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Capítulo I

Capítulo I:

El fin de la Primera Guerra Mundial en Noviembre de 1918 permitió a los Balcanes poder salirse del influjo del Imperio Austro-Húngaro, el cual había conquistado dichas regiones al Imperio Otomano antes del estallido del conflicto. Bajo un nuevo Amanecer, una Dinastía conocida como la Casa Real de Karadordevic fue la responsable de tomar las riendas y bajo el reinado del Rey Alejandro I El Unificador, dieron por comenzado un nuevo comienzo. 

Los primeros días de 1921 fueron tranquilos hasta que la llegada de los refugiados y exiliados desde Moscú atrajeron la atención del Monarca y su familia, ya que habían oído historias muy importantes acerca de los Ivanisevic y las generaciones que estuvieron allí, en los tiempos de los Zares, protegiéndolos hasta con sus vidas. Ahora, sin Patria, sin un Imperio, ellos eran "Parias", "Marginados" en medio de un Mundo que apenas se estaba recuperando tras la debacle sufrida por el conflicto armado. 

El recibimiento fue de lo más grande. Para aquellos que habían jurado estar con los Zares hasta los últimos minutos, causó que ellos fueran recibidos con bombos, platillos, flores y fuegos artificiales. Literalmente, todos los Pueblos Eslavos de Yugoslavia habían salido a las calles para darles la bienvenida. Muchos Soldados y Oficiales, en su mayoría jóvenes, veían a las chicas que les lanzaban besos o que arrojaban flores, llamando su atención. Los niños iban corriendo alrededor de ellos y éstos les tomaban de sus manitos, en compañía de los padres. 

Desde los balcones de las casas y edificios de diversos tipos y usos se colgaron banderas tanto de Yugoslavia y el Imperio Ruso, cosa que atrajo la atención de Fiodor, familia y allegados. Aquello parecía un sueño, uno que del iban a despertar pero no fue así. 

- ¿Será este el final de los exilios?. Los Paleólogos tuvieron que irse de Bizancio cuando los Otomanos la conquistaron.- Indagó Catherine Sharp, la madre de Fiodor y Camila.

- ¿Quién sabe, cariño?. Puede que sea cierto y esta desgracia haya terminado de una buena vez.- Le apoyó su marido, mientras que la mujer tenía los ojos empapados por las lágrimas ante semejante muestra de respeto y amor Nacional.

Fiodor, Camila, Luykan y los suyos tampoco daban rienda a lo que eran testigos. Los gritos de bienvenida, los insultos hacia los Comunistas y fervor de que todos los Eslavos deberían unirse bajo un poderoso Imperio que aplastara a los que estaban en Moscú, era algo inolvidable. 

- A pesar de que los Romanov ya no estén, nosotros somos su continuación.- Dijo Camila a su hermano y su prometido.- Su obra no terminó, esto es solo el principio.- Señaló ella, mientras que se bajaban de los caballos, al igual que aquellos tenían sus vehículos, camiones militares y también los carruajes que habían conseguido salvar.

Rasputín, viendo esa escena, supo que había cumplido con su cometido. Miró hacia atrás, lo pensó y supo que también tenía que ir con esa gente, sin embargo, parecía como si algo lo retuviera por completo, así que se acercó a Fiodor, Antonov y Camila para hablarles en privado; en medio de los festejos y la bienvenida organizada.

Reunidos en un lugar un poco más apartado de los festejos, el "Monje" respiró hondo y de ahí miró a cada uno de ellos con esos ojos tan llamativos.

- Bueno.- Dijo, se relamió los labios y de ahí infló su pecho, alzando el cuerpo para dar sus palabras correspondientes.- Misión cumplida: Han conseguido llegar hasta aquí, en una pieza y eso es lo importante.

- Con esto se terminarán los exilios para nosotros, ¿no?.- Preguntó Fiodor al "Monje" pero éste mantuvo el silencio.

Se dio media vuelta y miró hacia los Cielos.

- Hay veces en las que el Futuro uno no puede leerlo y hacer todo al pie de la letra. Debes seguir tus instintos, tu corazón y consciencia, no solamente al primero porque obtendrás los mismos problemas de antes pero ahora, con el fin de la Primera Guerra Mundial, llegará la paz pero nunca se terminarán los conflictos. He visto muchos otros en mis Visiones, en esos donde el Mundo mismo se estremecerá, bajo el fuego de nuevas guerras y en las que se probarán nuevas armas, una tecnología nunca antes vista y que luego...bueno, no quisiera asustarlos.- Indagó Rasputín, dando a conocer sus conocimientos y mostrando imágenes del Futuro pero se detuvo en una parte muy importante del relato.

