Al principio el ardor lo hizo sentir incomodo a Minho.

La ola de calor que se expandía por sus venas le era en realidad bastante placentera, se sentía como miel tibia.

Su vista recorrió la sal de practicas, observando a los diferente miembros, su lobo interior respondía a todos pero cuando posó su mirada en Felix, gimió encantado.

Emparéjate, déjalo que te consuma.

Esas palabras lo quemaron, lastimando lo con necesidad y placer. La sensación entre sus piernas se estaba volviendo molesta y el calor era cada vez peor.

- ¿Nadie huele eso? - pregunto Hyunjin mientras olfateaba el aire, su sonrisa fue remplazada por un celo fruncido.

- ¿Oler qué? - pregunto Felix olisqueando alrededor, tratando de encontrar lo que sea que el Alfa estuviera sintiendo.

De repente, otra oleada de calor le golpeó haciendo le sentir algo líquido derramarse por entre sus piernas. Su cabello que estaba pegado a su frente con su sudor desde la práctica ahora estaba goteando.

Lee mordió su labio inferior intentando retener los pequeños gemidos, sus manos estaban en el suelo, hachas puños hasta el punto de que sus nudillos se volviera blancos.

- ¿Realmente no huelen eso? - volvió a preguntar el alto, sus ojos se encontraban ligeramente rojos.

Minho observó a su alrededor para comprobar que nadie le estuviera mirando y sorpresivamente ninguno lo hacía. Toda la atención estaba puesta en Hwang.

- Bueno, ¿Y que es ese olor? - pregunto Jisung riendo, restándole importancia al asunto. - ¿Cuántas palabras? - pregunto sonriente, lo que hizo que I.N riera como idiota a su lado.

- ¡Lo digo en serio! - se quejó Hyunjin. - ¿Ninguno lo siente? - sus oscuros ojos buscaron por la sala hasta caer en el segundo mayor del grupo. - Minho-hyung, ¿usted de verdad no lo huele? - pregunto, ignorando por completo el como se encontraba este.

- ¿De verdad hay algo que ole-a-ah~ - se vio interrumpido cuando una nueva oleada lo golpeó dejándolo jadeante.

Los ojos de Felix se abrieron en demasía cuando escuchó el gemido, pudo sentir como sus ojos se volvían rojos de deseo.

Claramente los Alfas siempre tenían necesidades pero nunca tan fuertes.

El primer error de Felix fue; mirar a Minho.

De pronto, todos sus instintos de Alfa comenzaron a decirle diferentes cosas pero todas dirigidas hacia el Omega.

Muerdelo

Lamelo

Chupalo

Saboréalo

Follalo.

RECLÁMALO.

YongBok no era posesivo en lo más mínimo pero el pensamiento de que cualquier otro Alfa pudiera llegar a tocar a su Omega, lo hacía enfurecer.

La tentación de reclamar el mayor en ese preciso momento y lugar era casi incontrolables, lo estaban enloqueciendo completamente.

- ¿Hyung, estas bien? - pregunto Han cuando llegó al mayor, Minho trató de responder pero lo único que lograba salir de su boca eran jadeos y gemidos bajos, asintió dejando caer sus parpados.

Entonces, un aroma familiar lo golpeó, Lee mantuvo sus ojos cerrados pero sabía perfectamente quien lo estaba aprisionando.

Recordó el aroma, tan potente y penetrante.

Sus sentidos se habían agudizado, sentía todo con detalle, como si anhelara cualquier toque.

- Mio. - Gruño el Alfa sobre el cuello del mayor, provocando que el calor en él aumentara y esa humedad se filtrara fuera de él.

Su mente estaba nublada con la necesidad de ser reclamado, de ser llenado.

- Felix. - Los ojos de Minho se abrieron sorprendidos al escuchar el gruñido del líder de la manada.

Todos los Alfas, a excepción de Hyunjin, tenían los ojos de un rojo profundo y sangriento rojo.

ChangBin se dirigía hacia el acalorado Omega con cautela, mientras que Seungmin tenía su nariz en la unión del cuello y hombro Jisung, tratando de usar el leve aroma de su compañero para calmarse.

En lugar de dejarlo en el suelo, Felix solo atrajo al jadeante Omega mas cerca de su cuerpo.

El líder debió haber tenido la paciencia del mundo para ser capaz de resistir el impulso de comenzar una pelea con el otro Alfa, ya que Felix estaba desafiando su dominación y normalmente así era como formaban las peleas para solucionar lo que sucedía.

- Déjalo ir. - Dijo Chan, dando un paso más.

Con cada paso que daba el mayor, Lee apretaba con más fuerza a Minho.

El Omega no sabía que hacer, quería obedecer al líder, le debía tanto, pero también quería disfrutar el increíble aroma del menor, lo deseaba, el olor de su Alfa.

- Mío. - Volvió a gruñir el mas joven, Minho necesitó de toda su resistencia para no derretirse en sus brazos y gemir.

Las manos del estaban, de nuevo, sosteniéndole de la cintura fuertemente, hundiendo sus dedos en su cadera, de esa forma, Felix sabía que se dejaría marcas.

