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(Mi diosa en imagen)
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⊰✩⊱
(Cap Liskook re necesario)
Gritos, burlas, insultos, carcajadas...
Una multitud de aproximadamente 9 niños rodeaban el resbaladero que se encontraba a lo lejos.
El pequeño intentó ignorar la revuelta que daba lugar a solo a 5 metros de él. Su madre le había enseñado a no meterse en problemas o en otras palabras, no meterse en donde no le llamaban. Sin embargo le fue imposible seguir las órdenes de la mujer que lo trajó al mundo, cuando escuchó un débil llanto proveniente del centro de aquel escándalo.
El castañito detuvo el columpio en el que se encontraba meciendo y con algo de dificultad, ya que sus piecitos estaban 5 centímetros separados del suelo, bajó de él.
─¿Qué le pasó a tu camisa? ¿La mordieron las ratas?
─¿Ya vieron? ¡Su cabello parece un nido de pájaros!
─Eres igual que un vago...
─¿Conoces los cepillos, niño?
─¿O las duchas...?
Esos horribles comentarios y estruendosas risas por parte de la multitud de infantes era lo único que el pequeño Jungkook lograba escuchar mientras se acercaba.
Las carcajadas aumentaron hasta que uno de los niños exclamó─¡Ya vayámonos! es aburrido si no nos mira...─Y fue ahí que el castañito detuvo sus pasos vacilantes, viendo como todo el grupo que antes rodeaba la resbaladilla, ahora se esparcía alrededor del parque.
Con su campo de visión más despejado, Jungkook enfocó en el colorido juego la silueta de un niño de cabellos completamente negros que se encontraba sentado en posición fetal, escondiendo su carita en el huequito que había entre sus piernas y brazos.
Se acercó a pasos aún más lentos y hasta que logró estar lo suficientemente cerca fue que pudo escuchar los suaves suspiros e hirientes sollozos que el pequeño liberaba.
Quiso averiguar, indagar, descubrir qué era lo que le pasaba a aquel niño de cabellos azabaches, pero la lastimosa imagen frente a él, le dejó sin palabra alguna.
El chiquillo pelinegro sentado en la resbaladilla, portaba una camisita blanca llena de pequeños orificios que dejaban ver su lastimada y raspada piel pálida. Sus cabellos se encontraban despeinados y empolvados y en sus piecitos no había zapatos ni calcetones algunos que los cubrieran del ligero viento de verano.
El pequeño corazón de Jungkook se apretó dentro de su pecho, su pequeño labio inferior abultándose hasta llegar a formar un ligero pucherito dentro de su preocupada expresión.
¿Quién había sido capaz de lastimar de esa manera a un pequeño?
Jungkook no podía comprender cómo era que existían personas así. Él, siendo un nene que siempre había tenido sobre todo el infinito amor de su madre, no podía comprender, cómo había pequeños que, a falta de dicho amor, se vieran tan frágiles ante el mundo.
Juntando de toda su valentía, el castañito dejó a un lado la opresión de su pecho para después atreverse a susurrar.
─O-oye...─Y el simple llamado hizo al que se encontraba con la mirada escondida, tensarse─N-no te asustes, y-yo no te haré daño.
Y no mentía, Jungkook jamás mentía.
Se acercó lo suficiente hasta posar una de sus manitas en el pequeño hombro tembloroso del pelinegro, quien al sentir el repentino tacto, tembló aún más.
─T-tranquilo...─Murmuró Jungkook permitiéndole a su dulce voz acariciar los sentidos del contrario y sus ojitos completamente perdidos en las marquitas rojas que decoraban la descubierta piel pálida─Está todo bien...─Volvió a susurrar después, dando suaves y ligeras palmaditas en el hombro del contrario y recordando aquello que su madre hacía para calmarlo después de despertar en medio de la noche por culpa de una pesadilla, extendió ambos de sus bracitos hasta cubrir con estos mismos el débil cuerpecito del contrario─ Todo está bien...
