Capítulo XXII:

Mientras que el Mundo seguía pendiente el día a día de la "Guerra de Malvinas", en Nueva York, dentro de un bar cercano al "WTC", dos jóvenes estaban reunidos allí. Se trataba de uno rubio y otro que provenía de alguna parte de la Europa Oriental, habiendo huido, en el Pasado, del Comunismo para ponerse a salvo bajo la "tutela" y protección de los EEUU. 

- "Y continúan los feroces combates entre las tropas argentinas británicas. Nos han llegado noticias del hundimiento del "HMS Atlantic Conveyor", alcanzado por un "Misil Exocet" que fue lanzado desde los "Super Etenrand" de fabricación francesa que los argentinos han operado y utilizado para hundir navíos enemigos. Esta nueva tecnología ya se ha cobrado otros buques de vital importancia como los "HMS Sheffield", hundido el 3 de Mayo y ahora nos llegan informes de que, presumiblemente, el "HMS Invincible" ha sido alcanzado y mandado a pique por los aviones de la "Fuerza Aérea Argentina. Seguiremos actualizando estos informes con el correr de las horas".- Pasaban por la "CNN" las noticias sobre el desarrollo del "Conflicto del Atlántico Sur".

Se trataba de un joven de cabello negro, llevaba lentes de Sol y lucía todo un conjunto oscuro en sus prendas de vestir. Alzó su mano y llamó a uno de los camareros, quien les tomó la orden, anotando lo que querían.

- Dos cervezas bien frías.- Pidió, emulando un acento norteamericano a la perfección, mientras que el rubio lo oía con suma atención.

- Enseguida.- Acató el camarero, mientras que se retiraba con los pedidos.- 

- Ahora, dime ¿para qué me has llamado, Jack Venom?.- Preguntó el ruso, quitándose los lentes y revelando unos ojos oscuros como la Noche. Se volteó y miró la televisión, podían oírse los disparos que provenían desde las imágenes que transmitían los periodistas desde el frente de batalla, las explosiones, las casas y edificios en llamas sobre el "Establecimiento Darwin-Goose Green/Pradera del Ganso", la rendición de las tropas argentinas con honores realizado por el Mayor Keeble.- Hmm, se nota que no los tomaron enserio a sus rivales los ingleses. No me extraña, viniendo de ellos y su moralismo de niñitos educados que no tirarían ni un plato.- Se burló de aquella gente, mientras que veía a aquel rubio desplegar un sobre de papel marrón cerrado, llevando  que el otro alzara una ceja.

- Para esto te llame.- Respondió Jack Venom con tono serio.- Ábrelo.- Le dio esa orden, mientras que el otro titubeaba, buscaba algún motivo para conocer lo que ocurría pero podía ver, en el rostro de su anfitrión, de que no iba en broma.- 

Respiró hondo, tomó el sobre, levantó la solapa y vio que habían fotografías y papeles con información acerca de unas personas que aparecían allí. El ruso se quedó leyendo, uno por uno, lo que decían aquellos documentos, asentía con la cabeza y de ahí volvía la mirada hacia su interlocutor. 

- ¿Qué es esto?.- Preguntó el peli negro.

- Una misión.- Respondió el rubio sin inmutarse ni moverse de su asiento.

- Sí, sí, ya veo.- Comprendió el otro, viendo de que no era ningún tonto.- Pero lo que quiero saber es...

- ¿Quieres saber qué es todo esto?.- Repuso Jack y se movió un poco en su asiento.- Tú no estabas aquí hace dos años atrás pero te contaré toda la historia: En el año 1972, durante la inauguración del "World Trade Center", uno de mis primos estaba a cargo de la Seguridad pero fue atacado por un grupo de Eslavos que aparecen allí, quienes fueron allí y se robaron, en el Despacho de Larry Silverstein, los planos de los complejos y edificios.- Comenzó a contarle, llevando a que surgieran dudas en la mente del ruso.- Sí, estarás pensado qué estaba haciendo esa gente aquí, gente de Tito, la misma que odiaba a Rusia y demás.

- Bueno, los rusos y Eslavos de los Balcanes tuvimos rencillas en el Pasado por los intentos de Stalin en querer asesinar al Mariscal Tito y tratar de anexionar sus territorios a la "Unión Soviética". Típica política de locos como Stalin.- Repuso el peli negro.- Prosigue.

