Capítulo VIII:

Un jinete llegó a todo galope para el Cuartel General en Crimea, allí, en medio de los bombardeos navales de las Flotas de Inglaterra, Francia, el Reino de Cerdeña y el Imperio Otomano contra sus posiciones, no tuvo problemas para evitar que le alcanzara algún impacto de la Artillería que lo pudiera mandar a volar, estallara en miles de fragmentos o que su caballo se asustara y lo arrojara contra el piso pero no fue así. El muchacho, de cabello negro y ojos verde esmeralda, llegó hasta la entrada del edificio, donde las columnas de humo se alzaban por las otras edificaciones. Se detuvo, un grupo de cuatro Mozos de Caballeriza tomaron las bridas de su corcel y lo llevaron para que pudiera descansar.

- Sequen su sudor. Esto no va a durar mucho.- Les pidió el mensajero.

- Enseguida, Conde Mikhail.- Respondió uno de ellos pero, cuando captó el otro dato, se volteó para verlo.- ¿Qué quiso decir con eso último? ¿Se termina la guerra?.

El joven Conde de la Familia Rasmarov, quien compartía lazos con el Reino de Grecia al tener sus posesiones en Atenas y El Peloponeso, procedió a abrocharse su abrigo y acercarse a los chicos que lo atendían.

- Desgraciadamente esta guerra se termina, pronto se declarará el alto al fuego.- Informó Mikhail, mientras que se peinaba sus cabellos sueltos y desparramados por los vientos gélidos de Febrero.

- Hubiera sido genial que nuestros barcos pudieran hundirles unos cuantos a los malditos ingleses.- Se manifestó un segundo de los Mozos de Caballeriza.- No nos dejan ni dormir.

- Estamos en guerra, chico, no en una fiesta. Es así.- Le hizo volver a la realidad el Conde Rasmarov.- Por cierto, ¿ella...?.

- Sí, lo está esperando.- Mencionó el Jefe de aquel grupo y lo escoltaron hasta el edificio principal, en donde un Destacamento de "Guardias Imperiales" custodiaban la entrada. Al verlo, tomaron posición de firmes y le saludaron.

- ¡AVE CÉSAR, CONDE RASMAROV!.- Exclamaron éstos, con el brazo en alto, dándose a conocer sus respetos.

- Ave, Soldados.- Les devolvió el saludo.- Debo ir a verla.- Pidió y tras abrirse las puertas, Mikhail ingresó en el Cuartel General del Imperio Ruso.

Dentro de la "Sala de Reuniones", una chica rubia y ojos celestes, vestida con un uniforme azul gélido, permanecía al lado del Zar Nicolás I Romanov. El que fue conocido como "El Gendarme de Europa" estaba entrado en años, pero se mantuvo de pie para combatir contra el enemigo y darles ánimo a las tropas, las cuales se encontraban exhaustas. Su plan de expandir la influencia Rusa por el Este había fracasado gracias a Inglaterra y sus Aliados, además de que el tan ansiado "Puerto de Aguas Calientes" iba a terminar "cajoneado" hasta el próximo intento, por lo que iban a ser años muy complicados, en términos navales, para la Flota Imperial cuando el Invierno volviera a presentarse en Europa. 

- Impresionante.- Oyó la voz de la joven rubia, quien contemplaba aquellas nuevas máquinas de guerra que se encontraban sobre el Mar Negro, bombardeando todo a su paso, oyéndose el retumbar de los cañones.- Los llaman "Barcos a Vapor", ¿quién lo diría?. Hasta hace 30 años atrás estábamos con naves movidas por velas al viento y las olas, ahora cuentan con el carbón, el hierro y el acero. Eso sí que es un progreso enorme.- Se maravilló la chica.- Lo mismo eso que llaman telégrafo, el fusil de ánima rayada, la fotografía y el ferrocarril. Jamás creí que llegaría a ver algo así en Europa y en el resto del Mundo.-

Un nuevo cañonazo hizo temblar el edificio principal y movió las lámparas de araña que pendían del techo, haciendo caer polvo contra el piso.

