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Pensamiento de los personajes.

Cuando están hablando con su conciencia.

"Conciencia"
Personaje

La mañana lo recibió con los brazos abiertos y una sonrisa en el rostro, y él no podía evitar sentirse rejuvenecido, como si hubiera devuelto a una versión más joven y vibrante de sí mismo

El poder del sexo, decía el.

Se recostó en su cama, sumergido en la comodidad de las almohadas, y no pudo evitar dejar vagar su mirada hacia su acompañante, que yacía a su lado, cubierto solo por una sábana que apenas llegaba a cubrir su parte baja.
La luz suave del amanecer se filtraba por la ventana, iluminando suavemente el cuerpo de su compañero, realzando cada curva y cada línea de su figura. Jungkook sintió un escalofrío de placer al contemplar la belleza que tenía frente a él, y no pudo evitar sentirse atraído hacia esa piel suave y cálida.

Sin ser consciente de sus acciones, o tal vez si, se inclinó hasta el castaño dejándole un beso en la mejilla y uno en la punta de su nariz, Taehyung se removió pero no se levantó. O eso creía creer el azabache.

Jungkook sonrió de lado y se levantó de su cama, agarrando una toalla de su armario y dirigiéndose hasta el baño para darse una larga ducha.

Tan pronto como Taehyung escuchó el sonido de la puerta cerrándose, se levantó de la cama, soltando un quejido se escapó de sus labios mientras se incorporaba, su parte baja palpitaba con una intensidad que nunca antes había experimentado.

(TH)
"Nos dieron muy bien, quiero más"

Cállate.

Con una mirada rápida, localizó su ropa esparcida en el suelo y se apresuró a vestirse, ansioso por escapar de allí lo antes posible. Cada movimiento era una lucha contra el dolor y la incomodidad, pero su deseo de huir era más fuerte

—Tonto por quedarte dormido—se recriminó en voz baja mientras se abrochaba el pantalón. Se sentía incómodo, no solo por el dolor, sino también por no haber podido encontrar sus bragas, que parecían haberse esfumado. —Dónde diablos está mi top—refunfuñó, mirando alrededor con frustración. Al no encontrarlo agarró una camiseta de su jefe—luego se la devolveré.—toqueteó sus pantalones y no estaba su billetera.—también esto—agarró la billetera de Jungkook y sacó unos cuantos billetes—prometo devolverlo y con interés— susurro y salió del departamento como si fuese un ladrón.

Al entrar en el ascensor, Taehyung se enfrentó a su reflejo en el espejo y soltó un jadeo de sorpresa. Su cuello estaba cubierto de marcas rojas y moradas.

—Si que es un salvaje...

"No te quejabas antes"

—Taehyung ignoró a su consciencia y se toqueteó su cuello—¿cómo cubriré esto?—las puertas del ascensor se abrieron y el salió a pasos rápidos del mismo. Parando al primer taxi que se le cruzó y diciéndole que lo llevaran a su departamento.


[...]


Las puertas del ascensor se abrieron con un susurro, revelando a Jungkook con el ceño fruncido y una expresión de disgusto en sus labios. Sus ojos parecían arder con una mezcla de confusión y molestia, como si no pudiera creer que el castaño de antifaz  se hubiera marchado sin decirle una palabra. Eso había arruinado su mañana.

—Buenos días señor Jeon—reverenció Jimin un poco cohibido por la intensa mirada del mayor.

—¿Dónde está Taehyung?—inquiero al no encontrar a su secretario en su puesto.

—Está en el baño—mintió con una sonrisa forzada, mientras lanzaba una mirada nerviosa hacia las puertas del ascensor, esperando que su amigo llegara pronto. No quería que su jefe lo regañara por la tardanza, así que decidió ganar tiempo con una excusa rápida, aunque sabía que no era la más creíble.

—Jimin...—la voz de Jungkook sonó como una advertencia, arrastrando las palabras con una mezcla de duda y sospecha. Su mirada se clavó en Jimin, como si intentara ver más allá de la excusa que había dado. Algo en su instinto le decía que Taehyung no estaba realmente en el baño, y que Jimin estaba ocultando la verdad.

—Jimin, a mi oficina—la voz de Yoongi retumbó a través del intercomunicador, cortando el aire como una orden inapelable. Jimin soltó un suspiro de alivio, como si hubiera evitado un peligro inminente, e hizo una reverencia rápida hacia Jungkook, antes de darse la vuelta y correr hacia la oficina de su jefe con una mezcla de obediencia y nerviosismo.
Sus pasos resonaron en el pasillo, como si estuviera huyendo de la mirada inquisitiva de Jungkook quien soltó un bufido molesto y se fue hasta su oficina.

