🍯 ꒱ única parte.
resubido por 2da vez: 16/O4/2O24
꒰ᐢ. .ᐢ꒱₊˚⊹
❝Donde JungKook ama con locura a TaeHyung y a su dulce aroma sabor a miel. O donde JungKook despierta a su dulce amado con besos húmedos y azucarados.❞
:¨·.·¨:
'·..·'
♡ ꒱ one shot con contenido fluff, soft & smut.
♡ ꒱ historia original. prohibido su copia o adaptación sin mi permiso previo.
♡ ꒱ publicado anteriormente: 1O♡12♡2O22
♡ ꒱ fanfic homosexual (kooktae).
:¨·.·¨:
'·..·'
Sus tibias manos se deslizan por la acanelada piel ajena, explorando más; desde la punta de la nariz hasta sus labios, sus esponjosos y rosados labios. Ama ver los diminutos detalles que tiene su amado, le deleita poder contar los innumerables lunares que tiene en su bonito rostro, sus delicadas pestañas rizadas, sus rulitos castaños que caen sobre su frente y sus ojos color avellana y miel que se mantienen cerrados por estar completamente dormido.
Siente que también podría estar dormido como lo está su TaeHyung, porque jura que, cada vez que lo ve, está levitando en una dulce ensoñación. Y siente como si estuviese en las nubes cada vez que ve la diminuta sonrisa de complacencia que tiene su amado al dormir.
Alberga una dulzura en su sistema, y por poco es abarrotado de los suspiros continuos que emana por su bello enamoramiento, a su único y dulce amor.
Como si de su canción favorita se tratara, como si de algún sueño poco común, como si un disparo hubiera dado en su corazón.
Su corazón es un estallido constante de fuegos artificiales.
Es la sensación de siempre, la sensación que lo estremece cada vez que toca su piel, cada vez que se deleita con sus suaves cabellos, cada vez que puede sentir al menos el fino tacto de sus dedos chocar con sus pomposos labios.
Un suave toque se desliza por el cuello acanelado del contrario, mientras sus dedos pasean despacio acariciando las hermosas clavículas que se vislumbran en su amado y que aquel sweater holgado, lo deja entrever.
Un estremecimiento es dado en el cuerpo de TaeHyung por aquellos toques, JungKook fija la mirada en su amado, y visualiza que sigue dormitando plácidamente. Continúa con los suaves toques por la abertura del cuello del menor, acariciando sutilmente la piel acanelada mientras sonríe tiernamente.
No podía creer que aquel bonito chico, TaeHyung, ahora fuese su novio. La vez que se le había declarado y que el castañito le correspondió, lo único que pudo hacer fue derretirse en sus brazos.
Lo amaba, demasiado. Absolutamente todo de él.
Sentía unas irremediables ganas de poder depositar sus labios con los de él, y fusionarlos en un cálido beso. En esos que ambos se daban y que carecían de tiempo, porque, con tan solo sentir el tacto del contrario, nada alrededor suyo importaba en lo absoluto.
Acostado a un lado de su amado, decidió acercarse más, por lo que quedó encima del castañito. Sus ojos amaron la vista que tenía, TaeHyung seguía durmiendo tranquilamente, mientras su respiración se escuchaba quedita, muy suavecita.
JungKook acercó su nariz hacia el cuello acanelado, e inhaló el dulce aroma de su amado. Era una sutil colonia con aroma a miel y manzanillas, y que lo volvía loco a él y a su débil corazón.
Suspiró rendido, su cuerpo quería desfallecer. Sentía que estaba levitando con tan solo la presencia de TaeHyung.
Era un verdadero enamorado.
Acercó nuevamente sus labios al cuello del castañito, y depositó un sutil beso, y después otro, y otro más.
El cuerpo de TaeHyung se removió complacido entre sueños, se sentía tan bien. Por lo que JungKook siguió con su labor, un beso en sus clavículas, otro en su manzana de adán, y otro en la mandíbula del castañito.
