Cyno tenía pensado ir a ver a aquel rubio, estaba claro que no iría por el día, ya que sino podría quemarse, así que saldría al oscurecerse. 

Tenía las llaves de aquel despistado joven , al cual no pareció importarle en absoluto dejarlas allí, si era alguna especie de trampa, Cyno no dudaría en matar a aquel idiota. 

Ya quedaba poco para la noche, así que el oji rojo comenzó a preparar algunas cosas que se llevaría por si acaso pasaba algo.

- ¿Cyno? - la pequeña Klee apareció por la puerta de su habitación, al parecer aun no sabía que el se iba a ir. - ¿A donde vas?

- Saldré un momento, será rápido, lo prometo - Y con eso salió del cuarto dispuesto a salir de aquella mansión por primera vez. 

- Suerte - soltó un divertido joven que lo miraba desde las escaleras, aquel alvino solo hacia que molestar, sobretodo cuando estaba mas ocupado. 

- No la necesito - respondio Cyno sin importancia, era de los mas fuertes de allí, porque iba a necesitar suerte de alguien como el?

- Con que aquí es... ¿Quién pone su dirección en las llaves de su casa? - eso le hizo gracia, era estúpido.

Pico a la puerta sin mas, esperaría a que saliera para darle el susto, sabía que no vivía solo, pero esperaba que saliera quien tenía que salir, y sino primero se cargaría el otro y después iria a por lo interésate.

La puerta se habrío, y para su sorpresa, la persona que tenía delante era mucho mas interesante.

- Quie- Que es lo que quieres... - la mirada del mitad fénec se oscureció, y con la poca luz de la noche daba algo de miedo, o eso pensaría un humano normal.

- ¿Por que me hablas así? No creo haberte hecho nada - Mientras este seguía jugando, Tighnari diviso una quemadura en el brazo derecho, al parecer lo de la luz si funcionaba. 

- ¿Con que si te quemaste? - El mitad fénec sonrío divertido.

- ¿Y que creías monstruito? - esa palabra, ¿por que siempre lo denominaban así?

- ¿Por que "monstruito" ¿los monstruos no son malos?

- Casi me quemas toda la cara, ¿eso te parece bueno? - respondio con una leve risa, quizas era verdad, pero eso no fue queriendo, lo tuvo que hacer para proteger a su hermana y a su mejor amiga. 

- ¿Y a ti te parece bueno atrapar gente en una casa? - las miradas que hechaba cuando decía esas cosas eran increíblemente aterradoras.

- Si, porque yo si que soy un monstruo, así me criaron - en eso Tighnari se dio cuanta de que el tampoco podía criticarlo, no conocía su vida personal, quizas nisiquiera lo hacia queriendo.  Lo que si sabía, es que llevaban mas de un minuto hablando, y el todavía no le había hecho nada. 

- ¿Qué es lo que haces aquí? 

- A tu amiguito se le cayeron las llaves - respondio pasándole las llaves.

- ¿Solo... has venido por eso? - Tighnari estaba desconcertado, ¿realmente era malo? Aun no lo conocía como para judgarlo, el mismo sabía que eso no estaba bien, la gente criticaba sin molestarse en conocer otros, y el no podía hacer lo mismo. 

- ¿Y esa cara? Es divertido ver tu desconcierto - soltó Cyno sin pensar. 

- No digas tonter- 

- ¿Qué haces aquí? - Kaveh apareció por detras. En eso Cyno pudo ver mejor el rubio, y una sonrisa malévola se formo en sus labios.

- Un cuenta cuentos... que divertido - su mirada parecio tornarse en una aterradoramente loca, parecía un psicópata.

- Cállate - dijo algo molesto.

- Soy amigo de alguien que quizas conozcas, Kaveh - ¿Cómo sabía su nombre? ¿Acaso se conocían? Tighnari miro directamente a su amigo, ya no entendía nada, ¿Qué es un cuenta cuentos? 

- Deja a  Yoimiya tranquila, yo no tengo nada que ver con vosotros...

- Ella fue quien te dejo escapar, ¿no es así? Tendremos que pensar algun castigo para ella...

- ¡He dicho que la dejes! - los ojos de kaveh comenzaron a brillar fuertemente.

- Ja, eres un actor pésimo, lo sabí-

De la nada alguien apareció delante de Kaveh, tapándolo - ¿Necesita algo? - Al-haitam sabía aquel secreto de hacía tiempo, y había prometido evitar que los demas del grupo lo supieran, pero aquella vez no había estado a tiempo. 

- Haitam... ya me ocupo yo, ¿Si? - convenció Tighnari para luego hacer entrar a los otros dos dentro de la casa.

- ¿Cómo eres capaz de ayudarme, a pesar de que no me conoces?

- Por eso mismo, no te conozco, y como no lo hago, no tengo derecho a criticarte, gracias por las llaves, vuelve antes de que salga el sol, no vayas a quemarte mas. - Y con eso Tighnari volvio a entrar en la casa, cerrando la puerta. 

- ¿Qué es lo que pasa? - pregunto un chico sentándose a su lado, aquel joven no era un vampiro, sino un demonio, vivía entre los humanos como si nada, así que conocía muchas costumbres. 

- Necesito que te acerques a alguien.

- ¿Y que gano yo?

- ¿Cuánto dinero quieres? - la pregunta sorprendió al oji ámbar. 

- ¿Tan importante es?

- Solo curiosidad - respondio despreocupado. 

- Esta bien, ¿de quien se trata? ¿Tienes alguna foto, o algo que devo seguir para encontrarlo? - pregunto seriamente, el no jugaba con esas cosas, y era precisamente la razón por la que Cyno confiaba tanto en el. 

- Solo busca un joven mitad fénec en el pueblo de aqui abajo.

- Eso... ¿Existe? - el demonio parecía desconcertado, nunca antes había visto nada parecido.

- Solo existe el, es único, y me interesa - la mirada de Cyno estaba perdida en sus pensamientos, realmente no sabía porque quería verlo, pero realmente necesitaba saber de el. 

Autora:

Hola 👋

Y si, inserte a Xiao porque si xd, ire metiendo personajes en la historia, habra muchos mas que ayudaran a Cyno a que descubra sus sentimientos, porque viva el Cynonari 😌

Y sin nada mas que decir, me despido ;)

Chaoo <33