- Bien, ¿en dónde estaba?. Oh sí: Ellos se defendieron, golpearon a mi primo y escaparon. Cuando trató de detenerlos, disparando a uno de ellos, no sirvió y casi lo despiden. Pidió la ayuda de mi tío y sus amigos pero cuando llegó el año 1980, hace dos atrás, se produjo un enfrentamiento armado en los Muelles de Nueva York, en donde mi tío murió allí junto a quince personas que iban con ellos y a mi primo me lo mataron delante de mis ojos cuando trató de defenderse al llegar a casa durante el cumpleaños de Andrew, mi hermano.- Relató el rubio, mientras que el otro seguía enfocado en lo que decían los papeles.- 

- Ya veo: Tienes un odio enorme. Bueno, no te voy a mentir. Hasta hace poco he sido enviado para Sarajevo con el fin de estudiar a fondo lo que ocurre. Desde que el Mariscal Tito murió, los Movimientos Independentistas siguen aumentando, sobre todo en Kosovo y Albania, quienes deseaban salirse del yugo de la "República de Yugoslavia".- Relató el otro, viendo que eso podía ser una carta a su favor.

- Y por eso quiero que te hagas cargo: Ve allí, siembre las semillas del odio en la gente, haz que se peleen y sobre todo, hazte "amigo" de la escoria de la Familia Ivanisevic, ellos fueron los que mataron a mi primo y mi tío en el Pasado. Ahora los quiero muertos, a todos, no me importa lo que lleve. Quiero verlos sufrir en carne propia y cuando llegue el momento, tanto tú como yo y otros iremos hasta allí y los erradicaremos de la faz de la Tierra.- Auguró Jack, cerrando el puño y mostrando lo que tanto había temido su Tío Willer en el Pasado: Que el odio creciera acaparara todo su ser y pensamientos, llevándolo hacia un desastre nunca antes imaginado.

El ruso sacó un cigarrillo y lo encendió. Comenzó a fumar un rato, miró a su anfitrión y de ahí guardó el encendedor consigo en sus bolsillos.

- No tienes por qué temer, Jack Venom. Yo mismo me haré cargo de la "Inteligencia". Tú, por otra parte, vete preparando. Esto llevará su tiempo pero quién sabe. Por ahí, dentro de unos años, los Balcanes no serán más que un puto nido de peleas y disputas. No serán más que eso, vivirán entablando batallas y nosotros aprovecharemos eso para eliminarlos.- Auguró éste, viendo que el proyecto que estaban diseñando iba cobrando forma.- Partiré mañana mismo para Sarajevo.

- Ten cuidado: Los Ivanisevic no están solos.- Le advirtió el rubio, llevando a que el otro se girara para oír esas palabras.- No lo están: Cuentan con varias "Casas Dinásticas", las más importantes son las Familias Sharp de Inglaterra, Aquila de Italia, Raichenkov de Rusia, Gradivechenko de Grecia, Dumitru de Rumania y Antov de Bulgaria, entre otras. No será tarea sencilla esto.

- ¿Cuentas con gente para ello?.- Preguntó el peli negro, guardando los documentos en el sobre de papel marrón.

- Estoy en ello. Te mantendré informado.- Prometió Jack, dando por finalizada la charla.

- Cuando llegue a Sarajevo, me haré cargo de llamarte. Envíame cuanto consigas poco a poco.- Finalizó el joven de Rusia y partió de allí, después de haber consumido la cerveza fría junto a su colega y empleador, mientras que éste le pagaba al camarero.

- Así será. Buena suerte, Mijaíl Karkarov.- Le deseó el rubio en aquellos momentos, cruzando sus manos y mostrando, debajo de ellas, una sonrisa malvada, mientras que se giraba hacia la televisión encendida, donde pasaban, todavía, las noticias sobre la "Guerra de Malvinas".- "Ustedes mataron a mi tío y a mi primo hace dos años, Eslavos de mierda. Ahora seré yo quien les vaya a devolver el golpe. Pagarán caro lo que me hicieron. Se los juro".- Dio su promesa de venganza y después de permanecer un rato allí, éste se subió a un taxi para volver a su casa.

