Cuando Valentino decidió acercarse a comprobar si el demonio con cabeza de televisor había tenido éxito, su rostro quedó con la mandíbula colgando al ver que, efectivamente, su antiguo socio traidor había sido desintegrado a consecuencia de recibir electricidad a niveles gigantesco, o al menos eso fue lo que le dijo su nuevo socio.

"¿Entonces eres capaz de controlar la electricidad? Podrías haberlo dicho antes" Comenzó a decir Valentino mientras se acomodaba en el antiguo despacho del demonio cocodrilo y continuaba hablando.

"No te preocupes, compartiremos las riquezas que generemos con este rentable negocio" Habló el demonio polilla mientras fumaba y echaba humo rosado por la boca instantes después.

La alegría de Valentino era inmensa, había recuperado su negocio sin mover un dedo, y había dado con un socio extremadamente poderoso al que poder manipular a su antojo, pero algo en su mente chirrió como una tiza en una pizarra cuando vio a la modista Velvette parada junto a su socio.

"¿Acaso te perdiste?" Preguntó Valentino a la pecadora de piel morena, la cual estuvo a punto de enfurecerse, pero se contuvo y simplemente le sacó el dedo de en medio.

"Valentino, tenemos que hablar" Comenzó el demonio televisor mientras mantenía un rostro serio, cosa que hizo fruncir el ceño a Valentino, pero hizo un gesto con una de sus manos para indicar que estaba escuchando lo que se supone que tiene que decir.

"Después de ser testigo de mi propio poder sé que puedo llegar a lo más alto en este maldito infierno, solo tengo que practicar, es por eso que mi próximo objetivo es apoderarme de la industria del entretenimiento y matar a Vocifera" Habló con extrema seriedad, esas palabras provocaron que Valentino se trague su palillo con el que estaba fumando, casi atragantándose en el proceso, pero consiguiendo escupirla en el último momento.

"¡¿Acaso quieres morir?! ¡Aún con ese poder no tienes ni una sola oportunidad contra Vocifera!" Logró hablar Valentino mientras miraba a su socio en completo shock.

El pecador con cabeza plana contestó determinado. "Me prometí no volver a ser pisoteado por nadie, y casi muero por ser pisoteado por ti y tus estúpidos tratos de mierda, ésta vez seré yo quien sea el que da las órdenes, además, Velvette me guiará por el edificio y me ayudará" Habló con confianza y seriedad, mostrando que tan en serio iba, Valentino parecía seguir procesando todo mientras miraba a Velvette de reojo y entrecerraba los ojos.

"Estás loco, lo único que conseguirás es morir, y yo no te ayudaré" Habló Valentino mientras miraba fijamente a su socio, el cual le devolvió la mirada con la misma ferocidad, pero el pecador con cabeza de televisor sabía que tenía que entrenar sus poderes eléctricos y aprender a manejarlos correctamente.

"Ya verás Valentino" Dijo simplemente antes de marcharse, dejando al proxeneta con una expresión de incertidumbre e incluso algo de curiosidad, pero esto último lo apartó de inmediato, Vocifera no era la mano derecha de Alastor por nada.

Velvette sonrió con algo de esperanza, pero sabía que debía de esperar para que el cabeza plana pudiera controlar sus poderes eléctricos, teniendo que sufrir un tiempo más con Vocifera.

"¿Por qué le hacías un favor a ese hijo de perra?" Preguntó Velvette con algo de desprecio a Valentino, pero rápidamente cambió de tema y le dio al pecador con cabeza de televisor un papel con una dirección y unas indicaciones sobre los puntos clave donde entrar sin ser visto.

"Espero que no seas un cobarde de mierda y te eches atrás" Dijo la pecadora mientras comenzaba a volver antes de la hora establecida por Vocifera, si se resiste una cadena verde la agarraría del cuello y la llevaría por la fuerza hacia el edificio, ya lo intentó una vez y es extremadamente doloroso.

El pecador con cabeza de televisor quedó quieto en la misma calle donde estaba el estudio fotográfico prono durante una hora, agarrando el papel y meditando varias cosas, entre ellas, la idea de no volver a ser arruinado, desechado y pisoteado por un supuesto ser superior a él que le dá las órdenes, ya cometió el mismo error aceptando el plan de Valentino y casi muere por ello.

Adentrándose en esos pensamiento, recuerdos de su vida pasada pasaron por su mente, provocando que el pecador se arrodille con el papel todavía el la mano siendo arrugado por la fuerza de ejercía, pensamiento sobre el, sufrimiento que debieron de pasar sus hijos, uno siendo un recipiente para el tráfico de órganos y la otra siendo una prostituta obligada para saciar a los pedófilos más enfermos. Toda esa rabia provocó que emitiera un grito de rabia mientras sus manos comenzaban a electrificarse de nuevo, el pecador se percató de ello y dejó el papel en el suelo antes de que sea quemado por la electricidad que está generando.

"¡Estoy harto!" Gritó nuevamente, esta vez para intentar desahogarse e intentar pasar página, Víctor, el mandado de la mafia que fue manipulado y desechado junto a su familia, ya no existe, ahora él es un demonio temible con poderes eléctricos.

El pecador miró brevemente un conjunto de radios con la voz de alguien que se hace llamar *Vocifera*, dando las noticias finales del día y apagando la transmisión instantes después.

"Vocifera" Repitió el pecador en un susurro mientras analizaba la palabra, viniendo del latín, fue entonces que su pantalla mostró una sonrisa perversa mientras volvía a agarrar el papel y comenzaba a reír del nombre que él mismo se había inventado.

"Entonces yo seré *Vox*, ¡Pues mi voz nunca dejará de escucharse en todo el infierno una vez sea el que dé las órdenes aquí!" Habló mientras las risas continuaban al mismo tiempo.