Sabía tan dulce, tan embriagador. Pero quería que TaeHyung se sumase a ello, por lo que, delicadamente, remojó sus labios y los depositó nuevamente en la abertura del cuello y el hombro del chico, sacándole un jadeo al castañito que aún seguía removiéndose por la exquisita sensación que tenía entre sueños.
JungKook viendo que su amado seguía sin despertar, empezó nuevamente con su camino de tiernos besos, los cuáles se tornaron húmedos y embriagantes. Una sensación húmeda pudo percibir TaeHyung aún con sus ojos cerrados, una deliciosa sensación que lo hacía levitar y soltar suaves jadeos.
Al pelinegro le gustó tanto escuchar aquel sonido de los labios de TaeHyung, por lo que prosiguió gentilmente.
Entre ello, JungKook mordió delicadamente el acanelado cuello, por lo que TaeHyung despertó de golpe. Sintiendo una increíble excitación en su entrepierna, y haciéndole jadear por la inesperada imagen que tenía ante él.
JungKook miró sus orbes color avellana, y suspiró tal cual enamorado. Y sonrió con sus dientecitos blanquecinos formando una sonrisa de conejito inocente. Como si lo anterior que hizo, no le hubiese generado nada.
—Hola, mi amor —susurró aún sobre él, mientras TaeHyung seguía suspirando entrecortadamente ante la cercanía del contrario.
—K-Kookie~ —el castaño habló y un tierno entrecejo se formó—. ¿Cuánto tiempo me quedé dormido?
—Por varios minutos, no los he contado —comentó JungKook dulcemente, mientras paseaba sus dedos por las mejillas del castaño.
—Y Kookie... Uhm... ¿P-por qué estás sobre mi? Digo, está bien pero, no... Uhm, es que... —sus labios murmuran incoherencias. JungKook eleva la comisura de sus labios. ¿Por qué rayos debe ser tan bonito?
Lentamente, comienza a cerrar el espacio que mantiene con el castañito. Siendo testigo el menor del cálido aliento del pelinegro que golpea contra sus labios, incitándolo a tomar más de aquel dulce, de degustar como si fuese un caramelo con sabor a miel.
Y le gusta, le encanta, le excita.
Solo que el castaño no quiere admitirlo en voz alta.
La cercanía del pelinegro, sus ojos llenos de un color brillante que no sabe explicar qué es, su boca entreabierta y sus cabellos rebeldes que caen por su frente; todo eso, generó una dulce y deliciosa corriente eléctrica que emanó desde su vientre bajo hasta su entrepierna, la cual ya estaba siendo estimulada por los besos húmedos que antes fueron depositados en su cuello.
TaeHyung sonríe alzando su comisura en una media sonrisa, aquella situación lo estaba excitando en demasía.
JungKook ve aquella oportunidad y deposita sus labios en los de él, creando un palpitar frenético en su corazón y un suspiro gustoso en el castañito. Se permite ladear su cabeza, mientras sus manos son depositadas a los costados de TaeHyung. Siente que sus labios están probando múltiples gotas de miel y almíbar. Se derrite cuando el castañito trata de corresponder a sus besos, delineando con la lengua sus labios en un tímido movimiento.
Siente que sus piernas están a punto de desmoronarse, su corazón está a punto de explotar ante los latidos que siguen palpitando con frenesí dentro de él. TaeHyung siente lo mismo. En aquel interminable beso, se describe lo mágico que es aquel momento. Siente que aquello es irreal, que no puede ser verdad. Pero, con tan solo sentir como su amado aferró ambas manos suyas en su cabellera azabache, le hizo saber que no estaba en ningún tipo de sueño ni en ningún pensamiento perdido.
Y hunde sus labios nuevamente en los de su amado, profundamente, haciéndole saber que lo ama con todo lo que el posee; con su corazón, con su ser, con su alma.
Y puede sentir como TaeHyung jadea ante lo bien que se sentía probar los dulces labios de su novio. Por lo que, el tímido castañito, suavemente fue girando el cuerpo de su precioso novio, quedando ahora él encima de JungKook, sin despegar sus labios con los de él por la inevitable y dulce adicción que poseía.
