Después de tener su tercer orgasmo en esa tarde, lo último que Minho esperó era ser aprisionado contra la cama.

Quien fuera el que lo estuviera haciendo estaba respirando contra su cuello, aspirando el natural y atrayente aroma que desprendía el Omega por su celo.

Normalmente, en una situación como esta, Minho estaría tratando de zafarse, ya que estaba siendo inmovilizado y al estar en celo, era seguro que terminaría en un indeseado desenlace, pero, por alguna razón se sintió relajado.

Los cálidos labios de esa persona besaban y mordían su hombro en un camino hasta llegar a su oreja, robándole suaves gemidos al Omega, quien reforzó su agarre en las sabanas, mientras que un par de manos tiraba de su cintura hacia atrás, presionando su hombría contra sus glúteos.

— Ahh...hm~ — gimió Lee mientras se mordía el labio.

Los jeans del otro chico se sentían ásperos contra el desnudo trasero de Minho al presionar dolorosamente contra él.

El Omega quería más.

La persona sobre él trazó su caliente lengua por el contorno de la oreja del mayor, mordiendo y chupando su lóbulo, mientras que su aliento le enviaba escalofríos por todo su cuerpo.

— Hey, amor. — susurró Felix, pasando sus dedos por el semen del mayor que estaba en su estómago, haciendo que este no se atreviera a devolver la mirada, estaba demasiado avergonzado para hacerlo, bueno, eso hasta que escuchó el sonido de algo ser chupado.

— ¡Lixie, eso es asqueroso! — le regaño tomándole de la muñeca, el nombrado solo rió burlón y bajó la vista a los muslos del Omega, de entre ellos se deslizaba el líquido transparente. El mayor se sonrojó y desvió la mirada.

— Se ve que te has divertido, Honey. — normalmente el sobrenombre calmaba a Minho si venía de Bang Chan, pero viniendo de él, era absolutamente diferente. El Omega lloriqueo cerrando los ojitos y mordiendo su labio.

De repente, en un rápido movimiento, el menor le puso boca arriba separando le las piernas para colocarse entre ellas. Minho, sintiéndose expuesto trató de cerrarlas pero las manos del Alfa se lo evitaron.

— Ya hemos llegado hasta aquí. — dijo mientras bajaba a los muslos del mayor para así clavar sus dientes , dejando rojizas marcas. — No te avergüences frente a mi ahora, mi amor.

Minho, a esa altura de la situación, no podía comprender ninguna palabra que el menor le decía, no teniendo la boca de este tan cerca de su miembro.

Movió su pelvis tratando de que los labios del Alfa se acercaran más, pero para su suerte, el se alejo sentándose en sus talones.

— Lixie.~ — gimió el mayor moviendo sus caderas.

A ese punto, Lee había arrojado a la basura su imagen de paciente y responsable hyung, estaba desesperado por sentir placer, estaba desesperado por Felix.

El menor admiraba el cuerpo del Omega, lo sudoroso y desesperado que se encontraba, retorciéndose frente a él, estaba tan sonrojado, sus mejillas, sus orejas y hombros, su hombría también lo estaba, el líquido preseminal goteaba por toda la extensión. Se veía doloroso.

Lix no pudo controlarse y lamió toda la longitud de la base hasta la cabeza del miembro del Omega, quien reaccionó de forma inmediata, retorciéndose entre las sábanas, quejándose por lo bajo.

El Alfa se sentó nuevamente, haciendo lloriquear mas fuerte a Minho, estaba tan cerca.

— Sé que me necesitas, amor, pero quiero hacer unas cuantas cosas antes de que comencemos con el plato principal. — dijo sonrojando fuertemente al mayor.

— Eres un bebé — murmuró Lee entrecerrando los ojos. - no deberías andar diciendo esas cosas. — Felix rió divertido.

— Quizas deberia irme entonces. — expresó el menor con un puchero y se alejó.

— ¡No! — gritó Minho encontrando energías para levantarse y tomarle del brazo para atraerlo nuevamente a él y subirse en su regazo, el Alfa sonrió al verle en esa posición.

— Esa es la energía que estaba buscando. — informó tomando de las caderas del mayor. — Así que lo quieres hacer de esta manera, ¿Hm, dulzura? — los ojos de Minho se agrandaron, dándose cuenta de que el mismo se había puesto en esa posición.

Antes de que pudiera siquiera moverse, Felix levantó su cadera hacia arriba, provocando que su pelvis chocarán contra los glúteos del Omega.

— Hm..~ — jaddeo Lee acercándose para sostenerse de los hombros del Alfa.

El mayor no tenía ningún control sobre cómo respondía su cuerpo ante las embestidas, Lee se movía rápido, con un ritmo salvaje.

No pasó mucho para que el Omega volviera a tener un orgasmo, el menor continuó con un ritmo suave, mientras que MInho se recuperaba.

— A pesar de gustarme mucho esta posición. — habló de pronto reforzando el agarre en el Omega. — No puedo comerte. — lo dio la vuelta haciendo que le diera la espalda y levantará el trasero, dejándolo en cuatro. — Ahora, sí. — el mayor se quejó por lo bajo ante el comentario, volteo a mirar al Alfa.

— Felix, eso está-ahh~ — se vio interrumpido al sentir la lengua del australiano en su entrada. — So-Solo espera, Ngh~ U-Un minuto~

La lengua del Alfa con facilidad entró en el Omega, tomando sus glúteos de forma brusca, follandolo con ese pedazo de carne a un ritmo salvaje, lamiendo y chupando, volviendo un lio de gemidos a Minho.

El cabello de su nuca se erizaban y sus piernas temblaban con necesidad, el lubricante natural se vertía a cantidades y Felix estaba mas que feliz recogiendo de a poco con su legua, gruñendo ante el delicioso saber.

Sentándose nuevamente, el Alfa llevó su dedo anular hasta el tembloroso músculo, tomando algo de la sustancia para llevarla a sus labios.

— Minho. — el nombrado se estremeció ante el tono imperativo y dudoso, miró hacia atrás, en ese momento, Felix metió el dedo en su boca lamiendo el líquido, El Omega gimió y rápidamente desvió la mirada. — ¿Necesitas ser preparado? — pregunto trazando con su dedo la entrada en un circulo.

Lee negó aferrándose a las sábanas, de un momento a otro fue girado quedando boca arriba y Felix entre sus piernas.

— Usa palabras, amor. — susurró el menor, levantando las piernas del Omega hasta dejarlas en sus hombros, mordiendo y dejando chupones sobre las anteriores marcas.

Minho, quien se había cubierto los ojos, se destapó para verle, encontrando a Lee mirándole fijamente con sus ojos totalmente rojos y negros.

— Dije que hablaras, dime qué quieres y continuaré. — repitió mientras acariciaba el muslo del mayor, tranquilizándole.

El Omega respondió avergonzado.

— N-No, necesito pre-preparación. — Lix sonrió, saboreando la piel del mayor una vez más

— Buen, chico. — ronroneó el Alfa. — Ahora, ¿Que es lo que quiere el gatito? — Minho lloriqueo ante el apodo.

— Có-Cógeme, ¿por favor? — pidió en un gemido, sintiendo más lubricante salir.

Felix soltó una risa misteriosa, dejando la cama para así quitarse la ropa.

— Claro, cariño. Si lo pides tan amablemente.

Tan pronto como Felix se quito el boxer, Minho vio la erección curvandose sobre su estómago, la cabeza de un rojo vivo y las venas marcándose.

Al Omega se le hizo agua la boza y sintió como su estrada goteaba aún más.

Bokie se arrodillo en la cama, colándose entre las piernas del mayor.

— ¿Estás listo? — preguntó, Lee asintió en respuesta.

Y no necesito ninguna instrucción más que esa.

Tomo las piernas de Minho para colgarlas en sus hombros para alinear su hombría y comenzar a entrar en él, gimiendo ante lo estrecho que era, succionaba su miembro evitandolo sacarlo.

El Omega se contrajo ante la intrusión y Félix acariciaba sus muslos en un intento por calmarlo.

Una vez estuvo completamente dentro, ambos jadeaba ante la sensación. El alfa decidió quedarse quieto para no lástimar al mayor y que este le dijera cuando pudiera moverse.

Felix subió la mirada para ver al Omega a los ojos, estos estaban violetas y sus labios estaban sangrando al haber sido mordidos.

— Li-Lix, ¿Podrías moverte?

Y eso fue lo que el Alfa necesito antes de salir y volver a entrar con un ritmo bestial.

Minho arqueo su espalda con cada estocada y tiro su cabeza hacia atrás, Felix se inclinó hacia abajo, acercándose al cuello del mayor para chuparlo y morderlo entre embestidas.

— ¡Ahh¡ ¡Hm~! — gimió ruidosamente cuando su próstata fue golpeada. — ¡Li-Lix! ¡A-Ahí! Ngh~ — el nombrado dio estocadas en el mismo lugar, dando de nuevo en su punto, haciendo tener otro orgasmo al mayor.

El Alfa no detuvo sus veloces movimientos, podía sentir el nudo crecer con cada embestida, cada vez era más difícil el intentar salir de él.

Minho sollozaba ante la sobre estimulación que estaba teniendo.

— Li-Lixie — le llamo el mayor, consiguiendo que el nombrado le mirara y grupera en respuesta sin detenerse, Minho extendió sus bracitos. — Be-Besame-ahh~ — Felix sonrió.

¿Cómo podía verse tan adorable mientras lo estaba cogiendo?

Se inclinó y atrapó los labios del Omega en un apasionado beso, ahogando los quejidos y gemidos de este.

Las embestidas de Lee disminuyeron cuando su nido había crecido aún más, dando estocadas profundas pero lentas.

Podía sentir el cosquilleo en la parte baja de su estómago, estaba cerca.

Minho rompió el beso para respirar a la par que tiraba su cabeza hacia atrás y gemía el nombre del Alfa.

— Por, favor ~ — suplico en un gemido ante las leves embestidas del menor sintiendo sus piernas entumecerse.

— ¿Por favor, qué? — preguntó Félix algo burlón.

— ¡Reclameme, Alfa! ¡Ngh~!

Eso había bastado completamente para que el menor llegará al límite.

Minho dejo a la vista su cuello y Félix gruñó, era una señal de sumisión.

Sin dudarlo, clavo sus colmillos en la carne que le era ofrecida, sacándole un desgarrador gemido al Omega, a la par que volvía a correrse. Felix tuvo su orgasmo y su nudo finalmente los unió.

Bajo la mirada al cuello de Minho, apreciando la marca que adornaba ahora en el.

Lee le miró una vez recupero el aire.

— Bien, echo. — susurro, haciendo a Felix desviar la mirada tímido.

— Si. — el Omega sonrió, atrayéndolo hacia él para besarlo.

— Eso fue maravilloso. — dijo riendo y abrazando al menor por el cuello.

— ¿Estas bien? No lo lastime, ¿Verdad? — pregunto preocupado viendo las innumerables marcas en los muslos del otro.

— Estoy perfectamente bien, solo algo cansado. — Felix asintió aliviado.

— ¿Y si dormimos? De igual modo estaremos así por un buen tiempo. — dijo refiriéndose al nudo que los mantenía un unidos.

Ningo bostezo en respuesta a la par que se acercaba más al Alfa, resguardando se en él.

Pronto, el par ya se encontraba sumergido en un profundo sueño.

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— Felix, eso está ¡Ahh~! — Jisung se estremeció ante el gemido, mientras que el resto de los miembros trataba de distraerse de los obscenos sonido que venían desde la habitación.

ChangBin palideció, incluso con la música al máximo en sus auriculares podían oír los crujidos de la cama y los gemidos que se asemejaban más a gritos.

— Espero que nosotros no hayamos sido así de ruidosos cuando nos emparejamos. — comento Seungmin con una sonrisa tímida.

— Oh, no, para nada, ustedes fueron peores.

— Su habitación estaba más cerca. — dijo Hyunjin.

— ¡Y ni siquiera tuvimos un aviso de que sucedería! — grito Jisung.

— Hay una razón por la cual puedes alzar tanto la voz, Seungmin. — comento burlón Jeongin.

— Fue una experiencia para todos. — dijo bajo Chris.

ChangBin y Seungmin se miraron avergonzados.

— Como sea. — dijeron al unísono.

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• Si ven un error, agradecería que me lo digan para arreglar lo.•

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See you in the next chapter, precious.♡

Lamento la demora.🙏