba triste por la discusión que habían tenido, pero no había imaginado que Seokjin le había pedido el divorcio a su papá .
—¿Qué...?—preguntó Taehyung, sorprendido y confundido.
—Seokjin levantó la cabeza, y sus ojos se encontraron con los de su hijo.—Lo hice, hijo—dijo, su voz llena de dolor—. Lo amo, sí, pero ustedes son primero... Mi prioridad siempre serán mis hijos.
Taehyung se sintió abrumado por una mezcla de emociones, luego se acercó a su papá y le limpió las mejillas con sus manos.
Borrando todo rastro de lágrimas.
—Papi...—dijo Taehyung, su voz llena de amor y comprensión—. Con cualquier decisión que tomes, estaré para ti, Sik y yo te apoyaremos. Siempre estaremos a tu lado.
Seokjin sonrió a duras penas, abrazándose con su hijo y Jimin.
[...]
Namjoon ingresó a su casa, se sacó sus zapatos y los dejó a un costado de la puerta, miró a su alrededor con una sensación de vacío y soledad. Todo estaba en silencio, sin las risas peculiares de su esposo y sus hijos, sin el sonido de sus voces, sin la energía y el calor que siempre llenaban cada rincón de la casa.
La gran mansión, que normalmente era un hogar lleno de vida y amor, se sentía ahora como un espacio vacío y solitario, Namjoon suspiró, sintiendo la ausencia de su familia como un peso en su corazón.
De repente, una notificación de su celular lo hizo salir del mundo de sus pensamientos, así que sacó su celular y encendió la pantalla.
Su corazón se detuvo por un momento al ver una notificación del banco.
Jeon Jungkook ha realizado una transferencia de $1,000,000
Ya me siguen por IG?
¿No?
Que esperan?!
Jskajsk
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