- Sí, a mí también me ha dejado sin palabras lo que es el avance de la tecnología. Dentro de unos años, ya no necesitaremos emplear a la Caballería para ir al campo de batalla. Bueno, ya no tiene le mismo papel que siglos atrás, cuando cabalgábamos hacia el frente. Ya no más.- Respondió el Zar Nicolás I, mientras que se ponía de pie.- ¿Usted qué opina, Duquesa Tatyana Ivanisevic? ¿Qué deberíamos hacer?.- Preguntó al respecto.

- Su Majestad, con el debido respeto, yo soy una Oficial y Agregada Militar en Crimea, no tengo el mismo poder que usted y tampoco se lo cuestionaría.- Respondió la rubia al ver que el propio Monarca le preguntaba algo.

- No es eso, sobre cómo manejo el Imperio, sino de lo que se está hablando en muchos países del "Viejo Mundo". Ya sabe de qué hablo.- Señaló y miró hacia un libro que se encontraba apoyado en la mesa junto a otros.

Tatyana caminó y le echó una fría ojeada al mismo. Respiró hondo y frunció el entrecejo, tomándolo con ambas manos.

- Esto no se lo puede llamar "libro", Su Majestad. Esto es una incitación a la violencia, a los "Golpes de Estado" como hicieron en Francia contra la Familia Borbón, Carlos X y Luís Felipe de Orleans. Que no me vengan a decir que Karl Marx es un "genio" cuando no es más que un pomposo Aristócrata que habla "a favor del obrero maltratado por los empresarios" cuando él vive rodeado de lujos, con su mujer que lo mantiene y que ya se le murieron varios hijos. Lo que este tipo simboliza es la decadencia de todo lo bueno que conocemos y devolver a la Humanidad a la Prehistoria misma.- Respondió la chica, dejando el libro llamado "El Capital" sobre la mesa. Yo no sé cómo es que los obreros vean esto. Se aprovechan de ellos y ninguno quiere que alguien sea manipulado, empleado como "Carne de Cañón" por los caprichos de una minoría. 

El Viejo Zar la escuchaba con atención, mientras que permanecía de pie. Desde hacía un buen tiempo que las ideas Liberales y ahora esta nueva corriente, llamado "Marxismo", empezaba a calar hondo dentro de las Sociedades Industriales de Europa Occidental. El surgimiento de nuevas técnicas en las fábricas, las máquinas que reemplazaban al trabajo físico del hombre junto a la migración del campo a las grandes ciudades se lo consideraba como un gran progreso, un avance para que se viera el nuevo Amanecer, sin embargo, en otras Naciones como España, la cual había llegado tarde la "Revolución Industrial" y lo mismo en el Este de Europa, la vida de los trabajadores estaba marcada por un contexto sumamente deplorable: Bajos salarios, trabajo infantil, sin seguro médico ni licencia por enfermedad, maternidad y vacaciones pagas. Todo giraba desde su bolsillo y mientras más pasaba el tiempo, más gente iba cayendo en la pobreza, algo que el propio Zar trataba de paliar como pudiera. 

- La "Emancipación de los Siervos" es algo que nos ha permitido que ellos puedan desligarse de este "Feudalismo" y esto llevará su tiempo, Duquesa Ivanisevic.- Señaló Nicolás I con seriedad.- No sé cuánto pero temo de que esto, o sale bien o habrá una guerra civil.- Temió el Monarca.

- No diga eso, Su Majestad, estoy segura de que llegaremos a una solución.- Prometió la chica.- Aún así, tenemos que hacernos cargo de la protección de la Familia Imperial, cualquiera que intente ir tras ustedes podría afectar al sistema que tenemos.- Dijo Tatyana, haciéndole saber que una amenaza terrorista contra ellos era vital y que podría ocurrir en cualquier momento.

Nicolás I suspiró y asintió con la cabeza, despacio.

- Es verdad lo que dices. ¿Cuál es tu propuesta?.- Inquirió el Monarca.

- Formar una "Guardia Imperial Personal" y al "Escuadrón de Defensa" que tanto se ha hablado, así como también contar con el apoyo de mis primos de Bosnia-Herzegovina, ya que ellos dirigen la "Orden de los Caballeros de Sarajevo". Nos serán mucha ayuda.- Enfatizó la joven y eso era muy renovador.

Pero al momento en el que el Zar iba a hablar, las puertas se abrieron, entrando aquel muchacho que tanto lo había estado esperando.