- ¿Qué más vio, Señor Rasputín?.- Preguntó Camila pero éste alzó su mano.

- Eso no vale, por ahora: Deben seguir adelante, sobre todo tú, Fiodor, cumple con la palabra que tu amigo Paul te ha pedido y sobre Anastasia, no tienen de qué preocuparse, ya que he estado investigando acerca de ella y está bien, se halla en París, Francia, en compañía de un chico que es todo un Caballero y la cuidará por siempre. De eso no tienen de qué temer. Yo seguiré con ustedes, como su Consejero y amigo más cercano.- Prometió y de ahí notaron que la gente los quería allí y más cuando apareció la Familia Real de Yugoslavia.

Con el correr del tiempo, los Ivanisevic fueron asentándose en los Balcanes y en especial en el Palacio Real de Sarajevo, en donde se convirtieron en los Consejeros, Ministros y Generales de los Reyes. Rasputín, por su parte, cumplió su palabra, quedándose al lado de ellos como su Protector, cuidando siempre de que no les pasara nada, así como también seguir viendo en sus Visiones del Presente y Futuro qué podía pasar desde aquellos días en los que se reinstauraba la "Vieja Gloria" y la "Belle Epoqué". 

Con el correr del tiempo, el Mundo fue entrando en los "Maravillosos Años 20", un "Boom" en la Economía, donde incluso las Naciones de América Latina se vieron inmersas en la abundante riqueza que, tras el fin de la Primera Guerra Mundial, fueron emergiendo para poder disfrutarlo. El "Sistema Patrón Oro" era la "Ley Económica", mientras que Rusia, Ucrania, Bielorrusia y otras Naciones de Europa Oriental se iban sumiendo en poderosos avances tanto políticos, sociales, económicos, todo bajo la órbita del Socialismo y el Comunismo, a la espera de que, algún día, se cumpliera la "Profecía" que Marx había dado acerca de la caída del Capitalismo.

A su vez, Fiodor se hizo cargo de una misión secreta en París, donde consiguió hallar a Anastasia Romanov. Grande fue la sorpresa, para ambos, de que la chica estuviera sana y salva pero cuando le preguntaron si quería volver a estar con ellos, bajo el cuidado de los Ivanisevic, debido a que compartían la misma sangre con los Romanov, ella ya había tomado su decisión de quedarse en la Capital de Francia junto al chico que amaba. Fiodor, al principio, temía de que esa persona fuera algún espía de Moscú pero, al conocerlo, notó que era un Caballero y encima tenía raíces que iban hacia Napoleón III de Francia, por lo que no hubo problema y tras despedirse de ella y su prometido, juraron encontrarse, uno de esos días, en Berlín, para cumplir con la palabra de Paul de ir todos juntos a aquel restaurante de la urbe capitalina. 

En aquellos años de violencia desenfrenada, muerte y revoluciones, producto de la "Gran Guerra", también había nacido la esperanza, ya que, poco antes, había nacido el hijo de Fiodor y su esposa, con la cual contrajo matrimonio poco antes del estallido del conflicto armado. La Princesa Lena de Inglaterra y el Archiduque Ivanisevic nombraron al recién nacido bajo el nombre de Nikolay, el cual pasó a llamarse con el "Título" de "El Último Príncipe de la Rusia Imperial" ya había nacido antes de la "Revolución de Octubre". 

Con el paso de los años, el Reino de Yugoslavia vivió una gran expansión y crecimiento bajo el gobierno de los Reyes, aún y a pesar de las tensiones entre Alemania y Francia, ya que la primera no podía pagar las deudas e indemnizaciones por la guerra, llevó a que casi estallara otro conflicto que fue resuelto por la "Sociedad de Naciones". Sin embargo, con el paso de los años y el desarrollo del hijo de la Princesa Británica y el Archiduque Ruso, Europa comenzó a experimentar un cambio radical que haría temblar sus mismos cimientos.

Todo comenzó en Italia con el advenimiento de Benito Mussolini, quien organizó la llamada "Marcha a Roma" con sus "Camisas Negras", poco tiempo después sería nombrado "Duce" ante el pueblo italiano, quienes le aclamaron y con ello inició un gobierno de características anti-Comunistas, persiguiendo a los Rojos, fusilando a una gran mayoría, así como también prohibiendo a las Familias Mafiosas, las cuales estaban teniendo un papel muy activo en los EEUU, sobre todo en la Ciudad de Chicago. 

