Epílogo del Segundo Arco
Epílogo del Segundo Arco:
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Nadie quiere que su historia llegue a su fin. Muchos piensan que la misma terminará y con ello quedará en la nada misma y sobre todo verse olvidados por el Pasado del tiempo. El Siglo XVI estaba culminando y pronto vendría uno nuevo. Las "Guerras de Italia" estaban quedando atrás, la victoria de España y el Sacro Imperio sobre el Rey Francisco I de Francia fue rotunda. Éste tuvo que abandonar todo intento de reconquista y con ello su ambición de apoderarse dicho "Diario de Sir Percival", el cual acabó en las manos de Basilio Paleólogo, quedando satisfecho al conocer la Historia de su familia, los lazos entre Roma y Bizancio, la "Caída de Constantinopla" en el año 1453 D.C, dando por cerrado a un tema mucho más importante: Los Paleólogo iban a "desaparecer", ellos eran los "Últimos Bizantinos" pero la llegada del Príncipe Sviatoslav Ivanisevic daría por iniciada una nueva Era para ellos, las dos Casas Dinásticas se fusionarían, comenzaba una nueva "página" de su Historia.
- ¿Adónde irás, Basilio?.- Se interpuso Lyudmila, quien venía en un caballo blanco.
- Necesito ir para el Sur, hacia los Balcanes, hermana. ¿Me acompañas?.- Pidió éste y eso llenó su cabeza de preguntas. Algunas merodeaban por su mente, llenando la misma acerca de qué clase de aventuras iban a tener allí pero al mostrarle la caja con el contenido, el "Diario de Sir Percival", Lyudmila galopó hacia donde estaba Sofía y Nicolás, llamándolos. Una escolta fue asignada y viajaron, por varios días, hasta arribar a Bosnia-Herzegovina.
El lugar era una de las tantas "Provincias" del Imperio Otomano. Éstos los dejaron pasar sin problema alguno, ya que la relación de amistad que tenían con Rusia bastaba. Cabalgaron un buen rato hasta que arribaron a una zona emplazada en las afueras de Sarajevo, la Capital de esa, hasta entonces, "Provincia" y en un sector rodeado por las montañas y claros, ambos por detrás, el chico desmontó y olfateó el aire. Un aroma fresco, a árboles y valles, de silencio y calma. Sostuvo la caja, miró ésta por unos momentos y unas lágrimas bajaron por sus ojos hasta que cayeron sobre la tierra.
- Basilio.- Oyó la voz de Sofía, quien se acercó hasta él.- Comprendo lo que significa, para ti, tener que desprenderte de ese "Diario" pero no puedes dejar que esto te ate. No desaparecerá, permanecerá aquí, todo el tiempo que necesite, hasta que un día, alguien con la voluntad y determinación de comandar a su pueblo, lo desenterrará y hallará este artefacto que muchos han buscado, incluso los Católicos. No dejes que las dudas nublen tu juicio, estas haciendo un gran trabajo y estamos orgullosas de ti, hermano.- Le respaldó la menor de ellos, apoyando su mano en los hombros de éste.
A pesar de haber triunfado sobre Francia, España estaba empezando a ver que sus gastos por expandir el proyecto imperial de Carlos I/V hacia otras partes del Mundo, guerreando contra los Protestantes, los Calvinistas, Francia, el Imperio Otomano y los Países Bajos, comenzaban a pasarle factura a la Potencia emergencia, la cual tendría sus consecuencias para más adelante. A su vez, Inglaterra se estaba encaminando hacia su "Reforma Protestante", en adoptar las ideas de Lutero para iniciar, lo que más tarde sucedería, como el "Cisma Inglés" y el conflicto que llevaría a inconvenientes mucho más importantes en el Futuro.
La vuelta de Basilio, Lyudmila, Sofía, Nicolás y María con las tropas del "Batallón de Élite Dragó Negro" a Rusia fue motivo de celebración para su pueblo. Tanto los rusos como aquellos Bizantinos que se habían unido con los locales de allí iniciaron los festejos. La bienvenida no se la esperaban y en medio de la algarabía que se respiraba por las calles, la "Duquesa de las Mil Máscaras" vio, entre la marea de personas y militares, a un muchacho rubio, quien corrió hacia ella y terminó siendo alzado en el aire por la joven, girando hasta quedar cara a cara, con los ojos cubiertos por las lágrimas.