Mientras tanto, de vuelta a Malvinas, la guerra proseguía su curso. En los días posteriores a la Batalla de Goose-Green/Pradera del Ganso, la rendición de las tropas acuarteladas y el posterior avance, la "Fuerza Aérea Argentina" incrementó sus bombardeos y ataques contra los invasores, desatando una feroz campaña que terminó con el hundimiento de varios navíos de vital importancia, siendo éstos los "HMS Coventry" y "HMS Atlantic Conveyor", siendo éste un golpe mortal para los suministros británicos, ya que traía consigo comida, agua, medicinas, armas, municiones, vehículos, piezas de Artillería, así como también toda una dotación de helicópteros, salvándose, únicamente, uno solo de ellos por la astucia del piloto, quien rescató a varios de los náufragos y otros los salvaron los barcos que estaban pasando cerca de allí, por lo que los ingleses debieron hacer, gran parte del trayecto hacia Puerto Argentino/Stanley a pie, soportando la tundra, las lluvias, nevadas y vientos gélidos que se hacían sentir allí.

Las tropas bajo el mando del Teniente Primero Oleg Raichenkov se encontraban cruzando una serie de prados por donde los pastores trashumantes llevaban a sus ovejas para que pastaran. El clima era frío, con Cielos despejados, la Luna y las Estrellas que brillaban cual Perlas en el Firmamento Austral pero que no daban buena señal. Con el Capitán Rod Boswell, el 7*Vizconde se acercó hacia él para hablarle.

- ¿Ve esa casa de ahí, Teniente?.- Señaló el rubio inglés.-

Oleg no podía ver bien, tomó sus binoculares y se quedó observando el sitio: Se trataba de una serie de edificios que conformaron, antiguamente, una granja dedicada a la cría de ovejas para el comercio lanar hasta que se tuvieron que ir de allí sus ocupantes. Estaba erigida a la vera del Arroyo Malo y ellos habían descendido en helicóptero, a pocos metros de distancia con el "Cuadro de Guerra de Montaña y Ártico", una de las Fuerzas de Élite sumamente conocidas en el Ejército Británico.

- No detecto movimientos, Mi Capitán.- Informó el joven de Rusia.- Espere.- Detuvo justo a tiempo a Boswell cuando se acercó hacia él, notando una sombra que se movía dentro del edificio principal.- Parece que sí los hay. 

- Deben de ser argentinos. Las comunicaciones de los "Royal Marines" nos han dicho de que hay presencia de "Comandos" por estas tierras.- Sostuvo Rod, mientras que se colocaba el casco y de ahí daba la señal a su Sección para que avanzaran.- Teniente Primero Ivanisevic, usted atacará por el Flanco Occidental, nosotros iremos por el Oriental, así los rodearemos y obligaremos a que se rindan.- Le encargó la misión.

Dicho y hecho, Oleg guardó sus binoculares y fue hasta su tropa, en donde se encontraban Benny, Spencer, Tony, los "Paratroopers" T, Lance y W, siendo éste un hombre bajito, moreno y bigote del mismo color. Eran unos 15 ellos, mientras que la Sección del Capitán Boswell la componían unos 19.

- Tengan las armas listas: Avanzaremos por este Flanco.- Señaló Oleg a sus tropas.

Avanzaron  con cautela, el grupo dirigido por el hermano de Yuri los comandaba en silencio. Lo primero fue descender aquellas pequeñas colinas que les rodeaban, unas ondulaciones que parecían ser sacadas de alguna caricatura de "Hanna Barbera" pero que consistían en un verdadero dolor de cabeza para ellos, quienes portaban un grueso equipo entre comida, armas, municiones, agua, medicinas y los misiles "Milan". La Oscuridad era impenetrable, no se podía ver hasta más allá de donde estaban, el caserío yacía en penumbras y Oleg, cada 2x3, intentaba verificar si había movimiento dentro del mismo. 

Pronto escuchó un sonido y vio que era el Capitán Boswell quien le hacía señas de que se detuvieran. Obedecieron. Los "Paratroopers" Lance, T, W, D y Vernon se detuvieron cerca de Oleg. Luego llegaron Benny, Spencer, Tony y Oswald junto al Soldado Tyler Doyle. 

- ¿Qué pasa ahora?.- Preguntó el hombre de bigotitos.

- No lo sé, pero parece que algo ha visto el Capitán.- Advirtió el "Paratrooper" W a su amigo.- Mi Teniente, binoculares.- Pidió el moreno y el otro se los dio, observando de cerca lo que podía estar ocurriendo.

Estaba de rodillas, intentando ver algo pero la Oscuridad era un profundo manto que cubría todo a su paso. Tomaba referencias con los "Cuatro Puntos Cardinales", revisaba cada palmo pero solo obtenía una sola cosa: Penumbra absoluta. Era como la niebla que había envuelto a los Romanos durante la Batalla del Lago Trasimeno, siendo aniquilados por los Ejércitos de Aníbal Barca de Cartago, hijo de Amílcar, durante la "Segunda Guerra Púnica".

