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Salimos de nuestro escondite asustados y nerviosos, Jeongguk me regaló una sonrió para que me tranquilizara, lo abracé con fuerza y beso mi frente tranquilizandome.
—Tuve tanto miedo.—le dije y Jeongguk me abrazó con fuerza.
—Estamos bien, nada malo pasó.—dijo suspirando y me dispuse a escuchar los latidos de su corazón.
—Debemos irnos de aquí.—dijo Hoseok.—Ya deben sospechar algo.
—Es lo mejor.—dijo Jeongguk.—¿Pero adónde?
Taehyung se mordió el labio inferior.—Pensaremos en ello, mejor vamos a descansar tengo sueño.
Asentimos y subimos hasta nuestra habitación, nos recostamos en la cama y pasé las yemas de mis dedos sobre los pectorales de Jeongguk quién sólo suspiraba cada vez que lo tocaba.
—Tus manitos son tan suaves.—dijo sonriendo y enrolle mis piernas entre las suyas.
•
Jeongguk y Hoseok ya se habían ido, cuándo bajé a la sala, Taehyung se encontraba hablando con alguien por teléfono.
—Yoongi.—dijo y me quedé confundido.—Hablare con Hoseok cuándo llegué sobre eso.
Terminé de bajar y Taehyung me miró.
—Hablaremos después.—dijo mientras colgaba.—Jimin.
—¿Qué fue eso?.—pregunté.
—Llamé a Yoongi está mañana, el me estuvo llamando por un buen tiempo como sabrás y lo llamé para buscar ayuda en el, haber si nos podía ayudar para salir del país y me comentó que para eso me había estado llamado antes, para que nos fuéramos, el me comentó que está ayudando a más personas judías y gitanos a salir del país, me dijo como era la ruta para salir y bueno, me parece una buena idea, huir.
Me quedé sin palabras sin saber que decir o cómo actuar.
—Así que cuándo llegué Hoseok le comentaré sobre eso.—dijo sonriendo y me abrazó besando mi mejilla.—No se que cosas pensaste pero créeme que amo a Hoseok con mi vida, y que si hubiera hablado con Yoongi antes te habría dicho, eres mi mejor amigo, mi hermano de otra madre.
—Lo siento por pensar cosas raras.—dije suspirando.
—No te preocupes, yo habria pensado lo mismo.—dijo sonriendo.
—Lo siento de igual modo, Tae....¿Sabes? extraño mucho a mis padres.—dije mordiendo mi labio inferior.—quisiera saber cómo están ellos, al igual que quisiera saber de Minho, Sofía, Seulgi, Rose, y de Hyungsik.
—Te entiendo, cariño.—dijo besando mi frente.—Hoy hagamos que Jungkook o Hoseok pregunten por ellos.
•
Ya era de noche el día había transcurrido cómo los otros, Tae se la había pasado hablando por llamada con Yoongi y le preguntó sobre el pasado de el a lo cuál respondió que su "Mamá" lo había secuestrado y había provocado el accidente de sus padres todo con el fin de tenerlo a el, no cómo algo enfermizo si no porque siempre había anhelado un hijo.
La puerta fue abierta y miré a Jungkook entrando seguido de Hoseok, salí a recibirlo y lo abracé mientras besaba su rostro, Hoseok cerró la puerta y fue hasta dónde Taehyung.
—¿Cómo estuvo tu día hoy?.—le pregunté mientras subíamos a la habitación.
—Mejor ahora que te veo.—dijo besando mi mejilla.—Te extrañe tanto, amor.
Sonreí algo tímido.—Yo también te extrañe, ahora siento que no puedo estar ni un segundo sin ti.
—Siento que me pasa lo mismo, Park Jimin, ¿Que me has echó?.—preguntó sonriendo.
—Un amarré.—le dije riendo, entramos a la habitación y Jungkook me abrazó con fuerza.
—Perdi tanto tiempo de mi vida en otras personas, negando lo que de verdad sentía por ti, eres mi serendipia, mi península, mi gato Calico, eres lo que necesitó para estar en pie, para vivir y para sonreír.—dijo acariciando mi cabello.—preferiria mil veces que me faltará todo en vez de ti, Te amo.
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