JungKook sonríe por la iniciativa de su novio, por lo que suavemente se reincorpora, teniendo a TaeHyung sobre su regazo y a horcajadas de él. Despega sus labios de los de su dulce amado, y deposita sus ojos con los del castañito. Son dos increíblemente preciosos orbes que admira extasiado, puede ver como están vidriosos por el placer de ser besado, mientras también podría jurar que ve mil estrellas y constelaciones.
Percibe nuevamente su aroma a miel y manzanillas, combinado con una sutil fragancia a lirios. La combinación es embriagante, y sabe que aquellos lirios desprenden su aroma en medio de ellos y del árbol en el que se encuentran.
JungKook suspira nuevamente sonriendo, a la vez que su espalda es depositada en el tronco de aquel árbol. Mientras TaeHyung lo ve, percibe que, en definitiva, está enamorado.
JungKook se deja embriagar de aquella preciosa sensación, por lo que sus labios se depositan en la frentecita de su amado, en un cálido y tierno beso. A TaeHyung se le hace dulce aquel gesto, y desprende una bonita sonrisa cuadrada. JungKook vuelve a derretirse.
—Eres tan dulce —menciona suavecito, generando un color carmín en las mejillas de TaeHyung por el cumplido—. Te amo tanto.
TaeHyung mira con devoción a su novio, y sonríe nuevamente. —Yo te amo más, Kookie.
Y sin dejar que el contrario responda, vuelve a unir sus belfos con los de él. Sus labios se vuelven a unir en un cálido y embriagante beso, que hace estallar sus corazones. El azabache desciende despacio, dejando todo un camino de besos húmedos; generando que TaeHyung suelte suspiros y jadeos hacia el cielo. Puede jurar que es la misma sensación que lo estremece y que le hace ver estrellas en sus párpados.
JungKook ama que aquellos sonidos toquen sus oídos como si fuese una etérea melodía, por lo que lentamente succiona la piel ajena y la delinea con su lengua perversamente, generando una deliciosa y fuerte corriente eléctrica a la entrepierna del castaño.
—Kookie~ —gimotea TaeHyung hacia el cielo, inundado por el placer de ser lamido por la lengua de JungKook en aquella zona tan erógena.
JungKook prosigue, mientras marcas rosáceas y rojizas tenues se tiñen en el cuello acanelado de su amado. TaeHyung comienza a friccionar su dolorosa erección, rozando la entrepierna de JungKook que también se hallaba despierta; generando un jadeo en ambos al mismo tiempo.
TaeHyung vuelve a repetir el movimiento, mientras sus labios se entreabren soltando jadeos que lo hacen extasiarse. Se siente tan bien, deliciosamente bien. JungKook, mordiéndose el labio inferior por lo excitado que se encuentra, deposita sus manos en la cadera del castaño, marcando el ritmo con el que se friccionaba TaeHyung sobre él.
Y siente su vientre bajo embriagarse deliciosamente cuando el castaño comienza a jadear constantemente con movimientos circulares sobre su pene, estimulándolo y haciéndolo gemir sobre los labios de su amado.
Siente que el pantalón aprieta su entrepierna cuando el castaño gime de vuelta y planta sus labios en los de él, suavemente y de manera profunda.
—Koo~ —jadea TaeHyung—. M-Mi cabeza va a explotar~
Y no miente. Siente que puede ver mil estrellas, de manera literal. Su cabeza es una deliciosa explosión continua, siente que está en un punto tan intenso, que su cabeza divaga, tratando de decir alguna respuesta coherente. Pero meramente siente como su boca se entreabre por los jadeos continuos generados por la excitación. No puede pensar más que en la deliciosa fricción de su pene con el de su amado.
—¿Y te gusta? —susurra al fin JungKook, aún con el castaño friccionándose sobre él, mientras involuntariamente, muerde su labio inferior nuevamente por la exquisita sensación que le vuela los sesos con el solo hecho de escuchar a su amado gemir su nombre.
—Sí. M-Me gusta mucho~ —habla entrecortadamente el castaño, mientras su mandíbula se mantiene abierta jadeando—. Oh, D-Dios, se siente tan bien~ —vuelve a jadear, cuando JungKook acerca sus labios a sus clavículas con besos húmedos.