 - Mantengan la cabeza gacha, Soldados.- Impartió Oleg esa orden a sus Camaradas.- Recuerden lo que pasó en "Goose Green/Pradera del Ganso" con aquel misterioso francotirador argentino: Más 15 hombres eliminó durante el combate.- Advirtió, llevando esa fresca referencia hacia los efectivos cuando, de golpe, justo cuando estaban por hacerlo, un disparo resonó desde la planta alta, dándole a uno de los hombres que les acompañaban, justo en la cabeza, cayendo inerte contra el piso.

Su casco rodó y se detuvo, el cuerpo quedó sobre la gélida tundra, mientras que Oleg se arrojaba y comenzaba a tirar hacia el enemigo. Su Sección estaba siendo atacada desde el Frente pero también pasaba lo mismo con la que estaba bajo el mando de Boswell, quien debió impartir la orden de atacar el establecimiento con unos misiles que impactaron, directamente, en la segunda planta, desatándose un feroz incendio.

- ¡Ahora, síganme, cúbranse con el humo!.- Ordenó el hermano de Yuri, abriendo fuego sin parar, acompañado por sus hombres. El "Paratrooper" W fue a su lado, tirando contra todo lo que pudiera moverse. Detrás suyo, otro de sus hombres cayó abatido, así como también podía oírse la feroz descarga de fusilería que los Argentinos estaban desatando contra ellos.

Varios ingleses que estaban en la Retaguardia cayeron fulminados por una ametralladora MAG que el enemigo estaba operando, mientras que, desde la planta baja, varios "Comandos" de aquel país tiraban hacia ellos, justo cuando Oleg y los suyos habían atravesado las alambradas que yacían destruidas y oxidadas. Uno de los disparos dio contra el Soldado Tyler Doyle, el cual cayó herido, agarrándose la zona del impacto: Había sido alcanzado en el lado derecho de su pecho y la bala subió hasta el esternón. Benny corrió hacia él para socorrerlo pero también le alcanzaron en la misma zona, cayendo herido junto a Doyle.

- ¡Les han dado...hirieron a Benny y Doyle, Mi Teniente!.- Le alertó el "Paratrooper T" a Oleg.

- ¡Spencer, W, Tony, conmigo, de prisa! ¡"Paratrooper W" te dejo mi puesto hasta que vuelva!.- Le encargó esa misión al moreno.

- ¡A la orden, Mi Teniente!.- Respondió el hombre de baja estatura y bigotes.

El fuego se había vuelto voraz y los argentinos habían ido abandonando el establecimiento que se iba convirtiendo una gigantesca hoguera. Ya estaban combatiendo fuera del mismo y Boswell les estaba pidiendo, hablando en español, de que por favor se rindieran, que ya no debían combatir pero éstos no se iban a dejar amedrentar ni nada por el estilo. Oleg, por su parte, apoyado por sus amigos, llegó hacia donde estaban Tyler y Benny. El inglés de pequeños bigotes estaban sangrando pero no era una herida seria, por lo que lo levantó él mismo, mientras que seguía abriendo fuego contra los argentinos. Por su parte, Spencer y Tony ayudaron a Tyler para que se levantara. Éste sí estaba un tanto complicado porque parte del esternón había recibido el impacto y le costaba moverse con facilidad debido al dolor que le invadía. 

Oleg se levantó, veía que varios "Comandos Argentinos" se habían rendido pero el enfrentamiento continuaba, oyendo la voz del Capitán Boswell, quien pedía lo mismo. Vio al "Paratrooper W" correr hasta una zanja, en donde estaba uno de los rivales, quien había quedado herido, yaciendo de pie y apuntándole con su arma.

- ¡Arriba las manos! ¡Arriba las manos!.- Le ordenaba aquel moreno de bigotes pero al ver que aquel argentino estaba herido y no podía moverse más, se dio cuenta, pegó un salto, le sacó el fusil "FAL" y lo ayudó a salir de allí, dándole palabras de aliento.- Tranquilo, tranquilo. Es la guerra, es la guerra. No se preocupe.- Habló "W", mientras que salían de allí.

- ¡DETENGAN LOS COMBATES! ¡CESE AL FUEGO! ¡CESE AL FUEGO!.- Ordenaba Oleg y su voz llegaba hasta donde estaban "W", el argentino que llevaba consigo y el Capitán Boswell.