Veinte minutos más tarde, la puerta se abrió con un suave clic y Jungkook levantó la vista de los documentos que había estado estudiando con atención.
Dejó los papeles a un lado y dirigió su mirada hacia Taehyung, escaneando su apariencia, su secretario estaba vestido de manera informal, como siempre y ya no le sorprendía, con unos pantalones holgados de color verde petróleo que le daban un aire relajado, una camiseta blanca que resaltaba su piel morena y una bufanda.

—Estamos como a 30 grados y estás con una bufanda—dijo negando con su cabeza.

—Buenos días señor—Hizo una reverencia ignorando lo anterior.

—¿Se puede saber por qué recién llegas?—enarca su ceja, esperando la respuesta de su secretario—son las once de la mañana Taehyung —dice con molestia mirando su reloj—dime algo creíble si no quieres que te despida.

(TH)
"Hace unas horas atrás nos trató bonito, ¿por qué ahora no?"

Taehyung ignoró a su conciencia y arrugó su frente.

—Pues, por qué alguien...—El castaño alzó la voz, señalando con el mentón a Jungkook, quien frunció el ceño al escuchar las palabras. —Me dejó abandonado en la discoteca—pateó el piso con el talón de su pie haciendo un berrinche.—Lo estuve buscando por todo el lugar, señor— continuó, su voz llena de indignación, caminando de un lado hacia el otro. —Estuve perdido, sin saber qué hacer. No tenía ni un solo sol para pedir un taxi que me llevara a mi departamento—Tae levantó su dedo, como si estuviera acusando a alguien. —Tuve que caminar muchísimas cuadras para poder  llegar  y hacía muchísimo frío—su voz se quebró, y comenzó a lloriquear.
Jungkook se sintió culpable, su mirada se desvió, incapaz de enfrentar la acusación.
La habitación parecía haberse vuelto más pequeña, y el aire más denso, mientras Taehyung desahogaba su frustración.

(TH)
"Rayos, serías un buen actor, hasta casi me la creo"

Todo para que no nos descubran.
(TH)

—Ya Tae, deja de llorar—Jungkook se levantó de su silla, acercándose al menor y jalándolo del brazo, haciendo que se sentara en el sofá—lo siento ¿si?

—Usted es muy malo—esnifo.

—No fue mi intención dejarte ahí—soltó un suspiro, sentándose a su costado—enserio lo siento, prometo que no volverá a pasar.

—Por hacerme llorar —la voz de Taehyung  tembló, sus labios se abultaron en una expresión exagerada de dolor—, aumente mi pago en 200 dólares más a los 300 que me iba a dar —miró a su jefe con ojos suplicantes—. En total, serían 500 —se sonó la naricita, mientras miraba a su jefe, esperando manipularlo para que aceptara.

Jungkook solo asintió, llevando sus manos hasta la altura del rostro de Taehyung, y con sus pulgares, secó las lágrimas que resbalaban por sus mejillas.

—Esta bien, pero deja de llorar.

Taehyung asintió y dejó de llorar.
Observando a Jungkook sentarse al frente de él.

—Sabes—dijo con una sonrisita—ayer me encontré al castaño—soltó emocionado.
Taehyung desvió la mirada.

—Que bien por usted señor—relamió sus labios.

—Quiero que me averigües que es un doncel—El castaño abrió sus ojitos en grande, sorprendido—ósea, el me dio un resumen—hace una pausa—me dijo que son hombres que pueden embarazarse.—clavó sus ojos en su secretario—es maravilloso, ¿verdad?-Taehyung asintió con sus mejillas muy sonrojadas.

—Le traeré la información más tarde—juega con sus dedos—¿algo más señor?

—Cierto, hoy vendrá un amigo mío...

Y cuando Taehyung iba a preguntar quién, se escucharon unos golpecitos suaves en la puerta del otro lado, interrumpiendo el momento.
La puerta se abrió lentamente y una figura emergió de la sombra, su presencia inesperada llenando la habitación de tensión.

Taehyung desvió la mirada rápidamente, como si tratara de escapar de la intensidad del momento. Sus manos subieron inconscientemente hasta su cuello, cubriéndose a pesar de tener la bufanda puesta. Fue un gesto reflejo, como si tratara de protegerse de la mirada del recién llegado.

—Oh Hyungsik—saludo con una gran sonrisa Jungkook, levantándose de su asiento.

