El dilema de Jimin era decirle a Yoongi o no. Ciertamente no podía pensárselo mucho porque la mirada fija del pelinegro le estaba complicando tomar una decisión.

Yoongi por otro lado estaba arrepintiéndose sobre manera de haberle pedido explicaciones de forma tan dura y tajante a Jimin, seguro sonó muy grosero de su parte. Todo se derivó a los miedos que estaban surgiendo en él por los comportamientos inusuales de su esposo, pero no por eso debió ser tan grosero. Quizá era mejor que Jimin no le dijera nada porque seguramente explotaría.

El silencio se prolongó y se hizo incómodo. Yoongi no pudo mantener la situación por más tiempo en el mismo punto.

—Lo entiendo Jimin. No debería estarte pidiendo que me des explicaciones... es solo que... bueno yo te he notado muy raro últimamente, no te voy a mentir creo que me he estado haciendo teorías en la cabeza pensando en qué puede tenerte así y me aterra que todos estos cambios sean porque alguien más ha llegado a tu vida. Que haya llegado alguien más que...—Yoongi soltó un suspiro cansado porque no podía continuar la línea que estaban llevando sus palabras—Te dije que buscaría enamorarte, pero últimamente estás tan distante, me asusta el hecho de que alguien más pueda venir y....—Yoongi no lo quería decir pero obvio que en su mente no dejaba de pasar la parte final de su frase "que pueda venir y te olvides de mi, que nuevamente me de cuenta que jamás lograré que me quieras".

—Yoongi—las palabras estaban atoradas en la garganta de Jimin, era muy vergonzoso tratar de decirle que no se trataba de nada de lo que estaba pensando su esposo. ¿Cómo no lo había notado? Estaba muy claro que en su camino por sorprenderle había terminado haciendo todo sospechoso para Yoongi. Sin embargo, si no hablaba claro en este momento era posible que Yoongi siguiera malinterpretando todo. Así que por más vergonzoso, tonto, cursi o como fuera, tenía que ser claro con sus palabras—Solo era una sorpresa—la voz de Jimin fue a penas oidible.

Yoongi seguía con la mirada fija en el rubio, notando como éste bajaba muy rápido la mirada y jugaba con sus manos. Obviamente se sentía avergonzado— No quería lastimarte haciéndote pensar esas cosas, no son ridículas, en serio he estado muy misterioso y no lo había notado. No te podía decir mucho porque quería sorprenderte... yo solo quería que saliera perfecto. Lo siento— Jimin se cruzó de brazos tratando de darse seguridad. No era fácil exponer una parte de sus sentimientos ante Yoongi. Aunque se hubieran besado ya en varias ocasiones lo cierto es que aún no podía verbalizar lo que aquellos besos le hacían sentir o lo que significaba ahora Yoongi para él.

—¿Sorpresa?—De todas las cosas catastróficas que estaba pensando Yoongi, jamás pasó por su mente que se tratara de una simple sorpresa. El corazón de Yoongi fue tocado por las palabras de Jimin, su Minnie estaba preparando una sorpresa. ¡Pero qué apresuradas fueron sus teorías!

—Sí, no me preguntes más, ya mucho lo he arruinado—Jimin estaba un poco frustrado porque ahora seguro que la impresión que pudiera tener Yoongi cuando lo viera presentarse sería menor, el factor sorpresa no regresaría. Pero por lo menos sirvió para ver la bonita sonrisa de Yoongi.

—Esta bien, esta bien. Perdona por arruinar la sorpresa—Yoongi hablo calmadamente y sintiendo que la tranquilidad regresaba a su cuerpo. Aquello era lo increíble de Jimin, no sabía cómo es que su hermoso esposo era capaz de cambiarle por completo el humor—Vamos a dormir cariño o... ¿prefieres que curemos ese rasguño?—dijo Yoongi con un tono burlesco y se acercó rápidamente a Jimin para tomarle de la cintura y comenzar a atacarlo con cosquillas.

Ambos se rieron con ganas y Yoongi aprovechó el momento agradable para plantarle un pequeño beso en la frente a Jimin.

Jugaron un rato más como si al día siguiente no tuvieran que levantarse temprano para comenzar con sus labores.

Jungkook despertó por el escándalo que se escuchaba en la habitación de sus papás. Bajó lo más rápido que sus habilidades de niño de dos años le permitieron con el claro objetivo de unirse a la guerra de cosquillas. Al momento de la llegada de Jungkook ambos padres corrieron para ver quien tomaba primero al pequeño y volverlo su aliado. En algún punto la guerra de cosquillas se convirtió en guerra de almohadas hasta que todos terminaron con las caras rojas por el ejercicio y los cabellos revueltos por los golpes recibidos.