- Lamento muchísimo el haber demorado, Amor Mío.- Se dirigió Mikhail hacia donde ella estaba, abrazándola con fuerza.- Su Majestad.- Mostró sus respetos hacia éste.

- Me alegra de verte, Corazón, Mi Osito de Peluche.- Habló Tatyana cuando un nuevo cañonazo hizo temblar todo el ambiente.- Malditos ingleses, ojala mi tía Tanya estuviera aquí, ella sí sabía bombardear a los navíos británicos en las Islas Malvinas.-

- Lo sé, lo sé, pero ahora no podemos quedarnos para discutir cosas del Pasado. Tenemos mucho que hacer y poco tiempo. ¿Qué hay de lo que se propuso? ¿Llevaremos a cabo la creación del "Escuadrón de Defensa" y la "Guardia Imperial Personal".- Preguntó su prometido a ella, quien asitnió.

- En efecto, lo haremos y será de inmediato.- Respondió la muchacha, mientras que lo besaba en los labios a su novio y futuro marido. 

El amor puede contra todo pero no frente a un tratado de paz como el que firmaron las Naciones vencedoras con el Imperio Ruso. La derrota del Imperio frente a sus enemigos abrió y dividió a  la sociedad entre aquellos que apoyaban la firma y los otros que culpaban al gobierno de haberse rendido frente a los enemigos de la Patria. Muchos jóvenes, sobre todo intelectuales, se volcaban a la violencia e incitaban a la población para que llevaran a cabo actos de terrorismo contra un sistema que ya no servía, que estaba en franca decadencia pero los Romanov no pensaban en rendirse, iban a seguir peleando hasta el final y demostrarían de lo que estaban hechos. 

Un tiempo después de la firma del tratado, murió el Zar Nicolás I Romanov "El Gendarme de Europa". La noticia caló hondo, incluso en los sectores más opositores de la sociedad rusa. Su funeral fue uno de los más emblemáticos debido a que fue sepultado en el Cementerio de Moscú, en el Mausoleo Familiar de los Romanov y con ello asumió la Corona Imperial el joven Alejandro II el 2 de Marzo de 1855, justo al morir su padre, iniciando una serie de reformas durante su gobierno, en donde recibió un gran apoyo por parte del pueblo y que eran tomadas desde el modelo de Europa Occidental sumado a la "Emancipación de los Siervos".

Otros proyectos que llevó a cabo fue la reorganización del Ejército y la Armada, creó una nueva administración judicial basada en el modelo francés con un nuevo código penal y un sistema ejemplificado de procedimiento civil junto a un gobierno autónomo local para las zonas rurales y las grandes ciudades con Asambleas electivas que poseían un derecho fiscal limitado y una "Policía Rural y Municipal" que estaba a cargo del Ministro del Interior.

El nuevo Zar había tomado una sabia decisión con respecto a la Familia Ivanisevic y un día de finales de Febrero, llamó a los presentes para que acudieran al Salón del Trono Imperial para dar por iniciada una Era de gran importancia para todos ellos.

- Estos tiempos son muy complicados en la política europea: Tenemos a los Italianos y Alemanes que están buscando la reorganización territorial, los Imperios van y vienen pero también tenemos a los Austríacos, quienes están uniéndose con los Húngaros en una poderosa Monarquía. Por su parte, Francia es una de las amenazas que debemos vigilar junto con Inglaterra, mientras que EEUU está envuelta en la "Guerra de Secesión Americana". Pero no solo de nuestros vecinos debemos cuidarnos, sino también de esto que llaman "Marxismo" y "Anarquismo", los cuales están sembrando sus raíces en las mentes de los jóvenes, llevándolos, en muchos casos, por el camino de la violencia armada, así que recae en ustedes, Familia Ivanisevic, hacerse cargo de la Seguridad de los Zares y de la Patria, por lo que les concedo plenos poderes y con ello doy por creadas la "Guardia Imperial Personal" y el "Escuadrón de Defensa" que dirigirán todos ustedes y también doy la bienvenida a la "Orden de los Caballeros de Sarajevo".- Dio el Zar Alejandro II Romanov su discurso ante los presentes, mientras que se completaba el "bautismo" y de ahí daban su "Juramento Imperial" en proteger a la Familia Romanov.