Los enfrentamientos cesaron, los argentinos se habían rendido: Dos de ellos, el Teniente Ernesto Emilio Espinosa, integrante de la "Compañía de Comandos 602", de la Provincia de Misiones y el Sargento Primero Mateo Antonio Sbert habían caído en combate. Uno de los Soldados argentinos intentó entrar en el caserío pero dos ingleses lo detuvieron.

- ¡¿Qué pasa?!.- Preguntó Oleg, corriendo hacia ellos.

- Tienen a su Comandante dentro, Mi Teniente: Murió en combate y quieren entrar para sacarlo.- Le informó uno de sus efectivos. El hermano de Yuri se volteó, miró aquella construcción y negó con la cabeza, por lo que se dirigió hacia los capturados.- 

- Lo siento mucho, pero no podemos hacer nada. El fuego está descontrolado y la estructura colapsará en cualquier momento. Hay que retirarse de allí.- Miró el cuerpo sin vida del Sargento Sbert y de ahí les hizo una seña a los argentinos para que lo sacaran de allí, llevándoselo con ellos, mientras que se alejaban de aquella construcción que se vino abajo en cuestión de segundos.

Tanto Oleg como Boswell miraron, pronto y con la llegada del Alba junto a los helicópteros, las ruinas humeantes de "Top Malo House". Los argentinos heridos fueron llevados con Doyle y Benny, uno de ellos lo miró: Estaba pálido y apoyado contra el regazo de Tony, quien le había aplicado los "Primeros Auxilios", deteniendo la hemorragia. El inglés de pequeños bigotes alzó y la cabeza junto a una de sus manos para hablarle en un ligero Castellano.

- Amigos, amigos.- Les llevó éste la calma a los argentinos capturados y uno de ellos asintió con la cabeza, viendo que todo estaba bien.

- Buen combate.- Se acercó el Capitán Boswell a los prisioneros, felicitándoles y dándoles la mano.- Pero nunca en una casa.- Aconsejó éste, mientras que los argentinos entregaban sus armas. Los Oficiales conservaron las Pistolas Reglamentarias y de ahí los embarcaron en varios helicópteros hacia el "HMS Uganda", el buque-hospital donde la "Cruz Roja" llevaba a cabo los trámites para los prisioneros de guerra. 

- Pelearon bien.- Les felicitó el "Paratrooper W", quien llevaba a Doyle consigo. Dos argentinos que no estaban heridos, corrieron y ayudaron a Benny, el cual no podía caminar muy bien, ya que se sentía mareado por la pérdida de sangre.

- Te pondrás bien, amigo. Iré a visitarte al "Uganda" cuando todo termine.- Le prometió Oleg, sosteniendo la mano del inglés de pequeños bigotes.

- Te estaré esperando. Aún me debes una partida de Póker, ¿eh?.- Dijo Benny, riéndose levemente, mientras que era atendido junto a los heridos argentinos. 

Pronto, las puertas se cerraron, quedando las Secciones de Boswell e Ivanisevic allí, observando el vuelo de aquellos aparatos hacia el Mar Austral.

Los enfrentamientos se recrudecieron en el mes de Junio y uno de los hechos que más marcaron el curso de la guerra fue la "Voladura del Puente sobre el Estuario Fitz-Roy" llevado a cabo por miembros y Zapadores del "Cuerpo de Ingenieros" del "Ejército Argentino", llevando a que los navíos ingleses, entre ellos los "HMS Sir Lancelot", "HMS Sir Bedivere" y "HMS Sir Galahad", los cuales traían a los "Regimientos de Guardias Escoceses y Galeses", los Mercenarios Gurkas, Nepaleses y a un equipo de la "BBC", debieron desviarse hacia la zona de "Bahía Agradable". 

Un gravísimo error que marcaría al Almirante Sir John "Sandy" Woodward de por vida, ya que, en ese preciso momento en el que las lanchas de desembarco iban llegando hacia las playas, los aviones argentinos iniciaron una serie de feroces bombardeos contra las fuerzas en tierra y en los barcos. 

Aquello fue conocido como "El Día Más Negro de la Royal Navy". Hubo muertos y heridos por doquier dentro de los tres barcos. El "Sir Lancelot", "Sir Bedivere" y "Sir Galahad" quedaron afectados seriamente por las bombas, quedando todo grabado por la "BBC" que había llegado hasta allí y que fueron vistas por toda Inglaterra, donde pudieron atestiguar la crudeza de la guerra: Cuerpos quemados por doquier, en llamas, los barcos también en ese estado junto a las lanchas, heridos, gritos, desesperación, algo que nadie se esperaba volver a revivir tras la Segunda Guerra Mundial.

Y con ello llegaron los Combates de los Montes Longdon, Tumbuldown, Harriet, Dos Hermanas, Wireless Ridge, el Puente Murrell y Sapper Hill, los más sangrientos y en los cuales Oleg, Rodney y Francesco fueron testigos presenciales de la dureza y tenacidad de ambos bandos.

Avanzaban en medio de la noche, entre disparos, balas trazadoras, disparos de Artillería, gritos y la sangre que se derramaba por doquier. En donde ellos dirigieran la mirada, solo había muerte, desolación, cuerpos de ambos contendientes por doquier. Rodney dirigía a uno de sus grupos y Mireya estaba allí, con ellos, abriéndose camino junto a los Mercenarios pero cuando los ingleses habían dado muerte al Sargento Cisneros de Argentina, burlándose un grupo del difunto, se lanzaron al ataque.

- ¡Quédense en las filas, carajo! ¡No se adelanten!.- Bramaba el joven a todo pulmón, casi difónico.

Pero el británico-eslavo notó algo por el rabillo del ojo, algo que lo horrorizó cuando vio a una figura negra alzarse de entre las sombras, sosteniendo un fusil "FAL" y abriendo fuego contra la columna que cayó diezmada.

Acto seguido, salidos de la propia niebla, los Soldados y "Comandos" Argentinos emergieron como Espectros de la Mitología Griega, lanzando sus gritos de batalla, en especial los que provenían de la Provincia de Corrientes con el "Sapucai", entablando un feroz combate cuerpo a cuerpo, incluso con las bayonetas y otras armas blancas, además de que los cohetes de su Artillería estaban cayendo sobre las posiciones inglesas.

Los gritos y festejos de los ingleses pasaron a ser de desesperación y terror cuando aquel argentino les tiraba sin piedad. Las balas picaban cerca de donde estaban los tres Primos Ivanisevic, quienes se parapetaron tras unas rocas pero Mireya y los suyos habían asaltado varias posiciones enemigas, haciendo que los defensores retrocedieran pero uno de los Oficiales quedó herido, contra el piso, por lo que Oleg fue corriendo hacia allí para detener cualquier locura.

- ¿Así que pensabas que esta sería la oportunidad de recuperar que es de ustedes?. Si están sufriendo económicamente, no pueden con EEUU, aunque debo felicitarlos por los golpes que han dado, así que te daré una muerte "rápida".- Auguró la chica, alzando su machete, listo para matar al Oficial argentino que yacía herido contra el suelo. 

Alzó el machete, éste estuvo rozando el aire, rasgándolo, ante la mirada de los Mercenarios que yacían con ella pero una mano tomó el "Facón" del argentino herido, lo blandió y detuvo el arma blanca con toda su fuerza.

- "No consciente que se cometa el delito de matar ansí un valiente".- Recitó aquella frase que había dado cierto personaje de la Literatura Argentina, perteneciente al "Martín Fierro" de José Hernández, cuando el Sargento Cruz defiende al Gaucho Martín de ser asesinado por la partida militar que lo buscaba para matarlo por sus crímenes al ser un "matrero".

Lo dijo con pura seriedad, ejerciendo presión contra el machete de Mireya, la cual lo miró, asombrada pero sonriendo de forma malvada.

- ¿Todavía metiéndote en donde no te llaman, Teniente?.- Preguntó ella con desafío.

- ¿Y tú olvidaste quién es el que está al mando de esta tropa y los Mercenarios?. Di una orden y es no matar a los prisioneros: Ahora aplicaré mi poder contra una escoria como tú, Mireya "Mist" Sánchez.- Sentenció el británico-eslavo, quedando cara a cara con ella.

Se desató una auténtica pelea. La mexicana cargó contra el rival. Éste recibió una herida en la mejilla izquierda, la sangre cayó contra el piso pero sonrió, enfrentando el riesgo de morir a manos de ella. Tanteó y realizó aquel gesto de desafío, trazando una Media Luna hacia donde estaba la otra. De ahí vino su carga, trazando varios golpes que eran evadidos. Ninguno de los dos cedía en su pelea. 

Los Mercenarios, pálidos, veían que Oleg iba en serio y más cuando llegaron Rodney y Francesco para presenciar esa escena, mientras que continuaban los combates en los Montes. El joven 7*Vizconde resbaló por el piso, Mist clavó su machete contra una roca y quedó atrapado pero ella sacó otro que traía consigo, por lo que volvió a la carga, sin embargo, por un descuido suyo y sin medir las distancias, Oleg le clavó, justo en el abdomen, el "Facón" que le atravesó de lleno. 

El cuerpo de la Mercenaria cayó de rodillas, agarrándose a la zona afectada, mientras que miraba a su oponente y la Luna reflejaba su imagen ante ella, igual que Augusto César al vencer a sus enemigos. Pronto, quedó inconsciente y abandonada allí. Luego se dirigió hacia los Mercenarios, quienes quedaron callados, helados ante semejante castigo y de ahí lavó el "Facón" con el agua de su cantimplora, devolviéndoselo al Oficial Argentino.

- Tenga. Puede irse. Vuelva con los suyos. Nadie le hará daño y que lo haga, se las verá conmigo y mi gente.- Prometió Oleg, mientras que el otro asentía, silencioso, hacía la venia militar y el otro respondía de esa forma.

Lo vieron subir por la pendiente, herido pero bien, alejándose de allí hasta volver con sus tropas que lo esperaban. 

- ¿Qué hacemos con ella?.- Preguntó el Sargento McNess de los "Guardias Escoceses".

- Desobedeció las órdenes del Teniente Primero Ivanisevic. Que se muera aquí.- Sostuvo Angus, su Camarada de Armas y amigo, dirigiéndole una mirada de asco a Mireya.

- No...¡No pueden dejarme aquí!.- Rogó por ayuda pero los tres Primos Ivanisevic le dirigieron una fría mirada, yéndose de ese lugar.- ¡Malditos, un día recen para que no los encuentre y cumpla mi venganza! ¡Su sangre va a estar en mis manos! ¡Lo juro!.- Les gritaba ella hasta que perdió la inconsciencia. 

- Que los Dioses y los Ancestros la castiguen por su desobediencia.- Apuntó Francesco, mientras que los combates recrudecían aún más.

Las tropas que ellos comandaron junto al General Jeremy Moore y el Comandante Jeffrey William Wrand, en donde se toparon con una de las escenas más honorables: Allí, en medio del fuego y la lucha, el Cabo Roberto Bacilio Baruzzo había salvado al Teniente Jorge Echeverría, herido de múltiples disparos y con su cuchillo "Facón" en mano, enfrentando a varios ingleses que le apuntaban, los tres Primos Ivanisevic vieron cómo uno de ellos iba hacia él y le hablaba, abrazándolo con fuerza.

- Ok, ok, Argentino.- Le decía en un tono tranquilo y conciliador.- La guerra ha terminado para ti. Ya está. No pelees más. Para ti ya ha terminado todo.- Dijo aquel Soldado inglés y de ahí notaron que Baruzzo rompía a llorar como un niño, no por el miedo, por la angustia, sino por lo que había hecho, ganándose el respeto de sus enemigos.

Aquel abrazo entre el británico y el argentino duró bastante, como si el tiempo se hubiera congelado para siempre.

El propio Comandante Wrand fue quien ordenó perdonar la vida al Cabo Baruzzo, ya que él había arriesgado su propia vida para salvar a la de su Camarada. Pronto, el inglés llevó la calma a sus compañeros, mostrando el arma blanca del argentino y de ahí varios lo seguían de allí, quedando uno como Centinela para vigilarlo y de ahí le ordenaban que recogiera los cuerpos de los caídos en ambos bandos.

Allí se quedaron los tres Primos, quienes entablaron amistad con Baruzzo y en donde uno de los Suboficiales de Oleg le habló para felicitarlo, de parte del Comandante Wrand al respecto.

- Tuviste suerte.- Habló el británico con un fuerte acento español.- Porque nuestro Jefe reconoce y siente aprecio por aquellos que se arriesgan por salvarle la vida a un Camarada en la lucha.- Dijo y le puso su mano en los hombros al joven de Corrientes.

- "Ésta será la última "Guerra de Caballeros", Oleg. Te lo juro con mi vida".- Recordó el 7* Vizconde las palabras del Teniente Livingston cuando estuvieron en "Goose Green/Pradera del Ganso".