Finalmente Jungkook fue tomado por su papá Yonnie para subirlo a la cama, después ambos le abrazaron cuando estuvieron perfectamente acostados y Jimin le cantó hasta que no supo nada más.

No era común que Jungkook acompañará a Jimin a su trabajo, hoy fue una de esas excepciones. Cargando una bolsa en su hombro con todo lo necesario para el cuidado de Jungkook y sosteniendo al mismo Jungkook de una de sus manos, Jimin iba camino al lugar donde practicaba en compañía de los demás bailarines. No era el lugar en donde practicaba solo. Era el lugar en donde practicaba con sus compañeros y aquello le ponía un poco nervioso porque sería muy difícil tener su atención en Jungkook y en la coreografía al mismo tiempo. Hubiera sido mejor que cancelara el ensayo pero estando tan cerca a la presentación se le hacía algo poco profesional, además Hobi le había ofrecido su ayuda para estar al pendiente de que su pequeño estuviera bien.

Sin embargo, Jimin no era la única persona que estaba caminando en la misma dirección.

Taehyung caminaba hacia la entrada también, sin notar que Jimin estaba detrás suyo. El chico había decidió ir a ver la práctica de Jimin, justificando que solo quería comprobar que todo marchara correctamente y sin contratiempos. Bueno a quién quería engañar, esa no era la finalidad principal. En realidad se trataba de su plática con Hoseok.

Desde aquel día había pensando mucho lo dicho por Hobi. ¿Podría darle una oportunidad a Jimin? La primera respuesta que asaltaba su mente era: no, claro que no. No era momento de ser amables, quizá en otras circunstancias se hubieran llevado genial. Pero si lo meditaba con cuidado su mente siempre evocaba la cara preocupada de Hoseok y no podía dejarla pasar. Recordaba como se había ido de su departamento, no le gustaba estar en malos términos con él. ¿Debería hacer un pequeño intento? Tal vez... si intentara hacer lo que le pidió Hobi y le comprobará que simplemente no era posible, por lo menos Hobi dejaría de estar tan a su contra.

Taehyung alzó su mirada para darse cuenta que Hoseok se encontraba en la entrada del lugar, viéndolo sin dubitaciones y comenzando a caminar. Parecía que se dirigía hacia él porque lo estaba viendo fijamente. Para Taehyung fueron casi automáticas las ganas de saludarle con efusividad, Hoseok no lucía tan molesto con él, posiblemente había entendido su postura y ahora todo estaba bien entre ellos. Pero cuando estuvieron enfrente uno del otro, Hoseok simplemente hizo una reverencia en forma de saludo y siguió caminando.

Iluso. Decía la mente de Taehyung.

Taehyung dio media vuelta para observar cómo Hoseok ayudaba a Jimin con sus cosas y se agachaba para saludar a Jungkook. Notando con demasía que el pequeño pelinegro le sonreía y le daba una de sus pequeñas manos para caminar a lado suyo. Cercanos. Parecían cercanos.

Taehyung tuvo el impulso de soltarse a reír con amargura. Sin duda Jimin era un hombre capaz de ganarse a quienes él consideraba sus más allegados. ¿Cómo lo hacía? ¿Acaso era su mirada que aparentaba frialdad pero que cuando sonreía se convertía en una tierna?¿Acaso era su belleza o su forma de hablar?

¡¿Qué era?! ¡¿Por qué se llevaba a Hobi también?!

Ahí fue que recordó que quien había acercado a Hobi a las manos de Jimin era él mismo por lo tanto no se podía seguir quejando cuando el único culpable era él.

—¿Qué haces Jungkook?—Hoseok se acercó a preguntarle al verlo tan concentrado y sin moverse.

—Papi—Junkook señaló a Jimin quien se encontraba en medio de una intensa práctica.

—Jimin lo hace cada vez mejor, tu papá está esforzándose mucho—Hoseok admiraba eso de Jimin—Se ve hermoso ¿verdad?

—Sí, bonito—Jungkook solamente admiraba los movimientos de todos. Era mágico, ¿lo dejarían intentarlo? El quería verse igual de genial que todos ellos

—¿Yo puedo?

—¿Quieres bailar como tu papá?—Hoseok había dejado de ver a Jungkook porque notó un movimiento que lo alarmó. Hasta que notó los apenas notorios ojos de cierta persona a la distancia. Estaba seguro que eran los ojos de Taehyung los que se asomaban por una de las puertas del salón de ensayos. "¿A qué habrá venido?" Se cuestionaba Hoseok. No se lo había preguntado hace un rato cuando lo topo en la entrada porque primero quería hacer notar su descontento, pero ahora quería acercarse y encararlo.