A su vez, en Alemania, la República Weimar es tambaleaba por sí sola. Los políticos no pudieron hacer nada al respecto y tras estar bajo dominio Comunista, a principios de los Años 20, la Milicia comandada por el Capitán Ernst Rohm tomaron la Capital, Berlín, iniciando el camino de un joven Soldado, pintor austríaco, quien llevaría a cabo un intento de "Golpe de Estado", el llamado "Putsch de la Cervecería Múnich", en donde empleando la retórica y la fuerza se ganaría el corazón de su gente.

Su nombre era Adolf Hitler.

Por su parte, en los Balcanes, era una noche lluviosa pero no para una persona de cabello negro, quien iba ataviado con ropas negras y un impermeable contra las precipitaciones que no paraban de caer.  Éste llegó hasta un edificio, en donde le abrieron y pasó a entrar, viéndose una serie de símbolos y banderas colgados en las paredes.

El joven caminó hasta que le invitaron a tomar asiento. Allí, delante de todos ellos, un hombre rubio se encontraba de pie, fumando un cigarrillo, mientras que tenían una serie de papeles y fotos desparramadas sobre la mesa y sus allegados le pasaban información sumamente importante. Pronto, asintiendo con la cabeza, éstos comprendieron que su Jefe quería estar "a solas" con los invitados y volvieron a sus respectivos lugares, dando por comenzada la reunión.

Llevándose su cigarrillo a la boca y dándole una profunda pitada, el rubio lanzó una densa columna de humo gris con tonos blancos al aire. El olor a tabaco inundó el lugar más de lo que estaba y de ahí se dirigió hacia los suyos.

- Caballeros.- Comenzó éste a dirigirse a ellos con tono tranquilo, caminando de un lado a otro del lugar.- Gracias a todos ustedes por venir aquí, a nuestra primera reunión que iniciamos en Yugoslavia.- Repasó el tema principal.- Como pueden ver: Los Reyes siguen poniéndonos a prueba, se ve que no quieren reconocer nuestros derechos que también merecemos pero se nota que son tan besadores de manos ante los Serbios de religión Cristiano Ortodoxa que para nosotros, los Católicos.

- Es verdad.- Respaldó uno de ellos.- Jefe Milan, estos infelices nos están quitando las fuentes de trabajo, nuestras tierras ancestrales. ¿Acaso los Reyes son también fervientes amigos de los Sionistas? ¿Cuánto tiempo más vamos a esperar para entrar en acción?.- Quiso saber éste, casi alzando la voz.

- Paciencia, nuestras acciones apenas están comenzando: Recordarán el incendio contra la Iglesia de San Esteban o los disturbios desatados durante el "Día de San Vladimir" por nuestros agentes. Nosotros, los "Ustachas" seremos recordados como Libertadores, gente que ha estado siempre al servicio del pueblo y no nuestros políticos que andan por allí, dando sus fiestitas y nosotros aquí, ideando el Futuro para la gente que quiere algo mejor.

- ¡Sí!.- Exclamaron los presentes, algunos golpeaban las mesas, otros se pusieron de pie.

- ¡Ha llegado la hora de demostrarles a todos ellos, incluso a los Ivanisevic, quiénes somos nosotros!.- Bramó Milan ante todos ellos, mientras que el muchacho recién llegado, conocido como Miljenko, lanzaba gritos de batalla contra sus enemigos.- ¡No podrán dormir, tendrán que pasar sus noches despiertos porque seremos quienes los persigan hasta en los sueños!.- Continuó hablando el Jefe ante los presentes y de ahí, pidiendo silencio, todos obedecieron.- Por ello, que se preparen nuestros agentes: Saldremos a causar disturbios para que se peleen contra nosotros, así los debilitaremos y cuando las filas vayan creciendo, lamentarán el día que hayan intentado atacarnos a nosotros.- Finalizó con todo serio aquel hombre, enarbolando la bandera de su Organización.

Aquel día se conoció como el "Amanecer de los Ustacha", los cuales demostraron ser terribles con sus enemigos. Los primeros días fueron de disturbios pequeños, en especial el ataque contra barrios de mayoría Serbia Ortodoxa, Rusa, Ucraniana y Bielorrusa, así como también incendios contra negocios de los citados, partidos políticos, incluyendo el asesinato de un importante militante a manos de los "Ustacha"; los cuales lo ahorcaron en un árbol cuando volvía a su casa después de un mitin y que pertenecía al Partido Socialista.