(Hogar de Zestial, presente)

"Sí, lo recuerdo como si fuera ayer" Habló Zestial después de contarle semejante relato a Sir Pentius, el cual estaba con una cara de poker digna de un jugador profesional, más que nada por la impresión que le dió escucharlo todo, pero todavía tenía incógnitas en su cabeza, la primera era cómo él sabía todo eso si ni siquiera parecía estar presente en esos momentos, pero lo que más intriga le daba fue lo que preguntó.

"Pero, ¿Cómo mató a Vocifera? ¿Cómo se convirtieron en los Vees que conocemos actualmente?" Logró preguntar el demonio serpiente con la suficiente valentía como para dirigirse a Zestial, el cual rió un poco mientras sorbía un poco de té.

"¿Así que te ha interesado verdaderamente la historia? Me gusta tu curiosidad, no seas impaciente, continuaré contando este relato en cuanto beba un poco de té para refrescar mi garganta" Contestó Zestial de forma incluso gentil mientras uno de los huevos, de forma algo torpe, intentaban llevar tazas llenas de té al overlord para que se aclare la garganta más rápido y continúe con la historia, Zestial agradeció el gesto.

"Tus sirvientes son la mezcla perfecta entre ineptitud y estupidez, pero parece que tienen algo de lucidez de vez en cuando" Comenzó Zestial.

"¿Gracias?" Sir Pentius, al no saber qué decir, simplemente agradeció las palabras del overlord, desconociendo todavía si esas palabras hacia sus minions eran halagos o insultos, de todos modos, estaba de acuerdo en ambos casos.

"En fin, continuemos" Dijo Zestial mientras se aclaraba la garganta y continuaba relatando.

(Torre de radio de Vocifera, Flashback)

Velvette se presentó ante Vocifera, el cual parecía entre ansioso y eufórico por empezar sus juegos eróticos para complacer sus fetiches, lo que significaba un dolor indescriptible que Velvette tendría que sufrir, pero, al menos, ahora tenía un posible asesino que podría matar a ese hijo de perra.

"¿Preparada, Velvette?" Preguntó retóricamente Vocifera con un tono de voz que ya dejaba en claro sus intenciones, la pecadora le sacó el dedo del medio mientras Vocifera usaba la cadena verde y tiraba de ella para hacer que Velvette cayera al suelo, funcionando.

"Pero antes de divertirnos, me han informado de que han habido sonidos de disparos en el estudio fotográfico porno donde tú trabajas a partir de ahora, ¿Qué ha ocurrido?" Preguntó Vocifera con una sonrisa depredadora, sabiendo que el contrado de esclavitud la obliga a decirle siempre la verda o la cadena la comenzará a estrangular hasta la muerte.

Velvette también es consciente de esto, y es por eso que comenzó a decir verdades a medias sin mentir. "Parece que Valentino ha contratado a alguien para matar a su antiguo socio traidor, y ha funcionado, ahora Valentino a recuperado el estudio, en cuanto al asesino, no parece ser nadie relevante en el infierno, ni siquiera pude saber su nombre" Esas fueron las inteligentes palabras de Velvette, la cual festejó para sus adentros al observar que la cadena no la intentó estrangular, funcionando su idea de contar puras verdades a medias las cuales no son mentiras, Vocifera pareció pensar pero a los pocos segundos sonrió satisfecho.

"La verdad es que me importa un carajo quien esté a cargo en el estudio porno, y, según me has dicho, ese asesino será un estúpido con suerte. Muy bien hecho, como recompensa, seré más rudo esta noche, espera... ¡Eso es una recompensa para mí y no para ti!" Habló Vocifera mientras comenzaba a reír, provocando que Velvette gruñera de rabia por no ser capaz de hacer absolutamente nada por evitar todo el dolor que le espera.

"Tú solo espera hijo de perra, porque si el cabeza plana tiene éxito, te haré desear morir de la agonía que pasarás" Pensó Velvette mientras era arrastrada a la cama de Vocifera, la pecadora aguantaría, estaba segura de que ese pecador es capaz de matar a Vocifera, simplemente el poder de Vocifera está sobreestimado. Tarde o temprano, su momento de gloria llegaría.

Esos pensamientos la hicieron deprimirse un poco, eso fue lo que pensó también cuando estaba viva y esperaba tener éxito en el mundo de la moda. Pero el destino tenía otros planes para ella, en busca de inspiración presenciando el paisaje urbano, fue testigo de cómo un policía corrupto abusa a una mujer indefensa, y ella simplemente no hizo nada para impedirlo, pues no era su problema, lo malo, que el policía la vio y, nervioso de que esa chica pudiera aportar algún tipo de pruebas, planeó un supuesto *accidente de tráfico* para silenciar a la modista Violeta, acabando en el infierno por ignorar a una persona en apuros, además de copiar los trabajos de moda de su amiga de la infancia, la cual fue manipulada, dejándola sola por el enojo que hubo entre ellas.

Su vida mortal fue una sucesión de fracasos, pero tenía la esperanza y la seguridad esta vez de que, en el infierno, ella sería una estrella de moda y la que mandase a la gente asesinar en vez de ser al revés, como le pasó a ella.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hasta aquí el capitulo, perdón si ha quedado algo corto. 

Solo falta un capítulo más de flashback y volveremos al presente, me gustaría leer comentarios de los lectores diciendo vuestra opinión sobre la historia de los vees. ¿Os está gustando? ¿Se os hace interesante o aburrida? 

Espero que os haya gustado, y disculpen a este escritor mediocre si no es sido el caso, ahora sin nada más que decir, adiós.