—Jungkook, a los años amigo mío—se dieron un apretón de manos. Su mirada desviándose al pequeño cuerpo que estaba en el sofá. Sonrió, lo había extrañado mucho.

—Tae, ven—Jungkook hizo señas y el menor negó—es un poco tímido—dijo.

—Tae...—Hyungsik frunció su ceño repitiendo las palabras de su amigo, ¿Por qué el apodo cariñoso? Se suponía que eran Jefe y secretario.

—Si, es Tae, bueno, Park Taehyung...—soltó una risa, llamando nuevamente al menor.

El castaño, soltó un suspiro rendido y resignado, como si hubiera aceptado su destino. Luego, hizo caso a su jefe y se acercó a él, colocándose a su costado.

—Te presento a Kim Hyungsik—señaló al castaño mayor, quien miraba intensamente a Taehyung.

—H..hol...que digo, buenos, no, buenas tardes señor Kim—hizo una reverencia.

—Ha estado llorando—no fue una pregunta, fue una afirmación, Kim Hyungsik conocía muy bien a su pequeño hermano. —¿Que le hiciste Jeon?—preguntó con un tono de voz tosco.

—No me hizo nada—se apresuró a decir Taehyung, moviendo sus manos, tratando de calmar a su hermano.

—¿Por qué te pones así?—Jungkook se cruzó de brazos, no entendiendo el comportamiento de su amigo.

Hyungsik cerró sus ojos con fuerza, como si tratara de contener un secreto que amenazaba con escapar. Inhaló profundamente, llenando sus pulmones de aire, y luego exhaló lentamente, tratando de calmar su mente y su corazón. Su amigo no sabía, no podía saber, que "Tae" era su hermano menor, y Hyungsik no quería arruinar el castigo que había sido impuesto. Sabía que su padre, Namjoon, lo mataría si descubría que había intervenido.

—Se tiró en el asiento—Por nada—dejó de mirar a su dongsaeng —¿para que me querías?

Jungkook lo miró con duda. Pero no dijo nada más.

—Hmm, los dejo solos—se apresuró a decir Taehyung, pero una mano alrededor de su muñeca lo detuvo, Hyungsik endureció su mirada.

—Tae, quédate—dijo Jungkook jalándolo con delicadeza—quiero que escuches esto.

—Hmm—Taehyung miró a su hermano, quien estaba muy serio.

(TH)
"Ya valimos"

—¿Recuerdas el perfume que me regalaste?—dijo Jungkook llamando la atención de los hermanos.

—El que me robaste querrás decir—Hyungsik rodo los ojos.

—Te dije que me lo vendieras, pero no quisiste. Así que no me quedó de otra—levantó sus hombros restando importancia después se sentó.

—¿Que tiene el perfume?—enarco su ceja.

—¿Por qué KTH? ¿Son iniciales? ¿O que es?

Los hermanos se miraron fijamente, un silencio entendido fluyendo entre ellos. Taehyung abrió sus ojos, y en ese momento, envió un mensaje mudo a su hermano mayor, una advertencia para que guardara silencio. Hyungsik, que ya había decidido no revelar el secreto, asintió ligeramente con la cabeza.
Luego, Taehyung desvió la mirada, rompiendo el contacto visual.

—¿Para eso me llamas?—con una expresión aburrida en el rostro.

—Solo dime Sik...

—son las iniciales de mi futuro hijo—fue lo primero que se le ocurrió y Taehyung lo miró con una mezcla de confusión y molestia.

—Ah, vale entiendo—Jungkook asintió—también me dijiste que era una edición limitada...

—Para mi familia...

Los ojos de Jungkook brillaron ante esa información, mirando a su secretario.

—Tengo que ir al baño, lo siento—dijo Taehyung, con una voz ligeramente temblorosa. Se levantó de su asiento, evitando la mirada de su jefe y su hermano mayor. Si seguía ahí, sentado y rodeado de la tensión sentía que iba a decir algo que no quería decir, algo que podría arruinar todo.

—¿sigues con diarrea?—preguntó Jungkook, Taehyung soltó un chillido de vergüenza.
Hyungsik frunció el ceño, volteando y mirando a su hermano.

—No señor, y ya deje de decir eso siempre cuando le diga que iré al baño—reclama.

—El azabache suelta una risa—okey, lo siento.—levantó sus manos rendido.
Y Taehyung salió de la oficina, dejando a su hermano con miles de preguntas en la cabeza.
Definitivamente hablaría con sus padres.





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~Blue

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