Podía considerarse como un "acto pequeño", simples incidentes que eran sofocados cuando la Policía llegaba para poner en orden las cosas pero, lamentablemente, los Ivanisevic veían a los "Ustacha" como peligrosos enemigos a los que no se les podía quitar un ojo de encima, por lo que debieron permanecer en las Sombras por un largo tiempo.

Durante esos meses tan turbulentos, los cuales estaban comenzando, floreció el amor, ya que Nikolay se enamoró de una hermosa muchacha llamada Amel, quien era una abogada bosnia en Sarajevo y cuyo padre fue Jefe de la Policía, además de que tenía una "Red de Informantes" acerca de los movimientos que los "Ustachas" estaban haciendo; así como también su hija, quien tenía contactos con la Familia Real Yugoslava, advirtiéndoles del peligro que esos enemigos representaban para la Patria.

- No hay lógica, no hay forma de comprender este odio racial y religioso hacia los Ortodoxos.- Habló Dalibor, el ex-Jefe de la Policía de Sarajevo, teniendo informes recientes sobre ese movimiento y los disturbios que causaban en barrios de dicha religión. Se levantó de la silla y miró por la ventana, en donde habían restos de incendios provocados en los territorios Ortodoxos. Los "Ustachas" habían atacado dichas zonas y causaron la bronca de los residentes pero esto era lo que buscaban. Ellos los superaban en número y muchos Serbios fueron hospitalizados por las palizas que recibieron.- ¿Cómo hemos podido llegar a esto?.

- Temo de que pueda empeorar aún más esto, papa.- Dijo Amel, quien se hallaba reunida con Nikolay.- 

- Señor, con el debido respeto, tanto mi familia como ustedes tendremos que permanecer en las sombras, evitar llamar la atención. Vea lo que está pasando en Alemania. Ese sujeto, Adolf Hitler, está levantando a las masas, se está hablando de un libro suyo, llamado "Mi Lucha", en donde refleja la superioridad racial de Alemania sobre los otros. Esto se va a ir poniendo mucho más feo.- Advirtió el prometido de la hija del ex-Jefe de la Policía.

- Veo que están informados ustedes también.- Sostuvo el hombre, cerrando los ojos, justo cuando se volvían a oír las piedras que lanzaban, junto a las bombas molotov, los jóvenes "Ustachas" contra los negocios y la Iglesia de San Lázaro, la cual era Ortodoxa.- Lamentablemente, visto desde todos los puntos, no nos queda más alternativa protegernos mutuamente. Solo espero que los Reyes no les pase nada.- Fue el ruego que hizo Dalibor, temiendo de que esto pudiera, solamente, la "Punta del Iceberg" y que aún no habían visto lo demás.

Desgraciadamente, en medio de esos años que se fueron volviendo mucho más violentos, tanto en los Balcanes como en Italia y Alemania, llegaron los Años 30. 1929 arrancó con tragedias, empezando con la "Crisis de Wall Street" en la Ciudad de Nueva York, que puso en jaque las economías de tinte Capitalista. Para mitad de los Años 20 Lenin había fallecido y su sucesor fue Iosif Stalin, el cual, tras vencer a su rival y mandarlo al exilio junto a su familia, León Trotski, inició una campaña de terror en base a su figura, el "Culto a la Personalidad" suya, las persecuciones contra todos sus Opositores, empezando por mandar a los Gulags a la gente que trabajó con Lenin, desatar una terrible hambre llamada el "Holodomor" en Ucrania, principalmente, debido a la "Colectivización", hechos que fueron denunciados por dos periodistas de la Italia Fascista e Inglaterra, cosa que Stalin se hizo cargo de "minimizar". Así como también el desarrollo de las infraestructuras en Centrales Eléctricas, rutas, represas, todas ellas construidas bajo la muerte de incontables trabajadores. Aún se tenía en mente que, en palabras de Karl Marx, el Capitalismo moriría, la "Unión Soviética" o "URSS" no sufrió los efectos de la crisis pero, igualmente, sus rivales siguieron en pie. A esto había que sumarle la "Ley Seca" en EEUU, las guerras de pandillas y Mafias en la Ciudad de Chicago, sobre todo con los Al Capone, quienes tenían a la urbe y otros dominios bajo su control, un "Imperio Criminal" montado por ellos. 

En América Latina se dieron los primeros "Golpes de Estado", empezando en Septiembre de 1930 por el General José Félix Uriburu, quien depuso al Presidente Hipólito Yrigoyen, dando por comenzada a la "Década Infame" que duraría hasta 1943 con la "Revolución de Junio" de ese año, dirigida por el "G.O.U" ("Grupo de Oficiales") entre cuyos hombres más prominentes estaba el futuro Presidente de la Nación, Teniente General Juan Domingo Perón. 

Los Años 30 también estuvieron marcados por la llegada de los "Sistemas Totalitarios", empezando por Alemania, ya Italia contaba con Mussolini, mientras que los Germanos veían la creciente figura de Hitler como una salvación ante el debilitado y anciano Canciller Paul Von Hindenburg, uno de los máximos Héroes de la Primera Guerra Mundial. Para inicios de ese año, la República de Weimar estaba sacudida, los Comunistas habían sido expulsados del poder y con ello venía otro comienzo. A su vez, en los Balcanes, los "Ustachas" habían pasado a ser una organización tildada de terroristas, empezando por el hecho más trágico que golpeó, sobre todo a los Ivanisevic y fue el asesinato del Rey Alejandro I El Unificador de Yugoslavia junto al Ministro de Relaciones Exteriores, Louis Barthou de Francia, a manos de un joven partidario de los "Ustacha", llamado Vlado Chernozemski de Bulgaria, el cual fue linchado por la multitud de civiles y Gendarmes en Marsella, Francia.

Los Ivanisevic se habían hecho cargo de frustrar un intento de asesinato en 1933 pero, a pesar de que insistían en acompañarlo, Alejandro I les llevó la calma a los presentes de que no ocurriría nada malo. Sus palabras fueron erróneas cuando se produjo la tragedia y esto llevó a que hubieran represalias de dicha familia y los Ortodoxos contra los "Ustachas".

Por varios días se vivieron hechos de violencia en las calles de Sarajevo, en donde se emplearon armas de fuego, bombas caseras, emboscadas, tiroteos y ataques incendiarios entre ambos bandos. Entre los tantos muertos que hubo, se contó la de Miljenko, quien fue asesinado por el propio Dalibor, el ex-Jefe de la Policía y padre de Amel. Por su parte, Milan, el Jefe de la "Sección Ustacha de Bosnia-Herzegovina" fue apresado y considerado como el "autor intelectual" del crimen, por lo que recibió una larga sentencia en la cárcel.

Sin embargo, desde dicho lugar, aquel Jefe seguía mandando a las Fuerzas y con ello se desataron oleadas de venganza contra los Ivanisevic, empezando por un intento de asesinato contra Fiodor y su familia, los cuales ordenaron, un contra-ataque que llevó a que las tensiones se rebajaran pero siguieran latentes.

Permaneciendo en las sombras y debiendo ayudar al Príncipe Pedro de Yugoslavia para continuar con la regencia y posterior coronación, llegó un día en el que se reunieron, en 1934, para celebrar las Fiestas de Navidad y Año Nuevo en Berlín, en aquel restaurante que Baumer le había relatado a Fiodor y allí fue con los suyos, pasando todo el mes de Diciembre en la Capital de Alemania, en donde ya había llegado al poder Hitler y se podían ver el Águila junto a la Cruz Esvástica en los edificios, casas y negocios. Aquello le inquietaba y más al tener a las "SA" que rondaban por las calles, dando palizas a todo el que fuera Comunista, mientras que las "SS", organización recientemente creada, iban por otros "objetivos".

Reunidos en ese sitio junto a Detering, su esposa, lo mismo con el Cabo Himmelstoss y la suya, brindaron en homenaje por aquellos que ya no estaban y por un Futuro donde no habrían derramamientos de sangre injustos.

Era un deseo imposible de cumplir, ya que, pronto, desde el horizonte, sobre una mañana que estaba llegando, también se avecinaban nubarrones oscuros de lo que se presagiaba para más adelante.

Una nueva página, una teñida de sangre, destrucción y muerte que asolaría, no solo a Europa, sino a todo el Mundo en una nueva y cruenta guerra.

[Capítulo un tanto "oscuro" pero reflejando cómo fueron los hechos desde 1918 hasta 1934. En el que viene iremos a la Segunda Guerra Mundial y conocerán a otro Ivanisevic de gran importancia, además de que será un "Capítulo-Crossover", bueno, varios de ese tipo. 

Espero que les guste, amigos. Nos estamos viendo. Cuídense, mando saludos y agradecimientos para MrR199shadowbellatrixEltioRobLucasAbad0 y 55margarita.

Les deseo un excelente inicio de semana para todos ustedes, Camaradas.]. 


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