Prólogo
Harry baja de la camilla y se coloca la gran sudadera negra después de que la amable enfermera le tomó los signos vitales,está ansioso y es qué hoy en recepción le han comentado que tendrá un nuevo psicólogo,Harry no está preparado para enfrentar el conocer a otra persona y es qué no es alguien sociable.Usualmente Harry es el último en escoger cuándo hacen equipos grupales y es como si no existiera ante la sociedad.
-Harry,pasa a la báscula.-Al escuchar la indicación de la enfermera, él más jóven ahoga un jadeo.Jamas le ha gustado ese aparato,cada que está sobre el no puede evitar pensar en cada gramo o kilo subió en los últimos días.
Él rizado se retira el calzado y resopla,una ligera capa de sudor recorre su piel y la sangre la siente helada.Coloca primero un pie y después el otro evitando ver por completo el aparato y mejor mira la blanca pared,escucha como la enfermera mueve algo y Harry resopla lleno de nerviosismo.
-Listo,puedes bajar e ir con la doctora en lo que llega el doctor Tomlinson.-
Harry con rapidez se baja acompañado de un ligero mareo,se coloca sus desgastados converse negros y después toma asiento en la silla color menta qué se encuentra frente al escritorio negro de caoba.Juega un poco con sus dedos para buscar el modo de poder estar tranquilo,le molesta la luz tuene del consultorio y puede observar qué dentro de la habitación hay varias cajas de cartón con él logotipo marcando "frágil".
Sus piernas llenas de intranquilidad están bailando,muerde el interior de su mejilla y busca el modo de desviar sus pensamientos intrusuvos como poder salir corriendo del consultorio y escapar de ése lugar,si tan sólo alguien leyera sus pensamientos lo tendrían en este momento bañado en sedantes y una camisa de fuerza sería su única ayuda dentro del hospital psiquiátrico.Algo dentro de él busca un incentivo,algo que lo haga sentir vivo y amado,la soledad siempre lo tiene de la mano y sus pensamientos autodestructivos son como un gorro lindo de lana.
La puerta se abre repentinamente logrando que Harry de un pequeño brinco sobre la silla,cierra los ojos y suspira profundamente.Escucha unas cuantas voces y una de ellas es algo ronca y aguda,pero no son de esas que irritan al escuchar sino te traen una tranquilidad.Harry lleno de miedo evita ver a las personas que están dialogando,no quiere que le tachen de un chismoso.Él rizado está a punto de decir que se siente indispuesto para conocer a su nuevo psicólogo, puede fingir que tiene náuseas pero al final del día tendrá que conocer al nuevo doctor.
-Harry.-El nombrado solo voltea a ver sin saber que esos perfectos zafiros serán su perdición.-Soy el doctor Louis Tomlinson, estaré contigo por unos meses en lo que la doctora vuelve de su incapacidad por maternidad.Espero qué nuestro trabajo sea eficaz, así que cuéntame un poco sobre tí.-
Pero el jóven rizado solo baja la mirada apenado,no es capaz de hablar sobre si mismo,no hay nada interesante en él o algo qué pueda comentar como una aventura llena de pasión qué al mundo asombren.De seguro el doctor Tomlinson estará pensando que es un pobre tonto.
-De acuerdo, entonces yo podré iniciar.-La sonrisa de Louis sale a la luz,pequeñas arrugas adornan los costados de sus ojos.-Me llamo Louis y soy originario de Doncaster,soy neurocirujano desde hace unos años pero decide enfocarme en la salud mental,he escrito algunos artículos científicos.Me gustan los deportes extremos como viajar en cuatrimoto y el alpinismo,me gusta surfear en las playas de México y mi mejor amigo se llama Liam quién también es mi colega en el campo de la neurocirugía.-Harry solo logra hacer una línea sobre sus labios.-Amo la comida grasosa lo cuál es algo gracioso,soy un médico y se supone que debo promover la salud,pero vivo ocupado todo el día así que termino comiendo hamburguesas o algo de la maquinita expendedoras,¿Y tú? De seguro tienes tantas cosas que contarle a la gente.-
¿Cómo qué?