Y el pequeño Jungkook no esperó para sumar a aquella tranquilizadora escena, el acto más puro e inocente que su madre le había enseñado; alejaba todos los miedos y sanaba todos los pesares. El castañito, delicadamente, posó sus pequeños y delgados labios sobre aquellas hebras color azabache, depositando un tierno y dulce besito justo en la coronilla del contrario.
No hubo palabras, pero si una reacción, un pequeño movimiento que le aseguró a Jungkook que había calmado las ansias del contrario, pues este dejó de temblar repentinamente.
Los delgados y pálidos bracitos se movieron, abandonando las piernas que anteriormente se encontraban abrazando, un suspiró salió de sus labios y el pequeño Jungkook esperó pacientemente a que el contrario conectara sus miradas... cosa que no pasó, pues el movimiento a su lado seguido del sonido de una puerta abriéndose y cerrándose, le despertó.
Abrió sus ojos un poco, solo lo suficiente para poder apreciar el lado continuo de la cama (ahí donde se encontraba descansando Kim Taehyung antes de cerrar los ojos) vació.
Quiso incorporarse, saltar de la cama e ir en busca del chico de cabellos fantasía, pero antes de poder siquiera moverse, dos voces femeninas le hicieron detenerse y fingir que seguía durmiendo.
─Listo, ponte cómoda y gracias por venir.
─Gracias a usted señora Jeon por contestar mis llamadas y por decirme que Jungkook se encontraba en este estado. Yo, estaba muy preocupada por que él no respondía su teléfono.
Esa voz. No puede ser, era...
─No hay de que Lisa. Yo... bueno como te dije, no sabia que Jungkook tenía una novia, perdona que no...
─No, no se preocupe. Kookie es muy despistado, tal vez se olvido de comentarlo...
─Si, lo es.
Ambas rieron y Jungkook solo pudo sentir una angustia tremenda crecer más y más en su interior.
Si, por segunda vez, se había olvidado de Lisa.
─Bueno linda, ¿Te dejo sola con él? si necesitas algo, estaré en la cafetería.
─Si, muchas gracias─Contestó y Jungkook pudo escuchar los pasos de su madre dirigirse a la salida─Uhm ¡Señora Jeon!
─¿Si?
─El... el chico de cabello fantasía que encontramos dormido aquí, ¿Q-quién era?
─Ah, ¿Hablas de Taehyung?─Cuestionó y sin esperar respuesta contestó─Es el hijo menor de la familia con la que Jungkook se está quedando.
─¿Taehyung?
─Si, ¿Por qué?
─Ah no, por nada...
─Uhm, bueno cariño, ya sabes, me hablas si ocupas algo.
─Sip...
Y tras esa respuesta se pudo escuchar como la puerta de la habitación era cerrada. Un gran suspiro se escuchó después de un pequeño silencio y unos pasitos muy cerca de él.
El lado contrario del colchón se sumió y fue en ese momento que Jungkook decidió abrir los ojos y enfrentar a "su novia"
─¡Oh! Kookie─Chilló la mencionada, quien se encontraba sentada a un lado de él─¡Despertaste!
─Lisa...─Susurró y la chica con una gran sonrisa, se atrevió a depositar un pequeño beso en el centro de su frente.
─Me tenías muy preocupada─Puchereó, una notable angustia decorando sus facciones.
─L-lo lamento.
Y Jungkook no tuvo el valor de seguir mirándola a los ojos, simplemente desvió la mirada y mordió un poco su labio inferior, aquello, Lisa lo notó.
─Kookie, ¿Pasa algo?
El interior del mencionado, era comido de a poco a poco por sus propios nervios. Jugando con sus deditos, decidió soltar.
─Lisa...Tengo algo que decirte.
La chica sonrió, un poco de melancolía destellando en su expresión ─También tengo algo que decirte, Kook.
Y aquel era el típico momento donde todo ser humano siente que su alma se sale del cuerpo. Ese momento en el que no se sabes que va a pasar o en que va a acabar todo aquello. Jungkook no quería lastimar a la chica, de hecho, él jamás tuvo esa intención. Si, al principio estaba confundido, al principio confundió una simple atracción con amor y esa fue una enorme equivocación. Pensar en que gustaba de esa persona y tratar, o bueno, exigir a su mente enamorarse de ella, fue el error más grande que pudo cometer en su corta existencia, por qué justo ahora, esa persona que le declaró su amor, sufriría a causa de su estúpida confusión.
─B-bien...─El castaño, a como pudo, se reincorporó un poco hasta quedar sentado en la cama.
─Con cuidado─Lisa acomodó los cables de suero que conectaban con el cuerpo del chico y después de aquello, peino con sus dedos los despeinados cabellos del castaño.
Jungkook quiso morirse ahí mismo, pues lo que estaba a punto de hacer no se lo perdonaría nunca en la vida, y era romperle el corazón a una chica. A la chica de la cual solo se encariñó.
─L-lisa yo...─Su mirada viajó rápidamente hacia sus manos, las cuales comenzaron a jugar con la sábana que estaba cubriendo parte de su cuerpo, suspiró y continuó─Creo que...o bueno más bien no creo─Se detuvo, cerrando fuertemente sus ojos y diciéndole a su cerebro que tenía que ser claro─Yo... estoy enamorado de alguien más.
El silencio se apoderó de la blanca habitación. Después de casi 5 segundos transcurridos, Jungkook elevó su mirada lentamente y enfrentó aquellos ojos claros que lo miraban con intensidad. De un momento a otro, la expresión de Lisa cambió de una neutral a una extremadamente... comprensiva.
Sonrió con dulzura y tomando la mano de Jungkook que se encontraba cerca de la suya, contestó.
─Lo sé...─Y ahora el rostro de Jungkook reflejaba todo un poema, al ver dicha expresión, Lisa soltó una risita nasal y continuó─¿Sabes Kook? Las chicas tenemos un sexto sentido para esas cosas.
─Pero, ¿Cómo fue que...?
─¿Cómo fue que me enteré?─Se adelantó, manteniendo aquella expresión comprensiva y muy calmada─Bueno, mi sexto sentido lo detectó el día de la cena con mis padres. Esa noche, tu mente estaba en otra parte, mirabas a cada rato el reloj y en otros tantos tu celular, como si estuvieras esperando algo o como si estuvieras preocupado por alguien. Desde ahí lo imaginé, que estabas pensando en otra cosa o...en alguien más─Miró sus uñas con aires de sabiduría y rió.
─Ya.
─Aparte, te vi con él...En el concierto orquestal─Confesó y por enésima vez en ese momento la expresión de Jungkook fue de desconcierto.
─¿Q-Qué dices?
─Sip. ¿Has visto la forma en que tu cara resplandece cuando lo miras?
─Lisa, pero ¿Cómo? ¿Estuviste ahí?
La mencionada se encogió de hombros y explicó─Mi papá nos llevó a mamá y a mi al evento de la universidad de música incluyendo, obvio, a las orquestas, así que yo estaba ahí, justo detrás de ti. Quise hablarte, me emocioné mucho cuando te vi ahí, pero después vi la felicidad que emanabas al estar con ese chico y...─Sonrió─Simplemente lo dejé. Después de eso, fui a casa y propuse un plan para convencer a mi mente. Me dije a mi misma, si lo llamó y lo invitó a salir y dice que sí, insistiré, pero si dice que no, simplemente lo dejaré─Señaló─¿Sabes? fue tonto porque dijiste que si, pero pues después de que no llegaste yo...lo entendí.
─Lo lamentó...
─Jungkook, esta bien─La chica se apresuró, elevando con sus manos el rostro del menor que nuevamente había bajado─ Si, no voy a negar que no dolió porque bueno, si estaba un poco ilusionada contigo, pero en parte todo fue mi culpa ya que no debí acelerar las cosas. Siento que inconscientemente te presioné y eso no estuvo bien.
─Pero─El castaño negó─Yo te confundí y eso tampoco estuvo bien.