- ¡"Guardianes Imperiales" de la Familia Ivanisevic ante el Zar Alejandro II Romanov, soy el Comandante Kirill Nóvgorod, perteneciente a la homónima Casa y soy 19*Vizconde de Moscú y San Petersburgo!.- Hizo su entrada un muchacho de cabellos blancos como la nieve y ojos verde-esmeralda, quien marchó a paso decidido y después de entrechocar sus talones, se dirigió a sus efectivos.- ¡"Guardianes Imperiales", preséntense ante Su Majestad y su Comandante Suprema, la Duquesa Tatyana Ivanisevic!.- Ordenó éste.

- ¡Soldado de Primera División, Ruslan Carpatov!.- Dio el primer efectivo su paso al frente.- ¡Al servicio del Zar y la Familia Ivanisevic!.

- ¡Sargento Primero, Boris Boryanovich!.- Se sumó un segundo, haciendo sonar sus botas contra el suelo.

- ¡Capitán Marik Stranovisky!.- Añadió un tercero y con ello fueron sumándose otros más.

Tatyana, frente a ellos y con los Zares a su lado, pasó revista, cada quien dio su nombre, apellido y rango del recientemente formado "Escuadrón de Defensa". Con ella estaban su prometido y la "Orden de los Caballeros de Sarajevo", quienes habían venido desde tan lejos para presenciar aquel momento histórico.

https://youtu.be/u5FyRZbqfeM

- ¡SOLDADOS Y CABALLEROS DE BOSNIA-HERZEGOVINA, HERMANOS Y CAMARADAS DE ARMAS DEL ESTE, HAN SIDO LLAMADOS PARA RENDIR SU JURAMENTO ANTE LOS ZARES, CON NOSOTROS A SU LADO, LUCHAREMOS POR DEFENDERLOS DE LAS AMENAZAS QUE PROVENGAN TANTO DEL INTERIOR COMO EL EXTERIOR! ¡ESTÁ EN NUESTRA SANGRE, COMO VALIENTES GUERREROS QUE DARÁN TODO POR LOS ZARES, LOS PUEBLOS ESLAVOS Y LA MADRE PATRIA QUE NOS HA DADO SU ABRIGO TRAS MUCHAS DESGRACIAS!.- Exclamó Tatyana, dando un paso al frente, mientras que se hallaba su familia, incluyendo a una adulta Tanya Ivanisevic, quien había contraído matrimonio y, a sus 40 años, seguía combatiendo en las guerras, sobre todo cuando estuvo en Crimea.- 

A su vez, en un nuevo Cuartel General levantado por órdenes de Pietor, éste y sus allegados estaban manteniendo una reunión cuando llegó una misiva de parte de uno de sus Agentes sobre el terreno. Al tomarla y leer el contenido, siempre caracterizándose por mantener la calma, en esta oportunidad sintió un verdadero terror.

- ¡A todos aquellos que intenten dañar a los Zares, les avisamos de que lo pagarán con su vida!.- Anunció Tatyana a los suyos.

- ¿Qué dice, Jefe?.- Preguntó Guri, uno de los miembros del "Círculo Intelectual" que conformaba al grupo.

Pietor se puso de pie y caminó hacia el Centro de la Sala.

- Los Ivanisevic nos acaban de declarar la guerra con esto.- Anunció y mostró la carta.- Han creado una "Guardia Imperial Personal" y el "Escuadrón de Defensa" con la "Orden de los Caballeros de Sarajevo".- Presentó el papel ante los suyos, quienes gritaron y abuchearon a los atacantes.- ¡Si ellos buscan detener nuestro plan, entonces les daremos guerra sin cuartel, Camaradas! ¡Sin piedad!.- Exclamó el rubio, dando su grito de batalla e iniciando las hostilidades contra sus enemigos.

[Nuevo capítulo y con ello ya hemos sido testigos de cómo la Familia Ivanisevic empezó con su papel de proteger a los Zares. En el capítulo que viene veremos al hijo de Tatyana, Anatoly.

Espero que les guste, amigos. Mando saludos y agradecimientos para MrR199, eltíorob95 y los demás.

Que tengan una buena semana y también un...

¡Feliz Carnaval 2023!.].