Piensa él más jóven,no es como si su vida fuera interesante para alguien,ni siquiatra tiene amigos.
-Puedes iniciar desde tu nombre,pero,Harry.-De nuevo el chico se siente muy apenado.-Necesito que recuerdes que este espacio es para tí,nadie te juzgará si ese es tu miedo.Nadie en esta vida es perfecto,solo somos polvo de estrellas rotando por el basto universo,es de valientes admitir estar bien no estar bien,yo estoy aquí para escucharte y darte las herramientas necesarias para que puedas vivir solo por tu cuenta,todos tenemos días oscuros pero nosotros somos quiénes decidimos vivir bajo esa nube tormentosa o salir en busca de la primavera.-
-¿Cómo puedo hacerlo sí no hay nada qué me mantenga en este plano astral?.-
Louis sólo sonríe y abre una libreta de piel sintética,toma una pluma y hace unas anotaciones sin borrar esa perfecta sonrisa.
-La soledad te describe bien,todos nacemos con un objetivo en esta vida.Se qué es difícil poder resolver los problemas que uno a vivido,nos detiene nuestro pasado pero siempre estará esa pequeña chispa de esperanza.Siempre se puede escojer una y otra vez sin dejar de lado tus objetivos y tus valores.-
Harry muerde la esquina de su labio inferior y ahoga un jadeo,con sus manos revuelve sus rizos los cuáles desprenden un aroma a coco con avena.Se abraza a sí mismo como siempre, porqué no hay nadie quién le brinde calor,odia no poder tomar sus decisiones sin pensar en cómo se sentirá tener un poco de autonomía.Su pierna izquierda sube y baja con rapidez,se encuentra nervioso,no le gusta el color de las blancas paredes,le hacen recordar los malos momentos en los qué su padre perdía el control.
-Harry,¿Quieres que paremos por unos momentos? No quiero que te sientas agobiado,el doctor Payne me ha comentado que tomas medicamentos para poder mejorar así que puedo hablar con él y buscar el modo en qué no tomes tantas medicinas ya qué algunas de ellas tienen efectos adversos.-
-¿Puedo irme?.-Su voz es un murmullo,se siente desnudo y tan expuesto qué se siente juzgado.-No me siento cómodo.-
Louis sólo asiente.
-Puedes irte, Harry.-El doctor Tomlinson se levanta y se acomoda la bata clínica.-Te acompañado,me gustaría que nuestras sesiones sean sanas y que puedes confiar en mí.Me preocupa tu salud,yo estoy aquí para ayudarte.-Ambos chicos caminan por el consultorio y Harry solo mira el piso.-La puerta de mi consultorio siempre estará abierta si estás disponible para hablar,nadie debe de sufrir,Harry,todos merecemos segundas oportunidades.-
¿Cómo podré tener mi segunda oportunidad? Díos,soy tan patético.
Harry solo asiente si mucho ánimo,sale del consultorio con pasos apresurados y descordinados,su pecho está a nada de colapsar y sus manos sudan cómo si hubiera corrido todo un maratón olímpico.Sabe qué todo ésto es su culpa,sabe que si tan sólo se hubiera quedado callado todo sería diferente.Si tan solo nadie lo hubiera visto la vida de las personas sería diferente sin él.
Llega la habitación en dónde habita temporalmente y se deja caer sobre el colchón,mira el techo y cada una de las equivocaciones que ha cometido en toda su vida se reproduce como si de una película se tratase,sus dedos viajan a las marcas que reposan sobre sus muñecas y las vendas hacen un excelente trabajo ocultando las cicatrices.Talvez después de todo su hermano Matt tenga la razón,está tan devastado que no es capaz de ver la belleza que hemana con tan sólo respirar.Aún recuerda el último desayuno que tuvo en familia antes del trágico momento, aún recuerda la bella sonrisa de su madre mientras preparaba el desayuno y sus dos hermanos estaban jugando guitar hero, él estaba compartiendo con su padre un nutritivo jugo de betabel hasta que ésa persona tocó el timbre.
Los gritos de aquella mañana siguen retumbando en sus tímpanos,la forma en la que su madre perdió el control y cómo Matt le dió la razón a su padre,Gemma solo estaba en un estado de shock y él sólo vió su mundo colapsar.
Decide levantarse con tranquilidad y destiende la cama,no está de humor para salir a caminar solo por los jardines,odia estar encerrado en el manicomio porqué cada persona qué lo ve es cómo si lo juzgarán en voz alta,se siente atrapado entre ésos muros.Ha visto qué hay pequeños grupos de amigos,ellos parecen tan felices porqué tienen a alguien que los acompañe,pero Harry no tiene a nadie.
Estando entre las sábanas se hace bolita en busca de confort,le gusta estar escondido en las sábanas y sentir el calorcito.Al llegar la noche Harry es sacado de su habitación siendo obligado a ir al comedor,Harry detesta ése lugar porque el olor a comida está impregnado en esa zona.Toma asiento en una de las mesas lejanas y se coloca la capucha de la sudadera gris mientras observa la charola de comida,detesta saber que cada bocado aumentará considerablemente de peso.Con el tenedor blanco plastificado revuelve las verduras hervidas condimentadas,hace una mueca y finge comer algo.
-Las verduras contienen grandes proteínas y minerales.-Una voz interrumpe a Harry.-Las verduras nos proporcionan vitaminas,son escenciales para nuestra alimentación.-Una charola con los mismos alimentos que tiene Harry se pone frente a él.-No te he visto durante todo el día,¿Qué sueles hacer en tus tiempos libres?.-
Harry voltea a ver a ésa persona y parpadea demasiado sorprendido,el doctor Tomlinson está frente a él con un pijama quirúrgico negro y una bata blanca.Pequeñas canas adornan los costados de su cabello castaño y una sonrisa sincera acompaña la personalidad del mayor,éso hace que Harry se estremezca,odia las sonrisas ya que lo considera un signo de hipocresía total o talvez sea porqué realmente el chico jamás a experimentado la felicidad como debe de ser.Baja la mirada y quiere poder desaparecer,no le agrada la gente nueva en su vida o alguien que esté dentro de ella,odia tanto no poder ser normal y tener miedo todo el tiempo.
-¿Hay algo malo con la comida? He leído un poco sobre tu expediente,pero me gustaría poder conocerte y no leer simplemente lo que viene escrito en un papelito.Los pequeños pasos son lo más importante.-
El rizado hace un lado la charola y el olor de comida lo asquea en cuestión de segundos,juega con las pulseras que adornan las muñecas y puede sentir la piel abultada lo cuál le trae recuerdos amargos.
-Puedo pedir qué cambien tu dieta,puedes tener los cinco alimentos del día.-Harry observa como su nuevo psicólogo toma asiento frente a él.-Puedo acompañarte en cada comida,en las mañanas puedes iniciar con un licuado de proteína y una ensalada con espinacas junto con una tostada.-
¿Podrías dejar de hablar sobre comida?.
Es lo que piensa Harry pero no es capaz de decirlo en voz alta.
-Al medio día podrías comer un sándwich vegano con jugo verde y un helado de yogurt natural con frutos secos,en la comida podrías alimentarte con un poco de pechuga ahumada y arroz con sopa.-
Harry se levanta e ignora al castaño,detesta hablar sobre comida y le pone a pensar en cada caloría que tiene los alimentos.No le gusta la idea de tener más estrías sobre su caderas o en los brazos o que sus mejillas regordetas sean como las de una ardilla,no le gusta estar sentado y ver cómo sus muslos ocupan todo el espacio en los asientos.
-Harry...-
El rizado ignora la voz del doctor deseando que se vaya e incluso puede acceder este de nuevo con los de aislamiento y estar solo por varios días.Quiere poder callar las voces que atormentan su mente.
Holaaa buenas noches besties.
Espero que está ya sea la versión actual de esta historia flop.
Con amor SarahGolBerG28.
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