Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

S I E T E

— Quiero que vayas conmigo a una fiesta.— hablo Jaebum al otro lado de la línea.

— ¿A qué fiesta?— preguntó curiosa.

— Jackson organizó una fiesta hoy para celebrar que le está yendo bien en su nueva empresa. Ha invitado a varios ejecutivos y empresarios e incluso irá tu jefe.— rió un poco.— Tu vestido esta en tu cuarto pasaré por ti a las 08:00 pm.

— Que considerado.— susurro.— Estaré lista.— dicho eso colgó y siguió escribiendo una reseña y enviando unos correos que le había pedido Mark. Después de la cena que tuvieron aquel día él se mostró ante ella más amigable y sociable. Algunas secretarias al ver ese repentino cambio de actitud del jefe con ella empezaron a correr un rumor en toda la empresa que ambos dormían juntos.

Ya quisiera él tenerme en su cama. Bufó

— ¿Quién quisiera tenerla en su cama señorita Kang?— dijo entrando a su oficina.

— Nadie.— lo miro.— Ya terminé la reseña y de enviar los correos.

— Bien, gracias, Annie.— reverencio ante ella.— Hoy puedes irte temprano.— cerca de la oficina pasaron dos chicas mirando hacia donde estaban ellos y una de ella susurro "te lo dije", Mark pudo escuchar y salió detrás de ellas seguido de Annie.

— "Entonces si se están acostando"— dijo la castaña con rasgos muy marcados.

Mark tosió un poco llamando su atención. Cuándo giraron a vernos sus rostros cambiaron.

— ¿Quienes se están acostando?— preguntó él con una voz firme. La castaña retrocedió un poco mientras que su compañera quedó en una posición recta.

— Ustedes, ¿no es obvio?— respondió con voz un tanto aburrido la pelinegra.

— Yo no me estoy acostando con mi jefe.— respondió Annie pasando al frente mientras las miraba.

— Es lo que se rumorea en toda la empresa.— dijo la castaña en voz baja.

— Dejen de creer en rumores.— las miro serio.— Si vuelvo a escuchar nuevamente algo de este tema todos estarán despedidos.— sus últimas palabras las gritó haciendo temblar a las dos chicas.— Kang, tu labor ya terminó vete a casa.— giró a verla.— Y ustedes dos vuelvan a trabajar.— las dos chicas se marcharon y Mark entró a su oficina dando un portazo.




Annie regresó a su oficina y recogió sus cosas para irse a casa. Cerró la puerta y entro al elevador. Su celular empezó a sonar y atendió sin ver quién era.

— Hola, ¿sí?.— salió de la empresa y empezó a caminar rumbo a casa.

— Annie, salgamos hoy.— propuso el chico entusiasmado.

— No podré Jinyoung. Saldré hoy con alguien.— respondió con voz seria.

— Bien, te veré mañana y no acepto un no por respuesta.— colgó dejándola con la palabra en la boca.

Jaebum, no será competencia para mí. Las palabras de él vinieron a su cabeza.

Annie llegó a su hogar y se dirigió a su cuarto encontrándose con un lindo vestido corto negro con encaje y al lado de este unos zapatos negros de tacones con brillos del mismo color. Sonrió al ver el lindo detalle de Jaebum y giró su cuerpo para ver la hora 6:00pm. Ella se dirigió al baño para preparar la tina se deshizo de su ropa y entro a darse una ducha rápida. Una hora después ya se encontraba lista segundos después llegó Jaebum por ella.

— Te ves sexy.— dijo besando sus labios.

— Tú igual Jae. Te queda muy bien el negro.— respondió ella sonriente.

El camino hacia la fiesta fue algo silencioso. La música en la radio sonaba muy bajo dándole un toque relajante al llegar a casa de Jackson había muchos autos estacionados y personas vestidas muy elegantes por todos lados. Jaebum sujeto la mano de Annie y entraron a la gran casa. Mientras íbamos caminando él iba saludando con una reverencia. La casa se encontraba sumamente decorada con mesas y sobre ella un mantel de color melocotón, al igual que las sillas tenían lazos blancos, las luces de las lámparas y otras pequeñas luces iluminaban un poco el lugar. Habían pequeños grupos de chicas, chicos en grupo riendo y hablando mientras los meseros llevaban sus respectivas bandejas. A lo lejos Jaebum pudo reconocer a Jackson que se encontraba con Mark, Jisoo, otras personas que no pudo reconocer y Jinyoung.

Los ojos de Annie se abrieron como plato al verlo ahí muy sonriente. Cuando se acercaron todos se saludaron amablemente, Jinyoung también parecía sorprendido de verla.

— Por fin llegaste. Estaba hablando de ti.— dijo Jackson con voz ronca.— Hola, Annie...— hizo una reverencia y Annie imitó su acción.

— Espero que sea bueno lo que hayas hablado de mí.— respondió Jaebum riendo.

— Claro que sí hermano.— lo miro.— Les decía que gracias a ti me ha ido bien en mi nueva empresa. Me recomendó a las mejores personas para trabajar conmigo.— estrechó sus manos con cierto orgullo.

— No es nada hermano.— mientras hablaban Jinyoung no quitaba su mirada de Annie, ella decidió alejarse del grupo donde se encontraba y fue hacia la barra para pedir un trago de vodka.




La música sonaba fuerte, algunas personas se encontraban bailando, otras fumaban, otras más se besaban. En una de las mesas pudo ver a Jisoo con un chico riéndose. Una rubia pasó por su lado caminando como si fuera una súper modelo y llegó al grupo donde se encontraba su novio y posó una de sus manos en su hombro y empezó hablar con ellos mientras reía. Annie puso sus ojos en blanco y pidió otro trago cuando sintió una respiración en su cuello que erizó su piel.

— Ya veo porque te negaste a salir conmigo.— le dijo susurrando en su oído.

— Jinyoung, para.— lo alejo un poco.— Mi novio está ahí y puede vernos.— lo miro.

— Ya te dije que él no era competencia.— alzó sus brazos.— Aparte él es tu novio pero dejas que otra chica coquetee con él.— miró hacia ellos haciendo que ella los mirara igual. La rubia se encontraba aferrada a su hombro muy sonriente.

— Da igual. Es mi novio no mi propiedad.— dijo con fastidio.

— La chica es sexy y tiene un lindo cuerpo.— miro a la chica que estaba riendo.— Pero tú eres mucho más sexy y tu cuerpo...— volvió a posar sus ojos en Annie acercándose un poco.— Tu cuerpo es de infarto. Lo que daría por tenerlo sobre el mío.— relamió sus labios mientras posaba sus ojos en los labios de ella.

— No juegues...— Annie sonrió un poco y bebió el trago que tenía en su mano.

— No estoy jugando.— dijo serio.— Lo que daría por follarte ahora.— su voz se volvió ronca y tomó una de las manos de ella y la llevó a su entrepierna e hizo que apretara un poco. Annie pudo sentir lo duro que estaba su miembro e inconscientemente mordió su labio. Jinyoung era realmente caliente y eso le gustaba un poco.— Quiero estar dentro de ti...— movió un poco la mano de ella rozando su miembro.

— Alguien puede vernos.— quito la mano y lo alejo mirándolo.

— Las luces están apagadas, el lugar es iluminado por esas luces de colores. Tu novio no nos vio si es lo que te preocupa.— suspiro profundo, la miró unos segundos y la jalo del brazo llevándola a la parte trasera de la casa mientras ella pedía que la soltara. Cuando estaban fuera de la casa abrió una pequeña puerta y la empujó adentro mientras cerraba la puerta con seguro. Fue deshaciéndose de su ropa mientras la besaba con desespero. Mordió de forma instintiva su labio y la subió en una mesa.— Te follare como mereces.— sonrió.

Él quitó las pantis de ella mientras que al mismo tiempo, deslizaba su lengua por encima de su labio inferior, para luego morder y jalar de él. Annie sintió como Jinyoung deslizaba la palma de su mano sobre su estómago, con la punta de su nariz hizo una punzada contra su ombligo, ladeo su cabeza hacía atrás y le dio una sonrisa. Luego miró hacía abajo y abrió sus piernas, dándole paso a su lengua hacer lo él quería hacer ella, recorriendo suavemente con sus labios, Jinyoung empezó a dar besos húmedos alrededor de su vientre llegando a su intimidad.

— Maldita sea, Jinyoung.— Annie jadeo en voz alta y él levantó la cabeza dirigiéndole una mirada, noto el tono de su voz que marcaba un paso de lujuria y ternura al mismo tiempo. Paso unos minutos haciendo lo mismo, retorciéndola de excitación y viéndola como arqueaba su cadera, cuando Annie sintió que la nariz de él rozó ligeramente la punta de su clítoris. Abrió a penas su boca para gemir entre cortado, y llevó una de sus manos hasta encima de la cabeza de él jalando de su cabello.

Él la miro y al notar lo que hacía, sonrió satisfecho. Posó la palma de su mano encima de su clítoris al notar el efecto que producía su rose por ahí, Annie impulsó su cadera hacía arriba jadeando.

— Jinyoung, Jinyoung...— repetía constantemente cuando él movía su mano con extrema lentitud contra esta.— Por favor...— suplicó con un hilo de voz y él sonreía con eterna lujuria continuando los movimientos lentos con su mano encima. Jinyoung metió dos de sus dedos en ella y empezó a moverlos mientras pasaba su lengua por su clítoris repetidamente. Cuando Annie llego al clímax sus piernas temblaban, Jinyoung se levantó mientras la miraba y le sonrió.

— Eres tan deliciosa...— beso sus labios se alejo un poco mientras se sentaba en un sillón y le hizo señas para que se sentara sobre él. Ella llegó a él y sujetó su miembro colocándolo en su entraba y se sentó metiéndolo por completo.— Eres tan estrecha.— jadeo un poco mientras besaba su cuello.— Muévete, cariño.— Annie empezó a moverse lento mientras las manos de Jinyoung sujetaban su cadera con firmeza, cuando ella comenzó a moverse rápido una de las manos de él sujetó su trasero haciéndola subir y bajar. Annie se sujetaba de sillón para no perder el ritmo de sus movimientos mezclados con los de Jinyoung en algunas ocasiones su miembro salía de ella cosa que lo hacía maldecir. Cuando ella empezó a disminuir la velocidad, él la levantó apegándola a la mesa dejándola de espaldas y empezó a embestirla fuerte mientras gemía en su oído.

— Jinyoung...— Annie sujeto con fuerza la mesa cuando llego al orgasmo seguido de eso Jinyoung dio tres embestidas más y finalmente se corrió en su trasero llenando su espalda de semen.

— Debemos volver a la fiesta.— empezó a vestirse rápido. Annie empezó arreglarse el vestido y se colocó su panti.

— Eres un bruto.— lo miro. Jinyoung se rió y beso sus labios.

— Apuesto un millón de won que Jaebum nunca te dejo en este estado.— comentó riendo viendo como Annie temblaba un poco. Ella puso sus ojos en blanco y se termino de arreglar.

— Eres imposible, Park Jinyoung.— pasó por su lado mirándolo.

— Mía, mía y mía.— besó sus labios e hizo un puchero leve mirándola con ternura. Ella bufó con fastidio, no podía creer como Jinyoung de un momento a otro cambiaba su actitud de ser un follador veterano a un chico tierno e inocente.

— Eres imposible, Park Jinyoung.— volvió a repetir y salió de la habitación donde se encontraban. Él la siguió y volvieron a entrar a la fiesta, la música estaba más fuerte que antes y el lugar mucho más lleno. Busco con la mirada a su novio y lo visualizo con la misma rubia que ya hacía sentada en sus piernas a su lado se encontraba Jisoo tomada de la mano con Jackson. Maldijo en su mente al ver a su novio muy feliz y se acercó a ellos mirándolos fijo. La chica se le quedó viendo de pies a cabeza y se levantó de sus piernas.

— ¿Y esta quién es?— preguntó con cierto asco.

— Tu madre que regresó del infierno decepcionada sabiendo que tiene una hija tan puta.— respondió con el mismo tono que ella uso. Jisoo, Jackson, Mark y Jinyoung rieron al escuchar su respuesta. La chica al escuchar lo que dijo Annie se fue. Jaebum se le acercó a ella pero se alejó tomando su cartera que estaba en la mesa.

— Annie, muy buena respuesta.— dijo riendo Jackson. Ella solo sonrió.

— ¿Ya te vas? — preguntó Mark viéndola.

— Sí, mañana hay trabajo.— respondió sería.

— Mañana es feriado.— comentó riendo Jisoo.

— El alcohol ya te hizo efecto Annie-ssi.— añadió Jinyoung sentándose al lado de ella.

— ¿Annie-ssi?— preguntó Jaebum mirándola.

— Sí, Jaebum, ellos son amigos desde la infancia solía llamarla así.— dijo Jisoo riendo.

— Igual me tengo que ir. Es tarde y estoy cansada.— respondió Annie despidiéndose de ellos.— Muy buena fiesta Jackson.— sonrió estrechando su mano.

— Eres bienvenida cuando quieras.— le dio un pequeño abrazo a lo que ella lo respondió con amabilidad.

— Gracias.— alejándose.— Adiós Mark.— le sonrió y él hizo lo mismo.— Adiós Jisoo.— la miro.

— Me alegro que hayas arreglado las cosas con Jinyoung. — ella los miró a los dos.— Annie perdón por estar tan distante. Ya sabes como me pongo con tanto trabajo.— dijo con tono arrepentido.

— Descuida.— le sonrió.— Adiós, idiota.— Annie miró a Jinyoung sonriendo.

— Te llevaré a casa, enana.— respondió divertido levantándose de la silla.

— Mi novia vino conmigo. Yo la llevaré.— intervino Jaebum haciendo énfasis en las dos primeras palabras. Sujetó la mano de Annie y la sacó de ahí casi arrastras. — Annie, cariño.— sujetó su rostro.— Lo que viste con esa chica no es nada.— la miro con tristeza.

— No importa Jaebum.— respondió seca.

— Te amo, Annie. Jamás te engañaría con nadie.— Él la sujetó de la cintura mientras sonreía un poco. Se acercó a ella y rozó sus labios cuando fue a besarla escucho que alguien tosió falsamente y giraron a ver de quién se trataba.

— Jinyoung...— Annie lo miró y él posaba sus ojos en Jaebum. Lo miraba con cierto odio.

— ¿Se te perdió algo Park?— le preguntó Jaebum mirándolo.

— Annie-ssi, olvidaste esto.— hablo Jinyoung ignorándolo por completo y de su chaqueta negra sacó un pequeño arete brillante.

— ¿Podrías dejar de llamar a mi novia de esa manera?— habló enojado Jaebum acercándose a él.

— Jae, por favor.— lo llamó tomándolo del brazo.

— No sabía que aún conservabas el último regalo que te día.— siguió hablando Jinyoung sorprendido provocando a Jaebum. Annie puso sus ojos en blanco y tomó el arete.

— Jinyoung, para.— dijo entre dientes algo enojada.

— Aléjate de mi novia.— se acercó por completo a él soltándose del agarre de Annie.

— ¿Y si no lo hago que?— hablo retador Jinyoung.

— Basta, ya.— intentó ponerse en medio.— Jinyoung vuelve adentro ahora mismo.— hablo realmente enojada.— Jaebum vamos al carro.— pidió mirándolo.

— Que sexy te ves enojada.— dijo sonriendo Jinyoung acercándose un poco a Annie que trataba de alejar a Jaebum de él.

— Voy a romperte la cara.— gritó enojado tratando de soltarse nuevamente.

— Te diré lo mismo que le dije a ella.— se acercó quedando muy cerca de Jaebum.— Tú no eres competencia para mí.— lo señaló mirándolo con una sonrisa burlona.— No bajes la guardia, Im, puedo robarte a tu chica cuando quiera.— al decir eso se alejó de ellos y caminó hacia la entrada de la fiesta perdiéndose entre todos los invitados.

— Hijo de puta.— Jaebum se soltó de ella y golpeó con su propio carro activando así la alarma mientras maldecía repetidas veces.





Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro