El Sexto Hermano.
Karu se encontraba cayendo hacia el vacío su caída fue larga y aterradora, pero al final terminó cayendo a las fuertes corrientes de un río. Tan pronto como entro a esas rápidas aguas heladas, estás se encargaron de llevárselo a una rápida velocidad, sin darle una oportunidad de recobrarse, se encontraba debajo del agua dando vueltas hasta que al final pudo lograr sacar su cabeza a la superficie y respirar. Nada podía hacer contra la corriente, ya que nadar sería algo sin duda muy estúpido. Así que sin más opción el vessel dejo que la corriente lo llevara río abajo.
Pronto se dió cuenta que el río estaba plagado de rocas que eran un peligro si se llegaba a golpear con ellas, por lo cual intento esquivarlas para no quedar inconsciente; pero al final las rápidas aguas se encargaron de hacer que Karu se terminará estrellando contra un par de estás hasta que al final perdiera el control y se diera un fuerte golpe en la cabeza.
Todo para el vessel de pronto se puso negro mientras la corriente se lo llevaba.
[Por otro lado, de regreso con los Lords]
—¿Alguien vio hacia donde se fueron Zafiro y Karu?— Pregunto Jasir, él se hallaba ayudando a los heridos a ponerse de pie mientras que veía a todos lados.
—No Jasir, nadie vio hacia donde se fueron. Pero hay quienes dicen que persiguieron a esa maldita mantis traidora— Dijo Ashanti la cual estaba recargaba sobre un montón de cajas.
—¿Y solo fueron ellos dos?— Pregunto Jasir mirando a Ashanti con algo de curiosidad y temor.
Antes de responder Zafiro llegaría corriendo al lugar, y venía sola por lo cual los 5 Lords se preocuparon al solo verla a ella.
—¿Y Karu?— Pregunto Lewa mientras se acercaba a Zafiro.
—¡Se ha caído a un río con corrientes rápidas!— Exclamó Zafiro una vez recupero el aliento.
Al escuchar esto los Lords de inmediato quisieron preparar grupos de búsqueda para encontrar al vessel, pero pronto se dieron cuenta que tenían cosas mayormente importantes que Karu, y no es que lo hicieran menos pero sabían bien que él era capaz de sobrevivir a algo como las corrientes de un río.
—Ya iremos a buscarlo, pero por ahora solo nos queda hacer cosas de mayor importancia— Dijo Saud dándole un toque agridulce a su noticia.
Zafiro estaba a punto de protestar contra está decisión, pero todos los demás Lords opinaron lo mismo, por ahora habían cosas que tenían mayor relevancia a empezar una búsqueda, ya habría tiempo para eso. Pero aún así la noticia de que por ahora no irían a buscar a Karu era bastante mala en verdad; pero sin más la mantis se tuvo que aguantar.
Aún así, quizás Kamikaze y Tek podrían ayudarle a buscar a Karu, ella al parecer ya confiaba en ellos lo suficiente como para preguntarles si estarían dispuestos a ir con ella a buscar al vessel. Las respuestas que ambos le dieron le hicieron sentir por alguna razón un alivio en su pecho.
—¡Cuenta conmigo, ese chico haría lo mismo por nosotros así que vamos a buscarlo cuando tú nos digas!— Dijo Kamikaze mientras acomodaba su escudo y su espada.
—Si cuenta con nosotros— Dijo Tek con un tono mucho más tranquilo pero que estaba dispuesta a ayudar en la búsqueda del vessel.
—Bien, saldremos a más tardar mañana en la mañana, por ahora queriendo o no, tenemos que ayudar a recoger todo este desastre— Dijo Zafiro con un claro tono de disgusto y enojo.
No tan alejados de ellos tres, los 5 Lords hablaban sobre que hacer, al parecer el enemigo tenía una línea de ensamblaje de mantis modificadas así que era preocupante.
—¿Que vamos a hacer?— Pregunto Lewa mirando a sus hermanos, al igual que acomodaba la flor en su cabeza.
—Bueno es obvio que esto es muy preocupante y alarmante, hay que hacer algo muy pronto si no queremos que el número de imbéciles crezca hasta que nos superen— Dijo Saud mientras veía los cadáveres de las mantis modificadas apilados en una carretilla.
—¿Y que propones que hagamos?— Preguntaría Ashanti con curiosidad al mismo tiempo que se aseguraba de que los cuerpos no se muevan.
—Solo hay algo que podemos hacer en casos como estos...— Dijo Jasir rompiendo el silencio en el que se encontraba, a lo cual sus hermanos lo voltearon a ver.
—¿Y que hay que hacer Jasir?— Pregunto Kande mirando a su hermano con atención.
—...Que le pidamos ayuda a los Lords Jade y Salvia— Dijo Jasir, pero de inmediato hubieron decisiones muy divididas entre todos ellos.
—¡Jamás!— Rugió Ashanti con claro enojo en su mirada.
—No creo que quieran ayudar— Dijo Saud de forma algo pesimista sobre ellos dos.
—De lo poco que sabemos de ellos, de seguro se vayan a negar así que no es la mejor de las opciones— Dijo Kande cruzada de brazos y con un semblante de seriedad.
—Yo opino que nos podrían ayudar aunque sea un poco— Dijo Lewa con voz tranquila.
—Haber, miren, podemos ir, de todas formas si dicen que no les hacemos ver que sin nosotros las cucarachas podrían avanzar hasta encontrar su tribu, y de ahí que los puedan conquistar. Porque así serán las cosas si no hacemos algo para frenar a esas malditas y a esa mantis traidora.
Lo que dijo Jasir hizo recapacitar un poco a sus hermanos, a excepción de Ashanti quien seguía en contra de la idea de su hermano. Pero aún así él era quien tenía la última palabra, por lo cual se decidió ahí mismo que irían a ver los dos Lords. Iba a ser un viaje muy largo, pero al menos podrían encontrar aliados para unirse a su lucha contra las cucarachas.
[Mientras tanto en otro lugar]
Karu aún inconsciente era arrastrado por la corriente del río al que cayó, en su recorrido por este, termino por llegar a la orilla del río, estaba desmayado y posiblemente tenía agua en sus pulmones que podría matarlo de no ser que alguien le ayudará.
En esos momentos una sombra apareció y se llevó al vessel para ayudarlo, lo llevo arrastrando hasta una cabaña bien oculta entre la vegetación y maleza, para ahí afuera de la misma ayudar a Karu a respirar.
Karu tosió un par de veces tras sentir como el agua abandonaba su cuerpo, pero aún así miro a todos lados y se encontró con que ya no estaba yendo por las rápidas y peligrosas corrientes del río, ahora se encontraba acostado en el piso frente a una cabaña sin saber aún que ocurría el se levantó del piso para solo ser recibido por una voz detrás de él.
—Veo que ya estás despierto.
Al darse la vuelta rápidamente para ponerse en posición de pelea, Karu encontró a un macho mantis alto que tenía una gran cicatriz pasando por todo el lado izquierdo de su cara que cruzaba por encima de su ojo derecho el cual tenía un color lechoso, un claro indicio de que había perdido la visión en este. Solo ahí estaba el macho él cual lucía tener buenas intenciones con el vessel.
—Tranquilo, no pienso hacerte daño, ¿tienes algún nombre?— Pregunto el macho a lo cual Karu estuvo muy indeciso de si decirle o no.
Pero al final le respondió. Que suerte era que su collar no se hubiera roto.
—"Me llamo Karu..."— Dijo el vessel mientras veía al macho mantis que se hallaba delante suya.
—Muy bien Karu, es un gusto, yo me llamo Morati. Por favor ven conmigo una tormenta se acerca y lo que es aún peor de todo. Parece que va a durar durante un buen rato, y dudo mucho que te guste andar atrapado en la vegetación en medio de una tormenta, ¿o sí?— Dijo el macho que se había presentado como Morati.
Karu dudo de sus palabras hasta que escucho el primer trueno en el cielo, al levantar su cabeza vio como sus palabras tenían razón, todo el cielo se veía de un color oscuro así que pronto caería la primer tormenta fuerte de la temporada. Sin más el vessel tuvo que aceptar la invitación del macho a su cabaña, aunque estuvo desconfiado al principio, al ver que Morati no tenía malas intenciones sino que eran todo lo contrario, él se calmó y pudo andar mucho más tranquilo con el mantis, y su hospitalidad y amabilidad que tenía. Era casi irreal encontrarse una mantis como él.
—"¿Cómo es que hay mantis como tú?, hasta ahora no he conocido a ninguna que se parezca a ti en lo absoluto y eso se me hace raro"— Dijo Karu mientras veía a Morati con algo de dudas.
—Bueno esa es la cosa Karu, yo no soy como el resto de mantis, tengo una manera de pensar y de ver las cosas que cualquier otra mantis que hayas conocido— Dijo Morati mientras se iba a lo que al parecer era su cocina, ya que ahí había dejado una tetera con algo de agua calentándose.
Por su parte Karu aprovecho para investigar la cabaña en la que vivía el macho mantis, claro, no iba ir por ahí tocando todo lo que el veía, no para nada; solo vería las cosas. A primera vista no parecía algo del otro mundo, todo era de lo más tranquilo hasta que se fijó en algo que le llamo mucho la atención, este macho en una silla que tenía por ahí, había una capa algo desgastada y un poco rota de un Lord.
Esto hizo que Karu viera más de cerca la tela, queriendo asegurarse de que no era de un Lord cómo tal. Pero para su sorpresa si era así, tenía la misma calidad con la que se haría una capa para un líder mantis. Así que cuando el vessel se levantó para ir a preguntar le a Morati acerca de esto, se llevó una sorpresa al verlo detrás de él con una bandeja de metal en la cual traía dos tarros de madera.
—Veo que encontraste algo que hace tiempo no he usado...— Dijo Morati de forma tranquila sin aparentar estar enojado.
—"¿Fuiste un Lord?"— Pregunto Karu mientras veía al contrario con curiosidad.
—Sí, así es, en un pasado fui un Lord, aunque hace muchos años perdí mi título como uno y fui echado de la tribu a la que pertenecía— Dijo Morati mientras le daba a Karu uno de los tarros para que se siente con él.
—"¿Y de cuánto tiempo estamos hablando para ser exactos?"— Le preguntaría Karu al contrario viendo lo atentamente.
—Bueno se podría decir que desde hace años. Realmente ya no recuerdo cuando exactamente ocurrió.
—"Ya veo".
—Pero, lo que podría hacer por ti es contarte un poco de quién soy. Ya que bueno al menos para que sepas que no soy alguien con malas intenciones.
—"Bueno, la tormenta afuera no me dejara ir a ningún lado por ahora así que si me interesa saber un poco sobre ti".
—Vale, pero antes de empezar te tengo una pregunta que quiero que me dez una respuesta con honestidad.
—"Adelante, pregunta lo que quieras".
Tras unos momentos de silencio, el mantis suspiro antes de hacer su pregunta que le tenía preparada para el vessel.
—...¿Tú vienes de una tribu que no queda tan lejos de por aquí cierto?, una con cinco Lords.
Al escuchar esto, Karu se sintió algo curioso y extrañado, pero aún así termino respondiendo sobre esto.
—"Sí, si vengo de esa tribu, ¿por qué la pregunta?"— Karu miro con mucho interés al contrario, queriendo saber a lo que iba con la pregunta.
—Bueno, es que yo fui Lord de esa tribu....
Luego de escuchar eso, al vessel le dió una gran sorpresa escuchar eso ya que no se imaginaba que el fuera a decir algo como esto, pero aún así como era normal en él y en sus hermanos, la curiosidad de saber más nació y quiso saber mucho más sobre Morati. Lo bueno era que con una tormenta tan fuerte como la de afuera quizás no se iría de ahí en un día máximo.
—"¿Y por qué te quitaron de tu puesto de Lord?"—
—Digamos que tiene que ver mucho con esta cicatriz en mi cara, pero si quieres mucho del contexto necesito que te prepares y prestes mucha, y digo mucha atención ya que te voy a contar bastantes cosas.
[Mientras tanto, en la tribu]
Con la llegada de la tormenta, muchos buscaron refugio dentro de sus casas, otros lo hicieron en negocios y otros más lo llegaron a hacer dentro de las cuevas de la tribu (aunque está última elección no era de las más seguras que digamos).
Dentro de la sala de los tronos, los 5 Lords estaban hablando acerca de lo que harían para llegar a la tribu de Jade y Salvia, tomando en cuenta que la tormenta no parecía tener un fin por lo menos por ahora, ya que llovía con mucha intensidad, además de que caigan uno que otro relámpago a la distancia.
—¿Entonces, que vamos a hacer Jasir?, ¿iremos o no?— Pregunto Saud a la vez que veía a su hermano.
—Por supuesto que lo haremos, con o sin tormenta necesitamos que nos ayuden. Sino para cuando está acabe, vamos a tener una batalla bastante difícil y en nuestra contra— Explico Jasir mientras sus hermanos lo oían atentamente.
—Eso quiere decir que tendremos que ir si o si ahora mismo, ¿no?— Kande pregunto mientras veía a su hermano de reojo.
—Así es, no queda de otra, alisten sus codas y en especial alisten los cuerpos queremos que nos crean de que hay una gran amenaza— Dijo Jasir aunque con esta noticia trajo el desagrado de su hermana Ashanti.
—Otra vez iremos a ese maldito lugar de mierda...— Susurro Ashanti, pero aún así fue escuchada por Jasir.
—Ahora que lo pienso, no todos debemos ir. Dos de nosotros se pueden quedar a cuidar la tribu, en caso de otro posible ataque— Jasir miro a su hermana viendo que está se le quedó mirando para al final darse la vuelta para no tener contacto visual con él.
—En ese caso yo también me quedo, no trataré de esconder mi disgusto de ir a ese lugar. Después de todo, ese tal Jade nos tiene un desprecio tan grande que no nos quiere ver, ni siquiera en pintura. Así que me quedo con Ashanti aquí en la tribu— Dijo Saud a lo cual Jasir asintió con la cabeza.
—Está bien, entonces solo iré yo con Kande y Lewa. Deseen nos suerte.
—¿Suerte?, ¡ja!, vas a necesitar más que eso cuando llegues allá con esos cadáveres. Haber si no los quieren matar por mal interpretar las cosas como una declaración de guerra— Dijo Saud mientras se retiraba del lugar siguiendo a Ashanti la cual ya se había ido.
—Bueno, engre más rápido nos vamos más rápido estaremos de regreso aquí, así que andando— Dijo Jasir mientras le hacía la seña a Kande y a Lewa de que lo sigan.
N
o tan lejos de ahí, Zafiro, Kamikaze y Tek estaban ideando un plan para ir a buscar a Karu, la mantis quería abarcar más terreno al separarse y así poder encontrarlo más rápido. Si bien todo parecía ir con "normalidad" hubo algo que llamo la atención a ambos mayores, y era que la joven mantis tenía un tono de voz preocupado. Y no sabían si esto se debía a que ya le estaba agarrando cariño al vessel o si era por algo más. Aún así, los dos se ahorraron este comentario, ya que lo confirmarían más tarde cuando ellos pudieran encontrar a Karu.
—¿Y que piensan de mi plan?— Zafiro miro a los dos mayores presentes a la vez que tenía sus garras extendidas sobre un gran mapa de la región.
—Bueno, suena como un buen plan si no fuera por un pequeño problema—
—¿Y cuál es ese problema hormiga?—
—Bueno, aquí a mi lado Tek no se sabe defender muy bien así que si le sale un depredador o algo parecido dudo que ella pueda pelear.
—¡Hey!...pero bueno, tienes razón no soy la más fuerte entre los tres. Q
Zafiro gruño molesta debido a esto ya que no lo había tenido en cuenta, lo cual la hacia tener que pensar en un nuevo plan.
—¡Mierda!, está bien, tendré que idear algo más ya que así no se podrá.
—¿Y por qué no vamos solo tú y yo, y dejamos a Tek aquí en la tribu?—
—...¿Tú y yo nada más?—
—Sí, además ella podría ser de más utilidad aquí en la tribu que en el exterior.
Tras pensar un poco en lo que dijo Kamikaze, ella suspiro ya que él tenía razón sería más útil si ellos dos salían y no los tres. Ya que esto representaba muchos más riesgos de los que de por sí iban a tener una vez salieran de la seguridad de los grandes muros de la tribu.
—Bien, solo iremos tú y yo. Mañana a primera hora empezaremos a buscar a Karu.
—Solo esperemos que la tormenta ya haya pasado para ese entonces, sino esto se va a tomar mucho más tiempo del que creemos.
[Un par de días después]
La tormenta no había bajado mucho, e incluso lo que provocó era que varios de los caminos se llenen de lodo, al punto de que las piernas se hundan, o que las ruedas de las carretillas se queden atrapadas. Para colmo, el plan de Zafiro y Kamikaze se había tenido que retrasar, ya que Saud y Ashanti habían decretado que hasta que no se pasará la tormenta nadie iba a salir de la tribu. Por lo cual ahora mismo las cosas estaban muy controladas para evitar que hayan aquellos que quieran hacerse los graciosos y desafiar las órdenes directas de dos Lords.
Por otro lado, Jasir, Kande y Lewa habían finalmente llegado a la tribu de Jade y Salvia, y con ellos traían la carretilla con los cadáveres, solo que estos no se veían debido a una manta que les pusieron encima para evitar mal entendidos, que podrían haber fácilmente si llegaban con los cuerpos a la vista. Al principio no los dejaron pasar debido a la tormenta, más he aquí los Lords insistieron por lo cual los guardias que custodiaban las grandes puertas a la tribu los dejaron pasar mientras los escoltaban hacia la sala de los tronos.
Una vez ahí sorprendieron con su visita inesperada a ambos Lords, los cuales se encontraban en esos momentos con sus familiares, los cuales fueron a verlos pese a las duras condiciones climáticas del momento.
—¿A qué se debe esta visita sorpresa de su parte?— Pregunto Salvia con algo de curiosidad.
—Digamos que es por un asunto muy grave y que necesitamos de su ayuda, claro si es que ustedes quieren darla primero— Dijo Kande mientras se quitaba el chubasquero que se puso para evitar mojar sus ropajes de Lord.
—¿Y que es tan grave como para que tengan que acudir a nosotros eh?— Pregunto Jade con la misma seriedad y agresividad que lo caracterizaba.
Dalia, Rae, Asher y Salvia mostraban su curiosidad de saber aunque Jade se mostraba más indiferente al tema de que ellos vinieran con este clima hacia su tribu por algo de ayuda. Entre los tres Lords se miraron para después asentir y acercarse a la carretilla.
—Digamos que tiene que ver mucho con lo que estamos a punto de mostrar les— Dijo Jasir antes de con la ayuda de sus hermanas levantaron la mojada manta y revelaron para soreoresa de todos los cuerpos.
Dichos cuerpos se veían tan raros a primera vista, ya fuera por la extraña armadura o por esos tubos tan raros que tenían. Rae y Asher se acercaron con cautela mientras que Jade hacía más severa su mirada y su seriedad aumentaba junto a su desconfianza hacia ellos. Por otro lado Salvia se mostró sorprendida junto a Dalia la cual guardaba su distancia aunque no tanto para estar cerca de sus hijos adoptivos.
Al estar algo cerca, Rae y Asher vieron los cuerpos, casi de inmediato les daba un ataque al reconocer el líquido en el interior, aquel color naranja/amarillo que caracterizaba mucho a la diosa polilla.
Rae sintió demasiado odio en esos momentos al ver la escena, mientras que Asher se sintió consternado y muy aterrado al saber que la diosa no había muerto aún. Por otro lado Dalia solo mostraba su rostro de sorpresa, asco, repulsión, enojo y algo de pena por esas mantis.
Mientras tanto con los Lords era algo distinto, ambos se acercaron a ver los cuerpos junto al resto de su familia.
—¿Qué clase de atrocidad es esta?— Pregunto Salvia mientras veía los cuerpos con horror debido a lo grotesca que era la escena.
Por otro lado Jade se le veía una cara de completo enojo debido a la escena delante de ellos.
—Esto es una porquería— Dijo Jade enojado y con un claro disgusto por lo que veían sus ojos.
—Por eso necesitamos su ayuda, las cucarachas están creando a muchas de estas cosas para su ejército y si no las detenemos pronto, podrían crear aún más que nos superarían en número— Explico Jasir esperando que los Lords se les unan a su lucha.
Sin embargo sin que nadie se diera cuenta, en el montón de cuerpos, una de las mantis apiladas comenzaba a mostrar signos de "vida", ya que el líquido en sus tubos comenzaron a ser inyectados hacia el cuerpo, lo cual provocó un aumento de brillantez en sus venas, además de sus ojos mas brillosos de un color naranja/amarillo, y que su boca también se vea de ese mismo brillo. Pronto y lentamente mientras los Lords hablaban, está criatura se empezó a levantar hasta que al final estuvo de pie y lanzo un fuerte rugido furioso.
Todos los presentes rápidamente vieron con horror, sorpresa y algo de incredulidad cómo está mantis se había levantado. En cuestión de un abrir y cerrar de ojos la mantis modificada se abalanzó contra ellos, y aunque Rae y Asher fueron rápidos al atacar, siendo que uno de ellos le atravesó un punto vital con su aguijón, como lo era el corazón, y el otro lo apretaba y aprisionaba con su hechizo de raíces; esto no sería suficiente para acabar con esta mantis.
De manera sorprendente, consiguió romper las raíces del hechizo de Rae mientras ignoraba su herida mortal y atacaba con un instinto de violencia insaciable a los dos vessels, ni siquiera fue suficiente que Salvia y Jade le atacarán con sus hachas, o que Kande, Jasir, Lewa y Dalia hicieran lo mismo.
La mantis no caía al piso, dejando a todos más que sorprendidos. Incluso los dejo más aterrados y atónitos al ver cómo pese a recibir un impacto directo contra la quijada inferior por una de las hachas de Jade, lo cual le provocó la perdida de su mandíbula inferior. Siguiera atacando como si nada, ignorando sus heridas, que sangraban y tiraban más de ese líquido al piso, además de también no tener ya una de sus extremidades.
La mantis se abalanzó sobre Asher, el cual trataba de quitarlo de encima al igual que intentaba que nada de ese líquido le cayera dentro de su boca o ojos ya que sabía lo peligroso que era.
Rae trato de quitárselo de encima como el resto, pero al final lo único que lo termino parando fue el hecho de que Jasir le atravesó la cabeza con su lanza como un último remedio. Luego de esto Asher se arrastró un par de metros hacia atrás mientras Rae se acercaba para ver cómo estaba junto a Dalia. Por otro lado los 5 Lords vieron el cadáver abatido en el piso.
Salvia y Jade miraban como la sangre anaranjada/amarillenta, dejaba un gran charco debajo del cadáver, el cual todos procuraban mantener distancia en caso de cualquier cosa.
—Esta pobre mantis ha sido utilizada en algo horrible, esto solo pudo haber sido hecho por algún monstruo, transgredir de esta forma el ciclo natural de vida y muerte...algo así no puede continuar— Dijo Salvia quien veía el cadáver con algo de disgusto y un poco de tristeza.
Por su parte Jade estaba más enojado que su hermana, ¿a qué clase de idiota o monstruo se le ocurría crear algo así de peligroso y además muy aberrante?
—¡Imperdonable!, quiero la cabeza del responsable de esta mierda en una estaca, y la quiero ¡ya!— Rugió Jade con un gran enojo en su ser por lo que había sido testigo.
Y ellos dos no eran los únicos quienes querían en bandeja de plata la cabeza de quien sea el que haya causado esto, ya que para sorpresa de todos pero más de Jade, Salvia, Dalia, Rae y Asher, Seek, el caracol chamán y el encargado de los faros de la tribu estaba ahí de sorpresa. Y en su rostro se veía una mirada de enojo que no era para nada común en él.
—¿Seek, que haces aquí?— Pregunto Salvia confundida de ver allí al viejo caracol chamán.
—Sentí al gran océano agitarse, una pequeña luz que se acercaba percibió, y cuando vengo aquí me encuentro con esto. ¡Mis lords, esto es una HEREJÍA que trasciende toda otra!— Seek hablo con una furia en su voz que no era normal en él, si estaba así, era algo serio el tema entonces.
—Entonces, ¿se unen a nosotros para combatir a las cucarachas?— Pregunto Jasir escéptico ya que podría bien recibir un "si" o un "no" de ambos.
Antes de que alguno de los dos diera una respuesta, Seek volvería a hablar está vez para tratar de convencer a sus Lords de unirse a Jasir y sus hermanos en esta lucha.
—Mis Lords escuchen me, no soy mucho de hacer este tipo de cosas y lo saben bien. Pero esto no puede seguir ocurriendo así como así, además los peligros que conlleva que alguien haga algo como esto son demasiados. No podemos permitir que se siga dando el lujo de dañar las formas de vida y también que juegue con fuerzas que van más allá del conocimiento de cualquiera de nosotros— Dijo Seek en un intento de convencer a sus Lords, y vaya que por su tono de voz tan serio y al mismo tiempo enojado era obvio que esto era para tomarse en serio.
Y si bien aún Jade no quería, Salvia se hallaba mucho más decidida de unir fuerzas para frenar estás horribles abominaciones, además de que claro evitar que se sigan haciendo más de este tipo. Y ante tanta insistencia por parte del caracol chamán, Salvia y Jade (mayormente él) aceptaron el aliarse con Jasir y sus hermanos. Los cuales en el fondo se encontraban más aliviados al saber que si consiguieron la ayuda que buscaban. Así es como una vez la tormenta hubo bajado, los Lords de la tribu dieron la noticia a sus súbditos de irían a la guerra contra las cucarachas, aunque claro no entraron en muchos detalles. Ya que tampoco querían aterrar a la población con las monstruosas creaciones de un/a loco/a, y es de esta manera que todos esperaron a que la tormenta bajara de intensidad o que de plano terminara.
Para así poder partir lo más rápido de regreso a la tribu de los 5 hermanos, quienes desconocían la presencia de aquel que una vez osó desafiarlos y que desterraron hace mucho tiempo, viviendo cerca de su tribu. Sin duda se venían días demasiado atareados y pesados para todo el mundo.
Ya que sin saberlo, el enemigo tomo la ventaja que tenían, para poder crear aún más abominaciones de las garras de aquella mantis que trabajaba para las cucarachas. Pero pronto sabrían de la existencia de estos poderosos y muy letales enemigos.
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¡Y hasta aquí otro capítulo más de la historia de Karu! Ojalá y les haya gustado a todos.
Cómo ya es lo habitual pueden comentar que les ha parecido este capítulo, al igual que también pueden dejar su voto si así lo desean.
Y como ya vieron ando inspirado pues no ha pasado mucho desde que publique el último capítulo y ya salió uno nuevo. Así que puede que dentro de pronto llegue uno más. Si no se quieren perderse ni un solo capítulo de la historia recuerden agregarla a su biblioteca para que les llegue una notificación de cuando actualice.
Y ya sin nada más que comentar, yo me despido de ustedes aquí.
¡¡Hasta la próxima!!
Posdata: Este capítulo ha sido actualizado y reescrito para el deleite de los lectores.
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