- ¡Por fin nos volvemos a ver, Mi Amor!.- Exclamó Sviatoslav con emoción, casi sin voz por las lágrimas que recorrían sus ojos.
Ella no podía decir nada. ¿Quién lo diría?. Una de las mujeres más fuertes y combativas de la Familia Paleóloga mostraba esos sentimientos ante el amor de su vida. Para "recompensarlo", le tomó de la nuca y lo besó apasionadamente en los labios, ante la gran multitud que los ovacionaba sin parar.
Basilio los observó pero no podía quitarse de encima las palabras de su Tío Nicolás, el cual estaba con Amar, Heracles, Genadio, Aria y Asteria, sus nietas. En su poder seguía sosteniendo el "Diario de Sir Percival", supo lo que podía significar, en ese contexto que estaban inmersos, si encontraban dicho documento, así que tomó prestado un caballo y pidió a uno de los carpinteros de la Ciudad de Moscú que le hiciera una caja de madera recubierta con cuero de vaca para evitar que el clima pudieran afectar lo que tenía pensado hacer.
Caminó hasta llegar a una parcela de tierra y con una pala que llevó consigo, comenzó a cavar un agujero y tras arrodillarse, depositó un beso sobre la caja, enterrándola hasta cubrirla con la misma capa que había extraído y de ahí se quedaba de pie.
- Hasta que llegue el día en el que un Paleólogo o Ivanisevic venga y halle esta caja con el "Diario de Sir Percival", mi mente permanecerá tranquila, ya que estará en buenas manos.- Auguró éste y tras volver con sus hermanas y su tío, regresaron a Moscú.- Adiós y buena suerte.- Concluyó.
- Hiciste bien, hermano. Hiciste bien.- Le dieron Lyudmila y Sofía su apoyo junto a Nicolás.
- Permanecerá allí, enterrado, hasta que, como tú muy bien has dicho, llegue uno de nosotros, Paleólogo o Ivanisevic, para que recupere el "Diario" pero tendrá que ser alguien de corazón de acero y espíritu patriótico para que se levante de nuevo.- Profetizó el rubio, mirando hacia el Norte.-
- Lo sé, pero mientras que eso suceda, en algún momento, yo estaré tranquilo de que sus memorias y la Historia no serán tocadas por nadie. Eso es lo importante.- Juró Basilio.- Ha sido una gran aventura, pudimos conocer sobre nuestro Pasado junto a la familia. Además de que peleamos contra Francia en las "Guerras de Italia".- El chico sonrió y tras espolear a su caballo, los demás le siguieron para las fronteras con Rusia.
Era el tiempo de volver a la Madre Patria.
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Y finalmente había llegado el gran día para María Paleóloga y el Príncipe Sviatoslav Ivanisevic. Esa mañana de finales de Primavera y principios del Verano contraían matrimonio, dando por iniciada una nueva página de la Historia, una en donde la Familia Paleóloga se unía con la de aquel joven rubio para siempre.
En la Catedral del Cristo de la Luz, ubicada en el Centro del "Principado de Moscú", allí se estaba celebrando la boda. El muchacho oía las palabras que pronunciaba el Sacerdote, un hombre ya entrado en muchos años de haber unido a las parejas en el Sagrado Matrimonio. A su lado, la novia con su vestido hecho de las más finas sedas traídas desde España e Inglaterra, cuando aún no había un conflicto entre ellos y en donde el Príncipe Felipe de Habsburgo/Austria había contraído nupcias con una Princesa Británica Católica, llevando a que las Coronas estuvieran unidas. Los nervios recorrían el corazón y espíritu de la aguerrida Paleóloga, sabía bien que este significaba el comienzo de una nueva página para su familia. Pensó en todos aquellos momentos en los que estuvieron con el Mundo a sus pies, ahora, sin Bizancio, en poder del Imperio Otomano, su Dinastía entraba en el Crepúsculo pero, a su vez, estaba viendo un nuevo Amanecer y el Futuro lo tenía cerca suyo.