Hoseok estaba tan distraído que no pudo detener los pasitos de Jungkook hacia donde se encontraba su mochila. Ahí tenía una pequeña botella de agua. El pequeño había notado que su papi tenía mucha sed y él quería ayudarle.

Jimin acababa de terminar la rutina y el sudor le escurría por toda la cara. Estaba inclinado tomando sus rodillas tratando de regular su respiración cuando notó que Jungkook le tomaba de la playera.

—Oh gracias Jungkookie—Jimin tomó la botella de agua de las manos de su hijo y le acarició suavemente sus oscuros cabellos.

Hoseok veía la escena con ternura, siempre le habían gustado los niños.

—Me pregunto...—habló Taehyung a un costado de Hoseok— ¿qué crees que diría Yoongi si viera la cara que tienes justo ahora, o si viera lo cercano que eres a su familia?

—Lo siento señor Kim estoy en horario laboral, si me disculpa—Hoseok habló seriamente sin siquiera voltear a ver a Taehyung quien se había acercado sin siquiera notarle.

—Hobi...—Taehyung detuvo el andar de Hoseok agarrando uno de sus brazos--¿si le doy una oportunidad...me volverías a ver a los ojos... me volverías a sonreír...?—Hoseok podía sentir que la voz de Tae era profunda pero no determinada, sino dubitativa y frágil.

—Haz lo que creas correcto. No me necesitas para nada más—Hoseok se soltó del agarre y camino firme hasta donde estaba Jimin y Jungkook.

Algo iba mal, se supone que solo era una pelea pasajera con Hobby, algo que se arreglaría más temprano que tarde...entonces ¿por qué aquello sonaba a despedida definitiva?¿Por qué lo dejaba solo? ¿Por qué dolía?

Jimin iba apurado hacia las duchas para refrescarse un poco. Jungkook se había quedado con Hoseok en el salón de prácticas. No quería separarse tanto de Jungkook porque, aunque sabía que estaba con alguien confiable, su instinto paterno no le dejaba tranquilo sino estaba con Yoongi o con él.

Lo que vio al abrir la puerta que conducía a las duchas se sorprendió de ver a alguien sentado en el piso, recargado a la fría pared y con los brazos cubriéndose la cara. Hubiera pasado de largo si los suaves suspiros no se le hubieran hecho familiares.

—Taehyung...

—¿Dime Jimin eres feliz?—la voz pastosa de Taehyung se hizo oír pero no quitó los brazos de su rostro.

Jimin no sabía si aquello era una pregunta casual o era un reclamo o qué rayos era y cómo debía de contestar.

—¿Taehyung estás bien?

—No, no lo estoy—la respiración de Taehyung se escuchaba cada vez más errática—La persona que amo ama a alguien más. Mi mejor amigo esta en mi contra. ¡Hasta mamá está en desacuerdo conmigo! ¿Qué estoy haciendo mal?—Taehyung bajó los brazos que ocultaban su mirada, revelando que todo ese tiempo había estado llorando en silencio.

"Seguramente no quería hacer notar lo frágil que estaba" pensaba Jimin. Para el rubio era entendible, él tampoco haría evidente su llanto o lo mucho que le podían dañar ciertas cosas, o al menos eso hubiera hecho antes.

Jimin se sintió en la imperiosa necesidad de darle un poco de consuelo a Taehyung. Yoongi le había dado consuelo aún cuando apenas y podía considerarlo su amigo así que ¿por qué no ofrecerle al menos un abrazo a Taehyung?

Taehyung notó como Jimin se sentaba a lado suyo y le abrió sus brazos en una invitación muda a tener en quien apoyarse.

—Desahógate conmigo si quieres, no nos conocemos mucho así que no puedo juzgarte. Llora todo lo que quieras, no me iré hasta que termines y prometo no decirle nada a nadie. Estoy seguro que a Yoongi le gustaría verte sonreír—recitó Jimin aún con los brazos extendidos. Tampoco iba a obligar a Taehyung a recibir un abrazo.

—¿Cómo puedes estar seguro de eso?—a Taehyung le sorprendía que aún cuando Jimin estaba sospechando de las malas intenciones que tenía hacía él, aún así le dijera aquello.

—Porque Yoongi te quiere mucho Tae.

El chico de la sonrisa cuadrada no espero mucho más para fundirse en los brazos de Jimin. El esposo de su amado.

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Hola! Y he regresado después de una semana de evaluaciones. ¿Qué opinan si hacemos maratón a partir de hoy? Sería un capítulo por día 🤭.

Espero que les haya gustado mucho el capítulo de hoy. La verdad es el primero con el que me sentí muy indecisa pero la historia tenía que avanzar.

Díganme ¿Cuál es su personaje favorito?

El mío creo que es Kookie 🤭

Gracias por leer, comentar y votar