Pronto fue llegando el helicóptero y en donde Baruzzo le hizo una seña al Jefe de los ingleses y a los tres Primos Ivanisevic, viendo que no quedaban muertos ni heridos pero aún faltaba el Teniente Jorge Echeverría, al cual reconocieron y fueron a por él, subiéndolo a la aeronave para curar sus heridas junto a Baruzzo, quien se despidió de ellos, no sin antes recibir, de parte del Teniente Primero Oleg, una de sus "Boinas Rojas" como un recuerdo de la guerra.

Los últimos días los combates continuaron, "Puerto Argentino/Stanley" se encontraba bajo asedio pero las últimas confrontaciones no terminaron allí: Para mediados de Junio, el último "Misil Exocet" que se hallaba en tierra firme fue empleado, desde una lanzadera casera instalada en un camión, obra de varios Ingenieros y Técnicos del Ejército Argentino, el cual fue lanzado contra el "HMS Glamorgan" durante la noche, causando una feroz explosión, cobrándose la vida de varios miembros del navío, incluyendo al Oficial David Tinker, quien había mandaba cartas a su esposa sobre cómo era el curso de los hechos y en especial por su admiración hacia la destreza de los argentinos, sobre todo sus pilotos.

Las "Operaciones Mikado, Kettle Drum y Plum Duff" habían sido un completo fracaso para Londres, la misión que consistía en destruir a los "Exocet" y los "Super Etenrand" no se cumplieron, los miembros del "S.A.S" terminaron siendo enviados desde Chile para Inglaterra, mientras que, para el 10 de Junio de ese año, las hostilidades terminaron: Argentina se rendía ante Inglaterra, la cual recuperaba las Malvinas y con ello vino la entrada de las tropas británicas a la Capital Malvinense.

Aún así, a pesar de la derrota, los argentinos se habían ganado el respeto de sus enemigos. No hubo burlas, desprecio, ni tampoco ataques contra ellos, sino gestos de admiración, charlas, intercambios entre los dos oponentes, recuerdos, momentos que iban a quedar atesorados para siempre en la Historia y la memoria de ambos pueblos. 

- ¿Crees que un día este conflicto se resuelva, Oleg?.- Le preguntó el Cabo Stone a su amigo.

Éste respiró hondo, miró la Capital, cerró los ojos y de ahí buscó las palabras para ello.

- Quizás, solo espero que nunca vuelva a ocurrir una guerra así. Ambos bandos salimos perjudicados.- Señaló el chico, sabiendo que tenía esas heridas de bala.

- Lo mismo digo: Esto solo benefició a Thatcher. Nosotros volveremos, nos harán un desfile y luego una patada en el culo. ¿Sabes a cuántos he atendido y van a tener que usar silla de ruedas y bastón por todas sus vidas?. Es incalculable pero estas son las consecuencias de toda guerra. Aún así, espero que pronto podamos a reanudar las conversaciones con los argentinos. No me siento cómodo con haber venido desde tan lejos para ver morir a amigos míos por una disputa que solo benefició a los políticos y sus amigos de la Industria Bélica.- Remarcó el Cabo de Yorkshire.

- Tú lo has dicho.- Le respaldó Oleg y puso su mano en los hombros del Suboficial.- Ven, vamos con los otros. Iremos a visitar a Benny y Tyler.- Sugirió, para quitarse de en medio ese escollo que representaba la parte negativa de la lucha.

Por su parte, en el Monte Tumbuldown, un helicóptero "UH-Bell" aterrizaba y allí, en medio del frío, alguien se encontraba con Mireya. Estaba viva pero herida, por lo que dos médicos, quienes no eran ni ingleses ni argentinos, se la llevaron de allí para un rumbo desconocido.

La "Guerra de Malvinas" había terminado.

[Tremendo el capítulo de hoy: Entre la aparición de Mijaíl Karkarov alias "Brad", el plan de Jack Venom contra los Ivanisevic y lo que quedaba de la "Guerra de Malvinas" nos conduce hacia lo que queda de esta Saga y a la última, la de Alexander.

Les advierto que, a partir del capítulo que viene, las cosas se van a ir poniendo más feas para los Ivanisevic. Preparen pañuelos porque habrán lágrimas que derramar.

Cuídense, amigos. Mando saludos y agradecimientos para shadowbellatrix, MrR199, ElLinternaVerde2814F, ShakespireErick25, Eltíorob95, LucasDiaz727, LucasAbad0 y los demás seguidores.

Buen inicio de día Viernes de mi parte, Camaradas.].