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(No al spoiler)
⊰✩⊱
Sábado por la mañana y el olor de un desayuno estilo americano ya estaba inundando todo el primer piso del hogar Kim.
Mina, quien sorpresivamente había bajado para desayunar en el comedor y no en su habitación, se encontraba mirando al chico que ponía en la mesa platos, vasos, cubiertos, jalea de fresa, miel de maple, mantequilla... todo lo necesario para poder disfrutar correctamente los panqueques que la señora Kim preparaba en la cocina.
"Él es incluso más guapo que mi hermano mayor..." pensó la chiquilla de 15 años, quien vestía una camisa de un bonito color rosa, la cual hacía una combinación perfecta con el brochecito floral que decoraba sus cabellos. La chica se deleitó, apreciando cada movimiento del chico de hebras como el oro, más no dudó en desviar la mirada rápidamente, al momento en que este, cruzó sus bonitos ojos con los de ella.
Jungkook sonrió notando el leve sonrojo que invadió las mejillas de la menor al disimular que no lo veía, pero ciertamente es que él estaba más que consiente que esos profundos ojos llevaban un largo rato mirándolo.
Desde que la personalidad femenina adolescente salió ayer por la noche, después del pequeño accidente con su brazo y el tierno momento de su abrazo, esta no había dejado de mirarlo ni siquiera por un momento y eso, a Jungkook, le era sumamente tierno.
¡Claro que podía acostumbrarse a esa atención!
La chica, muy disimuladamente, volvió a mirar a su dirección y se encontró con el castaño ofreciéndole un vaso lleno de jugo de uva.
Mina extendió el brazo y tomó lo que le era dado─G-gracias oppa...
─De nada Minie...
Y una vez más Jungkook se deleitó con ese bonito color rosáceo que bañó delicadamente las bonitas mejillas de porcelana que portaba el cuerpo de su mayor, si dijera que no podría pasar un día entero admirando tal acto, sería una vil mentira.
De repente, el sonido de una campanita de notificación se escuchó junto con el sentir de una vibración en el bolsillo delantero del castaño, quien dejó de ver a la de cabellos platas para poder prestar atención al mensaje, o bueno, a los mensajes que habían llegado a su celular.
Número desconocido
¿Hola?...
¿Jeongguk?
¡Soy yo! Lisa...
La chica que traía el perrito en el parque...
¿Me recuerdas?
Jungkook formó una "o" con sus labios seguido de una gran sonrisa, al recordar a la linda chica de cabello rubio y flequillo, que había conocido ayer en el parque.
Tan preocupado había quedado por la aparición de Dak y Mina, que había olvidado completamente que él y aquella chica, de nombre Lalisa, habían intercambiado teléfonos celulares, con la promesa de que algún día la rubia le pagaría un helado al castaño por encontrar a su perrito.
Número desconocido cambiar a Lisa Manoban~
Jeongguk<3
¡Lisa! claro que te recuerdo...
¿Cómo olvidar a la chica que casi llora de emoción por encontrar a su perrito?
Lisa Manoban~
Lo siento...
Es que en realidad no es mi perrito.
¡Es de mi compañera de piso!
¡Ella ama demasiado a esa bola de pelos!
Ayer me ofrecí en cuidarlo y pasearlo, pero a mitad de la caminata se echó a correr por que vio a un gato ¡Y a mi casi se me sale el corazón cuando pensé que lo había perdido!
No sé qué hubiera hecho sin ti, Jeongguk :c
Jeongguk<3
Wow...
Pues no te preocupes más, lo has encontrado.
Lisa Manoban~
No, en realidad,
¡Tú lo has encontrado!
Déjame comprarte el helado que te prometí como agradecimiento: c
Jeongguk<3
Hey vamos,
No es necesario...
Lisa Manoban~
¡Claro que lo es!
Me sentiré mal si no lo hago: /
Jeongguk<3
Bueno si es así...
Dejaré que lo hagas
Lisa Manoban~
¡¿En serio?!
Jeongguk<3
Yep, hablamos de un helado, jamás rechazaría algo como eso...
Lisa Manoban~
AH! ¡Gracias Gguk!
¿Puedes esta tarde?
Jeongguk<3
Claro...
¿Estaría bien después de las 3?
Lisa Manoban~
¡¡Si!!
¡Está más que perfecto!
Jeongguk<3
Bueno, entonces, esta tarde a las 3
Te espero en el parque, justo en donde nos conocimos.
Lisa Manoban~
Sisi, ahí nos vemos Gguk ^v^
—Oppa~—Un pequeño llamado lo sobresaltó, y fue ahí cuando se dio cuenta que una sonrisita boba había aparecido en su rostro— ¿C-con quien ha-hablas?—Preguntó la de cabellos platinados.
—Ah... y-yo... mmh, con una amiga.
— ¿Una chica?
El castaño asintió.
—Muy bien chicos...—La señora Kim apareció en el comedor con la gran charola llena de esponjosos panqueques—Hora de desayunar...~—Cantó, depositando el recipiente al centro de la mesa.
Al oler el delicioso aroma, Jungkook no dudo ni un segundo en guardar su celular y tomar asiento a un lado de la silla donde se encontraba la de cabellera plata, quien, de solo ver aquel acto en Jungkook, se levantó sorpresivamente y a toda prisa.
—Mina, cariño ¿Sucede algo?—Cuestionó la mujer a la personalidad femenina.
La chica negó, su mirada baja y sus dos pulgares jugando entre sí.
—S-se me quito el apetito, m-mamá...—Susurró apenas, elevando un poco su ensombrecida mirada —I-iré a dormir...
—Mina...
Jungkook intentó tomarla del brazo, pero la personalidad sensible no dejó siquiera que la tocara, por el contrario, se alejó de su mayor, hizo reverencia y salió.
¿Qué era lo que había pasado con ella? ¿Un momento estaba sumamente emocionada por que su madre le haría su desayuno favorito y al otro simplemente optaba por no comerlo?
—Ella es así...—Señaló la señora Kim al ver que Jungkook siguió con la mirada a la de cabellos platas, hasta que desapareció—Es muy sensible...—Admitió.
—P-pero... ¿Qué fue lo que la puso así?—Preguntó el menor con la preocupación inundando sus ojos— ¿D-dije a-algo malo?
La mujer lo miró y negó dedicándole una media sonrisa.
—Ella es muy insegura de sí misma, Kookie. Hasta la más mínima cosa, la hace sentir mal. Lo leíste en la carpeta ¿No? Ella sufre de depresión.
—Sí, pero... ¿Por qué?
—Mmh, creo que es algo que aún no se sabe. Necesitamos que mi Taehyung recuerde su pasado para saber el origen exacto de cada personalidad.
El menor asintió lentamente, tratando de encontrar una manera diferente de saber aquello.
¿Tal vez preguntándole directamente a las personalidades, puedan obtener algo?
El chico terminó de desayunar, agradeció a la mujer por la comida y después de lavar los recipientes, se dirigió a su habitación a hacer los deberes pendientes.
La mayor parte de la mañana la dedico a la tarea, para así poder darse el gusto de tener la tarde libre.
De vez en cuando, el de cabellos como el oro, salía de su habitación y dirigía su mirada al fondo del pasillo, justo donde se encontraba la habitación de su mayor, o en ese momento de MiNa, más la decepción le ganaba al no ver señales de la peliplata, incluso, en más de dos ocasiones optó por llevarle aperitivos de fruta, pero la chica nunca salió.
Pasaban de las 2 de la tarde cuando el castaño salió de su habitación completamente perfumando y aseado. El chico vestía un pantalón negro con rasgos pocos notorios en el área de los muslos, una camiseta blanca holgada para la parte de arriba y una chaqueta de mezclilla con un gorro gris cubriendo su cabeza ah, y sus características botas timberland, las cuales le daban un toque casual pero sexy a su vestimenta.
Después de un último vistazo a la habitación del fondo y percatarse que aún no había señales de la menor, decidió simplemente olvidar todo por un rato y disfrutar su encuentro con la chica de cabellos rubios.
—Oh por dios, mira nada más lo guapo que te ves.
Un leve sonrojo no tardó en aparecer en las mejillas del menor, quien sonrió muy tímidamente y agradeció a la pelirroja por el cumplido.
—¿Irás a algún lado?
—Oh, si...
—Uhm no me digas─La mujer levantó ambas cejas y sonrió─ ¿Una cita?
—A-algo así—Confesó el menor, el color rojo aumentando en el area de sus pómulos—En realidad... uhm, es una chica que recién conocí.
—Ouu... bueno, pues no te hago perder más tiempo. Mucha suerte en tu cita Kookie—dijo la mujer—Recuerda ser tu mismo, estoy segura que esa chica caerá rendida por tu encanto.
La señora Kim acarició maternalmente los cabellos del castaño, provocando que éste se avergonzara aún más.
—G-gracias señora Kim...—Habló, sus pasos yendo a la puerta de entrada—Regreso a las 8...
Dicho esto y después de recibir otro "buena suerte" de parte de la mujer, salió del hogar. Fue cuando iba cruzando el jardín que sintió esa extraña sensación de ser observado, otra vez. Giró su mirada rápidamente y la posó en la ventana contigua a su habitación.
Como un deja vu, las cortinas blancas fueron corridas por una sombra negra y un escalofrío recorrió su espina dorsal al presenciar aquello, pues aunque estaba un 90% seguro de que esa presencia era MiNa, la simple idea de ser observado de lejos, le aterraba.
Suspirando y dejando a un lado tal acción, salió por completo cerrando la pequeña cerca y caminando calle abajo.
⊰✩⊱
—Entonces... ¿Playa o montaña?
Jungkook dejo de tomar de su frappé para después hacer una mueca pensativa.
—Mmh... Montaña definitivamente.
— ¡¿En serio?!—Exclamó— ¡Yo también!—Confesó la rubia con gran emoción — Me relajo mucho más en una cabaña en medio de una montaña que frente al mar...
El chico la miró sonriendo y estuvo totalmente de acuerdo con su respuesta.
Aunque a decir verdad, tenía más cosas en común con aquella chica, de lo que podía imaginar.
Resultaba que a ambos les gustaba el baile, un tema que les dio de qué hablar por horas y horas. Aquella chica era una cajita de sorpresas en cuanto a gustos se trataba, y qué decir de su amable y divertida personalidad. Definitivamente Lalisa Manoban era una perfección andando, sin dejar atrás la elegancia y hermosura de su increíble rostro.
—Muy bien... ¡Sigues!
Jungkook entrecerró los ojos pensando en una pregunta original, y no repetida.
—A ver... mmm... ¡Ya se! Si fueras un topping de pizza, ¿Cuál te gustaría ser?
La chica no pudo evitar soltar una carcajada ante lo escuchado y Jungkook sonrió al lograr su cometido.
—Jeon ¿Pero qué clase de pregunta es esa?—Cuestionó calmando el dolor que sentía su estómago por las risas.
— ¿Qué...?—Exclamó encogiéndose de hombros— Es una pregunta interesante y culta—Señaló divertido─Aparte, me interesan las chicas con buen paladar.
—Mhh... Bueno, si tengo que responder—Ahora fue la rubia quien formó una mueca pensativa— Tal vez aquellas con extra queso...
Coincidencia, no lo creo...
—Demonios...
—¿Qué?
—Nada, es solo que...—El castaño se encogió de hombros—Yo amo el queso.
El resto de la tarde pasó volando con aquel juego de preguntas y respuestas, tanto que ninguno de los dos chicos se percató que el sol ya se encontraba a nada de despedirse.
—Oh por dios ¡Ya son casi las 8!—El menor miró perplejo su reloj de mano al no creer lo que la chica decía—Lo siento Gguk, pero quede en llegar temprano a casa para ir a cenar con mi amiga por su cumpleaños ¿Te importa si...?
—No, no, no adelante—Expresó rápidamente el castaño— También tengo que irme...
Dicho esto, a pesar de que Lisa le había invitado, Jungkook insistió en pagar la cuenta y acompañar a esta misma a la parada de autobuses.
─¿Puedo textearte?─Cuestionó la rubia antes de subir al bus que la acercaría a su hogar, recibiendo un asentimiento y una gran, y hermosa, sonrisa por parte del menor.
─Sin dudarlo.
Jungkook soltó un pequeño suspiro cuando el autobús se alejó, sonrió levemente y se dispuso a caminar. Su homestay se encontraba muy cerca del centro de Seoul, así que no tardó más que 10 minutos en llegar.
Al estar en frente a la casa, dirigió la mirada a la ventana de la habitación contigua, pero suspiró al no ver nada extraño o nada fuera de lo normal. Deslizó la pequeña reja, atravesó el jardín, sacó las llaves para abrir y entró, la oscuridad de la estancia recibiendolo.
Claro era lógico, la señora Kim tenía turno de noche en el hospital así que... espera, si no había nadie más que Mina en casa, entonces... ¿Por qué había un delicioso aroma proveniente de la cocina?
Con pasos lentos se dirigió a dicho lugar y no pudo evitar pegar un grito al momento de toparse con otro chico gritón.
—¡¿Q-quién diablos eres tu?!—Exclamó el chico alto de cabellos negros, que se encontraba sosteniendo dos utensilios de cocina con las manos.
¿Me equivoque de casa? La mirada del menor viajó por todo el lugar para cerciorarse estar en el hogar correcto.
¿Pero que...? ¡Claro que era su homestay!
Pero si era así, entonces... ¿Quién era ese chico apuesto de cabellos negros y cara de susto?
—Oh ¿Jungkook oppa?—Un susurro se escuchó en la entrada de la cocina y ambos chicos giraron a ver a la dueña de aquella peculiar voz.
El mencionado relajó sus facciones al ver el familiar rostro de Mina, o más bien, de su mayor.
—Nena ¿Lo conoces?—Cuestionó el pelinegro a la personalidad femenina.
—S-si, oppa~ —Contestó la nena a su mayor, su mirada viajando y deteniéndose timidamente en aquellos bonitos ojos—Él es J-Jungkook. Un huésped de mamá...
El pelinegro encarnó las cejas sin entender.
—¿Un huésped?—La chica asintió y Jungkook solo se dedicó a observar aquella conversación de miradas—Vaya... mamá sí que es todo un caso—Suspiró el de cabellos negros, para después dirigir la mirada al "huésped" de su madre.
—Bueno, entonces... me tocara presentarme...—El chico extendió su mano al de cabellos castaños—Mucho gusto Jungkook. Soy Kim Seok Jin, hijo mayor de la familia Kim...
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『16』
Nuevos personajes 7v7
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02/02/2020:
Gracias x leer~
Lxs jamuh ah'
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