Sus manos comienzan a quitar aquel pantalón de tela del castaño, el cual se desliza por las piernas del menor con facilidad, mientras sus labios recorren un camino de besos por la mandíbula de TaeHyung, el cual comienza a lloriquear por lo bien que se siente.
JungKook dirige su mano al borde de la tela del bóxer del castaño, haciendo estremecer al contrario ante el contacto de sus tibios dedos con su piel. Y baja su mano lentamente hacia la tela húmeda con una mancha en el medio, siendo esta el líquido preseminal del castaño.
TaeHyung gime deliciosamente ante las sensaciones que experimenta por primera vez con su amado. ¿Por qué era tan embriagante y dulce a la vez ser tocado por JungKook?
—JungKookie~ A-Ah~, ahí no~ —gime nuevamente cuando el pelinegro comienza a crear un movimiento de arriba a abajo con su pene erecto. Jura que se volverá loco si vuelve a repetir el movimiento.
—TaeHyungie, no lo digas así —habla el pelinegro, emitiendo suspiros que envuelven su sistema y mandan una puzanda deliciosa a su entrepierna ante los jadeos del castaño.
—E-Es que... no puedo~ —termina por decir el menor, al sentir la mano del mayor contra su entrepierna, y siente como uno de sus dedos comienza a acariciar la punta del glande de su pene de manera embriagante— ¡A-Ah!~ Kookie~
JungKook no se contiene, y cegado ante la excitación, comienza a mover su mano de manera rápida, estimulando el pene de su amado, y sintiendo el líquido seminal del castaño saliendo y esparciéndose por la tela del bóxer.
TaeHyung emite un sonoro jadeo ante aquello, y comienza a hiperventilar extasiado. JungKook sigue dando estimulación de manera continua a su pene, mientras hunde sus labios con los contrarios. En un beso lleno de excitación y de una calentura incontenible.
El castaño gime gustoso, mientras sus lenguas se tocan entre sí, saboreando el dulce sabor de sus salivas mezcladas. Sus labios son mordisqueados sutilmente, mientras la lengua delinea el borde de su labio inferior. Emanando una insaciable corriente eléctrica entre ambos cuerpos, haciendo volar sus sesos.
Finalmente, ambos llegan al esperado orgasmo, emitiendo de sus labios un precioso gemido. Sus respiraciones son irregulares, y sienten una liberación exquisita e inexplicable dentro de ellos.
TaeHyung se recompone, y sonríe de manera diminuta, acercándose nuevamente al pelinegro, y depositando sus labios en los del él en un tierno y dulce beso, que no hace más que generar un latir bonito en sus corazones y sentir mariposas revolotear por doquier.
Aquello había sido tan precioso.
—¿Te gustó? —pregunta finalmente el pelinegro con voz cálida, mientras acerca el cuerpo del menor hacia su regazo, más de cerca hacia su pecho; delineando con sus dedos los muslos acanelados de su amado, mirando sus orbes color miel, como un propio enamorado.
—¡Me encantó! —TaeHyung repone, mientras alza sus comisuras en una dulce sonrisa cuadrada, haciendo sonreír también al pelinegro.
JungKook lo envuelve en sus brazos, mientras deposita su abrigo color negro en las piernas del castañito, haciéndolo sonreír.
—¡Tengo calor! —exclama—. Aún así, me gusta —termina por decir, mientras vuelve a reclamar un besito en los labios del pelinegro.
Ambos sienten un cosquilleo nuevamente emanar de sus estómagos, es un cálido sentimiento que los estremece y los hace sonreír involuntariamente.
Y mientras los rayos del sol se desplegaban a sus anchas, el aire fresco de verano golpeaba en sus rostros, y las hojas de los lirios emanaban su fragante aroma a primavera; TaeHyung y JungKook se permitieron unirse en uno solo. Siendo el resultado un sentimiento cálido lleno de amor, de una ilusión colmada de miel y de una esencia única con etéreas sonrisas azucaradas.
Fin.
ggukcotton | 2O24
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro