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⊰✩⊱





─Entonces... ¿Jungkook?

Por enésima vez, los colores se le subieron al rostro al de cabellos fantasía, quien segundos antes había declarado a su hermano mayor estar completamente enamorado de alguien.

─H-hyuuung─Alargó el menor a la vez que bajaba la mirada para comenzar a jugar tímidamente con sus manos.

Seok Jin detuvo el auto dos cuadras antes de llegar a su hogar solo para tener la gran dicha de apreciar el rostro colorado de su hermanito, quien justo en ese momento estaba pensando en una buena forma para que la tierra se lo tragara.

─¡Hey! ¿Sabes que puedes confiar en mi verdad? yo siempre te he cuidado y jamas, jamas en la vida te juzgaré. ¿Lo sabes cierto?─El contrario asintió manteniendo sus ojitos clavados en el tapete del auto─Entonces... ¿Qué es lo que te pone en ese estado?

─E-es que─Comenzó tímidamente─Se siente extraño... estar enamorado─Señaló.

─¿Extraño? ¿En qué manera?

Su mirada se elevó y posó sus bonitos orbes en aquellos oscuros de su hyung.

─Duele...─Soltó─Duele tanto amarlo,  pero... quiero hacerlo. Quiero estar siempre con él y protegerlo a cada instante.

─Eso es normal cariño...─Se enterneció──Cuando el amor duele, significa que estás amando intensamente.

─Pero hyung, el dolor es malo...

─El dolor no es malo cuando estas enamorado TaeTae, ya que el único sentimiento que te hace sentir vivo.

El menor asintió, analizando un poco las palabras que había pronunciado su hermano mayor, pero no terminando de entender una cosa.

─Hyung, pero... ─Volvió a mirarlo, esa adorable muequita formándose en sus bonitos labios─¿Qué hay del dolor que sientes cuando no eres correspondido? ¿O cuando la persona que amas quiere a alguien más? ¡o peor aún! ¿Qué hay cuando ambos se aman con intensidad pero...su amor no puede suceder? 

Y las palabras enmudecieron justo al escuchar la última situación. El mayor suspiró profundamente mientras dejaba a sus pensamientos vagar hasta detenerse en el recuerdo de aquel chico de cabellos mentolados, sonrió un poco y contestó.

─Creo... creo que lo bonito de aquellas 3 cuestiones es el dolor─Soltó sin saber muy bien que estaba diciendo, pero hablando desde lo más profundo de su ser─De las primeras dos, la herida siempre sana , lleva tiempo... pero sana, pues cuando ves a la persona ser feliz, cuando ves su sonrisa resplandecer gracias a la presencia de alguien más, te sientes bien, te sientes completo incluso cuando ese "alguien más" no eres tú. Y en el caso de la última...─Habló refiriéndose a la última cuestión─Cuando... cuando ambos se aman y no puede ser─Se detuvo un poco, su corazón empezando a latir y ese extraño vacío en su estómago comenzando a aparecer─Creo que lo único que te mantiene vivo y soportando el dolor es saber que estás cuidando de la otra persona. Es saber  que a pesar de que no están juntos, él o ella está a salvo. Esa... esa es la manera más viable de sobrellevar el dolor.

─¿Aunque la otra persona sufra, hyung?

Y aquello terminó de martillar el pobre corazón del mayor.

Jin cerró los ojos, intentando soportar el vacío que crecía más y más a tal punto de querer asfixiarlo. Estaba tratando, claro que intentando con todas sus fuerzas que aquel sentimiento no lo jodiese más. Lo intentaba todas las mañanas al despertar y decirse a sí mismo que lo había hecho bien. Se decía que nada era su culpa, que él había tomado una buena decisión. Entonces, si se repetía siempre que podía que el de apellido Min estaba mucho mejor sin él, ¿Por qué ese estúpido vació en su interior no dejaba de crecer?  

─Tae... ¿Por qué mejor no seguimos hablando de ti?─Cambió rápidamente de tema, ignorando el jodido sentimiento que había florecido dentro de su pecho─Hace tiempo que no teníamos una charla extensa, podríamos...─Pero sus palabras se cortaron cuando al voltear hacia adelante, vio a través del parabrisas esa muy conocida cabellera color menta que segundos antes se había encargado de invadir sus pensamientos.

El impulso de bajar del auto e ir hacia el chico de piel blanquecina le invadió, tanto que hasta tomó la manija de metal para abrir la puerta del coche. Sin embargo, detuvo todo movimiento cuando al volver a mirar, se dio cuenta que el pelimenta no se encontraba solo, sino acompañado.

El chico de cabello anaranjado que iba justo a un lado de él, reía constantemente siempre que se veía que Yoongi abría la boca para decir algo.

He ahí, el verdadero dolor.

Jin se paralizó contemplando la imagen, imagen la cual mostraba a su ex novio siendo feliz con alguien más y no logró evitar el gran vació que se expandió aún más en su interior.

─¿Hyung?─Una pequeña y profunda vocesita le llamó, pero Seok Jin solo podía concentrarse en aquello que veía a lo lejos, sus ojos cristalizandose ante la imagen de Yoongi tomando el antebrazo de aquel pelinaranja─¡Hyung...!

─Oh...─Agitó su cabeza y después de presionar la palma de sus manos contra sus ojos, giró a ver a su hermano─Lo siento Tae, ¿Decías algo?

─Hyung ¿Estas bien? Te quedaste un poco ido y...─Señaló a la vez que veía a su mayor asentir.

─Estoy bien, es solo que... recordé que tengo algo que hacer─dijo no muy convencido─¿Está bien si te dejo en casa? Volveré rápidamente.

─Ugh, esta bien.

─¿Estarás bien?

─Si hyung, no te preocupes.

Y dicho aquello, el mayor arrancó el vehículo a toda velocidad, dejó a Taehyung en la entrada de su hogar y con la misma prisa regresó al lugar en donde había visto a Yoongi con aquel chico.

Seguían ahí, riendo y hablando de algo que a Seok Jin le valía madre, pero aun así quería saber.

Esperó un poco dentro del auto con el motor de este encendido, hasta que otro chico, pero este de cabellos negros, se acercó a la "pareja" intercambiaron un par de palabras y después se echaron a andar.

Discretamente y no pisando el acelerador a más de 20 km, Jin los siguió.

Yoongi y los chicos desconocidos, anduvieron por unas cuantas calles más hasta que entraron a un local lleno de letreros de colores neón.

Kim se detuvo, analizó el lugar, bajó del auto y decidió entrar.

Se estaba arriesgando, claro que lo sabía, pero él quería saber quién era ese chico de cabellos anaranjados para Yoongi y porque este le sonreía con cariño cada vez que podía.

Al estar en el interior del lugar, el mayor pudo divisar que se encontraba en un tipo de restaurant-bar con decoración urbana por doquier.

¿Cómo es que nunca había visto anteriormente de este sitio?

Peculiar, colorido, agradable, eran las palabras que describen el interior, sin dejar a un lado que las persona que se encontraban ahí, ya sea, bebiendo, comiendo o divirtiéndose, daban una perfecta armonia con vibra de sencillez.

Decidió tomar asiento cerca de la puerta y pidió una botella de soju a una mesera que se había acercado a  tomar su orden. Miró alrededor del lugar, en busca de aquella cabellera incomparable pero no la pudo encontrar, ni siquiera a aquella anaranjada que la acompañaba.

¿Dónde se habrá metido?

Y como contestación a la respuesta de su mente, en frente, justo en un pequeño escenario, aparecieron los 3 chicos que anteriormente venía siguiendo.

El bullicio de gente comenzó después que uno de ellos, el que llegó después, saludó y presentó a los otros dos que estaban presentes en el escenario como los mejores raperos de la ciudad.

Espera... ¿Raperos? ¿Suga y J-hope?

La música con entonación de Bip comenzó a retumbar en el lugar, y después de unos cuantos segundos transcurridos, los chicos de cabellos coloridos, empezaron a rapear, alternándose el uno con el otro cada cierto tiempo.

¿Qué era esto?

La expresión del mayor no podía ser más de sorpresa, pues lo que se encontraban viendo sus ojos justo en ese momento, nunca antes lo había apreciado. Min Yoongi, su ex novio, iba de un lado a otro recorriendo toda la extensión del pequeño foro, mientras cuidaba el no tropezar con las rápidas palabras que salían de su boca.

¿Sí, definitivamente, esa faceta de Min jamás se le había sido mostrada?

Repentinamente, las palabras de Yoongi o más bien dicho "Suga" se detuvieron de golpe, justo cuando sus ojos chocaron con aquellos oscuros del mayor.

La música seguía y el tal J-hope rescató aquel momento de shock de su compañero de escenario, rapeando en su lugar.

Y no desviaron sus miradas, al contrario, las mantuvieron firmes hasta el último momento. Seok Jin controlando los temblores que repentinamente emanaba su cuerpo y Yoongi... Yoongi sin saber exactamente qué sentir.





⊰✩⊱






─¿Qué mierda haces aquí?─Las palabras salieron con odio y desprecio, incluso hasta con asco.

El mayor de ambos giró a ver a su ex novio, quien repentinamente había llegado hasta su mesa, y le sonrió.

─No sabia que hacías esto Yoonie─dijo como si nada, refiriéndose a lo anteriormente mostrado en el escenario─Tienes talento.

La mandíbula del pelimenta se tensó─Deja de llamarme así, imbécil y contéstame ¿Qué carajo haces aquí?

─Estoy tomando soju ¿No ves?─Mostró su vasito tequilero a lado de la botella verde.

─Lárgate

─¿Qué?

─Que te largues─soltó ya sin paciencia.

─No puedes correrme.

─Claro que puedo. No te voy a permitir que también me vengas a joder en el único lugar donde me puedo relajar ¡así que largo!

─Escucha, yo...─El mayor se detuvo un poco, viendo la defensiva expresión que mantenía el rostro de su ex, suspiró y continuó─Q-quisiera hablar contigo...─Vaciló.

─Me importa un carajo lo que quisieras hacer ¡Largate!

─Hey, hey ¿ocurre algo?─Una tercera voz se unió a la intensa conversación.

─Nada que te incumba─Contestó el mayor a aquel de cabellos anaranjados que se acercaba hasta donde estaban ellos.

El apodado Jhope frunció su ceño extrañado, analizando aquella grosera actitud que ese desconocido había tenido con él. 

─¿Cuál es tu problema?

Ante esa cuestión, Jin solo pudo apretar sus puños al mismo tiempo que lo hacía con su mandíbula. Ugh, gran error, Yoongi lo notó y el menor sabía que solo había una razón lo suficientemente inmadura para que Seok Jin se comportara de aquel modo con una persona que ni siquiera conocía.

Elevando una de sus bonitas cejas debajo del flequillo color menta que las  cubrían, Min tomó la mano del recién llegado y sin despegar su mirada de aquel azabache que miró el amarre atónito, habló.

─No pasa nada, amor─La mirada de Jin pasó de estar en las manos entrelazadas frente a él, a la cara de su ex, quien no había quitado sus ojos de su persona, ni siquiera por un segundo─Un idiota que no deja de molestarme─Terminó el pelimenta dirigiendo después su mirada al chico de cabellos naranjas que se encontraba justo a su lado, este mirándolo con una expresión similar a la de SeokJin, completamente estupefacto, con ambas cejas levantadas.

Lo que vino después, nadie se lo esperó.

Yoongi, frente a los ojos de su ex novio, juntó sus delgados labios con aquellos que se encontraban cerca de él y después de un par de lentos movimientos se separó.

─Vámonos, cariño...─Murmuró a su ahora "novio" y después de soltar su mano para pasar esta misma alrededor de su cintura,  dio la vuelta y se alejó sin mirar atrás, sintiendo aquellos oscuros ojos que tanto había amado, clavados en alguna parte de su espalda.

─¿Qué carajo fue eso?

Cuestionó Hoseok con el ceño fruncido una vez que él y su nuevo compañero de rap, traspasaran las cortinas que los dividían de los clientes del restaurant-bar. El mayor soltando la mano del pelinaranja, se encogió de hombros y giró a mirarlo.

─Perdón si te incomodé.

─¿Qué si me incomodaste? Me besaste ahí afuera y me llamaste "amor" cuando solo llevamos 5 días conociéndonos─Señaló─De perdido merezco una explicación.

─No tengo sentimientos escondidos por ti si es lo que quieres aclarar─dijo antes de dejar caer su delgado cuerpo en el único sillón que había ahí dentro. Hoseok mirándolo con los brazos cruzados─Solo olvídalo ¿si? no volverá a pasar.

Pero aquello no mantenía satisfecho al menor.

─Quiero la explicación─Soltó─Quiero que me expliques por que te detuviste en medio de un rap perfecto y quiero saber porque carajo me besaste en los labios.

─Oye mocoso quien te crees que eres para hablarme de esta manera tan...

Pero un ringtone de celular los interrumpió. Yoongi rodó los ojos y el contrarió bufó al mismo tiempo en el que sacaba su móvil de uno de los bolsillos de su pantalón. Y palideció, se le fue el alma al cielo al ver el nombre del contacto que le llamaba después de mucho tiempo.

─¿No piensas contestar?

Ignorando la pregunta de su mayor, Hoseok se tomó la libertad de apreciar la pantalla un poco más, hasta que esta simplemente se dejó de iluminar, dándole a entender que el tiempo para contestar había terminado y que tal vez, solo tal vez, la persona en la otra línea le volvería a marcar. Sin pensarlo mucho, apagó su celular queriendo estar ajeno a todo y sobre todo queriendo estar ajeno a él, al chico de cabellos claros que tanto le había lastimado.

─Solo, solo no lo vuelvas a hacer─Soltó repentinamente, refiriéndose al beso que le dio Yoongi─Por favor.

Y diciendo esto último, el pelinaranja dio media vuelta y comenzó a preparar su voz para su segunda presentación de la noche, sus ánimos un poco más recaídos de lo que estaban al comenzar.

*

*

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¿Se esperaban eso?

Ya casi es el turno de las parejitas secundarias, solo awanten un poco más^^

*

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