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Capítulo VIII

Capítulo VIII:

1967 estuvo repleto de hechos históricos, sobre todo en EEUU con los "Disturbios Raciales de Newark" en donde se enfrentaron los ítalo-americanos contra los afro-americanos por cuestiones de territorio y luchas entre Mafias. En aquellos tiempos, un Ivanisevic, de los varios nacidos fuera de los Balcanes, de nombre Francesco, se encontraba deambulando por las calles de aquellos barrios de Nueva Jersey debido a una serie de embargos de armas contra Yugoslavia por órdenes del Presidente Johnson, quien los acusaba de "fomentar las divisiones" entre el pueblo norteamericano, cosa que ponía en riesgo a aquellos países unidos, así que, por órdenes del Mariscal Tito, aquellos nacidos fuera de los Balcanes tenían que iniciar una serie de operaciones, sin importar las consecuencias.

Para Francesco, de unos 25 años, cabello negro y bigote, elegante de pies a cabeza y con el título de Caballero y Conde tanto de aquellas tierras como de Italia y Grecia, además de por lazos sanguíneos con Inglaterra, empezó a trabajar para un hombre llamado Dickie Moltisanti de la "Organización Criminal DiMeo".

https://youtu.be/ACpOsmInmhE

- Hey, Joe Casieglo.- Le llamó el joven peli negro.- Dickie quiere su dinero, ¿cuándo se lo darás?.

- Ya te dije que pronto, hermano. Solo...Solo dame tiempo.- Respondió el otro, fumándose un cigarrillo de marihuana, lanzando una columna de humo hacia el otro, el cual le dio una bofetada en el rostro y le aplastó el citado objeto contra el piso, empleando sus zapatos negros.- ¡Hey, ¿qué te pasa?!.

- No me vuelvas a faltar el respeto, infeliz. Te lo advierto: O le pagas a Dickie en 24 horas o volveré yo mismo a cobrar la deuda con tu sangre.- Le advirtió, poniéndole el cañón de su Pistola Luger contra el cuello.- O mejor aún, ¿a ver qué hay en tu cuchitril de hogar?.- Se preguntó y empezó a hurgar por los alrededores, revolviendo todo.- ¿No me estarás ocultando el dinero para irte a fumar esa mierda?

- Es la nueva droga, hermano.- Sostuvo el otro, encendiéndose uno nuevo.

- Hippie de mierda. Cómo los odio, ustedes van a dar a luz a hijos con fragilidad emocional. No podrán ni andar en bicicleta porque habrá que tenerles tolerancia. Antes que suceda eso, prefiero irme a la guerra.- Le espetó Francesco y al ver que no encontraba nada, estuvo por irse hasta que sintió que un tablón del suelo no estaba fijado y eso alertó a Joe.

- Ehhh, oye, Fran, ¿te puedo llamar así?.- Intervino, algo nervioso, cosa que llevó a que el otro alzara una ceja.

- En primer lugar, no, no me llamarás así, te dirigirás a mí como Francesco Ivanisevic y en segundo lugar, ¿qué escondes?.- Le amenazó y sin que obtuviera una respuesta, levantó el tablón del suelo y se encontró con una caja de zapatos, de la cual se hallaba repleta de dinero, el cual estuvo contando.- ¡Aquí hay más de $5000, miserable rata hija de puta, le estabas ocultando a Dickie lo que le debías!.- Bramó y se le lanzó encima, golpeándolo con un atizador para la chimenea en la espalda.- 

- ¡NO, ESPERA! ¡ESPERA, FRANCESCO, TE LO JURO, LE IBA A PAGAR, ME DEMORÉ! ¡NO ME MATES, TE LO RUEGO, POR FAVOR! ¡PARA!.- Aquel joven Hippie estalló en lágrimas ante la furia del ítalo-eslavo, quien terminó de golpearlo y dejó el objeto a un lado, empapado de sangre. Inmediatamente, éste sacó un cigarrillo de su cajetilla y lo encendió con un encendedor, fumándole en la cara.-

-  ¿Ahora no te gusta esto?. Muy bien: Te lo advierto, me llegas a denunciar con la Policía y lo último que verás será el cañón de mi Luger directo contra tu hueca cabeza, ¿me oíste?.- Le dejó esa amenaza, mientras que el otro asentía en silencio, llorando a más no poder.- Y límpiate al igual que esta pocilga que tienes. Abre las ventanas que el aire fresco no es veneno como la mierda que fumas.- Le dejó ese aviso, se lavó las manos y fue hasta las escaleras con la caja en su poder.

