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Disculpen por la tardanza y gracias a todos los que siguen aquí. 😭❤️
Las amooooooo


—Cariño, tomate el día, ve a tu departamento y alístate porque está noche será especial—le había dicho Jungkook por la mañana.

Y desde entonces, había pasado el día entero sumido en la anticipación, su mente llenándose de preguntas y suposiciones sobre lo que Jungkook tenía planeado. ¿Sería una cena romántica en un restaurante exclusivo como las otras veces? ¿Un paseo por la ciudad bajo la luz de la luna? ¿O algo aún más sorprendente?

Ahora, mientras se preparaba para salir, no podía evitar sentir una mezcla de emoción y nerviosismo. ¿Qué tenía planeado Jungkook para esta noche tan especial?

El timbre del departamento sonó, interrumpiendo el momento de Taehyung frente al espejo, se sobresaltó, y su labial cayó al suelo con un suave ruido.
No se molestó en recogerlo de inmediato, podía hacerlo más tarde, en cambio, se miró nuevamente al espejo, ajustando su postura para admirar su reflejo.

Vestía una elegante camisa de seda celeste que resaltaba su tono de piel y dejaba expuestas sus delicadas clavículas, un pantalón palazzo blanco, perfectamente entallado que abrazaba su cintura con elegancia, y  sus mocasines blancos complementaban su atuendo, añadiendo un toque de sofisticación.

Su maquillaje era sutil pero efectivo, sus ojos, delineados con maestría, parecían más grandes y expresivos, y su mirada adquiría un aire felino y seductor, el leve plateado con brillos en sus párpados añadía un toque de glamour, y sus labios, pintados de un rosado natural, parecían suaves y tentadores.
Taehyung se sintió satisfecho con su reflejo.

El timbre sonó nuevamente, y el castaño, con cuidado de no despeinarse, caminó hasta la puerta con una sonrisa expectante. Al abrir la misma, se encontró con una visión que lo dejó sin aliento, un enorme ramo de rosas, perfectamente arreglado, bloqueaba su vista, y por un momento, se sintió abrumado por la generosidad del gesto, sus ojos se abrieron en sorpresa mientras intentaba procesar el tamaño del ramo, era más grande que él mismo, y literalmente no podría abrazarlo.
Las rosas, de un rojo intenso y vibrante, parecían bailar en la luz del pasillo, y su perfume dulce y embriagador llenaba el aire.

Taehyung se sintió conmovido por el gesto, y su corazón comenzó a latir más rápido mientras su mirada se desplazó hacia arriba, y en eso fue cuando vio a Jungkook, sonriendo con una mirada traviesa en sus ojos.

—Hola bonito—saludó alegremente, su voz resonando en el pasillo con una calidez que hizo que Taehyung se sintiera especial—. Fue todo un reto subir el ramo—comentó soltando una suave risa que hizo que el más bajo sonriera —, pero no imposible. Nada es imposible cuando se trata de ti—agregó, sus ojos brillando con una intensidad que hizo que Taehyung se sintiera conmovido.

Segundos más tarde, el ojiazul, se colocó a un lado, dejando pasar a Jungkook, quien hizo maravillas para que él y el enorme ramo entraran en el departamento.
Jungkook se movió con una gracia que hizo que Taehyung se sintiera impresionado, y finalmente logró entrar en el departamento sin dejar caer ni una sola rosa.

—Muchas gracias, Jungkookie y por cierto, buenas tardes—agradeció y saludó al mismo tiempo  mientras observaba cómo el azabache  dejaba el ramo en la mesa con cuidado.
Luego,  se acercó a él, y sintió su corazón latir más rápido ante la proximidad de su amado.

—Perdón por tan poco mi amor—susurró mientras le agarraba suavemente la mano.
Su mirada se encontró con la de Jungkook, que brillaba con una intensidad que lo hizo sentir especial.

Finalmente, Jungkook se inclinó y dejó un beso suave en su dorso, lo que hizo que sintiera un montón de mariposas en el estómago

—Hay 99 rosas—comentó mientras se enderezaba, sonriendo con una mirada traviesa en sus ojos—. La número 100 te la daré más tarde—agregó, dejando a Taehyung con la intriga y la expectativa de lo que podría suceder más tarde.



[...]

Treinta minutos habían pasado desde que Jungkook se puso al volante, y Taehyung había disfrutado del paisaje urbano que se desplegaba ante sus ojos.
Ahora, se estacionaba frente a un imponente edificio que parecía tocar el cielo, el  logo brillante en la parte superior del rascacielos revelaba que se trataba de un lujoso hotel de cinco estrellas.

Taehyung se sintió intrigado y emocionado al mismo tiempo, Se miró a sí mismo, vestido con su camisa de seda y su pantalón palazzo blanco, y se sintió adecuado para el lugar.
Unos suaves toques en su hombro lo hicieron girar hacia un lado, y se encontró con la mano tatuada de Jungkook, su jefe y amado.
La mirada de Taehyung se desplazó desde la mano hasta los ojos grises del azabache, que lo miraban con de una manera cálida.

—Acompáñame, Bebé—dijo Jungkook con una sonrisa, mientras extendía su mano para que Taehyung la tomara.
El castaño asintió rápidamente, tomando la mano de Jungkook y saliendo del Mercedes. Ambos caminaron hasta el hotel, donde el botón les abrió la puerta con una reverencia y la recepcionista los saludaba con un gesto en la mano, ellos Agradecieron saludaron  con una sonrisa  y fueron directamente hasta el ascensor.

Jungkook presionó el botón del último piso, y mientras esperaban, el azabache se acercó a Taehyung y le dio unos cuantos besos suaves en la mejilla.
El castañito sonreía tímido, sintiendo su corazón latir más rápido por la proximidad. Segundos más tarde, las puertas del ascensor se abrieron con un suave sonido, y Jungkook sujetó la cintura del más bajo, empujándolo suavemente hacia la gran habitación vip que era impresionante, con una vista panorámica de la ciudad que se extendía hasta el horizonte.
El lujo y la elegancia se respiraban en cada rincón, desde la cama king-size hasta el bar bien surtido. Taehyung se sintió abrumado por la opulencia que lo rodeaba, pero Jungkook lo guió suavemente hacia el centro de la habitación, donde una mesa estaba puesta para una cena romántica.

KTH
"Hoy nos dan como cajón que no cierra, ya era hora"

—No quiero que pienses que te traje aquí porque quiero que hagamos el amor, mi amor—dijo Jungkook, Taehyung hizo una mueca, y su mente comenzó a llenarse de dudas. ¿Acaso ya no lo deseaba como antes? ¿Había algo malo en él?

Pero antes de que pudiera profundizar en esas pensamientos, Jungkook respondió como si le hubiera leído el pensamiento

. —Te deseo, siempre lo hago—dijo con una sonrisa seductora—. Con solo mirarte se me para, en serio. —Taehyung soltó una risa, sintiendo su corazón latir más rápido ante las palabras de Jungkook.—Y no sigo porque no quiero malograr este momento romántico, cariño—agregó, acercándose a Taehyung y tomándolo de la mano—. Haremos el amor, pero no ahora. Ahora, solo quiero disfrutar de tu compañía, de mirarte, de hablar contigo...

El castaño simplemente asintió con una sonrisa de labios sellados, mientras Jungkook lo jalaba con delicadeza hasta la mesa, donde la comida caliente y exquisita los esperaba, el  aroma de los platos hizo que el estómago de Taehyung rugiera de hambre, y su mirada se desplazó sobre la variedad de opciones que había en la mesa.
Vio filetes de carne asada, arroz y pasta, todo perfectamente preparado y presentado. Y, por supuesto, no podía faltar el vino favorito de Taehyung, acompañado de una selección de frutas que sabía que le encantaban.
Taehyung relamió sus labios, todo se veía sabroso y apetitoso.

—Sientate cariño—el castaño sonrió y se sentó en la silla que Jungkook le había preparado, sintiendo la suavidad del terciopelo debajo de él. Jeon se inclinó y le dio un beso suave en la mejilla antes de sentarse a su lado, su mirada cálida y amorosa hizo que su acomapañant  se sintiera especial y querido.—espero y te guste.

—Gracias, Jungkookie—dijo con una sonrisa, sintiendo su corazón latir más rápido ante el gesto atento de Jungkook pues, el  azabache había tomado un cubierto, lo había limpiado con la servilleta con delicadeza y después se lo había entregado, demostrando una vez más su cuidado y atención por los detalles.