Aquel Príncipe de la Casa Ivanisevic permanecía en posición de firmes, luciendo su uniforme militar, siempre atento y oyendo cada palabra que pronunciaba el Sacerdote. Pronto, ante los ojos de Dios y del Pueblo Ruso, llegó el gran momento. La "Hora de la Verdad" estaba tocando a sus puertas, decidirían su Futuro, la suerte estaba echada y con ello venía lo que tantos esperaban.
- Princesa María Paleóloga, ¿acepta como esposo al Príncipe Sviatoslav Ivanisevic? ¿En la riqueza o en la pobreza? ¿En la salud o en la enfermedad?. Hasta que la Muerte los separe.- Preguntó el Magistrado Ortodoxo y ella alzó la cabeza, determinada y sin miedo al Futuro.
- Acepto.- Respondió con total franqueza. El Sacerdote asintió y se giró para donde estaba el novio.
- Y usted, Príncipe Sviatoslav, ¿acepta como esposa a la Princesa María Paleóloga? ¿En la riqueza o en la pobreza? ¿En la salud o en la enfermedad?. Hasta que la Muerte los separe.- Dirigió la misma interrogante o pregunta hacia el rubio.
- Acepto.- Fue la palabra que dio, siendo sincero y una vez que el hombre cerrara la Biblia que traía consigo, alzó sus manos al aire.
- Por el Poder que me confiere el Estado del "Principado de Moscú" y ante los ojos de Dios Todopoderoso, yo los declaro marido y mujer. Puede besar a la novia.- Anunció el Sacerdote, mientras que Sviatoslav levantaba el velo blanco que cubría el rostro de la chica, siendo éste transparente y de ahí procedía con darle un profundo y dulce beso ante la gente.
Los invitados y Súbditos se levantaron, comenzaron a aplaudir hasta tener sus manos agotadas, los músculos tensados y de ahí, tomados de las manos, ambos salieron, acompañados por sus familias y seres queridos, hacia el exterior de la Catedral, donde fueron recibidos por una lluvia de pétalos de rosas blancas, rojas y escarlatas.
¿Cómo describir ese espectáculo?. Si un pintor hubiera pasado por allí, lo retrataría de la siguiente manera: La gente agolpada en ambos flancos, la "Guardia Real" que mantenía el orden y un "Cordón de Seguridad" entre ellos, evitando que cualquiera saltara hacia donde estaba la pareja de recién casados. Adelante de ese camino, el carruaje que los llevaría hacia el Palacio Real, en donde tomarían posesión de los Títulos Nobiliarios y harían la fusión entre las dos familias, los Paleólogo e Ivanisevic, concluyendo una Era y dando por iniciada otra más.
Bajo un bello día de casi inicios del Verano Boreal, Europa vivió un momento de paz entre tantas guerras desatada por el deseo de poder y dinero.
Y una vez que el Siglo XVI terminó, trayendo consigo el "Siglo de Oro Español" en los campos de la Literatura, Teatro, Música, Pintura, Arquitectura, Escultura, políticas, militar e incluso Geopolítico durante la época de los "Austrias Mayores", uno nuevo comenzaba y sería muy distinto a lo que fue su predecesor.
El comienzo del Siglo XVII dio, como punto de arranque, la llegada al poder de los "Austrias Menores" tras la muerte del Rey Felipe II, hijo de Carlos I/V, en donde su poder comenzaba a verse mermado por el surgimiento de una Futura y nueva Potencia en el plano geopolítico europeo. Los Otomanos continuaban expandiéndose, el Imperio Safávida acababa de emerger y le iba conquistando terreno a los antiguos Timúrida y en La India surgía el Imperio Mogol dirigido por un nieto de Tamerlán de Asia Menor.
Por su parte, Inglaterra vio el fin de la Dinastía Tudor, su última Gobernante, la Reina Isabel I, conocida como la "Reina Virgen", ya que nunca contrajo matrimonio y al haber salido victoriosa tras vencer a la "Armada Invencible" de España, falleció y con ella vino la Casa Estuardo de Escocia, una que traería muchos problemas para los ingleses en esos tiempos.
Europa se estaba perfilando hacia una confrontación bélica. Los Calvinistas Hugonotes estaban ganando plazas en Francia y la emergente Casa Borbón tenía que hacer frente a este problema, así como también sucedían las luchas en Holanda y Bélgica, Católicos contra Protestantes, así como también en el Sacro Imperio tras la "Reforma Protestante" de Martín Lutero.
A pesar de esas desgracias, los "Últimos Bizantinos", los Paleólogos habían conseguido unirse con la Familia Ivanisevic, dando por comenzado una nueva Era para ellos y bajo el Escudo de Armas de la citada, llegaban novedades acerca del hijo que tuvieron María y Sviatoslav a finales del Siglo XVI, al cual bautizaron con el nombre de Alek y con él vino Boris, ambos recibiendo los Títulos de "Primer" y "Segundo Duque" iniciando así su historia.
Mientras tanto, en medio de tantos festejos, en una Dimensión donde reinaba el caos y las energías viles, rodeada por una "Guardia Real" de aberraciones y horrores que solo esa "persona" podía tener como Ejércitos, una chica de cabellos negros, coletas y vestida con ropas del mismo color, observaba la situación que se respiraba en Europa, la tensión reinante y sonrió plácidamente, apoyando su mano sobre la "Esfera de Cristal" y de ahí pasaba uno de sus dedos.
- Pobres Humanos...- Dijo con "tristeza", bajó la cabeza y de ahí lanzó una risa malvada.- ¿Pobres?. No, no, no, no son más que basura en mi camino.- Sentenció y mostró una vieja herida que estaba desapareciendo.- Y pensar que hubiera sido ayer cuando esos ignorantes y amantes de su "Dios Misericordioso" me quemaron a mi hermana y a mí en la hoguera. Sin motivos, sin un juicio justo, solo porque hubo un error que se podía enmendar pero lo hicieron: Nos condenaron a la Muerte misma y todo en el "Nombre de Dios".- En aquel momento, guardó la Esfera y de ahí lanzó un grito que hizo temblar ese "Mundo Distópico".- ¡Cómo odio oír y que pronuncien su nombre! ¡¿En dónde estaba cuando nos quemaron vivas?! ¡¿Eh?! ¡¿En dónde?!.- Exclamaba con rabia y una serie de Llamas Verdes fueron quemando el piso, haciendo desaparecer la superficie que se fundía cual acero en una fragua.- ¡¿Dios?! ¡Dios no es más que un sádico, un monstruo que le metió ese cuento a la gente de que podías ir al Cielo si hacías cosas bien! ¡Si es así, ¿por qué nos tuvieron que matar si no hicimos nada malo?! ¡¿Por qué?!.- Se preguntaba con rabia y de ahí se calmó.
Las Llamas Verdes decrecieron hasta desaparecer, su poder se calmó y el suelo volvió a la normalidad. Acto seguido, acomodándose en su Trono Imperial, nuevamente, la chica de coletas negras respiró hondo y de ahí volvió a mirar la "Esfera de Cristal".
- Ahora se van a matar en el Nombre de su "Dios Benevolente" en una futura guerra. Quisiera verlo para que caigan todos ustedes.- Añadió y de ahí se puso de pie.- Lamentarán el día en el que a mí, Margaret, fui enviada al Verdugo...Ahora llegó la hora de mi venganza.- Anunció y desapareció en las sombras de su "Reino", quedando el "Salón del Trono Imperial" vacío.
Fin del Segundo Arco: 1500
[Y con este final de Saga, nos dirigimos hacia la tercera, la cual tendrá lugar en el Siglo XVII y con el primer Ivanisevic. ¿Qué clase de aventuras tendrán los de esta primera generación?. Eso lo veremos en el primer capítulo del Tercer Arco.
Por otro lado, el personaje de Margaret no es de mi propiedad, ésta pertenece a eltíorob95 (Todos los derechos reservados para él) y a la cual vamos a ver en esta próxima entrega.
Bueno, amigos, espero que les guste. Nos estamos viendo y que tengan un excelente fin de semana largo.
¡Feliz Día de la Defensa de la Soberanía Nacional Argentina, Camaradas!.].
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