Los vecinos habían oído los gritos, un par de amigos hippies de Joe se acercaron para increparlo pero al notar que era Francesco, varios salieron corriendo y otros palidecieron como fantasmas.

- "Cómo los odio a estos inútiles que se visten así y encima fuman esa basura. No van a llegar a ni a los 60 años.  Para los 25, tirando a los 30, estarán esperando un trasplante de pulmón o estarán bajo tierra".- Pensó con frialdad, mientras que se topaba con un amigo suyo, un afro-americano de barba candado.- ¿Qué hay, Tommy?.- Le estrechó la mano.

- Jajaja, yo bien. Veo que vienes de "cobrar".- Respondió éste con una risa jocosa.

- Diste en el blanco pero silencio, que hay muchos "fumadores" por la zona.- Le señaló a un grupo de aquella gente, cosa que el ceño fruncido y la expresión del moreno cambió rotundamente.

- Cómo los detesto, se la pasan todo el día fumando o se van de viaje. La mayoría son "niñitos de mama y papa", sabes a lo que me refiero.- Enfatizó el negro.

- Estás en lo correcto: Gente de mucha pasta.- Remarcó Francesco y de ahí vio su reloj.- Bueno, colega, nos vemos luego. Mándale un saludo a tu esposa e hijos.- Se despidió con un fuerte abrazo de su amigo y de ahí tomaron sus caminos por separado.

Era el Mediodía en Newark, el año 1969, mes de Mayo y mientras que en la televisión y la radio pasaban acerca de los acontecimientos vividos en Argentina con el "Cordobazo", el asesinato del Líder Sindical Augusto Timoteo "El Lobo" Vandor a manos de un "Comando" del "Ejército de Liberación Nacional" a través de la "Operación Judas" y con ello la situación en Vietnam que se iba convirtiendo, día a día, en una verdadera piedra en el zapato de EEUU, además de que Richard Nixon había asumido la presidencia de aquel país.

Mientras que Francesco viajaba en un taxi con aquel dinero recaudado para Dickie, éste paró en una cabina telefónica, donde Silvio Dante, uno de los allegados de su Jefe, le había ordenado de que esperara hasta las 17 para que se reuniera con el citado, por lo que, aprovechando que había un cine cerca, decidió meterse allí, junto con la caja como su "acompañante", para ver la película de "Astérix y Cleopatra" que había salido hacía poco tiempo en EEUU.

Dentro de la Sala del Cine, con muy poca gente para esas horas y más siendo horario de escuela, el joven no paraba de reírse con aquellas escenas cómicas, la música y sobre todo la historia que ésta contenía encima. Una vez que la función hubiera terminado, cerca de las 17 horas, saliendo del edificio, éste vio que un grupo de tres sujetos lo habían arrinconado por completo, desenfundando sus palos y navajas.

- ¿Tú eres Francesco, no?.- Preguntó uno de ellos.

- No, soy Elvis Presley.- Se burló el citado, encendiendo un cigarrillo.

- Ten cuidado por cómo te expresas. Yo soy Richard Baltimore, amigo de Joe Casieglo, le diste una tremenda tunda y encima le robaste. Danos esa caja que tienes ahí o terminas como colador.- Le advirtió el que lideraba a aquella banda de tres, además de que llevaba una especie de bandana roja atada a la frente.

- Oye, no estamos en Woodstock, podrías ponerte una mejor ropa. Digo yo, unos jeans, una buena camisa y para las putitas de tus perros falderos tal vez unas faldas.- Se burló de ellos, llevando a que cundiera un silencio sepulcral.

- Tú te lo has buscado.- Advirtió Baltimore y cargó contra él, pero Francesco fue más rápido, dándole una patada en los bajos al enemigo, quien cayó al suelo, agarrándose dicha zona, mientras que tomaba su palo.- 

- Muchas gracias por el regalo. Ahora, ¿quién quiere pelear?.- Se preparó el ítalo-balcánico para dar una buena lucha contra dos armados con sus navajas.

- ¡Esta es por Joe, infeliz!.- Bramó uno de sus amigos, quien trazó varios cortes, uno de ellos le hizo una herida en el rostro a Francesco pero éste se lo devolvió con un golpe en la cabeza, dejándolo atontado.

- Bueno, somos tú y yo, ¿vamos a bailar o qué?.- Preguntó, desafiante, al último enemigo, quien, por miedo, arrojó su navaja y se llevó a los dos heridos directo al coche.- Me lo esperaba, huyen después de tirar la piedra.- Sostuvo con frialdad, mientras que se iba de allí con la caja e ingresaba en el restaurante que dirigían Dickie Moltisanti y los suyos, además de percatarse de que se encontraba, en esos momentos, Conrado Soprano, el cual era como el "Teniente" del Patriarca de la Familia Moltisanti.

Silvio Dante fue el primero en verlo llegar al "Cobrador", quien depositó la caja de zapatos en la mesa, delante de Dickie.

- ¿Está todo?.- Preguntó el citado.

- Más de $5000 que le ocultaba esa rata de Casieglo.- Respondió Francesco, tomando asiento al lado de un chico de nombre Tony Soprano.

Dickie le quitó al tapa y se puso a contar, por las dudas, cada uno de los billetes, pidiendo silencio en los alrededores.

- Oye, Fran.- Le habló Tony, quien era uno de los pocos que podía llamarlo así.

- Dime, pequeño.- Respondió éste, volteándose para verlo.

- ¿Le diste con todo? ¿No?.- Preguntó, refiriéndose a la paliza que le había ejercido a Joe.

- En efecto: Una escoria como Joe Casieglo no es más que un Cáncer para la sociedad, Tony y si un día tú te conviertes en el Jefe de esta Organización, en el Futuro, tienes que dejar de lado los sentimientos hacia aquellos que te puedan hacer daño. No busques ganarte su confianza, ellos te odiarán. Que lo hagan, porque así, a través del odio, está el miedo. Eso es lo que impulsa a un líder respetado, porque uno débil, flácido, se lo llevan como si fuera un tapete de bienvenida y tú no querrás eso, ¿no?.- Le dejó esa enseñanza sobre cómo tener el poder en las manos de uno.

El pequeño peli negro negó con la cabeza, por lo que Francesco le pasó la mano sobre sus cabellos.

- Ahora ven, te voy a dar unos consejos muy importantes para el Futuro. Dickie, esperaré afuera por si tengo que hacer algo.- Señaló éste hacia la puerta, cosa que el otro asintió en silencio, viendo que todo el dinero estaba allí y le permitió dirigirse hacia el exterior para hablar con su sobrino.

Afuera, en las calles de Newark, los Cielos se mantenían despejados, aún se resistía el Invierno con irse de allí y soplaba una brisa un tanto fría. Las personas iban y venían, al igual que los coches, todos metidos en sus pequeños "Mundos", tratando de seguir con el día a día de una Nación que estaba luchando contra el Comunismo pero no veía que su propia gente estaba sufriendo con sus políticas y una guerra, de la cual nunca habían sido llamados para combatir. 

El joven Tony Soprano tomó asiento en una silla del exterior, bajo una mesas, acompañado por Francesco, quien llamó a un joven camarero y pidió algo para tomar. El muchacho asintió y salió de allí para traer las órdenes que habían requerido en aquellos momentos. 

- Bueno, Tony.- Comenzó el peli negro, hallando las palabras adecuadas para un joven que iba por el mismo camino que su padre.- Empieza tú.

- ¿Cómo lo han hecho tú y tu familia?. Es algo que me sorprende.- Preguntó, yendo al "Hueso Central".

Francesco lo miró, sonrió, tomó un cigarrillo y se lo encendió pero no lo fumó delante del chico, el cual tendió su mano para tomarlo.

- No, esto no, chico.- Le advirtió, dándole un golpecito en la mano.- Nunca debes fumar, esto es solo para la gente que escoge ese camino. Yo solo fumo uno o dos cigarrillos pero usualmente. Tú nunca pero nunca cometas el error de fumar mucho, eso te arruinará al salud y más que nada, si un día alcanzas el poder, deberás cuidarte bien, porque habrán muchos que querrán derribarte. Con respecto a tu pregunta: Los Ivanisevic tenemos una historia muy larga, una que comienza desde la Edad Antigua con Grecia y Roma. Luego se extendió con Bizancio, los Imperios Otomano, Ruso, Británico, Italia, los Balcanes y ahora con Yugoslavia.- Le relataba el hombre, fumando un poco delante de éste.

- Pero tú te metiste aquí por otro motivo, ¿no?.- Preguntó y eso fue un punto para Tony.

- En efecto: Como bien sabes, mi primo Rodney y yo somos de la "Generación Extranjera", los nacidos fuera los Balcanes y desde que Richard Nixon lanzó un embargo de armas para Yugoslavia, nos hemos visto metidos en el asunto de contactar con traficantes que ustedes conocen para, de esa manera, enviarlas para Sarajevo. Es un trabajo peligroso, pero todo por la Familia Ivanisevic, pequeño.

- Incluso yo haría una cosa así.- Resaltó Tony.

- Tienes las agallas necesarias, chico, pero las emociones son traicioneras. El corazón puede decirte que lo "escuches" pero también oye a tu cerebro, tu consciencia, éste sabe qué hacer, cuándo reaccionar y sobre todo cuándo atacar. Nunca hay que dejarse apabullar por escorias como los Comunistas, Capitalistas o esa mierda hippie que, de seguro un día se convertirán en algo peor.- Resaltó y su tono sonó serio en aquellos momentos, llevando a que el otro alzara una ceja.

- Son inútiles. Mi padre también lo dice, incluso mi madre y hasta el Tío Dickie.- Remarcó el chico, mirando a un grupo de hippies que estaban tocando la guitarra cerca del restaurante, llevando a que Francesco les lanzara una mirada de furia.

- ¡Oigan, vayan a una plaza a tocar su música! ¡Aquí vienen familias a pasar el rato!.- Exclamó, enfurecido, poniéndose de pie y mirándolos con desprecio.

Aquellos dejaron de tocar, los ojos de aquel ítalo-eslavo que los tenía en la mira no paraban de "fulgurar". Por algún motivo, el sujeto, simplemente estaba allí, quieto pero firme.

- ¡La acera no es para sus payasadas, largo de aquí!.- Exclamó pero no lo oyeron.- ¡¿Qué?! ¡¿Están sordos?!.- Bramó y de ahí tomó un fajo de billetes, lanzándolo a la gorra de uno de ellos.- Malditos fumadores de hierba, ojala se mueran todos en Vietnam. Un Cáncer para el avance de la Humanidad, un escollo que solo traerá involución y retraso.- Dijo, mientras que aquellos hippies tomaban el dinero e ilusionados se iban de allí con destino a gastarlo en viajes y drogas.- ¿Lo ves, Anthony?. Esta clase de gente es con la que NUNCA debes tratar. Si quieres montar un Imperio, rodéate de lobos antes que de ovejas.- Le dio esa frase y volvía a tomar asiento frente a él. Los Lobos son seres cordiales, las ovejas solo balan, repiten como los ignorantes que se creen que el Comunismo y el Capitalismo son la salvación, cuando lo es el Nacionalismo. Esa es la forma ideal para establecerte.

El chico lo oía con atención, quería tomar nota pero se lo grababa en la cabeza. 

- El problema son los hippies.- Sostuvo aquel peli negro.-

- No, no solo son ellos el problema, sino de que, para ser un Líder verdad, es saber cómo dirigir y administrar el poder que uno lleva consigo. Nuestras acciones son las que nos juzgan pero, también, son las que nos demostrarán si hicimos bien o no nuestro trabajo. Cometemos errores, muy bien, somos Humanos pero no podemos volverlos a repetir. El liderazgo es lo más importante para uno, si quieres convertirte en alguien perdurable, entonces no te dejes aplastar por nadie: Quiere a los tuyos, en especial a tu familia.- Siguió hablándole pero notó que Anthony miraba para otro lado, como no queriendo saber nada sobre ese punto.

- Eso díselo a la mía. Parece como si yo no existiera. Todos son fijan en Janice, mi hermana.- Apuntó el chico.

- Hey, mírame, Tony, mírame, ¿sí?.- Pidió Francesco, dejando de lado su cigarrillo y tomando el rostro del otro.- Te ignorarán y todo, pero son tu familia y en el fondo te quieren tanto como a Janice. En este Mundo duro y cruel, el amor es solo para espacios limitados, para lo nuestro. No puedes hacer que nadie, en todo lo que nos rodea, viva del "Paz y Amor, Hermano". Nosotros tenemos conflictos, todos los tenemos y sin ellos, entonces la sociedad sería una utopía, un "perfecto" cuento de hadas o un tétrico Mundo de Terror muy edgy. Con esa palabra ya me entenderás, para el Futuro.- Le prometió, animándolo a seguir.- Un Líder nace, se convierte en lo que es pero nunca te debes dejar pisotear, así como también deberás ser autónomo, independiente, que tomes tus decisiones. No vivas siguiendo órdenes todo el tiempo, piensa por ti mismo, ¿sí?. Yo espero verte, un día de estos, convertido en lo que serás, Anthony Soprano.- Le dijo y dio esa dedicación, palmeando al joven cuando, de repente, las puertas se abrieron y allí aparecía Silvio Dante junto a Paulie Gualtieri y Salvatore "Pussy" Bonpensiero.

- Puedes pasar, Fran.- Le llamó el primero, mientras que Anthony lo seguía a aquel que consideraba como su "Segundo Tío" al interior del restaurante.

Sentado a la mesa, en compañía de su esposa, Dickie Moltisanti pidió a Francesco que tomara asiento y éste accedió, quedando cara a cara con aquel sujeto.

- Hiciste un muy buen trabajo, Fran.- Le felicitó Dickie pero el otro no cambió la expresión fría en su rostro.- Hace poco, para recompensarte por tus logros, logré dar con un traficante de armas proveniente de Francia y con otro de aquí. El primero se llama Le Maulle y el otro es un ítalo-americano de nombre Vincenzo "Vince"  McGuill, con ese podrás dar una entrevista y así obtener las armas que buscas.- Le explicó.- Sin embargo, deberás estarte atento: Hay muchos hijos de puta de soplones y no querrás tener al FBI detrás tuyo.

- No tiene por qué preocuparse, Señor Dickie Moltisanti.- Habló el joven con calma, apagando su cigarrillo.- Mi primo, Rodney, quien vive en Londres, puede ayudarnos también con el envío de armas, formando dos caminos: Uno aquí conmigo y otro desde Europa, así será más fácil trasladar aquellos hacia los Balcanes.

- Tienes muy buena forma de administrar los negocios, por eso te quiero nombrar como uno de mis hombres más cercanos junto a Pussy, Silvio y Paulie, ¿te parece?.- Le propuso esa idea, por lo que el otro aceptó inmediatamente, estrechando su mano, llevando a que se quedara establecida dicha alianza.

[Nuevo capítulo y entramos en 1969 con Francesco Ivanisevic, quien es el abuelo de Alexander, así como también veremos a Rodney Sharp-Ivanisevic en el próximo capítulo junto a un invitado especial.

Los personajes que han visto aquí pertenecen a la película "The Many Saints of Newark", perteneciente a la serie "Los Soprano". La película salió en Septiembre del 2021.

Luego del capítulo que viene, pasaremos a los Años 70 y es ahí donde habrá que estar bien atentos por lo que vendrá.

Mando saludos y agradecimientos para:

MrR199: Muchas gracias por el review y preparate porque cuando lleguen a los Años 70 será un reguero de sangre, uno que tendrá sus consecuencias para la próxima Década.

shadowbellatrix.

ElLinternaVerde2814F.

erickshakespare20089.

Eltíorob95.

* Y los demás seguidores.

Cuídense y buen inicio del mes de Septiembre y día Viernes de mi parte, Camaradas.].

  


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