Esos pequeños gestos que Jungkook tenía con él, hacían que su corazón  saltara de alegría.
Se sentía visto, escuchado y querido, y eso era algo que lo hacía sentirse verdaderamente especial, Taehyung miró a Jungkook a los ojos una vez más y vio allí una profundidad de amor y cariño que lo hizo sentirse abrumado de emoción.

—Como te lo dije antes bebé, te mereces mucho más.

Taehyung se sonrojó ligeramente y envolvió con el tenedor la pasta, después llevó un bocado a su boca, al  probar la comida, su rostro se iluminó con una expresión de satisfacción absoluta, y un gemido de placer escapó de sus labios.
El sonido fue tan intenso y sincero que hizo que Jungkook inflara el pecho con orgullo, sabiendo que él había preparado la comida que estaba deleitando a su amado.

Jungkook sonrió, sintiendo una sensación de satisfacción y felicidad al ver a Taehyung disfrutar de la comida que había preparado especialmente para él. Se inclinó hacia adelante, su mirada fija en la de Taehyung, y le preguntó con una sonrisa:

—¿Te gusta, mi amor?—inquirió aunque ya sabía la respuesta.

—claro que si—se limpió la comisura de sus labios con la servilleta—me darás la dirección del restaurante para pedir comida de allí—soltó cortando un pedazo de filete.

—Oh no—Jungkook soltó una risa—yo cocine.

El castaño dejó de hacer lo que estaba haciendo y lo miró sorprendido, ¿El gran Jeon Jungkook alias el ogrito, sabía cocinar?

—Se que te sorprende—vuelve a reír agarrando el cubierto con elegancia—pero si, cocino.—alza sus hombros.

—Es maravilloso—dijo sincero—la comida está deliciosa—relame sus labios.

—Gracias bonito—le lanzó un beso—cuando vivamos juntos.

KTH
"Iihhhhh, *se desmaya de la emocion*"

—cocinaré para ti.

—Que tierno eres Kookie, me tendrás que enseñar porque yo no sé.—abulta sus labios con pena.

—Con que yo sepa y te cocine, es suficiente, cariño—dijo Jungkook, su voz llena de emoción—. Yo quiero consentirte, hacerte feliz.

—Taehyung sonrió y se inclinó hacia adelante, su mirada fija en la de Jungkook. —Lo sé, Kookie, pero yo también quiero cocinar, cocinar para ti—dijo, su voz llena de determinación.

El azabache  soltó un suspiro enamorado, sintiendo su corazón latir más rápido ante las palabras de Taehyung,  La sola idea de que estuviera dispuesto a esforzarse por él, a aprender algo nuevo solo para hacerlo feliz, era un regalo en sí mismo. Jungkook se sintió conmovido por la demostración de amor y dedicación de Taehyung.

—Vale bonito, te enseñaré.

Taehyung chilló emocionado, su rostro iluminado por una sonrisa radiante.
Después, siguió comiendo con entusiasmo, saboreando cada bocado de la deliciosa comida que Jungkook había preparado para él. No quería despreciar nada.
Mientras comía, no podía evitar pensar en el día que Jungkook le enseñara a cocinar,
se sentía emocionado y ansioso por aprender, por descubrir los secretos de la cocina y sorprender a su amado con sus propias creaciones.
La idea de pasar tiempo con Jungkook en la cocina, rodeados de olores y sabores deliciosos, era un prospecto emocionante que hizo que Taehyung se sintiera como un niño en Navidad.

[...]


Exactamente habían pasado veinticinco minutos desde que habían comenzado a comer, y ahora se encontraban en el balcón del hotel, disfrutando de una vista espectacular de la ciudad, la noche había caído, y las luces de la ciudad brillaban como estrellas en el cielo, el  aire era fresco y limpio, y Taehyung se sintió relajado y contento mientras se apoyaba en la barandilla del balcón, admirando la vista.

Jungkook se acercó a él, rodeándolo con sus brazos y apoyando su barbilla en su hombro.
Taehyung se sintió envuelto en una sensación de seguridad y amor, y se relajó aún más en los brazos de Jungkook, Juntos, disfrutaron del momento, de la vista y de la compañía del otro.

