Dean se detuvo al ver a Sam sosteniendo entre sus brazos a la bruja. Se encamino decidido a sacarla de ese aterrador lugar. -¿Que haces?- le hablo con la voz quebrada. Rasposa. Dolorido. Haciéndose consciente de lo grave que había sido esa paliza. Sintiendo el sabor a hierro en su boca. A causa del reflujo de sangre que intento tragar.

-Sabes que no se va a salvar- contesto el grandote moviéndose ligero en dirección al impala. Sin darle atención a la contusión, como palpitaba su cráneo. Si Dean se hubiera acercado a verlo con detenimiento, hubiera notado esas pupilas aun dilatadas en sus ojos avellana.

El pálido rostro de la chica inconsciente contrastaba con esa túnica teñida de rojo. Sabia que era demasiada sangre.

Dean condujo hacia su refujio como si los estuviera persiguiendo la muerte.

"La muerte". Aqui Sam intentando racionalizar. Ser frió y calculador. Pero sentía helada a Hope sobre si y eso era una pésima señal.

En cuanto cruzaron el umbral de esa cabaña en medio de ese bosque, un primer equipo de policias y paramedicos irrumpía en la propiedad de Chris Hawke incrédulo aun de los horrores descritos por una llamada anónima en un teléfono publico que había alertado al 911.

-¿y como pretendes detener la hemorragia?- le pregunto con acidez. Preso de su angustia y miedo. Vio a Sam acomodarla en la cama. Espantado como esa vez en que el mismo dejo a su hermano muerto durante días en su habitación. Negándose al hecho... Buscando desesperado una salida.

Dean cayo sentado en la cama de enfrente. Y las costillas rotas le reclamaron otra vez.

Sam no quería resignarse al destino impuesto. Arrogante, buscaría la forna de forzar a la fortuna.

-Soy tu hermano y me dejaste morir... Era lo correcto. Tu lo sabias... Y de mal modo yo lo termine por comprender...- balbuceo intentando invocar el ultimo hálito de cordura. Recordando días pasados. -tu continuaste con tu vida... Puedes hacerlo de nuevo...- intento animarlo. -Se que puedes-

-No Dean.- lo interrumpió con las mandíbulas tensas. Preso de esa ira floreciente. -No-

El mayor sostuvo esa mirada de odio sobre si mismo. -...no sabes de quien es ese bebé- resoplo con desagrado ese argumento, aun sabiendo que era toda una bajesa. Luego todo su cuerpo se tenso cuando vio esa lagrima brillar descendiendo por la mejilla del castaño con cabello desordenado.

-¿...podría ser de cualquiera?.- resoplo cínico. Respiro profundo. Algo dentro no aceptaba esa idea. Algo en su interior sabia que no podía ser cierto.-y tu no podías quedarte solo...- continuo amargo sin poner freno a esa idea. Dean los había separado. ¿Ahora como se iba a perdonar así mismo?. No debió nunca resignarse a perder a Hope. Sam lo miro enrabiado... ¿Y si cupido tenia razón?.

<<¿Vas a defender a tu hermano después de embrujar a tu novia y follarla... de maneras que jamas si quiera has soñado?>>

Volvio esa dolorosa acusación a su cabeza. Esas claras palabras... Con esa dulce y demencial entonación... El ángel que no era ángel había calado su veneno con certeza en el corazón del cazador.

Sam ya no pudo dirigir su mirar hacia su hermano. Solo se limito a tomar la mano de la jovencita que a cada segundo se acercaba mas a ese oscuro final.

-Si tu no quieres ayudarme... Alguien mas lo hará- balbuceo sin voz. Sin fuerzas para la discusión.

Castiel fue la primera opción. La rogativa silenciosa. Humilde y desesperada no pareció ser escuchada... Luego penso en Muerte. Se pregunto si era posible. Pero no sabia como o con que negociar.

Entonces un grito estruendoso y lleno de ira... -¡CROWLEY!- la garganta se le habia quemado al pronunciar esa endemoniada palabra.

La ceja izquierda del rey de la encrucijada se levanto mientras lo veía perplejo a los pies del pasillo entre las dos camas, apareciéndose como acostumbraba con sus manos en los bolsillos de su costoso abrigo negro.

-Sam... Sam... Sam...- repitió su nombre negando en medio de un aletargado suspiro. -Lo lamento... Pero yo no puedo hacer nada- se explico con aterciopelada voz.

Dean lo miro confuso, eso le había sonado a lastima. Como si fuera posible, ¿Crowley conmovido por esa escena? ¿Que demonios estaba pasando?

-¿Por que?- pregunto alterado, el rey del infierno no podía ¿el pedante todopoderoso? -dime... ¿Que demonios quieres?- pregunto el menor de los Winchester.

-Lo siento Sam. Hay un contrato sobre mi "sobrina"...- contesto con esa entonación cínica-

-¿"Sobrina"?- repitió. Sin entender ¿había escuchado correctamente?

-Es una larga historia... El capricho de la genética o el destino. Como quieran llamarlo...- balbuceo sin ánimos de explicación.

Crowley observo a una de las ultimas descendientes de las sacerdotisas de Avalon. Tatatatatara nieta de Morgosse la única mujer que se preocupo de el mismo cuando su propia madre lo abandono. Algo que la joven bruja ignoraba, de ahí ese inusual poder que ella no llegaba a comprender ni controlar.

-¿que clase de contrato?- pregunto Sam al ver la curiosa mirada taciturna del rey de la encrucijada.

- John Winchester ya colaboro con Dawn Colt para negociar la vida de Hope... La bruja ya antes fue devuelta de la muerte.- contesto tajante. Categórico. Sus palabras tronaron. Tan violentas como un azote.

Dean y Sam se miraron incrédulos de lo que escuchaban.

-¿Como creían que John aprendió a pactar...?.- continuo al borde de una carcajada, obviando la situación.

El padre de los muchachos había sido testigo de la severa decisión de Dawn. La entrega perpetua y desinteresada. No había mas justificación. Y no la necesitaba. El amor era capaz de eso. De todo. Sin imaginar, que en un par de años llegaría a ser tan drástico por Dean... Sin arrepentirse, ni un maldito día en el infierno.

Palido. Con nauseas Sam intentaba comprender. Y Dean sentía que se le abombaba el cráneo.

-¿Entonces te la vas a llebar?- Sam forzo su garganta a emitir sonido.

-No.- Crowley sonrió amargo. Con cierto cinismo implícito.

-vino a asegurar que la chica ascienda- explico de pronto Castiel indicando al cielo. Apareciéndose de la nada. Como de costumbre a espaldas de Dean. Ahí estaba con su desgarbado traje, esa inmaculada camisa sin corbata y el impermeable desabotonado. Los hizo saltar de la impresión. Los hermanos ya estaban sobre pasados de las emociones.

-¿Cass...?- Dean lo reprocho de inmediato.

-¿No hay nada que puedas hacer?- Sam interrumpió humilde, con esa angustia que le apretaba los pectorales.

Castiel observo a Crowley por un momento.

-Quien creería que el destino obraría semejante tragedia- comento el demonio negando en su postura.

-¿Crowley?- abogo de nuevo Sam.

-Solo te puedo asegurar, que ningún otro demonio la volverá a tocar- respondió avergonzado el rey de la oscuridad. Sobre el, la culpa. Aquel ultraje jamas debió ser cometido.

Dean vio a Castiel dar unos pasos acercándose a la bruja. Se inclino, acomodándose al borde de la cama.

Con una ternura celestial acomodo unos mechones de cabello de la rubia.

El dolor en esos ojos azules podría haber estremecido al cielo.

Respiro profundo al cerrar los ojos. Leyendo todo ese tormento. Sintiendo la desesperación de Hope al ser torturada. Entonces el ángel se detuvo en medio de ese conflicto... después de ese descubrimiento insólito.
-¿Quieren que su hermana cuando sane recuerde los últimos días y recupere a su hijo?- pregunto Castiel a quemarropa.

-¿Hermana?- repitieron al mismo tiempo los Winchester

-Hope es hija de John- el Ángel suspiro infiriendo con dolor, sus amigos, al parecer, no lo sabian.

Dean y Sam intentaron respirar. Era logico, por que otro motivo John habria acompañando a Dawn... ¿pero como nunca llegaron a saber? No habia ningun registro en el journal...

Ni se imaginaban que no existía registro de la jovencita. Porque John murió con la sospecha, pero, sin confirmarlo.

Sam estaba mareado. Se hiperventilaba. ¿A caso todo no habia sido suficiente?

A Dean se le hacia chiquito el corazón. Sentía que no lo podía soportar.

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Close my eyes for ever | LITA FORD & OZZY OSBOURNE
-[Subtítulos]-

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Hope|COLT continua la próxima semana.