─De acuerdo, de acuerdo, ambos estuvimos mal. Nadie gana ni nadie pierde. Gracias por ser sincero conmigo.
─Yo soy el que debería darte las gracias por comprender.
─No es nada Kookie. Ya déjalo.
El chico asintió y optó por simplemente dejar a un lado aquel tema. Lisa, luego de unos segundos, mirándole fijamente con una sonrisa que parecía literalmente brillar.
─Así que...─Vaciló la chica, elevando ambas cejas en medio de la cuestión─ ¿Taehyung?
Y con la simple mención de ese nombre, Jungkook tuvo el super poder de hacer que su cara se transformara en un auténtico tomate, cosa que hizo a Lisa carcajear al instante.
─Mírate Kook, luces tan lindo todo rojito.
─¡Y-yha!─Tomó su rostro con ambas manos y lo frotó un poco con sus palmas─¿C-cómo fue que supiste su nombre?
─Tu mamá me lo dijo hace un momento─Confesó y Jungkook recordó lo que había escuchado mientras se hacía el dormido─Él estaba aquí acostado junto a ti. No se si me vio, pero yo pude ver la forma tan linda de cómo acariciaba tu rostro. Tienes un amor correspondido Kook, lucha por el.
El corazón del castaño comenzó a casi querer salirse de su pecho después de escuchar esas palabras.
¿Taehyung había hecho tal cosa? ¿El chico de múltiples personalidades en verdad se había tomado el tiempo de verlo dormir? Taehyung... él ¿En verdad podía corresponder su amor?
─Tus mejillas...─Señaló la rubia sacándolo de sus pensamientos, mientras pinchaba una de sus mejillas─Van a explotar si sigues haciendo eso...─Se burló.
─Lo siento.
─Msh─Chistó, encarnando una de sus bonitas y bien formadas cejas─¿Por qué sigues diciendo que lo sientes?
─Yo...
Claro que Lisa sabía a la perfección que el chico seguía lamentándose por haberla ilusionado, así que se encargó de hacerle saber aquello que le había pasado mientras lo esperaba aquel día en la cafetería.
─Hey, ¿Has escuchado la frase de "Todas las cosas suceden por algo"?─Jungkook asintió y Lisa continuó─Bueno, creo que esa frase ya me pegó a mi...
─¿A qué te refieres?
─Bueno, uhm, mientras te estaba esperando ese día en la cafetería, un chico, hum se-se acercó a mí─Habló tímidamente, sus mejillas tornando un ligero color rosado─Me preguntó qué me pasaba, porque honestamente, llevaba ahí un buen rato. Empezamos a platicar y al último terminó dándome su número de teléfono. Yo, ya sé que es pronto para fijarme en alguien más, pero... ¿Debería intentarlo?
─Hazlo─dijo rápidamente─No te detengas, conocelo y... esta vez intenta no apresurar las cosas. Escucha primero a tu corazón y escucha los sentimientos de él.
Lisa sonrió enternecida y sin pensarlo se lanzó y dio un suave abrazo a Jungkook.
─Lo haré─Chilló dando un casto beso en su mejilla─Gracias por entrar en mi vida Kookie.
─Gracias a ti Lisa... por estar ahí.
El ambiente del lugar cambió totalmente y la presión que Jungkook había cargado en su corazón por fin desvaneció. Después de aquella conversación, Jungkook tuvo que explicarle (a medias, pues no podía decir el secreto de Tae) a Lisa, lo que le había ocurrido para llegar en ese estado al hospital. Después, al igual que siempre, los temas triviales salieron a flote. Esa tarde, ambos disfrutaron de su compañía como dos grandes y mejores amigos..
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*
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Todo lo que no escribí del Liskook en toda la historia, lo hice en este capitulo xp.
¿Y ustedes, liberaron su presión?
Acerca del recuerdo, o más bien, el sueño de Jungkook, pues ahí va, obvio esta teniendo fragmentos de su pasado en sus sueños.
Póngase al tiro para que no se pierdan xp
*
Gracias por leer mai beibis.
ILY
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