—Taehyung—dijo Jungkook suavemente en su oído, y el mencionado se estremeció al sentir el aliento cálido contra su piel. —acompáñame—lo jaló suavemente de la cintura, y ambos quedaron en medio del balcón, mirándose cara a cara.—Hmm, no sé por dónde empezar—admitió muy avergonzado, y eso se le hizo tierno al castaño quién  acunó con sus manos las mejillas de Jungkook y le dio un beso en la nariz. —Gracias por esto, lo necesitaba—soltó un suspiro, mordiendo su labio—quiero empezar diciéndote que eres el peor secretario que he tenido.

KTH
"Huy, no me dejó" "cachetealo"

—¿Qué?

—Los cafés que me preparabas eran desabridos—Taehyung jadeo ofendido.

—¿Por eso pedías más?—enarco su ceja tratando de empujar al azabache, este sonreía y lo sujetaba con fuerza de la cintura.  Evitando que se alejara.

—Lo hacía porque quería verte. —Taehyung soltó un bufido rodando los ojos—algunos informes lo hacías mal, pero no te decía nada, yo los arreglaba por ti.

—Gracias supongo—hizo una mueca cruzándose de brazos.

Jungkook soltó una carcajada al ver la cara de indignación del más bajo, y Taehyung no pudo evitar sonreír al ver la expresión divertida de Jungkook.

—Sabes, todo eso hizo que me gustaras—dijo, y su mirada se volvió más seria y emotiva—. Que seas un respondón me gustó, me gustaba que me retaras, por fuera ponía una cara de ogro, como me decías, pero por dentro era burro, el que reía.—Taehyung se rió al escuchar las palabras de Jungkook, y su corazón se llenó de emoción al escuchar cómo su jefe  había comenzado a sentirse atraído por él. —A medida que pasaban los días, me empezaba a enamorar de ti—continuó, su voz llena de sentimiento—. Pero no quiero mentirte, cariño, cuando vi al chico del antifaz, admito que me llamó la atención, pero no tanto como tú. —aclaró—Me refiero a que cuando lo vi a él, tú solamente me gustabas, aún no estaba enamorado de ti, pero cuando llegué a estarlo, me alejé de él. Sólo en mi cabeza estabas tú, tú y sólo tú.

Taehyung se sintió conmovido por las palabras de Jungkook, y su corazón se llenó de amor y gratitud hacia él.
Luego Se acercó a Jungkook y lo abrazó fuertemente, sintiendo que su conexión emocional era más fuerte que nunca.

—Mi bonito—dijo Jungkook, su voz llena de sentimiento—a lo que quiero llegar es que, estoy muy pero muy enamorado de ti, me gusta todo de ti, tu sonrisa, tu voz, tu cabello, tu forma de ser, absolutamente todo.—hizo una pausa mientras su brazo se estiraba hasta la mesa, donde agarró con cuidado una rosa—esta es la rosa número 100–la mirada del castaño  se desplazó hacia la rosa que estaba al frente, sus ojos brillaron con intensidad—Te entrego mi corazón—dijo Jungkook, su voz llena de emoción—y quiero hacerte esta pregunta—nuevamente se miraron a los ojos—¿Puedo ser tu novio, Park Taehyung?

—Sí—respondió Taehyung rápidamente, su voz llena de emoción—. Sí, quiero que seas mi novio, Jungkookie.

Con una sonrisa radiante, Taehyung agarró la rosa entre sus delicados dedos, y después dio un saltito de alegría, Jungkook lo sujetó de la cintura, atrayéndolo hacia sí, y finalmente se besaron, fue un beso lleno de amor, sin dobles intenciones, solo la pura expresión de su amor y felicidad.

El beso fue suave y apasionado, y Taehyung se sintió como si estuviera flotando en el aire.
La rosa que sostenía en su mano se olvidó en el momento, y solo existían ellos dos, perdidos en su propio mundo de amor y felicidad, minutos más tarde el beso se prolongó durante un momento, y cuando finalmente se separaron, Taehyung sonrió y se acurrucó en los brazos de Jungkook, sintiéndose seguro y amado.




Espero y les haya gustado 😞

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Nos leemos 🫡

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