- Lixie. - Le llamó con tranquilidad el líder. - Entiendo que pienses que te pertenece ¡ Pero no puedes hacer nada para ayudarlo aquí!

La sala quedo en silencio por un par de segundos, YongBok se vio como si estuviera a punto de decir algo pero solo aflojó el agarre que tenía sobre Minho y se alejó.

- Hyunjin, quiero que vayas y le digaas a Park Jinyoung que debemos de terminar la práctica ahora mismo. - Le oredeno Bang Chan mientras ayudaba a Lee a levantarse del suelo, sus piernas temblaban como gelatina mientras intentaba ponerse de pie.

Bokie se tragó un gruñido cuando, su hyung, otro Alfa, tocó a su Omega, a su Minho.

Hyunjin ni siquiera preguntó la razón que salió corriendo fuera de ahí.

Seungmin, finalmente calmado gracias a Jisung, tomo el brazo del mayor ayudándole a sostenerse mientras dejaban el edificio.

El viaje de vuelta en el auto fue de los más raros, porque, Minho estaba en los asientos delantero, liberando feromonas que hacia que la mayoría de los alfas dentro se alteraran, pero también, todos estaban atentos a que Felix no atacara a nadie que estuviera cerca del Omega.

Lee fue enviado al cuarto de invitados tan pronto ingresaron a la casa. Jisung y SeungMin ayudaron en lo que pudieron para aliviarlo hasta que el Omega consiguiera algo que lo satisficiera.

Le dieron una ducha helada, para así poder sacarle el sudor y aclarar un poco su nublada mente.

El celo no era como se veía en los videos pornos, Minho se sentía quemar, su sensibilidad estaba extremadamente elevada, todo lo que sentía con demasiado detalle, de pies a cabeza, cualquier mínimo roce en su cuerpo le enloquecía y sus piernas estaban muy débiles por el constante placer que sentía entre ellas.

Minho estaba realmente jodido.

Seungmin le explico el por qué estaba así, por así decirlo, mojado y en caso de que lo necesitara, Jisung le dejó una botella de lubricante de vainilla, el Omega prefirió no preguntar el por qué la ardilla llevaba eso en su bolsillo.

✨🐺✨

Lee estaba caliente y molesto, había estado en la misma posición, boca abajo y con su rostro pegado a la almohada por lo menos diez minutos. Todo esto lo estaba abrumando, el cuarto olía a tantas cosas y tanta gente diferente pero aun así el aroma de Felix era el que mas destacaba.

Mierda, Minho quería coger, rogaba por el menor, su aroma, sus labios y sobre todo su.

- ¡N-Ngh~! - Gimió alto hundiéndose en la cama, sintiendo como mas lubricante natural -como Seungmin le llamaba- salía de él.

Lee estaba seguro de que sus bóxers ya estaban completamente empapados.

Cuando se frotó contra la cama, se dio cuenta de que el movimiento se había llevado un poco el calor.

Y de un momento a otro, de la habitación se comenzó a escuchar los crujidos de la cama y los gemidos del Omega.

- ¡A-Ahh, mi-mierda!

Las uñas de Lix arañaban los costados del sofá.

No podía solo sentarse y escuchar a Minho complaciéndose a si mismo, era una tortura.

- ¿Puedo ir ya? - Pregunto con desesperación, listo para saltar de su asiento.

Pero antes de que pudiera hacerlo, Bang Chan lo empujo haciéndole sentarse nuevamente con sus ojos rojos prendidos fuego.

- ¿Cómo sabes que te quiere a ti? - Gruñó molesto.

Y antes de que el Lee menor pudiera siquiera responder, Minho ya lo había hecho por él.

- ¡Hm-m, Fe-Felix, Ahh~ - El nombrado sonrió hacía el líder victorioso.

No quería herir al mayor, lo adoraba demasiado al igual que a los demás hyungs pero en este momento, era un obstáculo.

El Alfa más joven se preparó para lo que estaba por venir pero una mano en su hombro le detuvo.

- Trátalo bien. - Dijo Bang con una leve sonrisa. - Solo eso te pido. - El menor le devolvió la sonrisa.

- De acuerdo. - Respiró hondo y continuó con su camino hacía Minho.

Su Minho.

Felix siempre pensó en que el mayor era hermoso pero la forma en la que estaba ese día, lo hizo parecer una verdadera obra de arte,

Lee se veía realmente lujurioso, pero al mismo tiempo, su piel estaba sonrojada desde sus orejas hasta sus hombros, esto se veía gracias a que llevaba puesto un Swearter Oversized gris que se resbalaba dejando ver su clavículas, estaba usando un bóxer violeta pastel, los cueles combinaban con sus ojos llenos de placer, mientras que su cabello era un desastre.

Minho tenía una mano dentro del bóxer, sin estar consciente de que el Alfa había entrado en aquel momento.

El menor supuso que ya tenía sus dedos dentro en ese instante gracias al gemido que había soltado.

- Oh, Lixie...~ - Gimió acabando sobre su propio abdomen el nombrado se le atoró el aire en la garganta.

Su hyung estaba gimiendo su nombre.

Su puto nombre.

En ese instante, Felix atacó.

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• Si ven un error, agradecería que me lo digan para arreglar lo.•

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See you in the next chapter, precious.♡